Otras Paginas WEB

sábado, 10 de marzo de 2018

De la inversión extranjera y sus avances

A pesar de los pasos que se han dado, los resultados continúan por debajo de las necesidades del país



Foto: Jose M. Correa


La inversión extranjera en Cuba es un elemento activo y fundamental para el desarrollo y crecimiento económico del país. Sin embargo, lograr una estabilidad en este sentido necesita tiempo. Se trata de un proceso paulatino y que, aun cuando cada año tiene logros discretos, continúa siendo un reto a superar para este 2018.

Con la aprobación de la Ley de Inversión Extranjera en el año 2014, se inició un proceso de cambios, que unidos a los Lineamientos de la Política Económica y Social, se crea un escenario económico más acorde a las necesidades del país y al panorama de la región. En aquella época las estimaciones macroeconómicas, apuntaban a alrededor de 2 000 millones de dólares anuales de capital extranjero como necesarios para complementar los esfuerzos del país, alcanzar las metas trazadas y un desarrollo a mediano y largo plazos.

Hasta noviembre del 2016 Cuba logró atraer compromisos de capital extranjero de alrededor de 1300 millones de dólares. Sin embargo, según explicó a la prensa Déborah Rivas Saavedra, directora general de Inversión Extranjera, del Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (Mincex), en esta primera etapa, no se logró un avance perceptible ante el crecimiento que se necesitaba: entre un 5 y un 7 % en el Producto Interno Bruto (PIB).

En el año 2017, el ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca Díaz, anunció, en el marco de la Feria de La Habana, que el país había logrado comprometer capital por un monto aproximado de 2 300 millones de dólares. Esta cifra se traduce hoy en la presencia de negocios establecidos en el país, estudios de viabilidad logrados, además de cronogramas de inversión para desembolsar esas cantidades.

Según aclaró Rivas Saavedra, directora general de Inversión Extranjera, este escenario es un salto importante, pues Cuba comienza a insertarse en el entorno previsto según lo planificado. 

Esta primera cantidad de capital comprometido, añadió la directiva, se está recibiendo en los sectores del turismo, las energías (fundamentalmente renovables), la construcción, la logística, la minería y algunos negocios agroforestales. En este sentido, una de las metas cumplidas tiene que ver con la multiplicidad de inversionistas, un tema que, a su vez, complementa la política de no establecer dependencia de un solo país o mercado, sino lograr diversificar el origen del capital extranjero.

El camino transitado se materializa actualmente en la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM) y en dos sectores de la economía: el turismo y las energías.

ZONA ESPECIAL DE DESARROLLO MARIEL

En la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM) están presentes ya 15 países además de Cuba. La zona, es hoy el proyecto más ambicioso en el país referido a la inversión extranjera, y para satisfacción de sus cuatro años de trabajo, cuenta actualmente con 34 proyectos de negocios aprobados, al mismo tiempo que desarrolla su infraestructura.

Igualmente, su directora general Ana Teresa Igarza Martínez, explicó a la prensa que para este año 2018, los imperativos de la ZEDM radican en incrementar los diez usuarios que operan hoy en la zona, lograr que esas inversiones en ejecución culminen sus procesos constructivos, inicien su producción y tengan utilidades, como ha ocurrido con otras empresas ahí presentes, y que estas a su vez puedan reinvertir.

TURISMO

Uno de los sectores más dinámicos de la economía cubana es hoy el turismo. Su presencia en la ZEDM, con la primera empresa mixta para el desarrollo inmobiliario, ha servido para repensar nuevas inversiones dentro de la zona, que a su vez contribuyan al desarrollo del sector.

«Complementar los Planes de Desarrollo hasta el 2030 son premisas del sector del turismo, no solo con inversión propia sino también con inversión extranjera. Se está llevando a cabo un proceso para dinamizar la inversión por todo el país. Hablamos de ciudades patrimoniales y otros muchos sectores y polos que pueden desarrollarse y en los cuales se está llamando a la inversión», explicó José Reinaldo Daniel Alonso, director general de Desarrollo del Ministerio del Turismo (Mintur) en la televisión nacional. 

Los contratos de administración hotelera, el logro de empresas mixtas sobre todo para el desarrollo inmobiliario, y el crecimiento extra hotelero, son las tres modalidades en las que el sector ha logrado atraer mayor capital.

El mayor crecimiento, aseguró el directivo del Mintur, se percibe en los contratos de administración hoteleras. Existen 20 compañías de 10 países operando actualmente en el país, entre ellas entidades de alto estándar como la Kempinski y la Banyan Tree del sudeste asiático.

Al cierre de enero de 2018 se habían logrado 90 contratos y 118 hoteles aprobados bajo administración, lo que representa el 65 % de las habitaciones hoteleras existentes en el país. Entre las inversiones de este año, se encuentra la construcción de dos nuevos hoteles en Trinidad y la restauración de otros tantos en el país para mejorar el confort de las instalaciones. Una de las demandas del sector lo constituye el desarrollo extra hotelero, que proyecte su ampliación con la creación de marinas, parques temáticos y otros atractivos que complementen la oferta hotelera. 

ENERGÍA RENOVABLE Y PETRÓLEO

Con el objetivo de transformar la estructura de las fuentes renovables, disminuir la dependencia de los combustibles fósiles y elevar la sostenibilidad medioambiental, en el año 2014 se aprobó la Política para el Desarrollo Perspectivo de las Enérgicas Renovables en Cuba.

En esta área, el proceso inversionista se ha girado hacia la biomasa cañera para la concreción de bioeléctricas en 25 centrales azucareros. Actualmente según explicó a la prensa, Javier Rubén Cid Carbonell, viceministro del Ministerio de Energía y Minas (Minem) se trabaja en la ejecución de este proyecto con una empresa mixta y otra de capital ciento por ciento extranjero.

Asímismo, agregó el Viceministro sucede en el petróleo, un sector en el que cada día se hace más difícil encontrar inversores ante los bajos precios de este combustible en el mercado. No obstante, en 2017 se avanzó en dos proyectos relacionados con el incremento de producción, uno en Varadero y otro en la Zona Especial de Desarrollo Mariel.

Negociaciones con empresas mixtas fueron también avances en el año anterior, una para la comercialización del gas licuado en el centro del país y otra para el almacenamiento de combustible en Matanzas.

También, agregó el directivo del Minem, se ejecuta un proyecto para la adquisición, procesamiento e interpretación de 25 000 kilómetros de líneas sísmicas de alta resolución, que se realiza por primera vez en la historia de la industria petrolera cubana, y que servirá de base para posibles proyectos de exploración en Cuba.

Junto a estos, se potencian otros relacionados con la energía y la fabricación de paneles y calentadores solares, el aprovechamiento de la energía eólica, la fabricación de torres y otros elementos fundamentales para una economía también sostenible. 

Concretamente en este sector, se ejecutan proyectos relacionados al aprovechamiento de plomo y cinc. Actualmente se exportan 9 000 toneladas de concentrado de estos productos, un aporte real que ya tributa a la economía del país.

¿DE QUÉ DEPENDE MEJORAR LA INVERSIÓN EXTRANJERA?

Como rectores de la política en el país, el Ministerio del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera es hoy el máximo responsable de lograr que todos los proyectos se negocien, se logren con rapidez, eficiencia y que sean aprobados.

Sobre este tema, Déborah Rivas Saavedra, directora general de Inversión Extranjera del Mincex, agregó a la prensa que hasta el momento existen insuficiencias en el proceso. Entre ellas mencionó las dilaciones innecesarias que continúan presentes en los diferentes procesos negociadores, la dilatación en los estudios de factibilidad, la falta de preparación en términos, por ejemplo, de derecho mercantil, derecho internacional privado, la evaluación en las fichas de costo, la tecnología y otros.

Sobre esta misma línea, agregó, la existencia de un grupo de trámites y permisos que no se logran concretar de manera integral y orgánica, y que son imprescindibles para colocar los encadenamientos productivos como centros del proceso, y alcanzar el desarrollo armónico que requiere el país a mediano y largo plazo.

«Aun cuando se ha logrado concientizar y poner en conocimiento del empresariado la importancia que tiene buscar capital extranjero, para alcanzar los objetivos propuestos en tanto crecimiento y desarrollo, sigue siendo insuficiente lo que el país está percibiendo en materia de atracción de capital», afirmó la Rivas Saavedra.

El país demanda de mucho capital comprometido anualmente para que crezca el producto interno bruto y lograr el desarrollo. Aunque hoy la inversión extranjera llega a Cuba, este primer paso sigue estando por debajo de las necesidades. Ejecutar inversiones y alcanzar una estabilidad en este sector, es un proceso paulatino, sin embargo, esto no significa que no sea también, un imperativo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario