Fidel


"Peor que los peligros del error son los peligros del silencio." ""Creo que mientras más critica exista dentro del socialismo,eso es lo mejor" Fidel Castro Ruz

martes, 21 de junio de 2016

La pequeña empresa: entre La Habana y Silicon Valley


Universidad de Stanford. Foto: Lo Ming Ming

21 junio, 2016 

Por: Milena Recio, OnCuba

María Contreras-Sweet, encargada de la Agencia Federal para el Desarrollo de la Pequeña Empresa de Estados Unidos está en Cuba para realizar una vista de trabajo. Al terminar su agenda en la Isla Contreras-Sweet volará a California para ser una de las anfitrionas de la VII Cumbre Mundial de Emprendimientos que se celebrará entre el 22 y el 24 de junio en la Universidad de Stanford.

Esta gran reunión, enfocada al estímulo de la pequeña empresa y la aplicación de ideas innovadoras en el mercado, reunirá en Silicon Valley a más de 700 emprendedores de todo el mundo. Entre ellos, habrá varios cubanos.




Maria-Contreras-Sweet

Contreras-Sweet quien también viajó en marzo pasado junto al presidente Obama a Cuba, llega a La Habana esta vez para incrementar la influencia de su gobierno en el ámbito de la economía de pequeña escala en Cuba, aunque según difundió la cancillería cubana sus actividades incluyen encuentros con el ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca y otros directivos de los ministerios del Comercio Interior y de Trabajo y Seguridad Social cubanos.

Como es de rigor, recorrerá la Zona Especial de Desarrollo Mariel, donde hasta el momento se ha aprobado un número pequeño de proyectos de inversión.

“Hasta que se levante el embargo, una de las cosas más importantes que nosotros los estadounidenses podemos compartir con Cuba es nuestra experiencia en los negocios”, escribió Contreras-Sweet en uncomunicado difundido en la víspera de la visita de Obama a Cuba.

La agencia que dirige Contreras-Sweet, una exitosa empresaria de origen mexicano que llegó a Estados Unidos a los cinco años, está encargada de apoyar a 28 millones de pequeñas empresas en su país. En ellas se concentra la mitad de la fuerza laboral del sector privado en Estados Unidos. Además, supervisa el mayor fondo de capital semilla del mundo y administra una cartera de crédito de 120 mil millones de dólares. También dirige la mayor red de asesoría de negocios del mundo y una cuarta parte de la actividad de adquisiciones del Gobierno Federal de Estados Unidos para las pequeñas empresas.

De La Habana a Stanford



La Cumbre, conocida como GES (Global Entrepeneurship Summit) se celebra anualmente desde 2009, y fue animada por el presidente Obama, quien estará presente en Stanford y se dirigirá a los asistentes por última vez en su cargo.

Los organizadores del evento lo consideran una plataforma para conectar a empresarios emergentes con líderes de negocios, organizaciones internacionales e instituciones gubernamentales.

Los asistentes, seleccionados entre más de 5000 aspirantes de todo el mundo, participarán en talleres, paneles, conversatorios, competencias de pitching, tutorías y sesiones de trabajo en red. Están representados más de 170 países y regiones del mundo y los sectores con más presencia son el de la tecnología de la información, la educación, otras tecnologías, salud y energía.

En la Cumbre se conocerán experiencias en distintas etapas de desarrollo del negocio: desde empresarios que han hecho ya sustanciales inversiones en sus emprendimientos hasta aquellos que todavía están en la etapa inicial de riesgo.

“Al acoger a un número sin precedentes de los inversores a GES de este año, somos capaces de alcanzar esta meta y mostrar el talento, las soluciones y las oportunidades que existen en todo el mundo directamente a los inversores”, ha comentado la Secretaria de Comercio de Estados Unidos, Penny Pritzker quien es también una de las autoridades que estará presente el próximo miércoles cuando se inaugure el encuentro global.




De Stanford a La Habana
Foto: Alain L. Gutiérrez Almeida

Desde Cuba llegará a California un grupo conformado por emprendedores, la mayoría jóvenes y profesionales, quienes han iniciado emprendimientos con muy pocos recursos y menos experiencia, tratando de construir servicios de valor agregado en un país con altos déficits en tecnología.

Son, además, representantes de un sector emergente en Cuba que desde 2010, cuando el trabajo por cuenta propia fue relanzado por el gobierno, no rebasa el entorno del medio millón de personas. De ellas, cerca del 25 por ciento trabajan por cuenta ajena: siguen siendo empleados.

Esta actividades desarrolladas en el sector no estatal de la economía cubana, no obstante, se hacen cada vez más imprescindibles en áreas claves como el turismo, la gastronomía y el transporte.

Por ahora el ámbito de los emprendimientos, muy acotado y ceñido por las 201 actividades aprobadas, la mayoría de baja complejidad técnica, concentra casi el 30 por ciento del empleo hoy en Cuba.

Para los emprendedores que han tenido ideas de negocios y desean desarrollarlas los principales obstáculos provienen de la existencia de difusos o incompletos marcos legales, de la ausencia de mercados mayoristas, la existencia de prácticas centralizadas de importación/exportación, las barreras para alcanzar créditos u otros tipos de financiamientos, y las dificultades para acceder a conexiones a Internet y espacios físicos desde donde desarrollar sus actividades.

En este contexto, la GES puede ser una ventana para que los cubanos puedan intercambiar con otros emprendedores con similares dificultades y un camino recorrido en la solución de esos y otros problemas. Aún en condiciones más propicias, tener un sueño en términos de negocio y hacerlo posible, no es pan comido.

Brexit en contexto

Michael Spence, a Nobel laureate in economics, is Professor of Economics at NYU’s Stern School of Business, Distinguished Visiting Fellow at the Council on Foreign Relations, Senior Fellow at the Hoover Institution at Stanford University,

MILÁN – No creo que los extranjeros hagan un aporte positivo cuando pronuncian opiniones fuertes sobre cómo los ciudadanos de un país, o los de una unidad mayor como la Unión Europea, deberían decidir frente a una opción política importante. Nuestras percepciones, basadas en la experiencia internacional, a veces pueden resultar útiles; pero no debería existir ninguna confusión respecto de la asimetría de los roles.

Esto es particularmente válido en lo que concierne al referendo británico sobre si seguir formando parte de la UE o no. A escasos días de la votación, el resultado es demasiado reñido, y parece haber suficientes votantes indecisos como para inclinar la balanza hacia un lado o hacia el otro. Pero en un momento en el que la fragmentación política y social se extiende mucho más allá de Europa, los extranjeros tal vez puedan sumar cierta perspectiva sobre lo que realmente está en juego.

En primer lugar, no debería sorprender que, en términos de la distribución del ingreso, la riqueza y los costos y beneficios de un cambio estructural forzado, los patrones de crecimiento en la mayor parte del mundo desarrollado hayan sido problemáticos en los últimos 20 años. Sabemos que la globalización y algunos aspectos de la tecnología digital (particularmente aquellos relacionados con la automatización y la desintermediación) han contribuido a la polarización del empleo y el ingreso, ejerciendo una presión sostenida sobre la clase media en todos los países.

En segundo lugar, la crisis en curso en Europa (más parecida a una enfermedad crónica) ha mantenido el crecimiento en niveles demasiado bajos y el desempleo -especialmente el desempleo juvenil- en niveles inaceptablemente altos. Y Europa no es la única. En Estados Unidos, si bien la tasa formal de desempleo ha caído, los fracasos de gran escala en términos de inclusión han alimentado el desencanto -tanto de la izquierda como de la derecha- con los patrones y las políticas de crecimiento que parecen beneficiar desproporcionadamente a los ciudadanos de mayores ingresos.

Dada la magnitud de las recientes sacudidas económicas, los ciudadanos de los países desarrollados podrían estar más felices si hubiera pruebas de un esfuerzo concertado -basado en una repartición genuina de la carga- para hacer frente a estas cuestiones. En el contexto de Europa, eso implicaría un esfuerzo multinacional.

Pero, en general -y, nuevamente, en todo el mundo desarrollado- han faltado respuestas efectivas. Los bancos centrales se quedaron prácticamente solos con objetivos que exceden la capacidad de sus herramientas e instrumentos, mientras que elementos de la elite esperan la oportunidad de culpar a los responsables de las políticas económicas por el mal desempeño económico. 

Frente a respuestas de políticas no monetarias que son entre deficientes e inexistentes en relación a la magnitud de los desafíos que enfrentamos, la respuesta natural en una democracia es reemplazar a los que toman las decisiones e intentar algo diferente. Después de todo, la democracia es un sistema para la experimentación, así como para la expresión de la voluntad de los ciudadanos. Por supuesto, los "nuevos" tal vez no sean mejores y hasta podrían ser peores -quizá significativamente peores.

En tercer lugar, la UE enfrenta, de una manera más severa, un problema que afecta a gran parte del mundo desarrollado: fuerzas poderosas que operan más allá del control de las autoridades electas están forjando las vidas de los ciudadanos, haciéndolos sentirse impotentes. Pero si bien todos los países deben lidiar con los desafíos de la globalización y el cambio tecnológico, elementos importantes de la gobernancia en la UE están más allá del alcance de las instituciones democráticas, al menos aquellas que la gente entiende y con las que se relaciona.

Esto no quiere decir que la gobernancia local esté libre de problemas. No lo está. La corrupción, los intereses especiales y la simple incompetencia son problemas comunes. Pero la gobernancia democrática es en principio reparable, y las defensas y contramedidas institucionales en verdad existen.

La situación en la eurozona es particularmente inestable, debido al creciente alejamiento de los ciudadanos de una elite distante y tecnócrata; la ausencia de mecanismos de ajuste económico convencionales (tipos de cambio, inflación, inversión pública y demás); y las restricciones ajustadas para las transferencias fiscales, que envían señales poderosas respecto de los límites reales de la cohesión.

El Brexit es una parte de este drama mayor. Tiene que ver esencialmente con la gobernancia, no con la economía. Desde un punto de vista estrictamente económico, los riesgos tanto para el Reino Unido como para el resto de la UE están casi absolutamente a la baja. Pero si eso fuera lo único que contara, el resultado sería una conclusión inevitable a favor de quedarse. 

La verdadera cuestión -la autogobernancia efectiva e inclusiva- no es fácil de enfrentar en ninguna parte, porque las fuerzas como la disrupción tecnológica no respetan fronteras nacionales. En parte, los británicos votan sobre si su capacidad para navegar en estas aguas turbulentas mejora o se ve reducida si siguen siendo miembros de la UE. Pero también está en juego una cuestión más fundamental de identidad política -como sucedió en el referendo por la independencia de Escocia en 2014.

Algunos británicos (quizás inclusive una mayoría), y muchos otros ciudadanos de la UE, siguen queriendo que las generaciones futuras se piensen a sí mismas como europeas (aunque con un orgulloso origen británico, alemán o español) y estén preparadas para intentar nuevamente una reforma de las estructuras de gobernancia de Europa. Y hacen bien en pensar que el mundo sería un lugar mucho mejor con una Europa unida y democrática como una fuerza importante tanto para la estabilidad como para el cambio.

Esa es mi esperanza, aunque puede parecer una expresión de deseo. Más allá del resultado del referendo del Brexit (como muchos extranjeros, espero que Gran Bretaña vote para quedarse y abogue por una reforma generada desde adentro), el voto británico, junto con tendencias políticas centrífugas fuertes y similares en otras partes, debería generar una reconsideración importante de las estructuras de gobernancia y acuerdos institucionales europeos. El objetivo debería ser restablecer una sensación de control y responsabilidad ante los electorados.

Ese sería un buen desenlace en el largo plazo. Exigiría un liderazgo inspirado en todos los rincones de Europa -incluido el gobierno, las empresas, la mano de obra organizada y la sociedad civil así como un compromiso renovado con la integridad, la inclusión, la responsabilidad y la generosidad-. Es un reto monumental; pero no un desafío imposible de cumplir.

Generan vitro plantas acorde a las necesidades agrícolas

 Creado el Martes, 21 Junio 2016 07:57 | Marta Hernández | Foto tomada de Juventud Rebelde

Santa Clara, 21 jun (ACN) Expertos del Instituto Nacional de Investigaciones de Viandas Tropicales

(INIVIT) abastecen a las 11 biofábricas existentes en Cuba con las variedades requeridas por los agricultores del país. 

Sergio Rodriguez, director del INIVIT, comentó a la ACN que una semilla de calidad es imprescindible para lograr altos rendimientos, porque si tiene cualidades deficientes los patógenos del suelo se manifiestan con mayor agresividad. 

Subrayó que la multiplicación de los materiales vegetales en las biofábricas es una fortaleza de la agricultura cubana, porque le garantiza a los sembradores la disponibilidad de buenas simientes. 

La característica fundamental de las viandas generadas en el INIVIT es el alto potencial productivo y la resistencia a las plagas y enfermedades, y también hay otras variedades diseñadas para mitigar el impacto de los fuertes vientos por ser de bajo porte, añadió. 

Victor Mederos, investigador de la institución, explicó que en el centro se producen los explantes, o sea, el material vegetal primario requerido por las fábricas para lograr las simientes. 

El plan de producción anual, que oscila entre 35 a 53 mil, se realiza acorde con las necesidades de la producción agraria de la Isla, puntualizó. 

Dijo Mederos que en los recorridos del Grupo Nacional de Viandas, adscripto al INIVIT, los profesionales conocen las realidades de los sembradores y luego planifican la producción. 

Afirmó que la oferta se mantiene fundamentalmente en diferentes variedades de plátano, malanga y ñame, todas con cualidades adecuadas para los distintos tipos de suelos y condiciones climáticas del país. 

Reconoció que la biotecnología vegetal brinda a la agricultura valiosas potencialidades para obtener un desarrollo más intenso y eficaz, aplicar las técnicas de aislamiento de células, tejidos u órganos de las plantas y hacerlas proliferar en condiciones controladas (in vitro). 

Allán Ramirez, director de la biofábrica de Villa Clara, puntualizó que en un año comercializan con la base productiva un promedio de 400 mil plántulas. 



Recordó que años atrás los campesinos no eran muy receptores de este material, pero al adquirir más cultura agraria a partir de los cursos de instrucción demandan sistemáticamente estas simientes.