Otras Paginas WEB

sábado, 2 de septiembre de 2017

Qatar y Cuba consolidan vínculos económicos (Entrevista al Embajador)

José Carlos de Santiago y Jorge Coromina • 2 de Septiembre, 2017

Con el objetivo de conocer el estado actual de las relaciones diplomáticas y comerciales del Estado de Qatar con Cuba, el Grupo Excelencias tuvo la oportunidad de charlar con su embajador en esta Isla desde el año 2013, el Excelentísimo Señor Rashid Mairza Mahmoud Al-Mulla, quién accedió amablemente a respondernos algunas interrogantes.

Qatar siempre ha sido un apoyo económico para Cuba por el aporte de importantes créditos y fuentes de financiamiento. Durante la visita (a finales del año 2015) de Su Alteza el Emir de Qatar, jeque Tamim Bin Hamad Al-Thani, se firmó un Memorando para la inversión en Cuba que ascendía a 2 mil millones de dólares para cinco años, con el fin de abarcar varios sectores de la Cartera de Oportunidades que ofrece el país caribeño.

Actualmente existen varios proyectos inmobiliarios y de inversión en la Isla, como en la construcción del nuevo aeropuerto y otras obras de infraestructura. ¿Podría adelantarnos algunos detalles al respecto?

Cuba y Qatar disfrutan de unas relaciones bilaterales muy fuertes, que son distinguidas en todo Oriente Medio, y eso se debe en buena parte a los vínculos que se forjaron desde un inicio entre el Emir anterior (Hamad Bin Khalifa Al Thani) y el ex presidente cubano, Fidel Castro. Fueron ellos quienes sentaron las bases de esta relación tan sólida que hoy tenemos en lo económico, lo cultural y otras esferas.

Qatar ha mantenido siempre una actitud respetuosa hacia Cuba y ha querido apoyar a la Isla en las relaciones internacionales, concretamente en el marco de Naciones Unidas, con el fin de defender sus derechos a favor del levantamiento del bloqueo norteamericano. Esos han sido los pilares más importantes para el mantenimiento y consolidación de nuestras relaciones bilaterales.

Las relaciones económicas entre ambos países son muy buenas. Como país amigo de Cuba, Qatar siempre intenta brindarle apoyo económico a la Isla en la esfera de las inversiones. Un ejemplo concreto es el soporte que le ofrece a Cuba en el tema de las emergencias y las situaciones de desastres naturales, toda vez que la isla caribeña se ha visto afectada en varias ocasiones por el azote de huracanes.

Una mención aparte merece el apoyo qatarí al desarrollo de la infraestructura cubana. Hemos presentado varios proyectos a las autoridades cubanas, como por ejemplo en el tema del aeropuerto José Martí de La Habana y otras terminales aéreas del resto del país.

También hemos hecho propuestas para el desarrollo de la Marina Hemingway en La Habana, y queremos involucrarnos más fuertemente en el avance de la Zona Especial de Desarrollo del Mariel, concretamente con buscar las vías para que las empresas qataríes se instalen en la Zona.

Puedo adelantar que hay muchos estudios y proyectos conjuntos entre los dos países para afianzarnos en el Mariel, empresas que puedan aportarle a Cuba en materia de turismo, productos turísticos y desarrollo hotelero. Igualmente estamos aspirando a participar de conjunto con Cuba en el desarrollo de proyectos vinculados a la energía renovable y la energía limpia.

En el año 2016 se anunció que se abriría una oficina representativa del Banco Nacional de Qatar en Cuba, ¿qué novedades hay con respecto a eso?

Puedo comunicar con placer que ya hemos recibido los permisos correspondientes para la apertura en La Habana de una oficina del Banco Nacional de Qatar. Ya contamos con el local y estamos inmersos ahora en la etapa del amueblamiento de esa oficina. Con su apertura tendremos garantizado un vehículo importante para hacer las operaciones económicas y comerciales, entre nuestros dos países, más expeditas.

Pese a la voluntad de Doha y La Habana de avanzar en sus acuerdos comerciales, muchas veces las transferencias bancarias sufren los efectos del embargo. De ahí la necesidad de la apertura de dicha oficina y todo lo que ello supondrá en materia financiera para el desarrollo de los vínculos económicos bilaterales.

El bloqueo norteamericano contra Cuba continúa poniendo tropiezos a las relaciones comerciales internacionales de la Isla, y en el caso de Qatar, no es la excepción. Desde hace 10 años, empresas qataríes se interesaron en el desarrollo de los cayos cubanos, especialmente con la construcción de infraestructura y campos de golf. Hoy día, muchas de esas obras aún no se han iniciado debido a las sanciones estadounidenses contra este país.

Como usted mencionó anteriormente, uno de los sectores en el cual los que empresarios qataríes se han interesado es en la industria turística, específicamente ¿qué proyectos se han ido concretando?

De momento nos han aprobado la construcción de tres hoteles 5 Estrellas en Cuba, dos ellos en La Habana, exactamente en los terrenos ubicados en Avenida 1ra y Calle 70, en Miramar, muy próximo al Hotel H10 Panorama, y un tercer hotel en Cayo Largo, al sur de la Isla.

El Memorándum en el que la nación árabe concedió un crédito de 2 mil millones de dólares incluye la libertad de invertir ese dinero en aquellos renglones que Cuba estime pertinente, aunque siempre deberá ponerse en contacto con sus contrapartes en Qatar para informar cuál será el destino final de los fondos.

Independientemente de que el crédito acordado con Qatar permite que sea cualquier empresa de cualquier país la que reciba la licitación para emprender construcciones de infraestructura u operaciones de inversión en Cuba, nos gustaría que fuesen compañías de mi país las que pudieran hacer esos emprendimientos en la Isla.

Cuba ha identificado 5 puntos clave para la recepción de inversiones que permitan el desarrollo de su infraestructura: La Habana, Santiago de Cuba, Holguín, Cienfuegos y Matanzas. A Qatar le han presentado algunos de los proyectos que Cuba busca iniciar en ese sentido y sus autoridades están estudiando las posibilidades de involucrarse en esos emprendimientos inversionistas.

¿Qué empresas o instituciones se han interesado más por invertir?

Las aerolíneas qataríes, que figuran entre las mejores del mundo, así como el Fondo Soberano, y la Fundación de Inversiones de Qatar, son algunas de las empresas y entidades del Emirato que se han interesado en invertir en Cuba.

La empresa de bienes raíces Diar Qatari será la que construya, y posteriormente administre, los tres hoteles previstos en los próximos años.

¿Cuál fue el resultado de las negociaciones sobre el aeropuerto José Martí?

El Aeropuerto de La Habana necesita de grandes inversiones para hacer frente al aumento de la demanda, de los vuelos a Cuba y del incremento sostenido del turismo internacional. Las autoridades cubanas están buscando socios en el exterior que estén capacitados para emprender los trabajos que el aeropuerto requiere, tanto en financiamiento como en desarrollo posterior.

Algunas empresas qataríes se enrolaron con sus proyectos en la licitación, pero finalmente el gobierno cubano eligió a una compañía francesa para el desarrollo del aeropuerto. Independientemente de ello, desde Qatar las autoridades del Emirato prosiguen trabajando en aras de poder cooperar con el desarrollo del José Martí de La Habana, por orden expresa del Emir.

Misión médica cubana en Qatar

En noviembre de 2016 el canciller cubano, Bruno Rodríguez visitó Qatar como parte de un recorrido por la zona y constató el estado de la cooperación médica cubana en ese país. En esa ocasión se divulgó que Rodríguez felicitó a los profesionales por la calificación de excelencia que habían estado recibiendo y por ser merecedores del mejor índice de satisfacción a nivel del país (según una encuesta realizada en todos los hospitales de la Corporación qatarí Hamad).

El Hospital Cubano de Dukhan recibió entonces, por segunda vez, la acreditación de la Joint Commission International, considerada la categoría de oro en cuidados de salud a nivel global. ¿Qué puede decirnos de la misión médica cubana en Qatar?

Surgió en su momento la idea de contar con un hospital en Qatar para que los médicos cubanos brindaran sus servicios. Posteriormente, por orientación del Emir anterior, se construyó este hospital exclusivamente para ofrecer la atención del personal médico cubano. No obstante, otros centros hospitalarios qataríes buscan también los servicios de sus galenos, y todo ello como parte de un acuerdo con Cuba para la prestación de servicios médicos.

Solamente en el hospital construido para el acuerdo con La Habana, hay en la actualidad más de 450 profesionales de la salud, entre médicos y enfermeros. Es como una pequeña comunidad médica cubana en Qatar.

¿Tiene lugar algún otro tipo de colaboración cubana en Qatar?

En el área del deporte. Hay deportistas cubanos en una academia en Doha, además de la presencia de entrenadores y técnicos.

La nueva Embajada de Qatar en Cuba

Señor Embajador ¿cuál es el estado de la construcción de la nueva Embajada de Qatar en La Habana?

Ya han concluido los estudios topográficos y el inicio de la construcción estaba prevista para el último trimestre de este año. Será difícil que las obras se inicien este año, de manera que deben comenzar a inicios del 2018, ya se cuenta con todos los permisos.

Cuba también tiene un terreno en Doha para la construcción de su sede diplomática en Qatar. El terreno es propiedad del Estado de Qatar que partió de una donación de los líderes cubanos.

La Embajada la construirá una compañía qatarí, vinculada a la Cancillería de Qatar.

El área aledaña a donde estará ubicada la nueva Embajada también será saneada, toda vez que en los últimos tiempos se ha transformado en un vertedero. Qatar ha considerado la limpieza de la zona, no solamente del río, sino de toda esa área, atendiendo a que el edificio de la Embajada tendrá un estilo arquitectónico árabe clásico que será sumamente atractivo.

Rentas monopolísticas e impuesto de sociedades

Se da por hecho que reducir la fiscalidad de las empresas es buena idea. Los datos no dicen eso


La bandera americana preside la entrada de la Bolsa de Nueva York. RICHARD DREW AP

En cierta medida, es difícil tomarse en serio la propuesta de “reforma” fiscal del Gobierno de Trump. Un tipo sale elegido como populista y sus dos primeras grandes propuestas son (a) retirarles a millones de personas su seguro sanitario y (b) reducirles los impuestos a las grandes empresas. Vaya.

Es más, Trump es ignorante hasta decir basta en materia de impuestos (y en todo lo demás). Sigue declarando que Estados Unidos es el país con los impuestos más altos del mundo, que es casi lo opuesto a la verdad entre los países avanzados. Y sus aliados en el Congreso no son ignorantes, pero sí mentirosos: Paul Ryan propone recaudar y ahorrar billones de dólares sin especificar cómo.

Pero hay aquí una pregunta realmente interesante, aunque no deberíamos dar crédito a las respuestas republicanas. ¿Quién paga de hecho el impuesto de sociedades? ¿Recae sobre las grandes empresas y, por tanto, finalmente sobre sus accionistas? ¿O incide en última instancia en los salarios, como afirma el Gobierno?

Ha habido muy buenos debates sobre este tema en la Oficina Presupuestaria del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés). Esta se muestra escéptica respecto a los análisis de regresiones entre países que parecen indicar que buena parte de la carga recae sobre los salarios.

Coincido en cuanto a los principios generales: en la mayoría de los casos es demasiado difícil controlar otros factores. Las únicas veces que me tomo en serio los resultados entre países es cuando hay un factor con una conducta diferencial verdaderamente drástica que probablemente tenga grandes repercusiones, como las enormes diferencias en el grado de austeridad presupuestaria entre 2009 y 2013. El tratar de deducir las repercusiones de la fiscalidad empresarial, que no difiere tanto entre países de la OCDE y seguramente no sea la principal causante de las diferencias salariales, parece inútil.

La alternativa es una especie de relato estructural; y pienso que aquí hay un argumento importante, ya planteado por la CBO, pero sobre el que es necesario insistir: realmente debemos tener en cuenta las rentas monopolísticas.

La manera habitual de contar este relato es plantear los impuestos sobre sociedades como un impuesto sobre los rendimientos del capital físico. La historia dice a continuación que, en los viejos tiempos, cuando la movilidad de capitales entre países era limitada, las sociedades anónimas no tenían realmente manera de evitar la tributación, de modo que ese impuesto recaía efectivamente sobre los accionistas. Pero ahora, prosigue la narración, tenemos unos capitales altamente móviles; si se les hace tributar en un país, se irán, provocando una escasez de capitales y una bajada de los salarios, hasta que las tasas de rendimiento después de impuestos en ese país vuelvan a la media mundial.

Hay importantes salvedades que hacer a este relato ya de partida. Por un lado, la movilidad de los capitales sigue distando mucho de ser perfecta: la correlación de Feldstein y Horioka entre ahorros nacionales e inversión nacional se ha debilitado, pero sigue existiendo. Por otro lado, Estados Unidos es un país grande, capaz de afectar a las tasas de rendimiento mundiales. Y una cosa más: teniendo en cuenta el tamaño de Estados Unidos, la bajada del impuesto de sociedades bien podría inducir recortes competitivos en otros países, reduciendo aún más el impacto sobre los salarios estadounidenses.

Pero lo que me ha llamado la atención de la CBO ha sido un argumento bien distinto: buena parte de los impuestos de sociedades probablemente no recaigan sobre rendimientos del capital físico, sino más bien sobre las rentas monopolísticas. Da igual que esas rentas se hayan obtenido o no de manera justa, mediante, pongamos por caso, una inversión en tecnología, o incluso que las grandes empresas hayan obtenido o no beneficios superelevados. Mientras la fuente de beneficios local sea algún tipo de renta monopolística, la incidencia del impuesto de sociedades recaerá sobre los accionistas, no sobre los trabajadores.

Imaginemos un mundo en el que todas las grandes empresas son como Google o Apple: invierten recursos en desarrollar nuevos productos, después venden esos productos –en los que tienen mucho poder de mercado– en diversos países muy por encima del coste de producción, lo cual es la fuente de sus beneficios. Reducir el tipo impositivo sobre esos beneficios no les hará emplear a más personas, impulsando la demanda de trabajadores y, por lo tanto, los salarios; simplemente les permitirá conservar una parte mayor de sus rentas. 

Un ejemplo similar: piensen en el sector farmacéutico, en el que las empresas desarrollan un medicamento y después lo venden en todo el mundo. Algunos países utilizan la capacidad negociadora de sus sistemas sanitarios públicos para conseguir precios más bajos, y otros (nosotros principalmente), no; los países que negocian precios más bajos no pagan ningún precio en forma de acceso reducido a los medicamentos. De modo similar, si se impone un tributo a las rentas obtenidas de los monopolios tecnológicos, no se pierde el acceso a la tecnología, sino que simplemente se recaudan más impuestos.

Y hay buenas razones para creer que el poder del mercado es una cuestión cada vez más importante. Insisto, no tiene por qué ser injusto, y podría suponer una competencia monopolística sin muchos retornos superiores al comportamiento del mercado. Lo que quiero decir es que, independientemente de cuál sea la fuente y la justificación del poder de mercado, ese poder debilita el argumento de que la movilidad de capitales hace que reducir el impuesto de sociedades beneficie a los trabajadores.

Esto cambia la historia, ¿a que sí? En lugar de centrarnos en la movilidad de capitales como razón por la que los impuestos sobre beneficios podrían recaer en los trabajadores, tal vez deberíamos fijarnos en el creciente poder de mercado como razón por la que los impuestos de sociedades recaen en los capitalistas.

Lo importante por ahora es que cuando alguien les diga que los cambios en el mundo han hecho obsoletos los impuestos de sociedades a la vieja usanza se muestren escépticos. Es posible que algunos de los cambios que han tenido lugar en el mundo hayan hecho que el impuesto sobre beneficios sea ahora una idea mejor que nunca.

Paul Krugman es premio Nobel de Economía.
© The New York Times Company, 2017. 
Traducción de News Clips.

Epicien coloca nuevos productos en la red comercial de Cienfuegos

Por Armando Sáez Chávez -2 Septiembre, 2017


Por la principal pescadería de la ciudad de Cienfuegos inició la venta de los productos./Foto: Yuliet Sáez

La Empresa Pesquera Industrial Cienfuegos (Epicien) introdujo siete nuevos productos de gran demanda por parte de la población, los cuales muy pronto se extenderán a toda la red de pescaderías y puntos de venta de la provincia.

El paquete de ofertas comprende el filete de claria ahumado-curado, croquetas de pollo y pescado, indistintamente, con queso, e iguales ingredientes en la conformación de mortadella y chorizo; todos, a precios ajustados a la economía doméstica del cienfueguero medio.

“Con la novedad, ya suman más de 25 las variedades de productos a partir de las especies acuícolas y de plataforma, como parte de la diversificación de producciones y la sustitución de importaciones trazadas por esta rama de la industria alimentaria”, precisó para 5 de Septiembre la doctora en Medicina Veterinaria Idania Piñeiro Morejón, directora de la Unidad Empresarial de Base Industria.


Las nuevas ofertas están avaladas por certificados de inocuidad y calidad. /Foto: Yuliet Sáez

Agregó la directiva, que a pesar de la obsolescencia tecnológica y de infraestructura, de un tiempo acá los trabajadores de la entidad Indusur, Vanguardia Nacional por tres años consecutivos, sigue un plan de desarrollo para entregar un producto final que cubra las expectativas del cliente, basados en los sistemas de Gestión de la Calidad ISO y las HACCP (por sus siglas en inglés), un proceso sistemático preventivo para garantizar la inocuidad alimentaria,​ de forma lógica y objetiva.

Por lo pronto, informó Piñeiro Morejón, los almacenes proveedores a los dos salones de procesos de Indusur (conformado y productos frescos) cuentan con la materia prima y los insumos necesarios para estabilizar, en lo adelante, la presencia de las nuevas ofertas en la red comercial, amén de los imponderables que puedan presentarse.

La Empresa Pesquera Industrial Cienfuegos, cuyas instalaciones centrales se localizan en el lóbulo norte de la bahía de Jagua, tiene por encargo estatal el cultivo, captura, procesamiento industrial y comercialización de especies de agua dulce y de plataforma.

Con el nombre de Combinado Pesquero Industrial fue creada en el año 1975, y a partir de 2001 derivan en las empresas Epicien y Pescacien. Siete años después estas fusionan la acuicultura y la pesca de plataforma para adquirir la denominación actual.

( Tomado 5 de Septiembre)