ECONOMÍA E IDEOLOGÍA EN LAS REFORMAS ECONÓMICAS

Por Carlos Alzugaray Treto

En mi opinión, en esta rica lista (1)  en que intercambiamos ciudadanos cubanos con una larga experiencia acumulada pero con distintas perspectivas que obedecen a nuestras circunstancias específicas, debemos evitar responder con consignas ideológicas propias de otros contextos (2). Con aquellos famosos discursos de barricada que muchos de nosotros usábamos cuando éramos jóvenes revolucionarios e impetuosos.

Para mí, el enfrentamiento esencial de nuestros tiempos está entre los que favorecemos políticas que impulsan o fomentan sociedades justas, equitativas, y sustentables y los que, siguiendo a Adam Smith, creen que "la mano invisible del mercado" es la varita mágica que resolverá todas las contradicciones sociales. Las sociedades son organismos complejos que se enmarcan en determinadas circunstancias internas y externas, pero también hay regularidades que son comunes a todas. Por tanto, no hay políticas "capitalistas puras" ni "socialistas puras".

La lucha por una sociedad justa, próspera, equitativa y sostenible requiere que se estudie cada caso y se apliquen fórmulas que las fomenten. Los partidarios del capitalismo "puro y duro", que no existe en ninguna parte aunque el que más se acerca es el modelo norteamericano, tratan por todos los medios de justificar políticas depredadoras e injustas sobre la base de ese principio de Adam Smith al que hice referencia.

No percibo a nadie así en esta lista. Sí percibo muchos amigos tratando de proponer fórmulas que combinen el desarrollo de las fuerzas productivas cubanas, que no es posible sin reconocer que el mercado existe más allá de nuestra conciencia (como dijo Lenin al referirse a la materia), con la creación de una sociedad y de un ser humano nuevo, que debe ser próspero, honesto y culto. Reconocer la existencia del mercado no es una traición a los ideales socialistas o progresistas, o de izquierda, como se les quiera llamar. Es un reconocimiento basado en el principio totalmente marxista y dialéctico materialista de que "la práctica es el criterio de la verdad".

Ayer vi un Tweet que proclamaba que ETECSA era una empresa "fidelista, revolucionaria, marxista leninista que servía al pueblo en la construcción socialista". No lo estoy citando textualmente, estoy parafraseando. Y yo me preguntaba: ¿Para eso es lo que está ETECSA? ¿O está para ser eficiente y continuar trabajando por dar un mejor servicio a una más bajo precio? ¿Por qué un directivo de una empresa tiene que rasgarse las vestiduras y no hablar de lo que hace la empresa?

Estoy viendo una serie interesantísima, Chernobyl. Es horrible comprobar como un modelo socialista con preeminencia del partido comunista pudo permitir que un desastre cómo ese sucediera y se ocultara a la más alta dirección del país durante las primeras horas críticas de lo sucedido, todo porque sus directivos, todos miembros del Partido, estaban protegiendo sus puestos. Su primera preocupación no fue el daño que podía sufrir el pueblo sino a quién echarle la culpa. Hay una reunión inmediata después de conocida la explosión y en esa reunión un viejo y experimentado dirigente reclama que se oculte la información a nombre del partido y de Lenin. Esa actitud conduce a que todo el que se paraba a decir que había pasado algo grave contra lo cual había que actuar era calificado en los mas duros términos y acallado, todo a nombre de Lenin, del Partido y de la fortaleza ideológica. Las palabras del viejo fueron acogidas con un aplauso cerrado de todos los burócratas sentados en una reunión en un bunker dentro del edificio de dirección de la planta. El resultado, se perdieron horas clave hasta que al fin un científico se paró en una reunión con Gorbachov y a pesar de las críticas de uno de los más altos dirigentes del partido, insistió, corriendo riesgos, en alertar sobre la gravedad de lo que estaba pasando. Lo amenazaron hasta con fusilarlo y el hombre insistió. Sin apelar a consignas o propaganda. Para los que conocimos el campo socialista y su modus operandi, muchas de cuyas prácticas hemos reproducido en Cuba, este serial es un alerta de lo terrible que puede pasar cuando no se escucha lo que los críticos plantean. Por eso defiendo que en esta lista reproduzcamos criterios aunque no nos gusten. La unanimidad nos puede matar.

Por cierto, me ha sorprendido la cantidad de ciudadanos de todas las categorías y de todas las esferas que al comentarles la serie me han dicho que ya la han visto, que la piensan ver o que les gustaría buscarla. Eso indica que nuestra sociedad es mucho más políticamente consciente e inquisitiva que lo que a veces se piensa.

La economía no se maneja con consignas por más revolucionarias que sean.

Las ciencias sociales no son como las ciencias puras. En las ciencias puras, si Ud elabora una hipótesis, la puede comprobar en un laboratorio antes de aplicarla. La deliberación pausada, profunda, con distintas perspectivas es el laboratorio de las ciencias sociales. Muchos de los que participamos en la lista hemos vivido en países con otros modelos o los hemos estudiado desde la historia, la economía, la ciencia política o la sociología. También hemos vivido el cubano y su evolución. 

Tenemos pues derecho a nuestras perspectivas. Hay esferas de la economía y la sociedad cubana en que la propiedad estatal no funciona efectivamente. Hay esferas donde la única fórmula es la propiedad estatal o pública (siempre con la participación de los trabajadores en las decisiones fundamentales y en el control). Pero hay esferas donde pueden convivir todas las formas de propiedad y modelos de gestión. Un ejemplo de ellos es el turismo, y de ahí su importancia política principal. ¿Cuál es el criterio de medida? Lo que fomente el desarrollo y la prosperidad - individual y colectiva - con equidad y sustentabilidad. O para decirlo de otra manera, como lo dice Confucio: ¿qué importa el color del gato si caza ratones? Lo que no podemos perder es el objetivo general: una sociedad justa, próspera y sustentable. O sea, cazar ratones. Cuando se vea que en una esfera determinada un tipo de propiedad no fomenta ese objetivo general, hay que cambiarlo. Parafraseando a Fidel, hay que cambiar todo lo que deba ser cambiado.

Los vietnamitas, por ejemplo, descubrieron que el fomento de las telecomunicaciones se podía lograr mejor con varias empresas estatales compitiendo por el mercado. Lo aplicaron y el desarrollo de las telecomunicaciones vietnamitas, como en otros aspectos, es extraordinario. Hay empresas de telecomunicaciones vietnamitas ya compitiendo en el mercado internacional. 

A veces me parecen que directivos y periodistas repiten frase como "la sustitución de importaciones" o "los encadenamientos productivos" como meras consignas que muchos burócratas repiten porque son las "palabras de orden" o lo "políticamente correcto". Pero en ambos casos, las empresas - estatales, cooperativas o privadas - que participan en nuestra sociedad, tienen que tener en cuenta las condiciones del mercado mundial y local en que actúan para producir el mejor resultado, sustituir importaciones o exportar más para importar lo más barato o para encadenarse productivamente de una manera efectiva. Y eso es muy difícil, sino imposible hacerlo, con un sistema de planificación centralizado y rígido como el que hemos tenido hasta ahora.

Notas:

(1)  Lista de correo en que espontáneamente un grupo de cubanos intercambiamos sobre la realidad cubana. 

(2) Michael Vazquez montes de oca  dijo:

 Nyls y demás amigos y colegas

En épocas de confusión, cuando no se sabe que pasara con el mundo,  surgen también corrientes de pensamiento por así llamarlas de alguna  manera,  confusas. Así se dividió la socialdemocracia entre  bolcheviques, mencheviques, trotskistas, leninistas, estalinistas, maoistas, etc.

 En mi opinión, por lo menos en el caso de Cuba, lo esencial es quienes  quieren un Estado Socialista que como lo dice el termino le de  prevalencia a lo social y al hombre como centro como ente social y  quienes quieren, a veces de manera encubierta un retorno al  capitalismo. Mena, amigo de Ravsberg, del cual Fidel dijo que era  el mayor de los mentirosos, ya me lo demostró en el pasado, es uno de  ellos. Es malo confundir táctica con estrategia. Hay que estudiar bien

la NEP impulsada por Lenin y no perder el rumbo hacia la sociedad de los humildes, por los humildes y para los humildes.

 El tema da para mucho y no creo que con estos correos podamos  agotarlo. Solo recuerdo que quienes tienen el capital aspiran al poder  político. Por eso en Cuba el socialismo no puede renunciar a la  propiedad sobre los principales medios de producción.

 Mucho cuidado con las ideas restauradoras del capitalismo disfrazadas  de alguna modalidad de socialismo

 Un abrazo

 Michael Vázquez