Decir que el tema de aumentar el salario o esperar el aumento de la producción (productividad) es el cuento de quién va primero, el huevo o la gallina, es un sentido figurado que distorsiona el funcionamiento de la economía, tanto en sus métodos como en la aplicación de la ciencia económica es sí.
Los huevos en la evolución van después de la gallina, eso biólogos lo tienen bien claro. Organismos pluricelulares fueron envolviendo sus embriones en capsulas que los protegían de la agresividad del medio, hasta que evolucionaron a los huevos actuales que presentan todas las especies que utilizan esa forma de reproducción. Por lo tanto, sin gallina no hay huevo.
Hagamos la analogía en la evolución de la economía, primero surge el hombre que evoluciona de las especies que viven y trabajan en comunidad. El trabajo especializado, lo provee de medios en excedente, el excedente se intercambia, el intercambio aumenta a un nivel que es necesario que surja el dinero. Al unísono surge la apropiación del excedente y el dinero queda en manos de unos pocos y esos emplean para su beneficio a los desposeídos, que reciben dinero (salario) a cambio para poder adquirir los medios de subsistencia. 40 millones de años aproximadamente desde que surgió el hombre y hasta nuestros días el trabajo es lo primero, sin trabajo no hay salario. ¿Queda alguna duda?
Entonces respondamos la pregunta, qué tiene que aumentar primero, la producción para poder aumentar el salario. Pero como hacerlo en las condiciones actuales de la economía cubana, esa es otra cosa, pues mientras más gorda y de mejor raza sea la gallina, pone más y mejores huevos.
La empresa como célula básica de la economía, tienen todas las posibilidades y oportunidades para aumentar los salarios, siempre que conste con la autonomía y métodos propios para hacerlo.
Suponiendo que no existen las tan anunciadas trabas que todos mencionan y nadie enuncia. Lo primero que tiene que hacer una empresa que pretenda aumentar los salarios es definir su ciclo productivo o de servicios y con ello el capital de trabajo necesario, esto le dará la medida del nivel de salario que pude gastar, siempre que este nivel responda como estímulo a la producción y sustento eficiente (o no) del trabajador y su familia.
Si el ciclo productivo y el resultado del trabajo se comportan como está previsto, dará la medida de que el pago de salario se ha realizado con respaldo productivo. Por el contrario, se habrá malgastado el dinero y no será solo del salario que es una obligación para con todo el que trabajó, sino de todos los medios materiales y monetarios empleados.
Pero sigamos por la vía de la eficiencia, la empresa terminado su ciclo y midiendo sus utilidades dispondrá de recursos incrementados y podrá incrementar su nivel de actividad. En ese momento podrá rediseñar el presupuesto necesario (capital de trabajo) que contendrá un salario incrementado.
Otra forma de incrementar salarios es atentar contra los costos y disminuir utilidades, pero es tener un huevo sin gallinas y cuando se rompa no tendrá embrión.
Para la parte improductiva de la sociedad se podrá aumentar el salario si y solo si los ingresos al presupuesto de la parte productiva (impuestos sobre utilidades, de la seguridad social, por ingresos personales, etc.) aumenten por la eficiencia de las empresas, es decir que se producirá un aumento aparejado para toda la sociedad.
Ahora profundicemos en las condiciones que debe tener el salario para cumplir sus funciones ante cualquier miembro de la sociedad: debe ser capaz de garantizar la subsistencia del trabajador y su familia, pero no solo la subsistencia biológica, además debe ser capaz de proveerlo de medios para convivir en la sociedad acorde al desarrollo medio alcanzado por el hombre. Solo existirá diferencias por los asares de la vida y las capacidades individuales, a tal punto que el hombre se sienta realizado en su trabajo.
Todos estos aspectos muy resumidos son los que tienen que tener en cuenta el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social para fijar salarios mínimos teniendo en cuenta la canasta básica REAL, con todos los detalles de un consumo para que una persona se sienta digna.
El salario máximo lo tiene que definir la empresa por sus resultados como ya explicamos, pero en caso de tener malos resultados, debe desaparecer o ser absorbida por otra más eficiente, sin que ello deteriore la actividad que tenía quien la asume, de esta forma se garantiza el sostenimiento de la actividad económica reorganizada y se mantiene un proceso de actualización permanente. Un proceso de colaboración y asociación voluntaria entre empresas (no por dictamen) crea un ambiente de interés en mantener la unión y garantizar los salarios en una empresa eficiente.
Respetando estos principios con la legislación correspondiente tendremos la gallina para poner los huevos de oro.
Otra arista del tema salario en la actualidad es el clasificador de cargos técnicos y la escala salarial, en qué país del mundo existe y que resultados aporta, esa es la primera cuestión que nos aproximaría a una comparación en la política de salario establecida. Pero exista o no en otras partes del mundo es la negación del principio: a cada cual según su trabajo de cada cual según su capacidad. Realmente el clasificador de cargos es como si dijera: a todo ingeniero, licenciado, obrero, etc, que ocupe esta plaza le corresponde este salario independientemente del trabajo y lugar donde labore.
Por suerte con las nuevas resoluciones para el sector empresarial esto ha cambiado un poco, pero el concepto de salario básico sigue rigiéndose por la escala salarial.
Para ajustarnos a la ciencia económica el salario solo debe depender de las condiciones reales de la actividad que realiza y no debe estar sujeto a ningún clasificado que no sea el propio de la empresa ajustado a su estructura y contenido.
Por lo tanto, el MTSS como control de la política de empleo y salario debe captar de las empresas su estructura, cargos y salarios, velando porque se cumpla el Código del Trabajo y el salario mínimo. En el caso de los salarios máximos debe velar por los se alejen significativamente de los promedios, no para limitarlos, sino para analizar las causas que lo provocan.
Aprovecho la ocasión para exponer un enfoque distinto del concepto salario que hoy puede ser utópico y que considero es la expresión más adecuada para el socialismo. Dentro del sistema socialista la categoría salario no debe existir en el sector productivo, no debe considerarse un gasto. Porqué, volvamos a las analogías, el capitalista dueño de los medios de producción, sino tiene utilidad no gana nada, no tiene salario propio, pero si tiene utilidad, recibe su dinero que gastará en sus consumos personales y/o reinvertirá para obtener más. En el socialismo los trabajadores son los dueños, el estado pone en sus manos los medios de producción y ellos con su experiencia deben ser capaces de organizar los procesos para obtener resultados que los proveerán de utilidades propias, no de salario que es una categoría que identifica la explotación.
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