Ciego de Ávila, 13 ago (ACN) La minindustria de tostón vaporizado, de la Empresa Agropecuaria La Cuba, en Ciego de Ávila, afianza el encadenamiento productivo de esta entidad líder en el país, contribuye a la sustitución de importaciones y asegura otro alimento para el pueblo a escala local.
Ania Chengerai Montero, ingeniera química y especialista principal de la minindustria, informó a la Agencia Cubana de Noticias que diariamente elaboran entre una y 1.2 toneladas de tostón de plátano burro (rodaja del fruto machacada), las que antes de salir a sus destinos están tres días en proceso de congelación, a menos 18 grados, para conservarlas por espacio de un año.
Explicó que a pesar de la baja disponibilidad de combustible, la cercanía de los sembrados les facilita utilizar la tracción animal en el traslado de los racimos que luego, de forma manual, lavan, pelan y cortan en porciones para someterlos a vapor durante unos 20 o 25 minutos, en dependencia de la calidad del banano.
Después de cocinados los pequeños trozos de plátano se aplastan y por espacio de 10 a 15 minutos son colocados en la máquina refrigeradora (abatidor de temperatura) para disminuir rápidamente la temperatura, evitar así la aparición de bacterias que resisten el calor y propiciar un mejor envasado y calidad del producto final, precisó Chengerai Montero.
Especificó que el surtido, empaquetado en bolsas de nailon de medio, uno, dos y tres kilogramos, se destina, fundamentalmente, al mercado de frontera para sustituir importaciones, pero también llega a la población a través de los puntos y placitas que abastece Acopio.
Manifestó que esta es otra forma de darle valor agregado al plátano burro, pues la variedad macho dispone de una amplia demanda por los clientes.
El sector turístico del país solicita la gustada papa prefrita que elabora la Empresa Cítricos Ceballos, también avileña, pero cuando los niveles de abastecimiento de ese producto bajan, los pedidos de nuestros tostones suben y nos permite ingresarle a La Cuba más de cinco mil pesos convertibles en un año, detalló la ingeniera química.
Varias instalaciones hoteleras piden cantidades del alimento durante los 12 meses, muestra de que la calidad del tostón que elaboramos ha ido en ascenso, dijo.
Ciego de Ávila cuenta con más de 20 minindustrias, que en poco más de una década de creadas muestran sus éxitos productivos, las mejoras tecnológicas y diversificación de sus producciones a partir de frutas, viandas y vegetales.
En ese tiempo estas pequeñas industrias, atendidas fundamentalmente por las empresas Agroindustrial Ceballos, la agropecuaria La Cuba y la Integral Agropecuaria, produjeron más de siete mil toneladas de alimentos, lo cual ratifica su valía como alternativas viables para aprovechar las potencialidades productivas de cada lugar y aportarle a la economía nacional.
La Cuba también le da prioridad al plátano de la variedad Gran enano para comercializar este año su pulpa en el exterior a través del polo exportador avileño, señaló Carlos Blanco Sánchez, su director.
A pesar de las limitaciones con los fertilizantes químicos, encargados de aportar mayores rendimientos por hectáreas, seguimos plantando muchas más áreas para obtener grandes volúmenes de producciones, las cuales son siempre bien recibidas por el pueblo y ayudan en el balance nacional, añadió el directivo.
El plan de siembra este año es de mil 153 ha y ya vamos por mil 181 con 20 cultivos, pero podemos llegar a otras 600 hectáreas más, porque arrendamos ocho equipos de limpieza y roturación de tierras para dejarlas listas, puntualizó Blanco Sánchez.
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