Otras Paginas WEB

viernes, 2 de abril de 2021

FORMAR DOCTORES EN LAS EMPRESAS (II)

         PARA UN PROYECTO SIMILAR EN LAS CONDICIONES DE CUBA. POSIBILIDADES Y DESAFÍOS.

POR RICARDO J. MACHADO

 “Es necesario dar más participación a los expertos cada vez que se va a asumir una medida. Cuando se aborde una tarea de esta complejidad hay que traer a la discusión a los que más saben de cada uno de los temas…hay que consultar más el conocimiento de los expertos, cada vez tenemos que buscar más contradicción en el debate de los que vamos a diseñar.” (Reunión del Consejo de Ministros sobre resultados iniciales de la tarea ordenamiento, Granma 4 de marzo 2021.)

 Expertos y/o doctores.

 Esta expresión del presidente utilizando la palabra experto es muy oportuna. En efecto, existen personas que por su tenacidad y talento alcanzan un alto nivel de conocimiento en determinadas esferas de la actividad humana: son expertos aunque no hayan realizado un doctorado. De la misma manera en que pueden existir doctores que no sean expertos. 

Teniendo en cuenta esta realidad es que la ley de doctorados en Cuba ha incluido en los ejercicios de defensa de grado –además de los oponentes- un comité de expertos que no necesariamente poseen el título de doctor, pero sí un aval de trabajo sostenido durante largo periodo con resultados concretos. Naciones Unidas tiene una definición de experto que establece entre otros requisitos un mínimo de 10 años de actividad continua en determinada esfera del conocimiento. No considero necesario profundizar aquí este tema.

 PRINCIPALES RESULTADOS DE LAS EXPERIENCIAS DE ESPAÑA Y FRANCIA EN LA UTILIZACION DE DOCTORES EN LAS EMPRESAS.

 Sin duda es el epígrafe de mayor interés; encierra un gran valor para la práctica en la medida en que refleja las variables de medición de los logros alcanzados por ambos proyectos.

 Satisfacción de las empresas con la utilización de doctores.

-Son capaces de habituarse a nuevas tareas                                   81 %

-Muy satisfecho o bastante satisfecho                                             83%

-Carecían de habilidades profesionales para ciertas tareas                38%

 Sobre el último aspecto, se señala que fueron consolidando nuevas habilidades con el paso del tiempo.

 Valor de los doctores en las empresas

Respuesta

 SI

  NO

¿La percepción de que para la empresa era útil la incorporación de doctores aumentó?

 

56.6%

 

44.4%

¿La empresa desconocía en gran medida el potencial de los doctores para su actividad?

 

27.8%

 

72.2%

¿Para la empresa el valor de un doctor o un licenciado era similar?

 

23.4%

 

77.6%

 

 Satisfacción de las empresas con la calidad de la formación del doctor.

 Muy satisfecho              37.4%

Bastante satisfecho         45.1%

Total                                83.5%

 Cualidades más valoradas de los doctores según las empresas.

 1-Autonomía e iniciativa                                            53%

2-Conocimiento específico de su área                          51%

3-Orientación investigadora                                       36.9%

4-Capacidad de aprendizaje y orientación                   28.3%

5-Facilitador de contactos con la universidad

 y centros de investigación                                          14.6%

 

Conclusiones sobre el valor de los doctores en las empresas.

 Una de cada 4 empresas creó un depto. de I+D

Se impulsaron las tareas de I+D dentro de las empresas, sobre todo las investigaciones aplicadas y de desarrollo.

Las empresas pudieron observar o confirmar las capacidades y calidad de los doctores y contratar más.

Los doctores fueron un canal de comunicación con otras organizaciones.

 Trayectoria de los doctores durante y después del programa.

Doctores que permanecieron en las empresas                      59.3%

Doctores que continuaron en la empresa y después

se marcharon                                                                    27,.8%

Doctores que abandonaron la empresa durante

el programa o al finalizar este                                          12,9%

 

RESULTADOS DE LA EXPERIENCIA FRANCESA.

 En el caso de Francia no se dispone de tanta información como la experiencia española. Sin embargo, pueden percibirse diferencias de alguna significación entre ambas naciones, especialmente en la forma de abordar el problema.

 En opinión del autor el modelo francés es más acabado y maduro, en primer lugar por la duración del proyecto: 20 años, y los contratos eran por tres años.

 Otro aspecto diferenciador del proyecto francés es que considera como premisa el nivel de madurez de las empresas. Los franceses consideran como premisa del éxito la pertinencia de las empresas, su autenticidad. Según este concepto una empresa deficiente, con cuadros de bajo nivel profesional no garantiza la implementación exitosa del programa.

 En nuestra opinión el factor clave para obtener el éxito de un programa como éste es la capacidad de gestión, de las competencias directivas capaces de mantener una administración eficiente. Conozco personal extranjero de alto nivel profesional que ha trabajado en otros países, están asentados en Cuba hace varios años y me aseguran que el nivel de calidad de la gestión en nuestro país es uno de los más bajos de América Latina, incluso inferior a países como Honduras o Guatemala.

 No hablamos aquí del factor tecnológico ni cultural de los directivos sino de su capacidad para realizar una gestión administrativa profesional. Tenemos buenos directivos pero según mi experiencia de años de investigación en el sector empresarial no son muchos. El país no ha logrado consolidar un programa de formación de cuadros de estándar internacional. En casi todas nuestras universidades se dispone de maestrías en Administración de cierta calidad, pero no se considera obligatoria para los directivos del sistema empresarial.

 Los principales resultados de la experiencia francesa son los siguientes:

 La tesis doctoral y por tanto el contrato propuesto tiene que responder a la estrategia general de la empresa.

 El perfil de las empresas de mayor participación fueron: electrónica, servicios químico farmacéuticos, construcciones mecánicas.

 Áreas de las que provenían los doctores:

Física e Ingeniería                   (38%)

Biologia y Ciencias de la salud (18%)

Matemáticas                                (16%)

Informática                                  (13%)

 El 84% de las empresas participantes declaró haber obtenido beneficios directos del contrato, tanto en forma de resultados científicos como técnicos e industriales. El programa alcanzó altas tasas de éxito ya que en el 92% de los casos las tesis concluyeron en su totalidad. Al terminar el contrato CIFRE, el 67% de los doctores encontró trabajo en una empresa.

 El programa logró ampliamente su objetivo de aumentar el número de doctores en los sectores de la economía. El 80% de los participantes trabajó en empresas privadas y el 12% en el sector público.

 Diez años después del desarrollo del programa CIFRE, las encuestas sobre resultados demostraron que 6 de cada 10 casos tenían un trabajo de investigación. Sin embargo, diez años más tarde los doctores ocupaban muchos más cargos de dirección y gestión (se pasó de un 12% a un 30%). Los puestos de investigación se redujeron solo a 3 de cada 10.

 Otras ventajas del proyecto CIFRE.

 Los gestores del proyecto reconocen que las capacidades de los Recursos Humanos a veces no son fácilmente observables. Durante el tiempo de duración del contrato las empresas pudieron observar la productividad de cada individuo, y valorar al mismo tiempo el grado en que su trabajo aportó valores a la empresa.

 Por otra parte. esta experiencia permitió que las habilidades genéricas del doctor y su formación académica se pusieran a prueba en las condiciones de las industrias, muy diferentes a las de las entidades académicas o de investigación.

 El período de contrato permitió también que la empresa pudiera observar al individuo desarrollar habilidades de interacción con la organización, tales como trabajo en equipo, creatividad, pensamiento crítico, que son esenciales para el trabajo de investigación y de gestión.      

ESBOZO DE PROPUESTA DE EVENTUAL PROGRAMA CUBANO DE UTILIZACION DE DOCTORES EN LAS EMPRESAS.

 Las sugerencias que integran esta propuesta no pretenden abarcar la totalidad de un asunto tan complejo como éste. Estamos muy lejos de considerarla como algo acabado. Cuba tiene evidentes fortalezas para iniciar y consolidar exitosamente un programa de este tipo. Por ejemplo, gracias al proyecto de socialización y municipalización de la enseñanza universitaria desde principios de siglo, por iniciativa del comandante Fidel Castro, el país dispone de una amplia red de instituciones de enseñanza superior y centros de investigación que abarca casi todo el territorio. Puede afirmarse que prácticamente en cada provincia existe ya relativamente consolidado un potencial científico con investigadores de experiencia.

 La mayoría están vinculados a las 40 universidades y sedes que disponen de capacidades endógenas para afianzar este proyecto desde la base. Las sugerencias son las siguientes:

 Creación de un gabinete de pensamiento a nivel central integrado por representantes de universidades, centros de investigación y empresas. Su tarea inicial es realizar una valoración crítica actualizada sobre estas experiencias en países con experiencias significativas. Una tarea derivada es elaborar un programa de implementación bien fundamentado para evitar la improvisación, el apresuramiento y evitar la tentación de montar una fábrica de doctores en serie.

 Vincular el programa al proceso de formación de los Consejos Técnicos Asesores, en proceso de creación a partir del reciente decreto ley, poniendo atención detallada en su composición y métodos de trabajo para evitar lo sucedido con ellos en décadas pasadas.

Perfeccionar el programa actual de formación de doctores considerando nuevos objetivos relacionados con esta tarea.

Creación de empresas pilotos que reunan condiciones apropiadas en sectores priorizados a manera de experimentación.

Realizar reforzamiento de las áreas de I+D en los organismos centrales para garantizar autenticidad del banco de problemas de sus empresas.

Definir criterios sobre convenios a desarrollar entre empresa y universidades para impedir fuga o robo de cerebros, priorizando la utilización compartida del potencial científico.

Diseñar un programa de control para evitar seudo procesos de formación de doctores que pongan en riesgo su calidad profesional a causa de la precipitación.

 CONCLUSIONES.

 Proponemos las siguientes.

1-La introducción de doctores en el sistema empresarial no es un componente más en el proceso de transformación social que se desarrolla en el país a partir de la tarea Ordenamiento. Es un factor esencial y decisivo para obtener los resultados previstos para el plan hasta 2030.

 2-Se recomienda que el gobierno central otorgue prioridad a los programas elaborados a ese fin e implementar una campaña de concientización en todos los niveles de las entidades del estado, mediante uso de los medios de comunicación útiles para neutralizar posibles resistencias.

 3-Una premisa necesaria para el desarrollo esperado de este programa sería elaborar un plan de medidas para optimizar la estructura del movimiento científico cubano, en busca de un equilibrio más apropiado entre los sectores tecnológicos, económicos y de gestión sin cuya adecuada articulación no es viable la solución efectiva de los problemas.

 4-Prestar adecuada atención a los flujos de intercambio de especialistas de la academia con el sector industria, para evitar posible robo de talentos.

 5-Considerar como objeto primario de innovación las entidades estatales para convertirlas en factores de cambio; no son pocas las que carecen de los atributos indispensables como instrumentos para impulsar las transformaciones que el país necesita.

 6-Diseñar una base jurídica regulatoria del programa para que tenga la flexibilidad necesaria mediante la búsqueda de consenso entre las partes interesadas.

 Queremos terminar con la reflexión de uno de los más destacados científicos de la historia moderna de la ciencia, Louis Pasteur, que podemos considerar precursor de la idea central de este texto:

 “La suerte ayuda a los espíritus más preparados y solo las sociedades que realizan un elevado esfuerzo de investigación, que planifican adecuadamente su “industria del invento” son las que obtienen los descubrimientos claves y se desarrollan continuamente”.

                                                                             ……………………

 

1 comentario:

  1. Las necesidades de conocimiento en las empresas es imprescindible y la falta de estos una de las causas del desastre económico.
    Lo que no debe ocurrir es que sea una tarea a cumplir el tener doctores en la empresas. Pues ya pasó y pasa con los Máster, las empresas están llenas de máster. Todo el que termina el nivel superior corre a buscar el máster y muchas veces la especialización no es de interés de la empresa o la empresa no presta interés en aplicar esos conocimientos. En lo particular desarrolle un proyecto al igual de todos los que un día integramos un aula de diplomado, este proyecto debía ser ajustado y aprobado por la dirección de la empresa y después de terminado y avalado por el tribunal esos proyectos quedaron guardados en sus carpetas, en su gran mayoría sin motivar su aplicación práctica; puro formalismo.
    Temo que la masividad en este tema vuelva a generar gastos sin beneficio, a los doctores hay que incrementar el salario. Además ese grado científico nunca puede ser una meta fácil de obtener. En los años 80 conocí al mejor científico de Cuba y nunca pudo obtener el grado de doctor, quedó en candidato pues su tesis no pudo demostrarla después
    de años de investigación y pruebas de laboratorio. Ahora veo que todos los días aparece un nuevo doctor en ciencias. Habrá disminuido el nivel de exigencia para lograrlo?
    Rogelio Castro Muñiz

    ResponderEliminar