Por Ricardo J. Machado, ( HABANA INSIDER 1163)
La segunda parte de 2018 estuvo
cargada de acontecimientos de mucho peso para los cubanos: nuevo presidente, intenso
debate constitucional serias
deficiencias en la toma de decisiones de algunos ministerios e inesperadas escaseces. Se configuro un fin de año tenso y contradictorio.
Pero lo que sucede conviene .Aquí intentamos ofrecer
una interpretación constructiva de algunos de los hechos que en nuestra opinión tienen mayor significación comenzando en esta primera parte con el tema del
PIB. En las próximas notas comentaremos las restantes, que incluirán ademas un
intento sintético, sin muchas pretensiones de un balance de los primeros seis
meses del ingeniero presidente.
¿ Sirve el PIB para dar una idea real
del grado de desarrollo y bienestar de una sociedad?
Creo que el discurso oficial hace
demasiado énfasis acerca del PIB y los medios así lo reflejaron. Fue una
actitud discreta y medida del gobierno cubano y hasta cierto punto pudorosa. Es un indice bajo es cierto, pero también lo
es que son muchos los paises que tienen un desempeño semejante o inferior.
Esperemos el acostumbrado informe anual del Banco Mundial y lo comprobaremos.
La diferencia es que ninguno enfrenta una guerra y persecución económica implacable del pais mas poderoso del mundo. Tiene razón el gobierno cubano al
mantener una actitud positiva hacia ese 1,2.
El desarrollo de una nación debe ser
medido tanto mediante variables tangibles como intangibles. Es notable la producción científica de investigadores –incluso desde el capitalismo-que
defienden la importancia para el crecimiento de un pais y sus organizaciones de
los activos intangibles. El PIB muestra un enfoque demasiado unilateral hacia
las variables tangibles. (En un texto anterior hice una exposición un tanto
detallada acerca de la importancia de los activos intangibles en el modelo
cubano y su aporte a la sostenibilidad de nuestro proyecto de nación).
Es tan grosero el PIB como instrumento
de medición que excluye por ejemplo la
salud y la educación de una nación. En la década de los 80, el mismo Fidel realizó una critica pertinente. En realidad somos cada día mas los
especialistas de ciencias sociales –dentro y fuera del pais- que no confiamos
demasiado en su potencial de diagnóstico. No son pocas las fuentes que pueden
ser citadas sobre el tema.
Incluso desde el mismo campo de la ideología capitalista existen testimonios de mucho interés como el que nos deja
un político de reconocido talento, como Robert Kennedy, que en 1968, en uno de
sus discursos se refirió a este asunto del PIB;
"…no toma en cuenta la salud de
nuestros hijos, la calidad de su educación, ni el gozo de sus juegos. No se
incluye en él la belleza de nuestra poesía, ni la solidez de nuestros
matrimonios, la inteligencia de nuestros debates públicos. No mide nuestro
ingenio ni nuestra valentía, tampoco nuestra compasión o nuestra devoción a la
patria; en pocas palabras:lo mide todo, menos todo aquello que hace que valga
la pena vivir la vida".
De aqui los cubanos podríamos extraer
algunos de estos elementos y añadir solidaridad ante la adversidad ajena,
orgullo por nuestra historia, disposición a enfrentar el desafió del gigante
del norte en sus propias narices y sobre todo dignidad y amor a la
independencia y soberanía de la nación. Incluir ademas la disposición a pagar
el precio que todo ello implica para el deterioro de los aspectos materiales de
nuestra vida cotidiana.
En fin, nuestro PIB es bajo y agrio
como cierto vino, es verdad, pero es nuestro PIB con dignidad.(disparates
ministeriales aparte).
Las particularidades de la situación cubana en cuanto a la medición del grado de bienestar obliga a nuestros científicos a desarrollar instrumentos mas adecuados a nuestra realidad para una interpretación de mayor objetividad. Que valor otorgarle por ejemplo a la
seguridad de nuestras calles o a tener un gobierno honesto –que se equivoca-
como cualquier otro gobierno, pero
sobre una base ética? No son muchos los paises que disponen de esta fortaleza.
Están por ejemplo el indice de
desarrollo humano (IDH), el coeficiente Gini para medir desigualdad –tambien
con limitaciones-y sobre todo el instrumento conocido como paridad del poder
adquisitivo (PPA) muy utilizado por los chinos. Este ultimo merece un
comentario.
Se trata por ejemplo, de ponderar el
valor (cuantitativo y cualitativo; kilocalorias y gramaje diario de ingesta de proteína) de una comida popular, digamos la conocida "pizza de
papelito" y la llamada "cajita", cuyo precio, hasta hace poco se movía alrededor de un CUC con tendencia al alza. Un asunto pendiente es
investigar como es la alimentación promedio del cubano medio.
Si como propone el modelo cubano y
exhorta con frecuencia el presidente a instaurar un gobierno electrónico, este
no podria alcanzarse sin proveer de una base científica a las decisiones del
Estado, en primer lugar, y también a los sectores vinculados a la actividad económica, principalmente al conjunto de empresas del Estado.
Para lograrlo debe superar un obstáculo esencial pendiente: construir un sistema nacional de estadística oportuno y
confiable.
No lo tenemos y sin resolver ese
problema no podemos ni soñar con una gobernanza con fundamentos integrados por
las ciencias , principalmente las económicas y sociales. En la implementacion de
las partes esenciales del modelo cubano el papel decisivo lo tienen las ciencias
del comportamiento: Economía-Sociología-Psicología entre otras- cuya tarea
priorizada es articular racionalmente la mente,los sentimientos y el bolsillo
de la mayoría de los ciudadanos como hemos advertido en textos anteriores.
Aquí se encuentra la clave de la
sostenibilidad de los sistemas sociopoliticos y el socialismo no es una excepción. Gobernar
es preveer como decía Marti, pero para preveer –social y económicamente hablando -uno tiene que medir para
interpretar (diagnosticar) y a partir de ahí gestionar.
Entre diagnostico y medición existe
una interrelación que implica primero decidir que medir y despues construir los
instrumentos de medición de bienestar. Concluyendo: sin un sistema integral y
coherente de instrumentos de medición no es viable una gobernanza científica.
La tarea urgente de los científicos sociales cubanos es construir los instrumentos de medición que nos faltan,
perfeccionar los que tenemos y estudiar para ajustar los que se utilizan
internacionalmente, pero respetando su esencia para que la imagen -pais de Cuba
sea compatible con el resto de las naciones.
No estoy proponiendo desechar el PIB.
Pero hay que identificar a la mayor brevedad como medir la desigualdad, la
pobreza, el ritmo de crecimiento de la riqueza y las interrelaciones con las
dos anteriores. No hay que tenerle miedo a este tema, pues Cuba tiene
escenarios muy superiores a la media.
No debemos seguir ignorando el indice
de inflación anual, ni el de consumo diario de proteínas y kilocalorias, los
cuales hace años que no se mencionan.
Faltarían en mi opinión disponer también de un indice de medición de activos intangibles relacionados con la gestión de
la vida espiritual del pais, principalmente en la cultura en la que hemos
alcanzado estándares de nivel internacional, que algunos paises desarrollados
no tienen y que muchos cubanos subestiman porque carecen de marcos de
referencias. Esta zona esta muy relacionada con lo que podríamos llamar la gestión del talento en la vida espiritual (GTVE)
Cuanto vale para muchos cubanos
asistir a una sesión de ballet de una de las mejores compañías del mundo o
disponer-como en la capital cubana y otras del pais- de ofertas culturales
diversas y de calidad que no tienen nada que envidiar a la de paises
desarrollados?
Estos éxitos innegables-nos quedamos
esperando un trabajo de sociología cultural de la experiencia de la muestra de
las artes cubanas en el Kennedy Center- y el mencionado indice GTVE contrastan
con los que es el talòn de Aquiles de la sociedad cubana: la gestión del
talento en la vida material (GTVM).
A veces uno tiene la impresión que en
ciertas áreas y niveles de la dirección del pais existe un sentimiento larvado
y hostil a la inteligencia humana. Ya sucedió en el socialismo europeo, no seria
extraño que este virus apareciera aqui.
Creo que junto con el bloqueo este podría ser el principal obstáculo a nuestro desarrollo en la actividad económica y la prosperidad de la nación.
Lo mismo que hemos sabido hacer en la
esfera de la cultura, el deporte, la esfera militar, y algunas de la ciencia,
nos ha estado vedado en los sectores de la vida económica y material en
general-principalmente en entidades estatales, donde se encuentran no pocos
talentos frustrados, muchos de los cuales solo piensan en escapar de su situación sea para el extranjero o para el sector no estatal.
Este clima de promoción, respeto y
reconocimiento del talento debe ampliarse a las formas de gestión y propiedad
que funcionan fuera del Estado: trabajadores por cuenta propia, microempresas y
cooperativas, pues sin ellos no alcanzaremos el grado de prosperidad que
anhelamos.
En los planes de desarrollo de Cuba
para el 2030 falta uno dedicado al rescate y promoción del talento humano en
las esferas productivas. He señalado en textos anteriores que el desarrollo de
un pais depende de mentes desarrolladas, en todos los niveles, empezando por
los superiores. Es el talento y su gestión adecuada de donde emana el
desarrollo.
Aquí también vale aquello de que
"trinchera de ideas vale mas que trinchera de piedras" .Como premisa
de nuestro desarrollo y prosperidad hay que crear trinchera de ideas en las
organizaciones vinculadas a la economia, reconociendo a las personas que son
portadoras de ellas y viabilizando su ascenso y participación en la toma de
decisiones.
Cuando hablamos de talento, incluimos
dentro del concepto otros atributos de la personalidad. Sobre este particular
no ha faltado orientación precisa de la dirección del pais:
"El éxito dependerá de la
inteligencia, paciencia y sobre todo la firmeza con que actuemos"
(Raùl Castro, discurso del segundo
periodo de sesiones de la AN, Granma 23 de diciembre de 2014)