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lunes, 17 de junio de 2019

La concepción socialista del Che, ayer y hoy.

Por Elier Ramírez Cañedo

(Palabras de presentación del libro: “El pensamiento económico del Che”, de Carlos Tablada)

I

Quisiera comenzar estas palabras recordando hoy a Fernando Martínez Heredia, uno de los intelectuales cubanos que más estudió las ideas y las batallas del Che y  que fue también un guevariano en la vida. Lamentablemente lo perdimos físicamente hace dos años, cuando aun su mente luminosa seguía aportando muchísimo al pensamiento social cubano. Gracias Fernando, por tu ejemplo.

Creo ha sido una idea muy feliz que la editorial Ciencias Sociales haya decidido relanzar El pensamiento económico del Che, de Carlos Tablada. Con 38 ediciones realizadas y más de 600 000 mil ejemplares impresos en 14 países y 9 idiomas, esta obra continúa siendo un clásico entre los estudios del pensamiento revolucionario cubano y latinoamericano, al abordar las ideas de uno de los marxistas más descollantes del siglo XX.

Esta nueva edición aparece ahora con una excelente carta de presentación, los prólogos a impresiones anteriores realizados por Aurelio Alonso, Celia María Hart y Fernando Martínez Heredia, quienes no se limitan a destacar los valores del libro de Tablada, sino que lo complementan y dialogan con él a través de vivencias personales y análisis muy oportunos.

Esta es una obra finalizada en 1984, luego de 15 años de laboreo científico y cuyos resultados de investigación tuvieron que enfrentarse de manera audaz y valiente a poderosas fuerzas internas, en una época donde el Che era recordado y estudiado como guerrillero, internacionalista, hombre de excepcionales cualidades éticas y políticas, pero desconocido en lo más valioso de su pensamiento teórico sobre la transición socialista. Muy poco era lo que se había publicado tanto de la propia obra del Che, como estudios sobre su pensamiento en el período 1967-1987, hasta la aparición del libro pionero de Tablada.

Es justo mencionar como excepciones de esta etapa, la compilación de buena parte de la obra del Che en 7 tomos,[i]bajo la coordinación de quien en ese momento era su viceministro primero, Orlando Borrego. Estos tomos contaron con el privilegio de haber sido revisados por el Che en 1966 cuando se entrenaba para la lucha en Bolivia, sin embargo saldrían en 1970 en una tirada reducida solo para cuadros de dirección.[ii] En 1972 el Instituto Cubano del Libro tomando como fuente la compilación realizada por Borrego, publicaría Ernesto Che Guevara. Escritos y discursos.[iii] En el exterior, un año antes, había salido a la luz el libro El pensamiento del Che Guevara, de Michael Lowy.[iv] Pero lo cierto es que las ideas del Che durante años continuaron siendo patrimonio exclusivo de algunos especialistas. Si aún hoy existe desconocimiento y distorsión de sus ideas, hay que imaginarse el contexto de aquellos años, en que la mayor parte de su obra permanecía inédita o ignorada.

Quizás algunos subvaloraron –ya fuera por desconocimiento o mala intención- los aportes teóricos y prácticos del Che a la construcción del socialismo, considerando en espacios íntimos al Che de voluntarista e idealista, asociando su pensamiento al modelo económico asumido en la segunda mitad de los años 60. Vale la pena insistir en que nada tuvieron que ver aquellos errores y distorsiones económicas, con la aplicación del Sistema Presupuestario de Financiamiento (SPF) creado por el Che. De hecho, el SPF nunca llegó a aplicarse a escala nacional y hasta 1965 convivió junto al modelo del Cálculo Económico defendido fundamentalmente por Carlos Rafael Rodríguez.

A partir de los análisis críticos de las fallas cometidas en la conducción de la economía se pasó a otro modelo diseñado a inicios de los años 70, pero implementado a partir de 1976: el llamado Sistema de Planificación y Dirección de la Economía (SPDE), tomando como base la experiencia de los países del campo socialista. Recordar que Cuba había entrado al Consejo de Ayuda Mutua Económica (CAME) en 1972. Con el nuevo modelo comenzarían a sentirse entonces en pocos años los efectos nocivos del pragmatismo economicista: la ganancia y rentabilidad al margen de las consecuencias sociales; el estímulo material como único instrumento para incentivar a los trabajadores –deformado además en su comprensión y aplicación-, confianza excesiva en los mecanismos, entre otros males muy similares a aquellos que desde mucho antes venían corroyendo las bases ideológicas y culturales de las sociedades del llamado “socialismo real” y que el Che tan premonitoriamente como 1965 había advertido:

“Creemos importante la tarea porque la investigación marxista en el campo de la economía está marchando por peligrosos derroteros. Al dogmatismo intransigente de la época de Stalin ha sucedido un pragmatismo inconsistente. Y, lo que es trágico, esto no se refiere solo a un campo determinado de la ciencia; sucede en todos los aspectos de la vida de los pueblos socialistas, creando perturbaciones ya enormemente dañinas, pero cuyos resultados finales son incalculables (…) Nuestra tesis es que los cambios producidos a raíz de la NEP han calado tan hondo en la vida de la URSS que han marcado con su signo toda esta etapa. Y sus resultados son desalentadores: la superestructura capitalista fue influenciando cada vez en forma más marcada las relaciones de producción, y los conflictos provocados por la hibridación que significó la NEP se están resolviendo hoy a favor de la superestructura. Se está regresando al capitalismo”.[v]

Aquellas armas melladas del capitalismo utilizadas para construir el socialismo, lejos de ser eliminadas o controladas, fueron robustecidas con la Perestroika y la Glásnot de Gorbachov y penetraron hasta el corazón mismo del sistema soviético, terminando en aquel derrumbe vergonzoso que conocemos.

Fue en ese convulso y peligroso contexto de mediados de los años 80[vi] que el libro de Tablada adquirió una fuerza inusitada, luego de caer en las manos de quien más podía comprender a cabalidad su importancia y trascendencia: Fidel Castro. El líder de la Revolución se convirtió en el principal divulgador de la obra. En discurso pronunciado el 8 de octubre de 1987 expresaría: “Recientemente se hizo una compilación de todas estas ideas y un economista escribió una obra por la cual recibió un premio en la Casa de las Américas, que tiene el mérito de haber recopilado, estudiado y presentado en un libro la esencia de las ideas económicas del Che, recogidas de muchos de sus materiales hablados o escritos, artículos y discursos sobre cuestión tan decisiva para la construcción del socialismo. La obra se titula El pensamiento económico de Ernesto Che Guevara”.[vii]

El libro se convirtió en una referencia obligada para acometer en la Isla a partir de 1986 lo que se conoció como Proceso de rectificación de errores y tendencias negativas. Así el Che, con esa capacidad de seguir naciendo, vino nuevamente a combatir junto a nosotros todas las deformaciones que podían conducirnos irremediablemente hacia el capitalismo, en un momento donde muchos se ilusionaban y defendían la posibilidad de extrapolar las reformas impulsadas por el liderazgo soviético a nuestra realidad. Gracias al empeño de Tablada las ideas del Che sirvieron entonces no solo para rectificar en la búsqueda de nuestro propio camino, sino también como muro de contención a los entusiastas del calco y la copia.

II

Recientemente se hizo público un discurso inédito de Fidel en un encuentro con el Consejo Nacional de la Asociación Hermanos Saiz, el 12 de marzo de 1988, donde se observa claramente la fuerte conexión de Fidel con las ideas del Che, que evidentemente había vuelto a analizar a partir del libro de Tablada. Me permito citar algunos fragmentos:

“Nosotros no vamos a descuidar, ni en lo más mínimo, todo lo que se refiere a la eficiencia económica, pero habíamos caído en un mercachiflismo terrible; ni se sabe las consecuencias que habíamos tenido con esas empresas que actuaban como empresas capitalistas, es decir, tuvimos un bache serio.

“Yo me imagino lo que ha pasado en algunos países por ahí, porque todos esos mecanismos estuvieron funcionando veinticinco o treinta años; aquí estuvieron diez y por poco acaban con nosotros, esa es la verdad, en el cual se estaba aplicando una experiencia de otros países. Pudiéramos decir que el Che previó, porque el Che –y nunca había vivido esa experiencia por un país del Tercer Mundo- tenía una desconfianza terrible en aquellos mecanismos y decía que no se podía construir el socialismo a base de aquellas categorías capitalistas.

“Cuando en el año 1975 se empezó a aplicar aquí el sistema similar a los demás países socialistas, tuvimos todas esas cosas. Después las empresas no querían terminar un edificio porque ganaban dinero moviendo tierra, poniendo columnas y no ganaban dinero terminando, que es lo más difícil, lo que menos ganancia daba, y se empezaron a convertir en unos capitalistas de pacotilla. Yo digo, bueno, podemos decir que la Revolución pasó un período de eso, iba en estancamiento y descenso. Esa es la realidad.

(…)

“¿Qué, nos vamos a poner a competir con la sociedad de consumo yanqui? ¿Vamos a entrar en la competencia para que la gente se quede aquí a base de darle más zapatos, más lujos, más cosas? ¿Cuántos se quedarían aquí, si el cemento que une al ciudadano a su patria no es otra cosa que el bienestar material?

(…)

“Recuerdo lo que dije que significaba la cultura cuando había los criterios de que “esto cuesta tanto”, “esto es improductivo”, como si lo único productivo fuera aquello que produjera cemento, acero, cosas materiales.

(…)

“Si se cree en el hombre, y es un punto de vista del que yo parto, ¿es un animalito que obedece solo al palo o a la zanahoria? Yo no creo que el hombre sea esa porquería realmente. Yo creo que el hombre es mil veces superior a eso”.[viii]

III

A pesar de que el Che se adelantó como nadie en la crítica al socialismo real existente y alertó sobre la restauración del capitalismo en los países europeos, todavía hoy algunos siguen considerando la visión del Che sobre lo que debía ser y lo que no debía ser el socialismo, como idealista. Creo que tener esa valoración a estas alturas solo es posible sobre la base del desconocimiento o la tergiversación de la propuesta teórica y práctica del Che sobre la transición socialista. Basta con leer el libro de Tablada para entender cuanto realismo había en las propuestas del Che. Ese Che realista es que llega a plantear: “pensar que un país entero va a responder a estímulos superiores teniendo hambre…., eso a mí me parece un sueño (…); hay una cantidad de necesidades que son vitales, y ésas hay que satisfacerlas, si no las satisfacemos, difícilmente podamos avanzar”.[ix] Pero para leer y entender al Che hay que hacerlo desde su visión totalizadora del socialismo, donde no se pueden segmentar sus propuestas económicas, de la ideología, la política y la cultura. El Che tomó distancia tanto del idealismo voluntarista como del pragmatismo economicista.

“El socialismo económico sin la moral comunista no me interesa –expresaba el Che-. Luchamos contra la miseria, pero al mismo tiempo luchamos contra la alienación”.

“Marx se preocupaba tanto de los hechos económicos como de su traducción en la mente. El llamaba a eso un “hecho de conciencia”. Si el comunismo descuida los hechos de conciencia puede ser un método de repartición, pero deja de ser una moral revolucionaria”. [x]

“Y es que para el Che, como destaca Tablada: “los éxitos económicos serían realmente tales en la medida en que, tanto por sus resultados finales como por la manera en que fueran logrados, implicaran un impulso decisivo a la formación de nuevas relaciones sociales más humanas y, por tanto, de nuevas formas de conciencia social”.[xi]

Siendo uno de los grandes humanistas del siglo XX al igual que Fidel, para el Che siempre estuvo claro que la meta fundamental no era solo crear una nueva sociedad como antípoda de la sociedad capitalista, sino crear seres humanos distintos y que, de hecho, era imposible llegar al comunismo si por el camino no se forjaba al “hombre nuevo”. El Che colocaba al hombre en el centro de toda su concepción del socialismo, como actor consciente de la historia, y al factor subjetivo como la palanca principal para crear nuevas realidades. El Che no solo rechazaba al orden de subordinación que realizaban algunos teóricos al subordinar el desarrollo de la conciencia al “gradual aumento de los bienes de consumo para el pueblo”, sino que incluso defendía el criterio que el desarrollo de la conciencia ayudaba a que el individuo pudiera comprender, controlar y guiar los hechos económicos y acelerar más la creación de la base económica en función del proyecto social.

A lo largo de todo el libro de Tablada, se nos presenta a un Che enfrentado a la vulgarización más extendida del marxismo: el llamado determinismo económico. Para el Che no había economía sin política, tampoco política sin economía, pero era fundamental que la política fuera la que condujera a la economía y no viceversa. No desconocía los límites impuestos por las condiciones objetivas, pero tampoco se subordinaba a ellas. El Che entendía que las circunstancias hacen al hombre, pero también éste es capaz de hacer sus circunstancias. La herejía de la Revolución Cubana y del propio Fidel, ante los supuestos imposibles históricos, habían sido para él mejor ejemplo práctico.

Por supuesto, eso no significa –y estoy seguro que nunca fue la intención de Tablada- que estemos llamados a adoptar como camisa de fuerza las fórmulas en el sistema de dirección económica que el Che ideo para un contexto muy particular, como era aquel de la Cuba de los años 60, pero sí a profundizar en un pensamiento que aun tiene mucho que decirnos en las circunstancias actuales para evitar que “los árboles nos impidan ver el bosque”. Hay esencias en el pensamiento del Che que son y serán útiles para todos los tiempos, y en cualquier circunstancia de un proyecto que pretenda convertirse en una alternativa real y superior al capitalismo.

La enseñanza del Che, como también se desprende de este libro, es que debemos incentivar siempre el pensamiento crítico y por supuesto –si nos decimos revolucionarios y marxistas-, no contentarnos solo con interpretar el mundo, sino transformarlo. “¿Por qué pensar que lo que “es” en el período de transición, necesariamente “debe ser?”[xii] Es una pregunta que continuamente se hacía el Che y que debiera acompañarnos siempre para evitar el anquilosamiento y las verdades eternas, y a que prevalezca la “creación heroica” que proponía también ese gran marxista latinoamericano que fue Carlos Mariátegui.

IV

La influencia que desempeñó el libro de Carlos Tablada en la política cubana de la segunda mitad de los años 80, constituye una muestra ejemplar del papel que pudieran -y están llamadas a desempeñar- las ciencias sociales en nuestro país en la coyuntura actual, en tiempos de trascendentales cambios y transformaciones en nuestra realidad económica, política y social. En un momento en que se han multiplicado los diversos actores y estructuras que hoy intervienen en nuestra economía, sigue teniendo gran vigencia el llamado que hizo Tablada a partir de sus profundos estudios del pensamiento del Che: “La forma en que cada una de las nuevas estructuras económicas e instituciones condiciona y se expresa en las motivaciones del hombre corriente, resulta un aspecto vital que debe ser estudiado en cualquier ensayo sobre el período de transición”. [xiii]

El libro de Tablada que es más que el pensamiento económico del Che, pues aborda su concepción amplia y sistémica del socialismo, nos reafirma que el pensamiento y el ejemplo Ernesto Guevara siguen siendo actuales y necesarios para encarar los viejos y nuevos entornos subjetivos que vienen reproduciéndose en nuestro país –acompañados de nuevas expectativas y paradigmas de éxito, que se alejan del ideal de socialismo al que aspiramos y por el que luchamos; para enfrentar además del imperialismo y el capitalismo, al colonialismo cultural más sutil que nos invade, ya sea en la educación, en el lenguaje, en las costumbres o en los métodos. El Che sigue convocándonos a combatir el burocratismo, la corrupción, el derroche, las indisciplinas sociales, la doble moral, la apatía y el derrotismo. El Che sigue motivándonos a que a contracorriente nos aferremos a lo mejor el humanismo y a que junto al desarrollo de las fuerzas productivas desatemos las fuerzas espirituales de la nación cubana. El Che sigue llamándonos a ser patriotas, solidarios e internacionalistas.

Este es un libro pertinente para Cuba, pero también para toda la izquierda mundial, en especial en Latinoamérica. Las derrotas que han sufrido los procesos progresistas en América Latina y el Caribe, han demostrado que el cambio revolucionario más trascendente y perdurable no está en lograr mejores patrones de distribución, en crear nuevos consumidores, sino en forjar nuevos sujetos para el cambio revolucionario, consientes y protagonistas de las principales transformaciones. Muchas de esas ideas ya fueron adelantadas desde el siglo pasado por el Che y podemos verlas nítidamente en esta obra que presentamos hoy.

¡Muchas Gracias¡

Notas

[i] El Che en la Revolución Cubana (7 tomos), La Habana, Editorial Ministerio del Azúcar, 1966.

[ii] Entre el 2014 y el 2018, la Editorial José Martí, reeditaría estos 7 tomos en una tirada más amplia.

[iii] Instituto Cubano del Libro, Ernesto Che Guevara. Escritos y discursos, 1972.

[iv] Michael Lowy, El pensamiento del Che Guevara, Siglo XXI Editores, 
México D. F., 1971.

[v] Citado por Fernando Martínez Heredia en: El Che y la crítica desde el socialismo cubano, Cubadebate, 14 de junio de 2013.

[vi] Tablada tenía la vivencia personal de todas estas deformaciones pues durante una década (1975-1984) estuvo al frente de la dirección económica de una gran empresa estatal (Empresa de Producciones Varias (EMPROVA), donde se aplicaba el Cálculo económico.

[vii] Fidel Castro, Discurso pronunciado el 8 de octubre de 1987, en el principal acto conmemorativo del vigésimo aniversario de la muerte de Ernesto Che Guevara.

[viii] Véase en Fidel y la AHS, Versión amplia del discurso pronunciado por el Comandante en Jefe Fidel Castro, en la clausura de la reunión del Consejo Nacional de la Asociación Hermanos Saíz, celebrada el 12 de marzo de 1988, pp.7-57.

[ix] Citado por Aurelio Alonso en su prólogo al libro de Carlos Tablada, El Pensamiento Económico del Che, Editorial Ciencias Sociales, La Habana, 2017 (tercera edición)

[x] Carlos Tablada, El Pensamiento Económico del Che, ob.cit, pp.55-56

[xi] Ibídem, p.76.

[xii] Ibídem, p.39

[xiii] Ibídem, p.65.

La asignatura pendiente de los inventarios ociosos

«Hay cosas que no sabemos para qué sirven y son los clientes quienes nos explican», asegura Elina. Foto: Ronald Suárez Rivas
PINAR DEL RÍO.–José Heriberto Robaina pasa la vista por los estantes con una mezcla de asombro y desconcierto. «Aquí hay muchas cosas que si se sacan a la venta años atrás, se hubieran aprovechado mejor», dice.
Entre los objetos que despiertan su atención hay cajas de discos de 3 ½, cartuchos de impresora, transformadores de radios, fusibles…
Productos que desde hace tiempo se hallaban ociosos en los almacenes, después que el país invirtiera quién sabe cuánto dinero para su importación.
«Cuando uno ve estas cosas se sorprende, porque hubo un momento en que las necesitamos y no las teníamos. Algunas había que comprarlas en bolsa negra, porque no existían en las tiendas, y ahora es que llegan a ellas, cuando ya quedaron obsoletas».  
Estamos en el mercado experimental para la venta de productos ociosos de la ciudad de Pinar del Río, una pequeña tienda en la que se trata de hallarle destino a infinidad de artículos que las empresas y organismos del territorio adquirieron en el pasado y nunca los emplearon.
Es el caso de partes y piezas para medios de transporte o equipos a los que se les dio de baja, de instrumentos que ya no son compatibles con las tecnologías actuales, incluso de objetos que nadie sabe a ciencia cierta para qué sirven.
«A veces son los clientes quienes nos explican, porque el poder de inventiva del cubano es muy grande. Hay artículos que uno piensa que nunca se van a vender y de repente llega alguien que los compra y nos dice que si no le sirven para una cosa, le servirán para otra», cuenta Elina Gutiérrez, la administradora del mercado.


Entre las medidas adoptadas por el Grupo Empresarial de Comercio para liberar inventarios ociosos y de lento movimiento están las rebajas de precios. Foto: Ronald Suárez Rivas
RECURSOS ENCERRADOS
No es la única iniciativa que se implementa en la provincia con el propósito de darle salida a los inventarios ociosos. Rolando García, especialista del Grupo Empresarial de Comercio, recuerda que a principios de 2017 se organizó una exposición entre las 11 entidades del grupo, para evaluar aquellos productos que no tenían demanda en un territorio, pero pudieran interesar en otro.
Además, en los municipios y en la capital provincial se realizan desde entonces, de forma periódica, ferias para la población y cada cierto tiempo se aplican rebajas de precio a las mercancías que comienzan a estancarse.
Ello ha hecho de Comercio uno de los sectores con una gestión positiva en la disminución de productos ociosos y de lento movimiento. Sin embargo, el tema no ha tenido la misma atención en otras entidades y organismos.
Según datos de la Empresa de Productos Universales, encargada de conducir el tratamiento de esos recursos inmovilizados en los almacenes, Pinar del Río inició 2019 con un saldo en sus inventarios de 17 993 000 pesos (entre ociosos y de lento movimiento).
Si bien la cifra es inferior que la registrada a principios de 2018 (19 853 500), demuestra que todavía queda mucho por hacer.
«No son pocas las entidades que vienen cuando les hacen presión del organismo superior o cuando se acerca la Comprobación Nacional al Control Interno, a finales del año. A veces hasta llegamos a firmar un contrato, pero luego todo queda ahí», asegura Anabel Rodríguez, especialista de Universales.


¿COMPRAR POR COMPRAR?
José Luis Gil, subdirector de Economía y Planificación, considera que el fenómeno tiene varias causas: producciones que no tienen calidad, empresas que no hacen estudios de mercado para confirmar que un determinado artículo va a tener salida...
Pero la cuestión más preocupante es que en ocasiones falta previsión acerca de los posibles cambios tecnológicos o de las especificidades de nuestro país, entre quienes se encargan de comprar en el exterior equipos e insumos.
El 80 % de los 170 600 pesos en inventarios ociosos identificados a inicios del año pasado en el sector de la Salud en Pinar del Río, por ejemplo, correspondían a dientes para prótesis adquiridos en Colombia y en Chile, que se echaron a perder en los almacenes o resultaban demasiado grandes y no tuvieron aceptación entre los pacientes.
En casos como este, no queda más remedio que eliminar el producto, siguiendo las indicaciones del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
No obstante, existen muchos otros recursos ociosos que todavía pudieran ser de utilidad.
«Aquí todo lo que usted saque, si es barato, se vende», afirma Elina Gutiérrez, administradora del mercado encargado de la comercialización de ese tipo de productos en la capital pinareña.

«No hace mucho nos entraron tomas de leche de vaquerías y enseguida aparecieron personas interesadas, para adaptarlas en el sistema de freno de las motos».
Pero no todo lo que se oferta es asequible para la gente, lamenta la funcionaria.
«El procedimiento establecido para fijar el precio minorista exige que al valor inicial con el que la empresa los tiene en sus almacenes, se le incremente un 42 % para el aporte a la ONAT», explica Roberto Luis Gutiérrez, el económico de la unidad.
Esto, sumado al margen de utilidad que le corresponde a Comercio, hace que por ejemplo, un rodamiento de la numeración 32218, con un valor de 113,27 pesos, salga a la venta con un precio de 300.
«Como promedio, el costo de un producto se incrementa 2,63 veces», reconoce Juan Víctor Concepción, especialista de la Empresa de Productos Universales.
Ante esa realidad, Elina señala que muchos artículos terminan resultando demasiado caros y tienen que ser devueltos a sus entidades de origen, porque nadie los compra.
Por otra parte, advierte que de manera general es muy baja la concurrencia de las empresas al mercado.
«A pesar de que se sabe que hay productos echándose a perder en los almacenes, aquí ahora mismo tenemos poco para vender».
En efecto, de más de 200 entidades y unidades presupuestadas que suma Vueltabajo, solo 91 se han acercado a la Empresa de Productos Universales para firmar contrato y 27 han certificado no tener inventarios ociosos.
El resto, que es aproximadamente la mitad, no le ha dado la importancia que el tema requiere, en tiempos en que urge mirar más hacia nuestras propias reservas y abandonar de una vez por todas la mentalidad de acaparar recursos, y de comprar por comprar.

Rehenes en el Norte

Por: Randy Alonso Falcón
Publicado en: Relaciones Cuba-EE.UU
En este artículo: Bloqueo, Cuba, Donald Trump, Estados Unidos
17 junio 2019 


El Empress of the Seas se despide de La Habana. Fue el útimo crucero en entrar tras la tajante decisión del gobierno Trump. Foto: Reuters.
La estela de espuma de mar que dejó en la bahía habanera el Empress of the Seas, en su viaje de retorno, puede ser la simbólica imagen del portazo que la administración Trump acaba de darle a la industria de cruceros y a los cientos de miles de estadounidenses que esperaban llegar por mar a la bella nación caribeña que por decenas de años le han prohibido visitar.
Pocas veces, y nunca por tan prolongado tiempo, le ha sido vedado al pueblo estadounidense el derecho a viajar y conocer otros pueblos. El bloqueo los ha convertido en rehenes de su gobierno por casi 60 años. Cuba sigue siendo el único lugar del planeta al que los ciudadanos estadounidenses no pueden ir como turistas. Pero al menos, en los finales del mandato de Obama, se les abrió una ventana con la autorización de los vuelos comerciales y cruceros para traer hasta el archipiélago vecino a quienes pudieran utilizar alguna de las 12 licencias que autorizaban a viajar hasta aquí.
Las afiebradas decisiones que la Casa Blanca de Trump ha tomado en los últimos meses pretenden cortar el creciente flujo de estadounidense que están viniendo a Cuba, a contrapelo de prejuicios y de campañas perversas. En el 2018, 637 907 estadounidenses (sin contar los de origen cubano) pisaron suelo cubano. En el 2019, hasta abril, ya nos habían visitado bajo las licencias permitidas, 257 406 (+93.6% respecto a abril de 2018). La mayor parte vino en grupos de «pueblo a pueblo» y viajando en cruceros; ambas posibilidades han sido cerradas de tajo.

Historias del trumpicidio


La Plaza Vieja en La Habana Vieja. Foto tomada por la GM Susan Polgar y compartida en su álbum de fotos en Google.
La legendaria Gran Maestra de ajedrez Susan Polgar era una de las pasajeras del Empress of the Seas. Había venido a Cuba a rendir tributo a José Raúl Capablanca, «uno de los grandes de siempre». En su perfil de Facebook describió la emotiva despedida del crucero: «¡Es oficial! ¡Nuestro barco ha salido de La Habana! ¡Este es el último barco de los EEUU para salir de Cuba! Muchos cubanos se alinearon junto al muelle para despedirse. ¡Muchos taxis estaban tocando sus cláxon y nuestro barco hizo lo mismo! Hasta que se cambien las leyes, no se permiten más barcos».





This is the video of the last ship leaving Havana, Cuba (on June 5, 2019) for the United States. The new laws do not permit ships from America to enter Cuba. 🌴🇨🇺

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Safely back to Miami! Big thanks to all the staff on @RoyalCaribbean Empress of the Seas for taking good care of all of us. Unfortunately, this is the last ship to leave 🇨🇺 Cuba due to new laws. Hopefully one day soon things will change. Thank you 👏🛳

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La noticia del fin de los viajes de los cruceros a Cuba cogió sorprendidos a los pasajeros del Empress of the Seas. «Bien o mal, no sabemos nada de esto como ciudadanos estadounidenses. Fue una sorpresa total para nosotros», le declaró a la AFP la texana Linda Mensure.
Peor fue el impacto para la enfermera Cindy Hamilton: «Soy una de los cientos de pasajeros muy enojados a bordo de un crucero en medio del Caribe. Todos planeamos este crucero anticipando nuestra parada en Cuba. ¡Muy molesta!, escribió en su cuenta de Twitter. Al menos dos cruceros fueron sorprendidos por la noticia en travesía y debieron cambiar ruta abruptamente, generando el mismo malestar de Cindy en miles de personas a bordo.

Rick Kriseman Alcalde de St. Petersburg
El Alcalde de la ciudad floridana de St. Petersburg, Rick Kriseman, fue uno de esos frustrados con la decisión. Se proponía viajar a Cuba junto a una docena de familiares y amigos. Habían salido desde Puerto Cañaveral.
Kriseman contó a una emisora local: «Se suponía que el crucero debía abandonar Puerto Cañaveral, pasar la noche en Cayo Hueso y dirigirse a La Habana.
“La mañana que llegamos a Cayo Hueso, recibí un mensaje de correo electrónico de mi jefe de políticas, adjuntando un artículo de CNN que indicaba que el presidente Trump había cambiado la política, a partir del 5 de junio. Pero parecía indicar que iba a haber una excepción para aquellos que ya habían hecho planes de viaje: se les permitiría viajar.
«Irónicamente, sabíamos que íbamos a llegar a Cuba el 5 de junio. En cierto modo nos decíamos: «bueno, bueno, parece que vamos a ser los últimos en ir de crucero allí».
[…]»Y estábamos casi media hora, tal vez, fuera del puerto de Cayo Hueso, nos dirigíamos a La Habana, cuando llegó un anuncio por el intercomunicador que decía que había un cambio en la política del gobierno federal hacia Cuba, y que el barco iba a tener que cambiar de ruta y no iba a ir a La Habana, sino a Nassau en las Bahamas «.
[…]»…fue muy frustrante. Me sentí muy mal por mi familia y por todos los demás en el barco. Soy afortunado, he estado en Cuba tres veces. Pero la mayoría de mi familia -con la excepción de mi esposa y mis hijos, porque me acompañaron en nuestra segunda visita cuando los Rays jugaron allí´-, el resto de la familia nunca había estado en Cuba. Estaban muy emocionados de ir. (…)»
«Así que todos estábamos muy frustrados. Había personas que estaban en el barco que iban a ver a la familia en Cuba. Y ahora no iban a ver a su familia.
«Entonces, tenías alrededor de 2,000 personas en este barco, creo que la mayoría de los que estaban en este barco era específicamente porque iba a Cuba, que estaban increíblemente decepcionados ahora que no íbamos a poder ir».

Los cruceros Norwegian Sky y Empress of the Seas (apenas es visible su chimenea detrás del cartel) coinciden el 4 de junio en la Terminal de Cruceros de La Habana. Foto: Ramón Espinosa / AP
Según la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros, las restricciones de la administración Trump afectarán a más de 620 viajes de cruceros pprevistos y «a casi 800 mil reservas de pasajeros que actualmente están programadas o ya están en curso». Muchos de ellos probablemente reservaron pasajes sólo para ir a Cuba, dice esa organización.
Cheryl Kolar, una jubilada de 68 años que había viajado en crucero a La Habana, resumió a Reuters el sentimiento de muchos: «Pienso que estamos viniendo aquí como turistas, pero estás aprendiendo mucho. Es ridículo que no podamos venir más. Cuba es el único país al que no se nos permite ir. Podemos ir a Rusia, pero por alguna razón, Trump tiene algo contra Cuba»

Impactos visibles

El puerto de Tampa puede ser uno de los afectados por las nuevas restricciones de viajes. Desde allí partía hacia Cuba, cada 15 días, el Carnival Paradise ( 2 mil pasajeros), con salidas programadas hasta fines de 2020.
Aunque el Vicepresidente Ejecutivo del puerto, Raúl Alfonso, le dijo al Tampa Bay Times que no tenía preocupaciones, pues Carnival les aseguró que mantendrá el mismo número de cruceros desde Tampa; Suzanne Carlson, fundadora de Tarpen Springs´Maritime Travel una organizadora de cruceros a Cuba, valoró el impacto para la misma publicación: «Esto es enorme. La mayoría de los que reservaron estos cruceros hicieron reservaciones para ir a La Habana. Tendremos que ver lo que todos quieren hacer».
La publicación digital The Virginian Pilot , por su parte, alertaba de la afectación previsible a la ciudad de Norfolk, a dónde había regresado la compañía Carnival luego de retirarse hacía un año. «Cruceros de Norfolk a Cuba afectados por las prohibiciones de viajes de la administración Trump» es el título de un artículo del pasado 10 de junio que refleja la frustración que ha dejado en esa localidad.
Carnival operará con dos cruceros desde Norfolk; uno de ellos es el recién renovado Carnival Radiance, un crucero para 3 mil pasajeros, que recibirá mejoras por 200 millones de dólares. La idea era que el Radiance y el recién renovado Sunrise viajaran desde Norfolk a Cuba, comenzando en octubre de 2020.
Pero ese propósito no llegará a buen término. Norfolk, como otros puertos y miles de pasajeros han quedado en el limbo en relación con los cruceros a Cuba. Las autoridades portuarias ni siquiera fueron notificadas de la medida: «Lo vimos en la CNN probablemente como todos los demás», dijo Stephen Kirkland, director ejecutivo de Nauticus, la compañía que maneja el atraque de cruceros en el puerto de Norfolk. «Estamos decepcionados»

El recién renovado Carnival Sunrise partiendo del Nauticus´ Decker Half Moone Cruise Center, en el puerto de Norfolk, el 29 de abril de 2019. Sunrise sería uno de los cruceros que viajaría a Cuba desde este puerto en 2020. Las nuevas restricciones de Trump lo impiden. Foto: The Virginian Pilot
Fue igual la reacción de Adam Goldstein, Presidente de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros ( CLIA por sus siglas en inglés), quien declaró: «Estamos decepcionados de que los cruceros ya no operen en Cuba».
Mientras el CEO de Carnival Corporation, Arnold Donald, dijo en el North American Leaders Forum en Nueva York que «Cuando Cuba (para los viajes de cruceros) se cerró, fueron cerrados de inmediato, sin tiempo para prepararse. Había mucha gente que estaba viajando a Cuba. Eso no quiere decir que todavía no puedan ir a Cuba. Hay otras formas. Pero hubo un montón de llamadas que tuvimos que atender. Ese tipo de cosas impactan en nuestro negocio»
Las compañías de cruceros han tenido que reformular los itinerarios de sus barcos que tenían puertos cubanos entre sus paradas, dirigiéndolos ahora a México y Bahamas. Han tenido por ello que comunicarle a los pasajeros con reservas que pueden recibir reembolsos de hasta un 50% por los nuevos itinerarios o pueden cancelar sus viajes con reembolso completo.
Un analista de viajes de Atmosphere Research Group valoró a la AP que el cierre tendría «un impacto notable en las ganancias de las líneas de cruceros este trimestre y el resto de este año, y probablemente en 2020».
Si bien los viajes a Cuba son apenas el 3-4% del total de esas compañías, tienen precios un 20% superiores que los viajes a Bahamas, apuntan analistas. El Consejo Comercial y Económico EE.UU-Cuba cifra en 761 millones de dólares los ingresos brutos de esas empresas por sus viajes a Cuba entre 2017 y 2019.
Algunas líneas de cruceros quedaron incluso vestidas para el frustrado convite, pues empezaban a viajar hacia Cuba en meses próximos. Una de ellas es Virgin Voyages, la cual tenía viaje inaugural a La Habana desde el Puerto de Miami a inicios de 2020.
  • En el 2018 arribaron a Cuba 877.000 turistas a través de cruceros de las navieras Royal Caribbean, Carnival Cruise Lines y Norwegian Cruise Line. El 38,9% de ellos eran estadounidenses, según cifras oficiales.
  • El 55% de los visitantes de EE.UU que llegaron a Cuba de enero a abril de 2019 lo hicieron en cruceros.
  • Hasta el cierre de mayo 2019 habían llegado en el año 409 mil cruceristas (+ 2% respecto a mayo 2018)

Los estudiantes de Blue Ridge posan con miembros de la tropa de baile Habana Compas durante una de las paradas de su viaje de siete días  a Cuba. Foto: The Transylvania Times
Los viajes educativos grupales  que se amparaban en la licencia «pueblo a pueblo» han quedado cancelados. Al fin del trasiego de los cruceros, se añade que las aerolíneas comerciales estadounidenses que vuelan a Cuba han comunicado que no están recibiendo reservas para personas que lo hagan desde programas «pueblo a pueblo»
Collin Laverty, un veterano promotor del intercambio entre ambos países y presidente de Cuba Educational Travel, declaró en un comunicado el propio 5 de junio, que las decisiones de la administración Trump limitarán aun más la capacidad de los estadounidenses de viajar a la nación vecina y que son «terribles para las compañias estadounidenses que están proporcionado empleo y pagando impuestos en EE.UU, y que crean una huella económica en la isla».



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A pleasure to work with @USC on a life-changing Cuba experience for 50 young students, who built long lasting friendships with the hundreds of Cubans they interacted with over 2 weeks on the island! 🇨🇺 🇺🇸 🇨🇺 🇺🇸 @CubaEdTravel 💪 ❤️ 💪 ❤️

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La cancelación reciente de los viajes grupales «pueblo a pueblo» había sido precedida por la prohibición de los viajes individuales bajo esa licencia, en noviembre de 2017, lo que produjo afectaciones económica no sólo a los cubanos arrendadores de viviendas para el turismo, sino que impactó también al floreciente negocio que Airbnb venía teniendo en Cuba desde 2015.
Airbnb, con su sistema de reservaciones en casas privadas por internet, había penetrado con fuerza en el mercado cubano, que llegó a ser el noveno más popular entre las ofertas de esa compañía y el de más rápido crecimiento. El 35% de sus reservaciones en Cuba en 2017 provenían de Estados Unidos.
La ocupación de las viviendas particulares vinculadas al turismo fue de un 90% en 2016, pero bajó a apenas un 44% en 2018, según estadísticas que suministró a principios de este año el Director Comercial del MINTUR Michel Bernal.
El golpe al intercambio educacional también se ha acentuado por las dificultades para que profesores y académicos cubanos obtengan visas para ir a EE.UU, ante la inoperancia del consulado de la Embajada estadounidense en La Habana, por falta de personal y la obligación de buscar visado en terceros países. El reciente Congreso de LASA en Boston, anclado en la vigencia del ensayo «Nuestra América» de José Martí, perdió lucidez y sustancia por la ausencia de la mayor parte de los delegados cubanos.
En Tampa, el Centro de Estudios «José Martí» de una Universidad privada local tuvo que cancelar la presencia de un profesor cubano en el curso sobre la Historia de la presencia de Tampa en la luchas por la independencia de Cuba en los finales del siglo XIX, debido a lo complejo y costoso que se convirtió el viaje del académico invitado.

Diversas reacciones dentro del Imperio


El senador Patrick Leahy criticó fuertemente medidas de Trump sobre Cuba. Foto: Vermont Democratic Party / Archivo de Cubadebate
Las medidas anuncidas por la Secretaría del Tesoro y la de Comercio recibieron de inmediato el rechazo de miembros del Congreso estadounidense, grupos empresariales, autoridades locales, medios de comunicación y organizaciones favorables a la normalización de las relaciones entre los dos países.
Muchas de esas voces condenaron el impacto negativo que esas limitaciones tendrán sobre el pueblo cubano y las empresas estadounidenses, al tiempo que consideraron las medidas como una violación del derecho de los estadounidenses a viajar libremente.
Una de las más notorias y fuertes ha sido la del veterano Senador Patrick Leahy, quien en la Cámara Alta del Congreso estadounidense catalogó como tontas y vergonzozas las restricciones. «…No es solo tonta, es una vergüenza que afectará a muchos estadounidenses y a mucha gente buena en Cuba: la decisión anunciada por el Departamento del Tesoro de limitar severamente los viajes de los norteamericanos a la isla, expresó.
Leahy instó a sus colegas «a no permitir que los mismos argumentos viejos, desgastados, de la Guerra Fría, aislacionistas, temerosos y fallidos sobre Cuba se interpongan en el camino del sentido común».que restringe el derecho de los estadounidenses a visitar Cuba, a pesar de que una abrumadora mayoría de norteamericanos, tanto republicanos como demócratas, se oponen a esas prohibiciones» (…) ¿Qué tipo de Gobierno les dice a sus ciudadanos a dónde pueden viajar o dónde pueden gastar su dinero?», cuestionó el senador.
En su encendida intervención afirmó: «Los cruceros dejarán de navegar. Los intercambios educativos y culturales se cerrarán. Los equipos deportivos se quedarán en casa. Las misiones comerciales terminarán. Los agricultores y las empresas estadounidense serán excluidos».
Destacó que todas las veces que ha visitado Cuba apreció que sus habitantes son muy acogedores con los estadounidenses. «A diferencia de la gente de la Casa Blanca y en el Departamento del Tesoro, que nunca han ido a Cuba, yo sí he estado allí, así como mi esposa Marcelle y una de mis nietas».
«La postura de esta administración está siendo guiada por un par de figuras de línea dura en el Consejo de Seguridad Nacional que nunca han puesto un pie en Cuba, pero que están en una cruzada con el fin de presionar al Gobierno cubano para que cambie sus políticas», señaló Leahy quien anunció que presentará el proyecto denominado Ley de Libertad para viajar a Cuba ante el Congreso estadounidense.
También la senadora y precandidata presidencial demócrata Amy Klobuchar dio a conocer una declaración en la que afirma que «Cincuenta y cinco años de aislamiento a Cuba no han hecho avanzar nuestros intereses y han perjudicado a las empresas y agricultores estadounidenses. Necesitamos expandir el compromiso con Cuba y continuar con el progreso que hemos logrado, no .egresar a las políticas del pasado. Estados Unidos está mejor cuando estamos innovando, haciendo cosas y exportando al mundo- debemos alentar, no desalentar, el compromiso con Cuba»
Klobuchar encabezó a un grupo de 12 senadores que enviaron una carta a los secretarios del Tesoro, Steven Mnuchin, y de Comercio, Wilbur Ross, para rechazar esas medidas. Los firmantes de la misiva incluyeron a otros dos aspirantes a la Casa Blanca por el Partido Demócrata, Bernie Sanders y Elizabeth Warren.
«En lugar de regresar a las políticas fallidas del pasado, deberíamos trabajar para normalizar nuestras relaciones con Cuba y construir un vínculo que beneficie a ambos países», expresaron los senadores.
Al menos otros dos aspirantes demócratas a la Casa Blanca han criticado la postura de Trump hacia Cuba: el excongresista Beto O’Rourke; y el alcalde de South Bend, Indiana, Pete Buttigieg.
La representante demócrata por Florida, Kathy Castor, expresó en un comunicado que la política del presidente Trump impone un alto precio a los propietarios de pequeñas empresas y emprendedores en Cuba, a las familias, y a la libertad de los estadounidenses para viajar.
Su colega Barbara Lee, congresista del mismo partido por California, estimó que las restricciones solo perjudicarán al pueblo cubano y a los intereses norteamericanos en la isla, al tiempo que intensificará «la política fallida del embargo».
En el mundo empresarial destaca la Declaración del Consejo de Negocios Estados Unidos-Cuba, la cual señala que estas reglas interrumpirán las operaciones comerciales en el sector de los viajes, lo cual está fuera de sintonía con los esfuerzos declarados de la administración de que evitaría causar daños a las empresas norteamericanas que hacen negocios legalmente en Cuba. «Hacemos un llamado a la administración para permitir que los estadounidenses ejerzan su libertad de viajar y alentar al Congreso a actuar en apoyo de este derecho fundamental», dice el ente de negocios que actúa bajo la sombrilla de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos.
Mientras,Terry Dale, el Presidente de la Asociación de Turoperadores de Estados Unidos, declaró que aunque la industria se ajustará a las restricciones impuestas a los viajes educativos «persona a persona» a Cuba, estará «en primera línea» en defensa de que estos viajes vuelvan a ser permitidos.
Dale recordó que la Asociación, creada hace más de 40 años, ha apoyado una política de «fronteras abiertas» y continuará abogando por el crecimiento de la industria del turismo y por la libertad de viajar para los estadounidenses.
El Consejo Nacional de Comercio Exterior (NFTC) de Estados Unidosconsideró, por su parte, como equivocadas las nuevas decisiones de la administración de Donald Trump contra el intercambio con Cuba. Un pronunciamiento del vicepresidente del NFTC, Jake Colvin, subrayó restringir a las compañías de la participación en la Zona Especial de Desarrollo Mariel impide que los estadounidenses tomen parte en una actividad económica potencialmente beneficiosa para los trabajadores y el pueblo cubano.
La coalición Engage Cuba, promotora del acercamiento entre Estados Unidos y nuestro país, consideró profundamente lamentable la emisión de nuevas restricciones. «Es profundamente lamentable que esta decisión se basara en la política y la agenda personal de dos miembros del Congreso, y no en una preocupación genuina por el pueblo cubano, que apoya el acercamiento a Estados Unidos», expresó en un comunicado el presidente de la agrupación, James Williams.
Aunque no menciona específicamente el nombre de esos dos legisladores, parece hacer alusión al senador Marco Rubio y al congresista Mario Díaz-Balart, considerados los principales responsables de la posición de Trump hacia la isla.
Para Williams, estas regulaciones adicionales sobre las empresas norteamericanas simplemente dificultarán hacer negocios en Cuba, lo cual provocará que Estados Unidos deje de generar miles de millones de dólares y miles de puestos de trabajo.
Líderes de opinión y medios de comunicación también se han pronunciado. Richard Quest, anfitrión del programa financiero internacional de CNN, Quest Means Business, en un reciente foro empresarial describió los cambios como ocurridos «de la noche a la mañana» y agregó que la medida afecta severamente a «las grandes compañías que tienen activos de capital fijo que emplean a decenas de miles de personas». Y subrayó: “Usted tiene una administración anterior que abre Cuba [y] la próxima administración prácticamente la cierra de la noche a la mañana. Si eso es o no una buena geopolítica, te lo dejaré. Pero ciertamente no ayuda a la industria del turismo «.
Un medio local como el Gainsville Sun publicó un editorial bajo el título «Los límites de viajes a Cuba golpean el objetivo equivocado», en el que apunta que al parecer poco importa que los ciudadanos de EE.UU puedan viajar a dondequiera menos a Cuba, la cual está a 90 millas de Cayo Hueso. «La visión de la administración Trump luce más como un intento de ganar votos de la comunidad cubana exiliada que un bien planeado modo de causar cambios en Cuba», afirma la publicación.

El mayor perdedor

En diversas cartas a los medios estadounidenses y artículos de opinión los ciudadanos se cuestionan de quién los protege tales sanciones y cuál es la realidad que les pretenden ocultar.
Un académico estadounidense, el Dr. Samuel B. Hoff, Profesor Distinguido de Historia y Ciencias Políticas en la Universidad Estatal de Delaware. rechazó en duros e irónicos términos la nueva política de Trump en el Delaware State News, en un artículo que tituló «La política de Trump sobre Cuba no supera la prueba del olfato».
Con fino humor escribe: «Además de impedir que los cruceros y las embarcaciones privadas visitaran Cuba, la nueva política de Trump apuntó a programas educativos de «turismo velado», como el Programa de Embajadores People-to-People. ¡Tomo nota de esa caracterización! ¿De qué otra forma podría haberme quedado 66 horas seguidas durante mi viaje de 2003 a Cuba con este último grupo?
«Si bien el personal de la Casa Blanca de Trump obviamente cree que más sanciones y menos comercio con Cuba ahogarán a su gobierno y al ejército y conducirán a un cambio generalizado, esa fórmula ha fracasado durante medio siglo.»
En una misiva al Sun Sentinel, el ciudadano Stanley Greenbaum remarcó: «El corte de los viajes de cruceros a Cuba es una de las cosas más tontas que podría hacer el presidente Trump.
«Primero, daña la economía de la Florida. En segundo lugar, los viajes en crucero crearon la capacidad de que una puerta permanezca ligeramente abierta entre nuestro vecino a 90 millas de nuestra costa. Le dio al pueblo cubano la oportunidad de reunirse y hablar con los estadounidenses y ver de qué se trata, y posiblemente mejorar las relaciones.»
Bridget Perch Southbridge, un residente de Massachusetts que visitó Cuba a bordo de un crucero de la compañía Royal Caribbean, horas antes del cierre, afirmó a la Agencia Cubana de Noticias que ni siquiera las personas que votaron por Donald Trump pueden estar de acuerdo con estas medidas.
«El pueblo estadounidense es el mayor perdedor con esta decisión anunciada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, porque se le aleja de un vecino natural al que todos quieren conocer», dijo.
«Nos enteramos de la noticia estando ya camino a la Isla, y la reacción de todos fue la misma: no podíamos creer que el gobierno estadounidense continuara coartando las posibilidades de viajar, y más a un país seguro y con una historia increíble como es Cuba.
«No hay necesidad de cuidarnos de nada aquí, de hecho, posiblemente estemos más seguros en estas calles que en algunos de los lugares donde vivimos», expresó Perch Southbridge mientras paseaba por La Habana Vieja.
Sus palabras y las de muchos encuentran oídos sordos en la Casa Blanca, que por ahora sólo oye los susurros sibalinos de los Bolton, Rubio y compañía. El pueblo estadounidense vive rehén de una obsecada e irracional política hacia Cuba