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viernes, 30 de diciembre de 2016

Cuba registra récord de 4 millones de turistas extranjeros en 2016


30 de diciembre de 2016 - 21:12

Norteamérica y Europa son las regiones que más aportaron al resultado, aunque países de otros continentes también reportaron importantes incrementos en la emisión de viajeros hacia la isla



LA HABANA.- Cuba alcanzó este viernes la cifra récord de cuatro millones de turistas extranjeros en 2016, un 6% por encima de los 3,7 millones de visitantes previstos inicialmente para este ejercicio, según informó el Ministerio de Turismo (Mintur) de la isla.

La llegada de turistas a Cuba experimentó en 2016 un alza de 13 puntos porcentuales frente a 2015, indicó el Mintur.

Norteamérica y Europa son las regiones que más aportaron al resultado, aunque países de otros continentes también reportaron importantes incrementos en la emisión de viajeros hacia la isla, añadió el informe.

Este récord representa "un compromiso para continuar el camino ascendente de nuestro sector, elevar la calidad en la prestación de los servicios y los niveles de eficiencia", señaló la nota ministerial.

Además, considera que este hito constituye "un reconocimiento a los trabajadores de la industria turística y a todos los colaboradores dentro y fuera del país, a nuestro pueblo culto y hospitalario".

Cuba ha reportado en los últimos años un "boom" del turismo y en 2015 alcanzó por primera vez los 3,5 millones de turistas.

Ante el crecimiento de las visitas a la isla, está previsto construir 108.000 nuevas habitaciones hasta el año 2030, de las cuales 30.000 contarán con participación de capital foráneo.

El país caribeño ingresó en el primer semestre de 2016 más de 1.200 millones de dólares por turismo -segunda fuente de ingresos de Cuba tras los servicios profesionales- lo que representa un crecimiento del 15 % respecto al mismo periodo de 2015, de acuerdo con los últimos datos publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).

La apertura económica y el deshielo diplomático con Estados Unidos, que ha traído consigo visitas de numerosas personalidades de la cultura y el espectáculo a la isla, han sido dos de los factores que han aumentado en los últimos tiempos el interés internacional que suscita Cuba.FUENTE: EFE

La era de la incompetencia

J. Bradford DeLong is Professor of Economics at the University of California at Berkeley and a research associate at the National Bureau of Economic Research. He was Deputy Assistant US Treasury Secretary during the Clinton Administration, where he was heavily involved in budget and trade negotiations. His role in designing the bailout of Mexico during the 1994 peso crisis placed him at the forefront of Latin America’s transformation into a region of open economies, and cemented his stature as a leading voice in economic-policy debates.

BERKELEY – El 20 de enero de 2017, el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, asumirá el cargo habiendo obtenido casi tres millones de votos menos que su oponente; y trabajará con una mayoría republicana en el Senado cuyos miembros obtuvieron trece millones de votos menos que los demócratas. Sólo la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, liderada por su portavoz Paul Ryan, puede decir que representa una mayoría numérica de 55% de los estadounidenses que votaron en la elección de 2016.

Trump también comenzará su presidencia con un índice de aprobación inferior al 50%. En la historia de este índice, es algo sin precedentes (o “sin presidentes”, según rezaba uno de sus tuits semianalfabetos, antes de que lo borrara). Así que en la práctica, el gobierno de la democracia más antigua del mundo no es democrático. También sin precedentes es el hecho de que tan pocos miembros del partido del presidente electo, y ninguno de la oposición demócrata, lo consideren apto para los deberes de la presidencia (salvo para la función de “animador en jefe”).

Pero el fenómeno Trump se venía gestando hace rato. Con la honrosa excepción de George Bush (padre), que contaba con el conocimiento, la inteligencia, el carácter y los valores necesarios para el cargo, la última asunción de mandato de un republicano con todas las cualificaciones fue en 1957 (con Dwight Eisenhower). En cuanto a Richard Nixon, nadie niega que tenía conocimiento e inteligencia para ser presidente; pero la mayoría de la gente admitirá que su carácter y sus valores dejaban algo que desear.

La opinión mayoritaria sobre Ronald Reagan también era que no tenía el conocimiento y la inteligencia necesarios para el cargo (según el periodista Peter Jenkins, la ex primera ministra británica Margaret Thatcher dijo cierta vez en referencia a Reagan: “El pobre no tiene nada entre las orejas”). Y las aptitudes que tenía el día de la asunción al cargo se fueron perdiendo con el tiempo, tras las heridas que recibió en el intento fallido de asesinato a los 69 días de mandato, y después, cuando empezó a sufrir de alzhéimer.

Pero el carácter y los valores de Reagan eran (en términos generales) adecuados para la presidencia. Sabía perfectamente que ser la estrella no es lo mismo que ser el jefe. Como actor de Hollywood y como presidente de los Estados Unidos, Reagan tuvo detrás profesionales inteligentes, dedicados y capacitados para que escribieran lo que decía y dirigieran lo que hacía. Sabía que su trabajo era estar en pantalla y no interferir con la gente que detrás de cámara y en la sala de posproducción se hacía cargo del producto terminado.

Es lo que la mayoría de los observadores esperaban ver cuando George Bush (hijo) asumió el cargo en 2001: un animador campechano que siguiera las indicaciones de los asesores inteligentes heredados de su padre. Pero el segundo Bush se convenció de que además de ser la estrella, era el que tomaba las decisiones. Y si bien el vicepresidente Dick Cheney y el secretario de defensa Donald Rumsfeld habían sido funcionarios sagaces allá en los setenta, a inicios de este siglo se volvieron bastante erráticos. Vaya uno a saber por qué, Bush se ató a los dos y esto selló su destino. Después de su presidencia no asistió a ninguna convención nacional de los republicanos; y debe estar lamentando haber mandado a James Baker a Florida en noviembre de 2000 para asegurar su victoria sobre Al Gore.

Es evidente que Trump no aprendió nada de la segunda presidencia de Bush. Sabe que es la estrella, pero además cree erradamente que tiene conocimiento e inteligencia para ser el jefe. No parece darse cuenta de que la campaña terminó, de que en su nueva función puede fracasar en forma catastrófica y duradera, y de que más le conviene asegurar que sus propuestas sean válidas no sólo como consignas, sino como políticas reales que cuiden la seguridad de Estados Unidos y creen prosperidad.

¿Qué deberíamos hacer los millones de estadounidenses que ahora tememos por el futuro? En primer lugar, podemos trabajar en el nivel de los estados para tratar de neutralizar toda iniciativa política de Trump que sea defectuosa o inviable. Los demócratas y los republicanos con principios en las legislaturas de los estados deben trabajar juntos para mantener la recaudación impositiva andando y para financiar los muchos programas de gasto público que redundan en beneficio de los estadounidenses, sin importar lo que pase en Washington, DC. Y deben prometerse que, independientemente de quién llegue al gobierno en 2021, no se culparán mutuamente de haber sido obstruccionistas hoy.

En el nivel nacional, no debemos dejar de recordar a los senadores republicanos que representan a trece millones menos de votantes que los demócratas. Y a Paul Ryan, que se equivocó al acompañar las desacreditadas iniciativas económicas y de política exterior del gobierno de Bush entre 2001 y 2008, y que mostrar apoyo partidista incondicional a un gobierno tan claramente inepto es un mal servicio al país.

Y si todo lo demás falla, no hay que olvidar que oponer resistencia a un presidente impopular que recibió casi tres millones de votos menos que su rival no sólo es lo correcto, sino que también será perfecto para un reality show.

Traducción: Esteban Flamini

La recesión cubana y el estreno de los bonos públicos

Este es un artículo de opinión de Pável Vidal, economista cubano y profesor de la Universidad Javeriana en Cali, en Colombia

El boom de la llegada de turistas, en especial procedentes de Estados Unidos, como los sentados fuera de los restaurantes en una calle de La Habana, ha sido insuficiente para evitar la caída en la recesión de Cuba durante 2016. Crédito: Jorge Luis Baños/IPS

El boom de la llegada de turistas, en especial procedentes de Estados Unidos, como los sentados fuera de los restaurantes en una calle de La Habana, ha sido insuficiente para evitar la caída en la recesión de Cuba durante 2016. Crédito: Jorge Luis Baños/IPS

CALI, Colombia, 30 dic 2016 (IPS) - Los datos macroeconómicos de cierre del año proporcionados por el gobierno cubano confirman las proyecciones de que Cuba entraría en una recesión como resultado del shock venezolano.
La producción de bienes y servicios en 2016 cayó  0,9 por ciento. Esta es la primera recesión económica desde el año 1993, en que el producto interno bruto (PIB) se hundió  15 por ciento tras la desaparición de la Unión Soviética.
Desde finales de 2014, tras la dramática caída del precio del petróleo y la consecuente crisis de la economía venezolana, la recesión cubana era altamente probable, si además sumamos una respuesta de la política económica cubana insuficiente ante la magnitud del shock que se avecinaba.
Las relaciones con Venezuela están formadas bajo acuerdos muy singulares entre ambos gobiernos, con precios y facilidades financieras que se alejan de las prácticas más habituales en el comercio internacional.
Por tanto, no se trata simplemente de buscar nuevos mercados para el comercio que ya no se puede realizar con Venezuela, sino que hay que hacerlo de una manera diferente e impulsando nuevos sectores económicos, dado que parece bastante improbable alguien más reciba los médicos cubanos y nos venda petróleo bajo las mismas condiciones.
Por eso era tan importante comenzar cuanto antes la diversificación de las relaciones internacionales y la liberalización de las capacidades internas en búsqueda de un incremento de la productividad y mayor eficiencia en la producción nacional. La atracción a gran escala de inversión extranjera, la devaluación de la tasa de cambio oficial y la convergencia monetaria, una reforma más profunda de la empresa estatal y la ampliación de los espacios al sector privado y las cooperativas, eran algunos de los pasos que parecían factibles y coherentes con las reformas ya iniciadas.
¿Por qué no se dieron algunos o todos estos pasos? Pueden esgrimirse múltiples explicaciones.
Porque no hay claridad o convencimiento de hacia dónde dirigir el modelo económico cubano. Porque las fuerzas de resistencia a los cambios han ganado por ahora la partida. Porque las necesidades de tantos cambios sobrepasan la capacidad institucional y técnica para administrarlos todos al mismo tiempo. Porque el embargo estadounidense sigue impidiendo la llegada de inversionistas extranjeros institucionales. Porque de verdad se cree que una reforma muy lenta y haciendo experimentos es la única vía efectiva. Y seguramente se podrían añadir algunas otras explicaciones.
Por la razón que sea, el resultado final es que las reformas han perdido velocidad en vez de apresurarse, y transcurridos 10 años, no hay resultados muy alentadores cuando se examina la productividad, el salario medio o un sector específico como la agricultura.
Los anuncios de nuevas transformaciones son cada vez más dilatados. Cuba parece vivir en una dimensión del tiempo diferente, es como si un año de Cuba equivale a un mes en el resto del planeta.
La recesión cubana y el estreno de los bonos públicos
El economista y profesor universitario Pável Vidal. Crédito: Universidad Javeriana de Cali
Sin embargo, el espacio en el que opera la economía no está aislado, compite con otros destinos para los capitales internacionales, se rezaga tecnológicamente, pierde peso relativo en la región, y sufre los ciclos de los mercados internacionales y las crisis de sus principales aliados económicos.
Las perspectivas para 2017 y el rol de los bonos públicos
Para el año 2017 el gobierno planifica una mejoría en la situación de la economía, algo que es contrario a las proyecciones que habíamos efectuados.  El gobierno planifica un aumento de dos por ciento del PIB.
Este aumento del PIB para 2017 está sustentado en dos factores esenciales. Uno, la esperanza que mejore la situación de la economía venezolana tras los últimos aumentos del precio del barril de petróleo; y dos, el gobierno cubano pone en práctica una política fiscal expansiva anticíclica.
En su discurso en la Asamblea Nacional el 27 de diciembre,  el ministro de Economía y Planificación, Ricardo Cabrisas, plantea que: “Las proyecciones de los portadores energéticos para el venidero año permiten respaldar niveles similares a los del 2016…”
Muy probablemente esta perspectiva tiene como punto de partida el incremento que ha presentado el precio del barril de petróleo durante los últimos tres trimestres y algunas proyecciones internacionales que lo sitúan en mayores niveles para el año 2017, lo cual favorece el desempeño de la economía venezolana y abre la posibilidad de que se estabilizarán los envíos de petróleos a la isla y los pagos de los servicios médicos cubanos.
Por otra parte, se proyecta un incremento del gasto público y del déficit fiscal para respaldar el aumento del PIB. Se proyecta un aumento de 11 por ciento en los gastos fiscales, pero que no podrá ser cubierto por los ingresos fiscales, por lo que generará un “hueco fiscal” de 11.500 millones de pesos en el año 2017, lo que representa un valor equivalente a 12 por ciento del PIB.
En términos porcentuales es el déficit fiscal más alto desde 1993; en valores más que duplica el déficit del año 1993 que fue de 5.000 millones de pesos.
Es propicio que después de años de austeridad fiscal el gobierno decida expandir el gasto público para amortiguar el efecto recesivo de la crisis venezolana. Es válido aplicar una política fiscal expansiva en momentos de caída del PIB.
También es atinado financiar el déficit fiscal con emisión de bonos públicos, lo cuales comprarán los bancos estatales cubanos. Este es un nuevo instrumento que desde hace dos años viene estrenando el Ministerio de Finanzas y Precios con vistas a evitar la monetización (impresión de nuevo dinero) como mecanismo de financiación del déficit fiscal.
Tal mecanismo de financiación fiscal tiende a acercarse a las prácticas internacionales, y tiene como principal ventaja que evita un incremento de la cantidad primaria de dinero, con lo cual reduce las presiones inflacionarias.
¿Dónde están los riesgos de la política fiscal expansiva y la emisión de bonos?
Primero, el déficit fiscal puede crecer en épocas de crisis, pero no debe hacerlo de manera desmesurada ni mantenerse alto indefinidamente. Está bien aplicar una política fiscal anticíclica, pero tener un hueco fiscal de 12 por ciento del PIB en 2017 trae dudas sobre la sostenibilidad financiera de todo el mecanismo de financiación que se está poniendo en práctica. Para tener un punto de comparación, se espera que los países conserven, en promedio de varios años, un déficit fiscal menor de tres por ciento del PIB.
Se debe tomar en cuenta que los propios inversionistas extranjeros, prestamistas y proveedores internacionales, serán los primeros que estarán mirando este indicador de equilibrio fiscal. A nivel internacional este es uno de los principales indicadores que se toman en cuenta para evaluar la prudencia de la política económica y que define el riesgo financiero del país.
Segundo, la emisión de bonos públicos reduce los efectos inflacionarios pero no los elimina del todo. Expandir el gasto fiscal en 11.500 millones de pesos por encima de los ingresos sí puede presionar al aumento de los precios dada la ampliación desproporcionada que está activando en la demanda de bienes y servicios.
Tercero, Cuba no cuenta con una regla fiscal que organice y ponga límites al equilibrio fiscal de largo plazo (como tienen otros países en la región), sino que depende de la discrecionalidad del gobierno cada año. Es decir, no sabemos qué va a suceder con los déficits fiscales en el futuro. No tenemos seguridad de que los bonos que se están emitiendo y los próximos que se emitirán serán manejados adecuadamente con el fin de garantizar la sostenibilidad de todo el mecanismo.
Se debe tomar en cuenta que los bancos están empleando los ahorros de las familias para comprar los bonos públicos, por tanto, el gobierno tiene la responsabilidad de obtener ingresos fiscales futuros y equilibrar las cuentas públicas para cumplir sus compromisos con los bancos y, en última instancia, con los ahorradores.
Para tener una idea de la magnitud del déficit y de la emisión resultante de bonos públicos, observemos que en el año 2015 el ahorro de las familias en los bancos sumaba 23.680 millones de pesos cubanos.
Por ende, el déficit fiscal presupuestado para el año 2017 equivale a 48 por ciento del valor de las cuentas de ahorros de las familias. Los bancos, ciertamente tienen también depósitos de las empresas y su propio capital. Aun así, esta proporción de 48 por ciento llama la atención sobre el poco espacio de financiación que a futuro tendría el MFP para soportar elevados déficits fiscales.
En resumen, el crecimiento proyectado de dos por ciento para el año 2017 en la economía cubana depende de una situación que sigue siendo incierta para la economía venezolana, a pesar del aumento del precio del petróleo. Además, viene acompañado de una política fiscal expansiva que de ser bien empleada puede ayudar a manejar la crisis, pero en caso contrario, tendría consecuencias desastrosas para la estabilidad monetaria y financiera del país.
La activación de una política fiscal anticíclica y la emisión de bonos públicos es acertada, pero parece exagerado un déficit fiscal que equivale a 12 por ciento del PIB y a 48 por ciento del ahorro de las familias en los bancos.
No habría posibilidades de repetir la expansión fiscal en el año 2018, más bien será indispensable realizar un ajuste fiscal que disminuya significativamente el déficit en los próximos años.
Por tanto, el gobierno solo está ganando un año de tiempo, en el cual deberá aplicar algunas de las reformas estructurales pendientes y necesarias para sacar en firme a la economía de la recesión.
Revisado por Estrella Gutiérrez

El difícil aterrizaje de la comida en Cienfuegos

Por Roberto Alfonso Lara y Zulariam Pérez Martí -30 diciembre, 2016


En recorrido por varios mercados estatales de Cienfuegos, se constató la poca presencia de productos agrícolas./Foto: Roberto Alfonso

En 2016 la Agricultura fue una constante en la agenda pública en esta provincia del centro sur de Cuba. La inconformidad de los cienfuegueros con los altos precios de los productos —especialmente aquellos establecidos por gestores privados— y el desabastecimiento en los mercados estatales, marcaron las grietas de ese sector en el territorio. Casi al finalizar el año, tal parece que la comida no quiere aterrizar en el plato.

LA AGRICULTURA EN NUESTRA EDICIÓN IMPRESA

Periódico 5 de Septiembre. 19 de febrero, páginas 4 y 5: “En un término de tres o cuatro meses se empezará a ver un grupo de productos (en los MAE), como resultado de su siembra emergente.

“Consideramos que los precios del MAE no son malos, y un aumento de producción debe hacer disminuir los precios en los demás actores de la comercialización que están fuera de nuestro sistema, porque tendremos abastecimientos en los nuestros y entonces deberán bajar si quieren vender”. Yoan Sarduy Alonso, delegado de la Agricultura en Cienfuegos.

Periódico 5 de Septiembre. 23 de septiembre, página 2: (En el Pleno del Comité Provincial del Partido en Cienfuegos) “se censuró la escasa presencia de surtidos agrícolas en la red estatal de agromercados y otros puntos destinados a la venta directa a la población”.


Periódico 5 de Septiembre. 28 de octubre, página 2: “Los programas de siembra se sobrecumplen, las entregas del encargo estatal, así como las exportaciones fundamentales. Solo algunos renglones, escasos, por cierto, no llegan a las cifras que sobrepasan el ciento por ciento. Sin embargo, todavía los productos son inaccesibles y los precios permanecen altos, algunos inalcanzables”. Comisiones de trabajo de la Asamblea Provincial del Poder Popular. Comisión de producción, distribución y comercialización de alimentos.

ORGANOPÓNICOS

“La provincia tiene 737 unidades de organoponía, en diferentes modelos: parcelas, organopónicos, huertos intensivos…”. Yoan Sarduy.

¿Ustedes fijan los precios por oferta y demanda?

“El Consejo de Administración Provincial fija los precios por los que podemos vender. Es sobre la base de la oferta y demanda, pero nunca igual a la de los mercados de este tipo”. Frank Abreu Arbolay, administrador del organopónico de La Esperanza.


En algunos casos, el valor de los productos ofertados en organopónicos no se ajusta a las tarifas estipuladas en las Resolución 157, que establece precios como los del tomate, a 4.20 pesos la libra./Foto: Liliam

“La Resolución 157 es la que topa los precios, eso incluye a los organopónicos. Por ejemplo, en estos momentos está establecido que el tomate se venda a 4,20 pesos la libra (lb) y ellos están obligados a venderlo así, sea cual sea su modelo de gestión, de lo contrario, están violando lo establecido, y para eso hay inspectores”. Yoan Sarduy.

¿Cómo gestionan la compra de las semillas?

“Cuando yo comencé, la libra de semilla de lechuga estaba a 6 pesos, ahora a 115. La de tomate vale más de 800 pesos, la de pepino vale más de 600. Eso hace que se encarezcan los productos.

“No podemos decir que siempre están las semillas. Este mismo año no ha entrado remolacha. La zanahoria ha estado bastante estable”. Frank Abreu.

“Este año las semillas han estado bastante estable. Lo que más ha faltado es la zanahoria. Se ha mantenido bien la remolacha”. Nelson Yuliesky Rodríguez Soto, administrador del organopónico del T15.

¿Afectan los moluscos a los organopónicos?

Los moluscos, al ser herbívoros, han sido considerados plagas en los cultivos. En Cuba, desde hace muchos años, por ejemplo, el boniato viene afectado por esos orificios que provocan las babosas. Algunos productores tratan de enmascarar el asunto, pues si el mazo de lechuga tiene ocho hojas, ellos quitan las que tienen orificios y te venden el resto por el mismo precio. Igual ocurre con la acelga y la remolacha. Hay una merma por rendimiento, pero también económico. Dr. Leonides Castellanos González, académico del Centro de Estudios para la Transformación Agraria Sostenible de la Universidad de Cienfuegos.

“Aquí los cultivos están contaminados con bastantes moluscos. Estos se comen las semillas de las plantas, y cuando estas crecen, sucede lo mismo. Por lo menos un 30 por ciento de las producciones se pierden”. Nelson Yuliesky Rodríguez.

“Lo que más nos afecta es el caracol”. Frank Abreu.

“Ni moluscos ni plagas tienen una implicación determinante en la producción; son cosas puntuales que pasan, pero no es nada que constituya un peso en los resultados productivos”. Yoan Sarduy.

“Existen seis especies de moluscos que atacan hoy a los organopónicos, dos de ellos son babosas y cuatro especies de caracoles. Por ejemplo, en la remolacha las pérdidas por metro cuadrado son de 1,15 a 8,46 kg, lo que representa 53,94 pesos. En el caso de la lechuga, se pierden de 1,78 a 6,05 kg por metro cuadrado, equivalente a 32,83 pesos”. (*) Informe de investigación de la doctorante Maité Nodarse Castillo, de la Universidad de Cienfuegos.


Varios organopónicos de Cienfuegos presentan afectaciones ante la proliferación de moluscos./Foto: Yuliet

ASEGURAMIENTOS

“Este ha sido un año de oportunidades para la Agricultura, donde el nivel de inversiones ha crecido considerablemente en comparación con otros años (…) La Agricultura no se puede esconder tras el velo de que han faltado recursos.

“No han existido afectaciones con los combustibles, sí hubo tensiones en algún momento con la energía, la gasolina, pero no ha sido un año de problemática con esos recursos”. Yoan Sarduy.

“Hubo reducción del combustible de un 20 por ciento, lo suplimos con tracción animal”. Yasnoli Alfredo González Jiménez, jefe de Producción de la UEB Juraguá.

“No decimos que no hayamos tenido problemas con el combustible. Sí hubo una reducción, pero eso no ha afectado a la empresa, porque en julio y agosto, nosotros lo optimizamos y entramos a trabajar en septiembre sin dificultad. El combustible a nosotros nos entró alrededor del 80 por ciento”. Raudel Rubio Rodríguez, director de la Empresa Agropecuaria Horquita.

“Hoy Acopio está deprimido en las balanzas de mil kilogramos, esas que irían sobre el camión o a completar el punto de compra”. Águedo Rafael Rodríguez Cosme, director de la Empresa Provincial de Acopio en Cienfuegos.

(A principios de año hubo retrasos en el montaje de las máquinas de riego). “Se debió a la situación con la maquinaria pesada, específicamente con los buldócer, con los que se remueve todo y solo tenemos dos en toda la provincia, y para el montaje de las máquinas hay que buldocear”. Yoan Sarduy.

ACOPIO

“Acopio, de no tener base y depender de la prestación de servicios externos, ya este año tiene catorce camiones y deben recibir otros equipos. Ha triplicado las ventas en comparación con años anteriores”. Yoan Sarduy.

“Contamos con quince camiones, aunque no podemos decir que es el transporte que necesitamos. Acopio para mantener un abastecimiento estable y cumplir con todo el programa de envíos a La Habana, requiere 32 equipos”. Águedo Rafael Rodríguez.

“Acopio solo participa en el 30 por ciento de la estructura de las ventas. La meta es que participe en mayor medida: mientras más puntos estatales, más producción le llegará al pueblo con precios topados”. Yoan Sarduy.

“Si usted quiere satisfacer demanda, facilito, auméntele el precio (…) cuando se ponen precios asequibles, la población demanda más.

“Considero que en la provincia ha habido un aumento de la producción y al bajar los precios de los MAE existe un aumento en la adquisición del producto. La población puede decir que los precios están caros, lo que pasa es que las personas miden el efecto de estos de acuerdo con su poder adquisitivo.

“Es verdad, la permanencia en los mercados no es la necesaria”. Águedo Rafael Rodríguez.

COMERCIALIZACIÓN

“Las ventas en los Mercados Agropecuarios Estatales (MAE) se han multiplicado.

“Los mercados que venden mucho y son excepcionalmente buenos es por el material humano que allí labora. Hay mercados que siempre están abastecidos. Las ventas tienen mucho que ver con la capacidad de gestión”. Yoan Sarduy.

“Tenemos hortalizas para abastecer a Cienfuegos y a todos los municipios. Hoy estamos vendiendo el mazo de hortalizas a peso en Cienfuegos, que no lo asumen los mercados. Tenemos rábano, acelga, lechuga, col de dos tipos, berenjena, tomate.

“Nosotros la semana pasada teníamos aquí más de 5 mil quintales diarios de boniato. Estamos pidiendo que se comercialice el tomate grande. Plátano no ha faltado nunca en ese mercado (Séptimo Congreso), producido por Horquita.

“Diariamente, los camiones nuestros regresan cargados de hortalizas. Eso lo sabe todo el mundo. De 100 cajas, están vendiendo 15 o 20. Esas producciones las pierde la empresa. Ahora, nosotros estamos para producir, no para administrar los mercados. Quien debe cuestionar si lo recibe o no, es otro”. Raudel Rubio.

“Llevo cinco años aquí y este ha sido el más malo. Regularmente tengo siete u ocho productos, no más”. Luis Miguel Abreu, dependiente del punto de venta La Chirimoya.

“Juraguá no cumple con nosotros, debe entrar dos veces a la semana, y lo hace solo una vez o se pasan diez días y no vienen. Sin embargo, asiste a la feria de la Calzada con sus camiones llenos, hasta tres camiones trae”. Rafael López Mederos, administrador del MAE La Calzada.

“Las frutas están perdidas, lo único que ha entrado ha sido frutabomba. No hay abastecimientos, ni malanga ni guagüí. No tenemos productos frescos ni nada bueno. Este mes, por ejemplo, ha entrado muy poco, yo no sé desde cuándo no recibimos un pepino”. Norey Hernández Sánchez, dependienta del MAE La Calzada.

“Esto ha ido para atrás. Está en barranca y loma abajo. Horquita viene con yerba nada más. ¡Tú sabes lo que es venir de Horquita aquí a traer col china! ¿Dónde está el resto de las hortalizas? El boniato lo traen picado. No entra ni guayaba ni níspero; el mango que vendimos este año fue poco. Es cierto, tres veces a la semana viene a abastecernos, pero vienen con yerba. Hemos guapeado para que entren otras provincias: el plátano de Ciego y la cebolla de Banao, porque Cienfuegos no tiene abastecimientos, está en cero, ¡cero!”. Romel Medina Pérez, administrador del MAE Séptimo Congreso.

“Durante el mes de diciembre hemos recibido 145,04 quintales en frutas, viandas, hortalizas y granos de las formas productivas, mientras de Acopio: 617,57 quintales. Eso parece mucho, pero en realidad no satisface ni la mitad de la necesidad de los consumidores. Le estoy dando 3,8 libras a cada habitante, cuando están estipuladas 23,1 lb.

“La calidad de los productos agrícolas que entran a nuestras placitas es entre comillas. Aquí dicen que es de primera, pero en realidad no lo es, si vamos a las normas técnicas”. Santiago Díaz Cortés, administrador del MAE Buenavista.

“Nosotros vendemos lo que mandan de Buenavista, no siempre tenemos lo mejor. Por ejemplo, la papa ni la vimos. Hoy solo tenemos tomate, boniato medio picado y plátano burro. La población se queja de las ofertas, pero yo no puedo inventar la mercancía”. Dependiente del punto de venta en La Esperanza.

“Esta semana entró un poco de tomate. Hace tiempo que no vemos vianda, hortalizas, frutas. Hoy solo tenemos granos y unos cocos”. Robeisy Rivero Dayron, dependiente del punto de venta El Pepino, en Tulipán.


En algunos mercados estatales es visible la poca variedad de productos agrícolas./Foto: Yuliet

Precios de productos agropecuarios en diciembre de 2016


Producción de leche


Fueron consultadas para este reportaje más de 20 fuentes activas del sector agrícola, en visitas a mercados estatales, organopónicos, puntos de oferta-demanda y a los polos productivos Juraguá y Horquita. Además, se consultaron 16 trabajos periodísticos publicados por 5 de Septiembre en 2016, relacionados con el tema.

*Valores máximos observados para poblaciones muy altas, entre 15 y 20 moluscos por metro cuadrado.

Buen año para cuentapropistas de Ciego de Ávila

cooperativas no agropecuarias ciego de avila 1
• Luego de cuestionarnos ¿hacia dónde íbamos con el cuentapropismo?, y lo describiéramos como uno de los fenómenos más complejos y variables hoy, las expectativas comienzan a encontrar recompensas

Cuando en el 2010 se anunció una flexibilización en la entrega de patentes para el trabajo por cuenta propia, los cuestionamientos sobre la posible pérdida de la esencia social del proyecto revolucionario y de los riesgos de un crecimiento desmedido de la pequeña propiedad privada conquistaron el debate, no obstante, al cabo de seis años las cifras ilustran las potencialidades crecientes de este sector en la generación de empleos y su papel protagónico en el proceso de actualización socio-económica que vive el país.
 Las cooperativas no agropecuarias han sido otro de los logros del sector no estatal en el año
Solo en Ciego de Ávila, al cierre de noviembre, existían 16 759 cuentapropistas y, en comparación con igual período del año anterior, el aumento fue de 9 559.
Alexis Portuondo Brizuela, director provincial de Trabajo y Seguridad Social, explicó a Invasor que el cuentapropismo ha logrado incorporar alrededor de 6 571 personas sin vínculo laboral anterior y a 1 520 amas de casas; siendo las actividades de elaborador-vendedor de alimentos y bebidas, y la fuerza de trabajo contratada, las de mayor representación.
“Todavía nos falta ganar un poco más de cultura tributaria, que se vean los impuestos como una obligación y una forma de aportar al presupuesto del estado, no como obstáculos a evadir. Es responsabilidad de cada quien cumplir con la entrega en las fechas establecidas.”
Los impuestos provenientes de estos contribuyentes, en lo fundamental, han posibilitado que se sobrecumplan los ingresos netos del territorio en más de nueve millones de pesos, lo cual habla de constancia y responsabilidad en el ejercicio de estas funciones, cuyo ascenso ha sido progresivo en el último sexenio.
Todavía quedan algunas violaciones asociadas al ejercicio de actividades que no están legalmente autorizadas, distintas a las reconocidas en la patente o en lugares no autorizados, y a emplear trabajadores sin la correspondiente contratación. Por estas y otras causas, a lo largo del año, se retiraron 43 licencias, se realizaron 43 decomisos y se impusieron 1 108 multas.
Tampoco las inconformidades desde el otro lado han cesado porque la ausencia de un mercado mayorista encarece y dificulta el acceso a las materias primas, o porque la declaración jurada reconoce los ingresos en bruto y a partir de aquí se fiscaliza, sin tenerse del todo en cuenta la inversión, la que, muchas veces, tampoco puede justificarse al provenir del “mercado negro”.
Sin embargo, aunque el camino no ha estado excepto de deslices nadie niega que 2016 ha sido un buen año para el sector no estatal en Ciego de Ávila y, aun cuando para los próximos 12 meses se auguran reestructuraciones y carencias, los derroteros están ya trazados, falta ahora materializarlos.