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jueves, 10 de agosto de 2023

La bancarización será un proceso gradual y donde las condiciones lo permitan

 Por: Randy Alonso Falcón, Oscar Figueredo Reinaldo, Angélica Arce Montero, Claudia Fonseca Sosa, Rogelio Carmenate

 


Para continuar informando sobre los pasos en el proceso gradual de bancarización y pagos electrónicos en el país, comparecieron en la Mesa Redonda, autoridades del Banco Central de Cuba, del Banco de Crédito y Comercio y del Ministerio de Comunicaciones.

Al intervenir en la Mesa Redonda, Julio Antonio Pérez Álvarez, director general de Operaciones y Sistemas de Pagos del Banco Central de Cuba, explicó que este proceso de bancarización se realiza para crear facilidades en los servicios bancarios integrados a los canales de pago. “Reiteramos que es un proceso gradual, en el cual no solo interviene el banco, sino que participan todos los Organismos de la Administración Central del Estado”.

Como decíamos en una Mesa Redonda anterior, dijo el funcionario, este proceso de bancarización apuesta por crear condiciones para el uso de los canales de pago, y “para nada se trata de desorganizar los procesos que hasta ahora se venían haciendo”.

Durante su intervención, Pérez Álvarez, informó que se concluyó el proceso de capacitación a nivel de estructuras bancarias, lo cual permitirá lograr un mejor desempeño a nivel territorial y acompañar a los actores económicos en estos pasos.

A la par, reiteró la importancia de contar con una buena estrategia de comunicación y subrayó que este proceso no se trata de hacerlo en todos los lugares y bajo cualquier criterio. “La bancarización avanzará en los lugares donde existan las condiciones”.

Más adelante recordó los canales de pago habilitados en el país. En este sentido mencionó a los cajeros automáticos, los terminales de puntos de venta, la banca telefónica, la banca Remota, las pasarelas de pago como Transfermóvil y Bolsa MiTransfer, así como Enzona.



“Desde inicios de los años 2000 nuestra población comenzó a pagar el teléfono o la electricidad sin tener que hacer una cola, a partir de la disponibilidad de una cuenta bancaria. Debemos subrayar que la bancarización es muy beneficiosa, aporta seguridad y se logra mayor eficiencia, ahorro y transparencia. El cliente tampoco depende de que si abre o no la sucursal".

Dijo además, como en el año 2019, la matriz de pago era fundamentalmente en efectivo, con más del 88%, mientras que para el año 2022 las operaciones digitales se elevaron por encima del 63%.



Apuntó que en el año 2022 se alcanzaron 200 millones de operaciones por canales electrónicos, con un peso importante en Transfermóvil; mientras que en lo que va del 2023 estas superan los 130 millones de operaciones.

En cuanto a la aplicación de la resolución 111, el funcionario aclaró que no se elimina el uso del efectivo. “Se trata de nuestra moneda, además de que en el mundo no se ha podido eliminar el uso del efectivo, aunque la tendencia es incrementar el empleo de los canales de pago electrónicos. Este es un proceso gradual, hay sectores como los pescadores o los campesinos donde no hay infraestructura para hacerlo, por tanto, sería irracional acometer esas acciones”.

Otra de las dudas que aclaró fue que el límite de 5,000 pesos por operación es solo para los para actores económicos. “Este número es superior a lo que estaba vigente, y no tiene que ver con las personas naturales. Ya apreciamos un mayor acercamiento de actores económicos a las sucursales bancarias. Todas estas acciones de realizarán a partir de los contratos entre la entidad y los bancos”, agregó.



A pesar de que estos pasos representan un paso hacia la seguridad de las operaciones, aun es incipiente el uso de códigos QR u otros medios para el pago electrónico entre los actores económicos. “La bancarización permitirá empoderar la economía y potenciar el desarrollo bancario a favor del país. Para nada se busca limitar a las entidades, sino que medie el acto legal entre el banco y los clientes”.

Comentó que aunque aún no se logran los niveles deseados, se ha incrementado las operaciones de las personas naturales a través de los cajeros automáticos. Muchas oficinas bancarias también abrieron los días incluso los días no laborables.

“No le queremos crear problemas a la entidad. Estamos diseñando para que en cada entidad bancaria se atienda con la celeridad y atención adecuada que llevan. Esto conlleva a un proceso de la reorganización de nuestras oficinas, no estamos ajenos a los problemas organizativos. Estamos diseñando oficinas que van a concentrar los servicios a los actores económicos como anteriormente el banco usaba”.


Al intervenir en el programa televisivo, Alexis Trujillo Morejón, presidente del Banco de Crédito y Comercio (BANDEC), afirmó que durante esta semana se ha observado en las sucursales del banco que existen dudas en la población sobre cómo se implementan las medidas y hacia dónde se dirige el proceso de bancarización, por lo que se ha trabajado en dar respuesta a esas inquietudes tanto por la vía presencial como por las distintas plataformas de comunicación de la entidad.

Han sido momentos de esclarecimiento, que pasa por la comprensión de que se trata de un proceso gradual, dijo.

Reiteró que el proceso de bancarización es un proceso gradual, en el que se aspira potenciar el uso de los canales electrónicos de pago.

El directivo consideró que durante la semana también se pudieron identificar fallas en el sistema, a pesar del amplio proceso de capacitación realizado, y sobre las que ya se trabaja.

El BANDEC opera con varios actores de la economía, especialmente el sector agrícola y agropecuario, el cual tiene especificidades en su forma de trabajo, con pagos diarios, etc. Este sector ha manifestado dudas y preocupaciones, a las que poco a poco se les responderá, explicó.

Recalcamos al campesinado que este proceso no va a afectar su operatividad, su trabajo y creación de riquezas.

Trujillo Morejón dijo que de manera similar sucede con las mipymes y proyectos de desarrollo locales vinculados con el banco.

Existen muchas especificidades en las relaciones de las personas naturales con los bancos, de los TCP con los bancos...., por lo que se trabaja en dar respuestas para cada caso.

El directivo informó que en el año 2019 BANDEC contaba solo con 1.8 millones de tarjetas, y hoy suman más de 5.5 millones de tarjetas, para un crecimiento de un 197%.

En cuanto al servicio de banca remota, que en el caso de BANDEC es el Virtual BANDEC, explicó que en los últimos años se ha incentivado su uso, que permite a las personas y empresas acceder al banco sin necesidad de ir personalmente a las sucursales.

Agregó que el 79% de las mipymes y proyectos de desarrollo locales que trabajan con el banco, tienen contratado el servicio del Virtual BANDEC y operan por él.

Por tanto, dijo, esa cifra de actores económicos ya utilizan la plataforma electrónica y lo único que tendrían que hacer es limitar las operaciones que realizan en efectivo y pasarlas al Virtual BANDEC.



Consideró que el reto del banco está en que esas formas de gestión comprendan la necesidad de disminuir el uso del efectivo. Siempre se operaría, acotó, creando las condiciones y de forma paulatina, sin afectar la actividad económica.

De acuerdo con Trujillo Morejón, se aprecia disposición y motivación en los funcionarios y trabajadores de las distintas sucursales del banco para la implementación de estas medidas, gracias al proceso de capacitación previo realizado.

Aunque aún es compleja la afluencia de público en las sucursales, y eso es una insatisfacción que tenemos, consideramos que la bancarización ayudará a aliviar las colas en un tiempo prudencial, concluyó.



La generalización del uso de los pagos electrónicos es una tarea de todos


Ernesto Rodríguez Hernández, viceministro de Comunicaciones, comenzó su intervención en la Mesa Redonda reiterando que “el desarrollo y la generalización del uso de los canales de pagos electrónicos es un prioridad de la transformación digital, en la que se ha trabajado desde la misma política de informatización de la sociedad”.

En función de ello, señaló el viceministro, se han ampliado capacidades en la infraestructura para soportar estos procesos. “Dichas capacidades no podemos parar de desarrollar y las continuaremos robusteciendo en la medida en que las condiciones económicas lo permitan.

“Hay que hacer inversiones y trabajar en capas de las redes y la infraestructura. Nada se puede ver aislado, todo es un sistema, que incluye redes de comunicaciones y privadas de datos, así como los dispositivos terminales de acceso, donde se generan operaciones como un teléfono, una computadora, terminal de punto de venta; entre otras.

Mencionó, además, las plataformas digitales. “No solo se trata de tenerlas si no también de elevar la eficiencia del servicio”.

De acuerdo con Rodríguez Hernández, hoy el 83% de los lugares donde viven los cubanos tienen cobertura de telefonía móvil. “Eso permite hacer operaciones desde Transfermóvil, una de nuestras dos plataformas de pagos electrónicos. Transfermóvil usa un canal de señalización de la telefonía celular y tiene presencia donde quiera que haya cobertura”.

Precisó que el 50 % de los espacios en Cuba tienen cobertura 4g y el 75%, 3 G. “Desde estos lugares pueden hacerse transferencias no solo por Transfermóvil, sino también desde Enzona, la otra pasarela de pago nuestra”.

Recalcó que en los últimos años se ha logrado en el país la fortaleza de contar con dos plataformas nacionales de pago. “Tenemos toda la capacidad para el soporte técnico y el desarrollo evolutivo, incluso, para la generación de nuevos servicios sobre estas plataformas”.

Al respecto ejemplificó el monedero móvil, desarrollado sobre Transfermóvil. “Implica prácticamente las capacidades de bancarización de los cubanos. No ata a tener las bondades de los pagos electrónicos a través del monedero, todo por el hecho de tener una tarjeta magnética y hacerlo desde la comodidad del teléfono”.

Reiteró que tanto Transfermovil como Enzona tienen distintas vías de acceso. Una es a través de un código de señalización (Transfermóvil) y la otra es mediante la red de datos móviles del servicio de Internet (Enzona). Ambas son libres de costos adicionales para el cliente.

En cuanto a la capacidad tecnológica puntualizó que en 2022 se hicieron desde Transfermóvil 444 millones de operaciones, teniendo en cuenta hasta consultas de saldos, de base de datos y del costo de los servicios, “normalmente cuestiones que estresan los sistemas de comunicaciones”.

Detalló que el pasado año, Enzona reportó alrededor de los 45 millones de operaciones. En tanto, en lo que va de 2023 se han hecho, por Transfermovil, más de 400 millones de servicios y el pronóstico es que se cierre con 1000 millones, para duplicar prácticamente lo realizado hasta el momento.

“Por Transfermóvil se ejecutan cerca de 29 operaciones cada segundo y, si sacamos el cálculo de lo pronosticado en 2023, prácticamente serán 3 millones mensuales. Esto tiene que ser respaldado necesariamente por una infraestructura, capaz de gestionar esos volúmenes”, aseguró.

Comentó que servicios como la electricidad, las comunicaciones, los impuestos, el agua y el gas licuado han ido creciendo sostenidamente sus pagos mediante canales electrónicos en los últimos años.

El viceministro puntualizó que, en lo que va de 2023, más del 80% de los pagos en servicios de comunicaciones se han hecho por canales electrónicos, mientras que el 40 % corresponde a los de electricidad y el 60 % a los impuestos.

Estos números ilustran confianza, seguridad, pero también el bienestar de los ciudadanos, cuando pueden pagar electrónicamente los servicios. Lo que se trata ahora es de generalizar estos pagos.

“Todo está en la voluntad que queramos hacer, en crear cultura, para lo cual también ofrecemos las capacidades de los más de 600 Joven Club del país, con presencia en todos los municipios. Asimismo, contamos con los 8 000 miembros de la Unión de Informáticos de Cuba, para el acompañamiento necesario en cada proceso”.

Destacó la importancia de lograr mayores niveles de seguridad en el uso de estas plataformas de pago. “Para eso nos hemos preparado con un control más riguroso de la seguridad de estas plataformas, donde se incluyen los mecanismos de protección de las mismas y cómo se gestionan las cuentas de los usuarios, las transacciones y los datos personales.

Aseguró que el propio robustecimiento de las estructuras ha dado mejores índices de disponibilidad en los últimos tiempos. “La disponibilidad es una variable de seguridad, al igual que el hecho de perfeccionar los mecanismos para gestionar los inconvenientes que se dan y poder depurar responsabilidades con transparencia y prontitud”.

El directivo insistió en que se ha trabajo en la capacitación en el uso responsable de estas plataformas y en cómo hacer las operaciones de manera segura.

No podemos cansarnos en seguir creando competencias y habilidades en nuestra población, que es culta, sabe que esta es una necesidad impostergable hacia la modernidad de un país y está consciente de cuánto significa para mejorar su calidad de vida”.

Sobre cómo avanzar en el propósito de que haya más comercio electrónico en Cuba, Ernesto Rodríguez Hernández, dijo que “es una tarea de todos. Los que hoy la tengan implementada, tienen que favorecer su uso. Esto comienza desde el prestador del servicio.

“Es también vital que el ciudadano, que ya conoce sus ventajas ejerza el derecho de poder exigir que le cobren digitalmente donde quiera que las condiciones estén creadas”.

En los últimos minutos de su intervención, el viceministro de Comunicaciones, reiteró el concepto de gradualidad en la bancarización del país. “Se trata de que todos los que estamos involucrados en el proceso también trabajemos con mucho rigor en la atención a las preocupaciones y problemas ciudadanos y en halar parejo.

“Así podremos aspirar a tener un país cada vez más moderno, con una transformación digital que rebase los temas conceptuales, y el ciudadano lo vea en la práctica, disfrutando de las ventajas y bondades de este proceso”, concluyó.

Sobre el proceso de bancarización


Texto de Roberto Feria Rodriguez





A ver compañeritos y compañeritas, voy a dar mi humilde opinión sobre el tema actual de la bancarización de la economía, igual puede estar equivocada pero es la mía.

Para mí una maravilla y explico, porque sé que la palabra bancarización y economía son utilizadas de mil maneras.

Primero: para mí es excelente que yo pueda ir a cualquier negocio y pagar de varias formas posibles, donde una de las formas seguirá siendo el efectivo (para los que ya les metieron en la cabeza que el efectivo va a desaparecer), pero también de forma digital, algo en lo que nosotros estamos atrasadísimos, y es algo que yo tengo implementado en mi negocio Feria SoftCell desde el comienzo con mi código QR para pagos vía Transfermovil.

Segundo: Los que hablan de los no bancarizados pues podrán usar la Bolsa Mi Transfer, claro que debe tener móvil inteligente, pero por ejemplo, si en todos o la mayoría de los negocios se implementaran todas estas formas de pago pues yo no tendría que darle efectivo a mi niña, le recargo su Bolsa Mi Transfer y listo, llega a un local para merendar y paga directamente desde su teléfono, y no necesita una cuenta bancaria, de quedarse sin dinero en algún lugar pues solo sería transferirle y listo.

Tercero: sí, porque ahora vienen los que no tienen cuenta bancaria ni teléfono, pues esos seguirán pagando en efectivo, no hay de otra, ahh el tema cajeros claro, bueno pues la medida que solo lo puedan utilizar las cuentas de salarios, chequeras, etc. pues despejará un poco ese servicio, igual que la caja extra en los establecimientos, pues los otros actores al mover mayor cantidad de dinero se supone tengan implementada las otras vías además de la utilización de los bancos.




Claro que hay mucho que hacer en tecnología e infraestructura, estudios y capacitaciones que hacer, pero por qué ir en contra de la tecnología, en su buen uso, algo que ya es normal en cualquier país del mundo, y hablo de cualquier mundo.


Nueva escala de contribución para los trabajadores por cuenta propia y socios de cooperativas no agropecuarias

 De acuerdo con lo dispuesto, la contribución de los afiliados al Régimen Especial de Seguridad Social es del 20 % de la base de contribución seleccionada desde un mínimo de 2 000 pesos, hasta un máximo de 9 500 pesos, de la escala

 Foto: José M. Correa

A partir de septiembre comienza a aplicarse la nueva escala de contribución en virtud del Decreto-Ley 48 del 6 de agosto de 2021, que establece el Régimen Especial de Seguridad Social para los trabajadores por cuenta propia (TCP), los socios de las cooperativas no agropecuarias (CNA) y de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), informó el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.

Añadió que la referida norma jurídica estableció, en su Disposición Transitoria Única, que durante los dos primeros años de su aplicación –hasta septiembre de 2023–, los TCP y los socios de las CNA ya constituidas, que se encontraban contribuyendo por la escala establecida en los decretos-leyes 278, de 30 de septiembre de 2010, y 306, de 17 de noviembre de 2013 ya derogados, podían mantenerse aportando por la base contenida en ambos decretos-leyes.

De acuerdo con lo dispuesto, la contribución de los afiliados al Régimen Especial de Seguridad Social es del 20 % de la base de contribución seleccionada desde un mínimo de 2 000 pesos, hasta un máximo de 9 500 pesos, de la escala.

El MTSS aclaró que, entre los meses de octubre a diciembre de 2023, los TSP y los socios de las CNA constituidas antes de la entrada en vigor del referido Decreto-Ley, que mantienen su contribución por los anteriores regímenes especiales de seguridad social, cuya cuantía es inferior a 2 000 pesos, deberán modificar su base de contribución, a lo que se dispone actualmente.

A tal efecto, se han adoptado medidas para facilitar el proceso de modificación de su base de contribución, sin necesidad de acudir a las instituciones determinadas para dichos trámites.

La solicitud se podrá realizar a través de la dirección de correo electrónico modificarbc@inass.gob.cu, adjuntando la planilla habilitada a tal efecto con toda la información que en ella se solicita, la cual está disponible para descargar desde la versión digital de esta nota en nuestra página web, así como desde los perfiles institucionales del MTSS; también estará visible en las Oficinas de Trámites y Empleo, y en las direcciones de trabajo provinciales y municipales.

El MTSS advierte que de no realizar la solicitud de modificación en el plazo previsto, se procederá a realizar, de oficio, el ajuste de la base de contribución, al nivel mínimo de la escala, en una cuantía de 2 000 pesos.

Los socios de las cooperativas no agropecuarias, aprobadas a partir del mes de agosto de 2021, por el Ministerio de Economía y Planificación, no tienen que realizar este proceso, ya que los mismos están aplicando lo dispuesto en el Decreto-Ley 48/2021 desde su aprobación

El alto precio de una bancarización

Debería existir algún tipo de sensor capaz de detectar cuándo una medida, política económica, decreto-ley, orientación, indicación, tiene carácter regresivo en términos económicos a corto y largo plazos.




Un par de meses atrás una caja de pollo podía alcanzar los 12 500 CUP y un litro de aceite de girasol podía costar 1 500 CUP. En la actualidad, todavía hoy, es posible comprar esa caja de pollo entre 6 000 y 7 500 CUP; y el aceite de girasol, entre 550 y 700 CUP.

No hubo ningún milagro, tampoco hubo que desgastarse en infinitas reuniones ni consumir recursos en visitas y controles. Fue solo el incremento de la oferta y de la concurrencia de muchas pymes importadoras de “productos finales” que, sin ponerse de acuerdo, compitiendo entre ellas mismas, hicieron que el precio en pesos cubanos descendiera en esa magnitud.

Para poder vender ese pollo, las pymes deben antes contratarlo y pagar al menos el 50 % a la firma del contrato; deben comprar al menos un contenedor que carga unas 25 toneladas, entre 1,4 y 1,5 dólares por kilogramo.

Significa que esas pymes a las que se les culpa de la “manía de importar productos terminados” deben adelantar al menos la mitad de esos 37 500 USD, esperar mínimo un mes, pagar el resto del importe al recibo del contenedor y luego vender ese pollo dolarizado en pesos cubanos.

Para volver a obtener dólares, a falta de un mercado de cambio oficial, transparente y confiable, esas pymes recurren a “operadores informales” —que podrían ser formalizados— que les facilitan lo que, por las razones que sea, el sistema bancario cubano no es capaz de facilitar.

Debería existir algún tipo de sensor capaz de detectar cuándo una medida, política económica, decreto-ley, orientación, indicación, tiene un carácter regresivo en términos económicos tanto en el corto como en el largo plazos. Debería existir además un instrumento que lo complementara y pudiera impedir que la medida fuera aplicada y entrara en vigor. Lamentablemente, ninguno de los dos existe.

Solo queda confiar en la sabiduría, la experticia, la capacidad de análisis, la sagacidad y el sentido común de quienes están a cargo y de los que, sin estar formalmente a cargo, pueden influenciar el proceso de toma de decisiones. Ocurre que los hechos siguen siendo tozudos y parecen no querer colaborar con los diseñadores de las políticas económicas.

El debate que tiene lugar hoy en Cuba motivado por la controvertida Resolución 111/2023 emitida por el Banco Central de Cuba (BCC), a la cual siguió de inmediato el anuncio por el Ministerio de Comercio Interior de un grupo de normas sobre el comercio minorista, el uso del efectivo y la aspiración de que en seis meses no se utilice efectivo en el comercio (por cierto, no conozco ningún país del mundo, ni siquiera aquellos que han alcanzado el mayor desarrollo del comercio, que haya logrado prescindir del uso de efectivo) rebasa con creces las medidas que lo originaron.

En realidad el debate aborda asuntos mucho más esenciales, tales como la capacidad del Estado y el Gobierno para conducir y lograr rebasar una crisis que dura ya varias décadas; el tamaño y la viabilidad del sistema empresarial estatal; el rol del sector privado en la economía y la sociedad cubana; la calidad y la coherencia de las instituciones, entendidas como las reglas de juego; la asignación eficaz y coherente de los escasos recursos de los que el país dispone en función de las urgencias estratégicas; la diatriba entre producción nacional e importaciones —un viejo dilema reverdecido en esta nueva coyuntura, etc.

Resulta casi imposible encontrar nuevos ángulos para examinar la Resolución del BCC, de tanto que se ha escrito sobre ella. Intentaré sintetizar lo que me parece son los principales consensos, algunos más públicos que otros, aunque sin duda no podré abarcarlos todos:Sobre la necesidad de la bancarización: creo que ningún economista discrepa de la necesidad de lograr niveles crecientes de bancarización, como tampoco discrepa de los bajos niveles de bancarización existentes en Cuba.

Sobre las ventajas que teóricamente se le reconocen: seguridad, eficiencia y ahorro, transparencia, inmediatez, capacidad de pago, funcionamiento permanente. Todas, de alcanzarse, son innegables.

Sobre el argumento dado por el BCC para tomar la medida: aquí también existe consenso, en el sentido de que resulta imposible ignorar la poca disponibilidad de efectivo en poder del sistema bancario, lo cual le obstaculiza cumplir parte de sus funciones y atender las demandas de dinero efectivo de la población y las empresas. Sin embargo, también existe consenso en que otras razones auparon la decisión y que de alguna manera esta tiene un trasfondo político dirigido a reducir/limitar/entorpecer la dinámica de las pymes y de otros actores no estatales.

Sobre el momento en que ha sido tomada esta medida: existe consenso en que se repite el mismo error que se cometió con el Ordenamiento; se ha hecho en el momento equivocado y sin las condiciones mínimas necesarias para reducir los impactos negativos.

Sobre la capacidad de las oficinas del sistema bancario cubano: aquí no solo un grupo grande de economistas, sino toda la población que acude a las oficinas e incluso funcionarios de los bancos, han reconocido que la demanda de servicios bancarios hace mucho tiempo ha sobrepasado la capacidad del sistema bancario cubano de satisfacerla. De igual manera, han reconocido el atraso tecnológico que padecen esas oficinas y la carencia de personal para atender a la población.

Sobre la infraestructura tecnológica que debe soportar esta transformación: aquí el consenso generalizado, sustentado en la realidad cotidiana, es que el sistema bancario se verá desbordado por el crecimiento exponencial de las operaciones y la imposibilidad/incapacidad de las empresas estatales responsables de garantizar esa infraestructura de proveer nuevas facilidades tecnológicas de inmediato. Imagino a las cubanas y los cubanos que viven en territorios muy apartados, donde tener 3G es un milagro.

Luego, en la Mesa Redonda del lunes 7 de agosto, altos funcionarios del Banco Central de Cuba confirmaron la falta de condiciones de todo el sistema bancario cubano y a la vez dejaron de abordar los temas más sensibles derivados de la innovadora resolución, como si el sistema bancario viviera en un universo y las cubanas y los cubanos vivieran en otro diferente de aquel.

Lo otro que llama la atención es que una decisión de tal envergadura no haya sido primero discutida en la recién finalizada sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular, consultada con expertos, sometida a un exhaustivo análisis de consecuencias en las instancias correspondientes de esa organización.

Al menos un grupo de colegas, economistas de diferentes edades, coincidimos además en que la bancarización forzada tendrá efectos negativos de corto y mediano plazos; reducirá la oferta de bienes, alimentará la inflación, tanto porque depreciará más el peso cubano como por la reducción de la oferta, de la concurrencia y de la competencia; promoverá una mayor informalidad en el sector monetario de la economía y generará nuevos canales informales de financiación; empujará hacia arriba la dolarización; reforzará la incertidumbre y también contribuirá a una mayor concentración de la riqueza.

Como efecto boomerang impactará negativamente en aquellas empresas estatales que han desarrollado algunos negocios con el sector no estatal. Debe esperarse además el cierre de pequeñas y medianas empresas y la reducción de la dinámica de apertura de nuevos negocios.

Por todas las razones mencionadas es una medida regresiva. Vaya manera de “avanzar” hacia la prosperidad.

Mientras escribo estas líneas, 8 de agosto de 2023, el peso cubano en el banco tiene un 10 % de devaluación en relación al peso físico. Es el primer gran logro del Banco Central.

Como en otras ocasiones, no solo chocamos con la misma piedra una y otra vez: lo perverso es que parezca que se disfruta haciéndolo.