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viernes, 13 de diciembre de 2019

Público no significa estatal



Foto: Progreso Semanal

Por Yassel A. Padrón Kunakbaeva, La Joven Cuba

Los conceptos tienen una gran importancia en la lucha de los pueblos por sus derechos. De manera recurrente, la historia nos muestra cómo una transformación social es precedida por una renovación teórica, en la cual se destilan y condensan poderosas ideas. Estas herramientas-conceptos muchas veces ni siquiera son algo puramente nuevo, sino que son como monumentos antiguos, largamente olvidados, que encuentran de nuevo el momento para desplegar su impronta. Tal es el caso, a mi entender, del concepto de lo público, que está llamado a ser un estandarte de los cubanos frente a los abusos de la burocracia.

La palabra “público” se remonta a la antigua república romana, y significa aquello que es común a todos los ciudadanos. Por eso cuando los romanos llamaban a su forma de gobierno “res publica”, estaban haciendo referencia a una asociación de hombres libres e iguales que deliberaban y tomaban decisiones con respecto a los temas comunes. Lo público se convertía de ese modo, para los romanos, en la base de su comunidad política.

Por supuesto, ya desde esa época, la sociedad tenía un lado oscuro. Fuera del ámbito de lo público se encontraba “lo privado”, que tenía su expresión más acabada en la casa familiar, el dominium, donde el patriarca de la familia, el dominus, ejercía su gobierno absoluto sobre la mujer, los hijos y los esclavos. Dentro de la hacienda del dominus no existía república alguna, allí todo el mundo dependía para vivir del señor de la casa, y se hacía lo que él mandaba.

Sin embargo, a pesar de ese lado oscuro, los señores romanos resolvían entre ellos los asuntos públicos de manera republicana. Ellos, los que eran parte de la sociedad civil, se daban a sí mismos su ley, por encima de la cual nadie podía colocarse. La existencia de la república significaba la no existencia de un monarca, es decir, de alguien que pudiera tratar el conjunto de la sociedad como si fuera su dominium privado.

Por otro lado, el carácter oligárquico de la república romana fue impugnado reiteradamente a lo largo de los siglos de su existencia. La plebe, es decir, el conjunto de los que dependían de su trabajo para vivir, se hizo sentir, eligió sus tribunos, y luchó por reivindicaciones sociales tan importantes como la reforma agraria. Es importante recordar que una de las principales luchas de la plebe romana fue la defensa de las tierras públicas, frente a los intentos del patriciado de convertirlas en haciendas privadas.

Este periplo por la antigüedad romana permite situar históricamente el concepto de lo público, lo cual nos ayudará a confrontarlo con otro concepto que es muy común en nuestra vida cotidiana: el de “lo estatal”. Esto es importante, porque de manera habitual en Cuba se confunden ambas cosas, hasta el punto de que la Constitución utiliza ambos términos casi como sinónimos.

En su libro La democracia republicana y el socialismo con gorro frigio, Antoni Doménech describe como la noción de Estado que nosotros utilizamos en la actualidad comienza a consolidarse en la Europa del siglo XVI, para referirse principalmente al aparato administrativo estable y desligado de la vida civil característico de la dominación política monárquico-absolutista. Es decir, el Estado moderno surgió de la concentración del poder en las familias reales europeas, hasta un punto tal que pudieron acabar con otras formas de organización social que habían existido durante siglos, y adquirir el monopolio de la violencia.

No se puede negar que el Estado se ha convertido desde entonces en uno de los pilares de la modernidad capitalista, a pesar de su raíz feudal y premoderna. Su ADN es la racionalidad administrativa, la cual es por definición monológica, es decir, una voz que solo dialoga consigo misma. El mercado, que es el otro pilar de la modernidad capitalista, es la verdadera institución burguesa, y como tal es mucho más dialógico, pues a pesar del monopolismo no puede dejar de ser un espacio abierto a nuevos actores. Sin embargo, el capitalismo hasta ahora ha sido incapaz de existir sin el Estado.

Se trata de un sutil problema de genealogía. Las monarquías absolutas solo fueron posibles gracias al apoyo de la burguesía. De ese modo, el Estado absolutista es en sí ya un híbrido. La racionalidad matemático-administrativa nace en las manufacturas burguesas, con un gran potencial para ser instrumento de dominación; no obstante, los burgueses por naturaleza entienden el poder siempre de un modo incompleto, y necesitan la alianza con otros burgueses. Dentro de las recámaras de los reyes, la racionalidad matemático-administrativa se mezclaba con el viejo sentido feudal del derecho divino, adquiriendo así un carácter monológico.

El hecho de que la burguesía necesite hasta hoy del Estado significa que la sociedad capitalista se erige sobre el magma del mundo premoderno. Los capitalistas intuyen que no basta el mercado para disciplinar a los de abajo, y que en caso de emergencia será siempre necesario recurrir al Estado, a la coacción bruta, para reprimir a los rebeldes.

Ahora bien, la modernidad se ha caracterizado por intentos de republicanizar al Estado. De ese modo surgieron las repúblicas parlamentarias modernas y las monarquías constitucionales. Pero eso ha terminado siendo una hábil maniobra para fortalecer la hegemonía burguesa. Además, ha traído una gran confusión alrededor de las categorías del viejo derecho republicano. No es por gusto que la categoría de Estado moderna sea más útil para entender la estructura social del Antiguo Egipto que la de la Roma republicana. Tampoco es casualidad que desde el siglo XIX los juristas orgánicos al capitalismo hayan interpretado el concepto de lo público como sinónimo de lo estatal.

Los parlamentos modernos –curiosamente, una institución de origen feudal— incorporan un elemento dialógico y potencialmente democrático en el seno del Estado. Pero al lado de esta institución se encuentra el aparato burocrático y represivo de ese Estado, que es el que implementa las políticas, y que no ha perdido su raigambre autoritaria. En las sociedades contemporáneas cada vez son más las decisiones importantes que pasan directamente de las directivas de las empresas capitalistas a las agencias gubernamentales, burlando la voluntad popular que debe estar encarnada en el parlamento.

Después de ver todo esto, cuando volvemos los ojos hacia lo que fue el socialismo real, y concretamente a Cuba, se hace patente la tragedia que ha sido querer anular el capitalismo y el mercado con el método de fortalecer al Estado. Porque por más que se diga que es socialista, revolucionario, de los trabajadores, el Estado moderno sigue siendo el mismo híbrido feudal-burgués que ha sido a lo largo de la modernidad, con el añadido de que, una vez desaparecida la alta burguesía, la burocracia estatal asciende por primera vez a la posición de clase dominante, entronizando un modelo de racionalidad administrativa menos dialógico que el de la burguesía.

Donde se logre construir una sociedad completamente republicana y democrática, algo que no ocurrió ni en Atenas ni en Roma, estaremos hablando de una asociación de productores libres, es decir, del comunismo, y allí no habrá ninguna forma de Estado. Pero incluso donde eso no sea posible, donde no se logre de un tirón el nivel de educación popular y conciencia que serían necesarios para eso, se debe aspirar a un aparato estatal lo más republicano y democrático posible, y el Estado no debe ser visto como un paradigma sino como un problema.

La revolución cubana ciertamente tenía que construir un nuevo Estado, principalmente para destruir el viejo Estado burgués heredado del anterior bloque histórico. Pero el paradigma debía ser el progresivo empoderamiento de la sociedad civil. En cambio, caímos en la trampa de entregarnos a la estatolatría, que nos mantuvo prisioneros de una nueva forma de enajenación.

Ahora tenemos que soportar, en la nueva Constitución, que se diga que la propiedad socialista de todo el pueblo es aquella en la que EL ESTADO te representa como propietario. Sí, el Estado es el propietario, y bajo su sombra feudal-burguesa crecen, como no podía ser de otro modo, los burócratas-capitalistas aspirantes a oligarcas.

Es aquí donde entra a jugar su papel el concepto de lo público. La propiedad socialista de todo el pueblo debe ser llamada propiedad pública, porque no le pertenece a la burocracia estatal, sino a todos. El cambio de palabra es parte de la lucha por el control efectivo de los recursos económicos. Los servicios gratuitos que son conquista de la Revolución deben seguir siendo llamados públicos, y nunca debemos permitir que se las llame estatales, porque ellos se pagan con el dinero de todos para el beneficio de todos. Esa reivindicación de lo público puede ser la antesala de una renovación cívica de la sociedad cubana.

Público también debe ser llamado el espacio de nuestra Isla, sus ciudades, calles y campos. Este debe ser un espacio para la libre expresión y manifestación de posiciones políticas. La racionalidad monológica de la burocracia estatal, con su voluntad de discurso único, es un grillete para el libre desenvolvimiento de una sociedad que aspira a un desarrollo socialista. Solo cuando todas las voces tengan el mismo derecho a ser escuchadas, tanto en el centro de trabajo como en el espacio mediático nacional, entonces estaremos avanzando por un camino de emancipación. Porque la cosa pública es de todos, y a todos les concierne.

Para contactar con el autor: yasselpadron1@riseup.net

Del átomo al PIB: el método del control sintético

Por Javier Ferri , Nada es gratis



Para evaluar los efectos que una perturbación, provocada o espontánea, es capaz de inducir sobre un estado de la naturaleza, idealmente debería compararse el estado observado después de la perturbación con el que se habría observado en ausencia de la misma. Esta es la base de la metodología empírica de cualquier rama de la ciencia, y la que utiliza un físico para establecer las reacciones nucleares que tienen lugar en un elemento bombardeado por partículas, un biólogo que estudia el crecimiento bacteriano en un cultivo, o un farmacéutico que trabaja con ratones para entender la efectividad de un medicamento.
Lamentablemente, la pureza del método descrito disminuye con la complejidad de la naturaleza objeto de la investigación. Un átomo de carbono es una unidad observacional más simple que una bacteria. Dos bacterias de la misma cepa son mucho más similares entre sí que dos ratones de la misma especie. Y dos humanos son más diferentes entre sí que dos ratones. Un físico no necesita preocuparse, al comparar dos átomos de carbono, por las diferencias existentes en el átomo antes de su experimento, porque ambos son idénticos, por lo que le vale con comparar la reacción producida en el mismo antes y después del experimento. Aunque los ratones son más que un átomo, el farmacéutico que trabaja con ellos tiene la certeza de que ni el ratón al que le ha administrado el medicamento, ni su ratón alter ego, han quemado las noches de su juventud en el ‘after hours’ bebiéndose la estantería de ginebras. Sin embargo, la única forma que existiría de garantizar que estamos comparando dos humanos iguales, antes de que uno de ellos sufriera una perturbación, sería generar una coincidencia absoluta en su ADN y obligarles a pasar la vida en una burbuja, en ausencia completa de estímulos. Y esto, afortunadamente, no existe.
Pese a las dificultades a la que nos enfrentamos al tratar con humanos, y no con átomos, bacterias o ratones enjaulados, los economistas llevamos ya muchos años utilizando, lo mejor que podemos, el método empírico consistente en comparar el desarrollo de individuos que han sufrido una perturbación común (al que le llamamos, como los médicos o farmacéuticos, grupo tratado) con los individuos más parecidos posibles, pero que no han recibido dicho shock (o grupo de control). Un tipo de perturbaciones que nos estimulan particularmente, aunque no las únicas, son las políticas económicas.
Para realizar estas comparaciones entre el grupo tratado y el grupo de control, los economistas recurrimos a distintas fuentes de información. En algunos casos, generamos la información en los llamados laboratorios de economía experimental (muy apreciados también por nuestros estudiantes, que se ganan unos eurillos); David Jiménez Gómez nos hablaba aquí de las buenas prácticas para el diseño de experimentos. En otros casos, conseguimos la información experimentando sobre el terreno. Entonces, los individuos comparados no están expuestos a situaciones hipotéticas, sino que son personas que reciben (o no) perturbaciones diseñadas por los economistas y que afectan (o no) a su vida real en una aldea de la India, por ejemplo. En esta otra entrada sobre los últimos Premio Nobel de Economía, Mónica Martínez-Bravo y Pedro Rey nos explican con más detalle los méritos de este tipo de experimentos aleatorios controlados sobre el terreno. Pero los economistas empíricos que no diseñan sus experimentos también pueden obtener información valiosa a partir de datos más o menos públicos y entre los que destacan, por su calidad, los datos administrativos (véase, por ejemplo, el resumen que hicimos de nuestro estudio sobre el efecto de la subida de las tasas universitarias en el rendimiento de los estudiantes). En función de su capacidad de generalización de resultados, de corregir sesgos al hacer inferencia, y de la flexibilidad en su implementación, cada una de estas tres formas de extracción de información tiene sus ventajas y debilidades.
Si damos ahora un paso más, y avanzamos desde el estudio individual de un conjunto de personas a sistemas dinámicos más complejos, como las sociedades creadas por humanos, cuya evolución es el resultado de millones de interacciones entre miles de personas, la pretensión de encontrar dos sistemas idénticos en su evolución para poder compararlos después de que uno de ellos reciba una perturbación aislada es, en principio, una quimera. Del mismo modo que el método empírico se vuelve menos puro (pero sin duda más imaginativo) cuando se estudia una dimensión concreta de la reacción de las personas frente a la reacción en el núcleo de un átomo, su precisión disminuye cuando el objeto del estudio es el propio resultado agregado (llámese PIB, por ejemplo) en un sistema complejo (llamémosle, para simplificar, una economía). He aquí uno de los dramas de la macroeconomía cuando se compara con la microeconomía: la complejidad que subyace al resultado observacional dificulta el análisis causal de los efectos de los shocks.
Aun aceptando sus limitaciones, el método empírico en macroeconomía debería desviarse lo menos posible del explicado. Para ello existen dos grandes aproximaciones, y ambas pasan por crear una representación artificial de lo que sería una ‘economía de control’. La aproximación más conocida consiste en diseñar un sistema de ecuaciones que representen las principales características de la toma de decisiones y la interacción entre los agentes que operan en el sistema, y cuya solución se parezca al comportamiento dinámico observado, antes de la perturbación, de la economía que se desea de estudiar. Una vez diseñado este sistema artificial, se puede introducir en el mismo una perturbación con características similares a la observada en la realidad, para volver a obtener la solución dinámica del mismo que se compararía con la del sistema sin perturbar (economía de control). Esta aproximación empírica está basada, por lo tanto, en la teoría que reflejan las ecuaciones, y en los supuestos subyacentes, que no necesariamente van a reflejar fielmente el proceso de toma de decisiones real de los agentes.
La otra aproximación es puramente empírica. Imaginemos que una economía A recibe una perturbación y queremos evaluar el impacto de la misma en términos de PIB. El equivalente en el plano microeconómico sería un conjunto de individuos afectados por una política económica, por ejemplo. Pero ahora sólo tenemos un individuo tratado (la economía A que ha recibido una perturbación). Frente a esta economía tenemos otras que comparten características comunes con la economía  afectada, pero que no han sufrido esa perturbación (al menos de forma directa). El enfoque del control sintético propuesto por Abadie y Gardeazabal (AER, 2003) plantea la posibilidad de obtener un economía de control sintética dando distintos pesos a las economías no directamente afectadas por la perturbación. Esos pesos se pueden estimar óptimamente minimizando la distancia entre ciertas características observables de la economía tratada y la economía sintética, creada a partir de un conjunto de datos observados. Por ejemplo, si en una serie de variables que explican el crecimiento del PIB real, la economía A se parece bastante a la economía B, algo a la economía C, un poco a la economía D y nada a la economía E, el método comentado podría generar una economía artificial (S), alter ego de la A, como S = 0,6B+0,3C+0,1D, donde 0,6; 0,3 y 0,1 son los pesos que hacen a la economía S lo más parecida posible a la economía A, según un conjunto de variables determinadas.
La economía alter ego así construida se utilizaría para comparar la evolución de su PIB con la observada por la economía tratada, y estimar de este modo el efecto de la perturbación sobre la variable de interés. Como los experimentos económicos en laboratorios o sobre el terreno, se trata en definitiva de un estudio del caso, restringido a un periodo, a un lugar y a una perturbación particular.
En la entrada que acompaña a ésta comentaremos lo que nos dicen las estimaciones más recientes que utilizan el método del control sintético sobre los costes económicos de tres casos de conflictos separatistas que nos han tocado o nos siguen afectando de cerca: el País Vasco, el Reino Unido y Cataluña.

Reafirma Cuba su interés en consolidar el turismo MICE

Reafirma Cuba su interés en consolidar el turismo MICE


La Habana, 13 dic (ACN) Cuba reafirma su interés en consolidarse como un destino de turismo MICE (reuniones, incentivos, congresos y exposiciones), y con vistas al año 2020 ya cuenta con 227 citas agendadas, entre convenciones, talleres, ferias y festivales.

Con un carácter internacional, nacional con participación extranjera y sedes captadas, los encuentros versarán sobre temáticas varias como agricultura e ingeniería; ciencias jurídicas y políticas; economía, contabilidad, administración e industria; informática y telecomunicaciones; turismo, entre otros.

Dalila Alba González García, subdirectora general de mercadotecnia del Ministerio de Turismo (Mintur), explicó hoy en la presentación del calendario de eventos para el venidero año que las áreas con mayor desarrollo de citas son arte, cultura, sociedad y comunicación (43); deporte y cultura física (41); ciencia, tecnología y medioambiente (36), educación (32) y salud (30).

En la programación para 2020 destacan algunos como la Feria Internacional del Libro (del 6 al 17 de febrero), el XVIII Encuentro Internacional de Gestión de Ciudades Patrimoniales (del 12 al 15 de mayo) y el XXVII Festival Internacional de Ballet de La Habana Alicia Alonso (del 28 de octubre al 6 de noviembre).

La especialista aseveró que Cuba constituye un destino ideal para la realización de reuniones de todas las ramas del conocimiento y de formatos, y sentenció que el desarrollo de esta modalidad forma parte sustancial de su estrategia de trabajo.

Asimismo afirmó que el Mintur se ha propuesto crear un departamento encargado de organizar, diseñar y ejecutar las acciones dirigidas a regular, promover, captar y desarrollar eventos e incentivos en el país.

Entre las facilidades del destino para la celebración de estas actividades resaltó la existencia de centros de convenciones, hoteles con prestaciones para reuniones, personal capacitado, así como agencias de viaje con representaciones en todo el país que brindan incentivos al congresista en el destino que se encuentre.

González García señaló que Cuba forma parte de la Federación de Entidades Organizadoras de Congresos de América Latina, de las asociaciones internacionales de Congresos y Convenciones, de Ferias de América y de Palacios de Congresos, así como de la Unión de Ferias Internacionales.

En el Portal del Turismo de Cuba (https://www.cuba.travel/) existe un espacio dedicado a la modalidad de eventos, en el cual se inserta el calendario anual así como banners promocionales y paquetes turísticos asociados a cada actividad.

MICE es el acrónimo en inglés utilizado para el turismo de negocios o viaje de negocios: Meetings, Incentives, Conventions and Exhibitions.

Mil habitaciones más en Varadero para el año 2020

Creado el Viernes, 13 Diciembre 2019 13:52 | Bárbara Vasallo | Fotos: ACN

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Varadero, 13 dic (ACN) Para el año 2020 Varadero contará con mil habitaciones más, una vez concluyan las inversiones de los dos hoteles que se edifican en las zonas del Oasis y de Los Taínos, respectivamente, confirmó Ivis Fernández Peña, delegada del Ministerio del Turismo (Mintur) en Matanzas.
Actualmente el balneario supera las 22 mil habitaciones, en 52 hoteles, la mayoría de altos estándares que acogen a clientes de 72 naciones, quienes según las encuestas, muestran satisfacción por la calidad de los servicios y disfrutan de la segunda mejor playa del planeta.
Fernández Peña explicó que para la Feria Internacional de Turismo (FitCuba) que tendrá por sede a la península de Hicacos en el venidero año, está en proceso la inversión del boulevard de Varadero, con novedoso diseño enmarcado en las calles 62 y 64 y la reparación capital del Centro de Convenciones Plaza América, entre otras de carácter extrahotelero.
El balneario cubano cerrará este 2019 con un millón 800 mil visitantes, de ellos un millón y medio de extranjeros, lo que demuestra la preferencia por Varadero, a pesar de las medidas impuestas por el gobierno de Estados Unidos que recrudecen el bloqueo contra Cuba, comentó la funcionaria.
Canadá continúa como principal país emisor, con el 80 por ciento de las operaciones aéreas por el aeropuerto Internacional Juan Gualberto Gómez, en la periferia de Matanzas; Rusia crece considerablemente y le siguen Alemania, Francia, México, Chile y España que vuelve a tener presencia en la playa.
La delegada señaló que el mercado interno creció en un 12 por ciento y que las autoridades del Mintur vaticinan una buena temporada invernal, pues la provincia de Matanzas se consolida entre las preferidas por los clientes, no solo Varadero, sino también la Ciénaga de Zapata y la ciudad de Matanzas, junto al Valle del Yumurí y la Ruta del Esclavo.
Estimó que el sol y playa es modalidad que atrae; pero el territorio combina con la cultura, el patrimonio, la historia.
En ese sentido señaló al teatro Sauto, recientemente reabierto, como un sitio para mostrar lo mejor de la cultura cubana y al cabaret Continental, anexo al hotel Meliá Internacional, ambos productos de excelencia.

Reducir gastos e incrementar ingresos, no hay otra alternativa

En la reunión se informó sobre el comportamiento de la campaña de frío, la cual resulta decisiva para no enfrentar desabastecimientos a inicios del próximo año. Foto: Ronald Suárez Rivas
«Debemos concentrar los esfuerzos en la búsqueda de todas las alternativas posibles que nos permitan, por una parte, incrementar los ingresos en divisas y, por la otra, destinar los recursos disponibles hacia aquellas producciones que no tenemos capacidad para realizarlas en el país. Y la vía más factible es producir bienes y servicios para la exportación y la sustitución de importaciones».
Esa fue la exhortación del vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, durante una reunión realizada el pasado martes, mediante videoconferencia, con los presidentes y vicepresidentes de los Consejos de la Administración provinciales y municipales del país, en la cual se evaluó, entre otros temas, el plan de aseguramientos para celebrar el aniversario 61 del triunfo de la Revolución.
En la sesión de trabajo, que contó con la participación de los miembros del Buró Político, Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado, y los vicepresidentes del Consejo de Ministros, Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez y Roberto Morales Ojeda, también se informaron las medidas a implementar para reducir los gastos e incrementar los ingresos al Presupuesto; así como las estrategias para contribuir al cumplimiento del plan de circulación mercantil minorista.
En los últimos años, reconoció Valdés Mesa, hemos retrocedido en la capacidad de rubros exportables, mientras que las importaciones han mantenido su tendencia creciente, incluidos los productos que se pueden fabricar nacionalmente. A su juicio, «se ha entronizado en no pocos cuadros y directivos una mentalidad importadora que mutila la iniciativa para buscar soluciones y romper la inercia».
En ese sentido, informó que el cumplimiento del plan de exportaciones y el fomento de nuevos rubros exportables serán temas de riguroso análisis en los chequeos sistemáticos que se realizan, bajo la conducción del Gobierno, en los territorios. Incluso los proyectos de desarrollo local que se aprueben en lo adelante, subrayó, deberán incorporar este enfoque desde su diseño.
El Vicepresidente de la República reiteró, además, ideas que constituyen líneas de trabajo invariables: fortalecer la labor ideológica de los órganos de Gobierno y la administración; vencer las insuficiencias propias; defender la unidad y el socialismo, romper el pensamiento de finca; hacer prevalecer en la conducta de los cuadros la humildad; luchar contra la corrupción, por la ética, la decencia y la cortesía; así como actuar con honestidad, laboriosidad y antimperialismo.
Todo ello, apuntó, resultan prioridades para defender el país, la Revolución en sí misma y el legado de la generación histórica encabezada por Fidel y Raúl.
La situación actual, dijo, convoca a ahorrar; a mantener un riguroso control del combustible; a ser eficientes en las inversiones; a ampliar la inversión extranjera y hacerlo bien; a desarrollar los encadenamientos productivos y, sobre todo, a una buena gestión de Gobierno desde la sensibilidad, el vínculo con la base, el trabajo colectivo, la crítica a lo mal hecho, «sin olvidar que somos servidores públicos y todos nos debemos al pueblo».
Valdés Mesa también llamó la atención sobre el programa de autoabastecimiento municipal, emprendido desde hace más de dos años, y que para 2020, a pesar de los contratiempos con el combustible y otros aseguramientos, se propone llegar a las 30 libras per cápita entre viandas, hortalizas, vegetales, frutas y granos.
Asimismo, informó sobre el comportamiento de la campaña de frío, la cual resulta decisiva para no enfrentar desabastecimientos a inicios del próximo año. Hasta el momento, comentó, las siembras marchan al 68 %, con los niveles más bajos en Mayabeque, Matanzas, Ciego de Ávila y Camagüey.
Urge, en su opinión, usar todos los medios, más allá de la maquinaria agrícola, o sea, todas las tecnologías de siembra, incluidas las más tradicionales, las experiencias de los productores, las potencialidades de las semillas, así como los bioproductos y los fertilizantes orgánicos. De igual modo, insistió en la importancia de generalizar y mantener las medidas de ahorro implementadas en días recientes.
 Que el 61 aniversario de la Revolución sea una fiesta de pueblo
El programa de actividades para celebrar el 61 aniversario del triunfo de la Revolución debe reflejar las potencialidades del sistema de cultura a todos los niveles, especialmente en la base, y debe integrar en su concepción al sector no estatal, enfatizó Roberto Morales Ojeda, luego de conocer sobre las propuestas diseñadas por algunos de los organismos involucrados.
Al respecto, Esteban Lazo Hernández insistió en desarrollar al máximo las iniciativas en los consejos populares, en los bateyes, en las comunidades intrincadas, que las celebraciones no sean solo en las ciudades, sino que se conviertan en una fiesta de todo el pueblo.
Desde el Ministerio de Cultura, su viceministra primera, María Elena Salgado, señaló que se ha tenido en cuenta la promoción de los mejores referentes de la cultura cubana, con actividades que integran a casi todas las manifestaciones artísticas: música, teatro, literatura, cine, etc.
Por su parte, la directora general de Operaciones y Calidad del Ministerio de Turismo, María del Pilar Macías, explicó que el plan de su organismo contempla más de 400 actividades recreativas y 230 ofertas gastronómicas, entre ellas, cenas conciertos, competencias de bailes y ofertas especiales de alojamiento en las Cadenas Gran Caribe e Islazul.
También el Ministerio del Interior se ha sumado al programa, en pos de mantener un clima de orden, seguridad y tranquilidad ciudadana durante la realización de las actividades recreativas; así como en la transportación de la población.
Y justo el transporte es otro de los sectores priorizados dentro de este cronograma festivo. Luis Ladrón de Guevara, director de Transportación de Pasajeros del Ministerio de Transporte, precisó que en todo el país se asegurarán los refuerzos en rutas, puntos de mayor concentración y vías aledañas a los polos turísticos y recreativos.
Igualmente, el viceministro de la Agricultura, Miguel Rodríguez de Armas, informó sobre la distribución en diciembre de productos agrícolas a la población, que incluye, entre otros renglones, viandas, granos, hortalizas, cítricos y frutas; así como carne de cerdo, huevos y leche.
Incrementar la circulación mercantil
Durante la reunión de trabajo, la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz Velázquez, dio a conocer las ofertas para incrementar la venta de materiales, insumos y servicios con impacto en la circulación mercantil minorista.
Respecto a los productos alimenticios para comercializar en diciembre, informó, entre otros surtidos, sobre la disponibilidad de arroz, frijol, harina de trigo, pollo, salchichas, hamburguesas, picadillo y bebidas. Y en cuanto a los productos no alimenticios, destacó los inventarios de jabón de lavar y de tocador; así como de cemento y acero.
De forma general, resaltó, los volúmenes disponibles igualan o superan los comercializados en igual periodo del año anterior e, incluso, el promedio de este año.
También destacó la garantía de aseguramientos de las Tiendas Caribe y Cimex para esta época; así como el cumplimiento del cronograma de apertura de nuevas tiendas en moneda libremente convertible.
En torno a las estrategias de comercialización, Valdés Mesa hizo hincapié en la necesidad de adoptar medidas que eviten la especulación y el acaparamiento.
En el Presupuesto cada peso cuenta
El impacto del incremento salarial en los presupuestos locales y los estimados presupuestarios para el 2020 fueron los tópicos abordados por la titular de Finanzas y Precios, Meisi Bolaños Weiss.
De cara al próximo año, acotó, se mantienen restricciones en los gastos corrientes de la actividad presupuestada y no presupuestada y se respaldan las inversiones materiales, con prioridad para el programa de la vivienda, así como los sectores de educación y salud.
Otra directriz de trabajo, afirmó, apunta hacia el cobro de todos los ingresos que genera la economía del municipio y la provincia, unido a la gestión, de conjunto con la onat, de los ingresos dejados de recaudar en tiempo y forma por incumplimientos e indisciplinas tributarias.
El ahorro, subrayó, «es la premisa de hacer lo mismo o más, sin afectar la calidad, con menos o igual financiamiento».
Se trata, en palabras de Valdés Mesa, de velar por el uso racional del Presupuesto, de reducir gastos e incrementar ingresos. No tenemos otra alternativa.