La Habana, 12 abr (ACN) La fabricación de piezas de repuesto y el alargamiento de la vida útil de equipos en fábricas e industrias cubanas por parte de los miembros de la Asociación de Innovadores y Racionalizadores (Anir), permitió que en 2020 esta entidad ahorrara al país más de 400 millones de pesos.
El presidente de la Anir, Alfredo Machado López, explicó al diario Granma que esta cifra se calcula a partir de los más de ocho millones de pesos ingresados el pasado año por la Asociación, por concepto del dos por ciento del efecto económico de las innovaciones y racionalizaciones aplicadas.
Según el directivo, las provincias de La Habana, Villa Clara y Santiago de Cuba son las más destacadas en esta labor.
Enfatizó que en 2020 la respuesta de los asociados fue masiva, pues se incorporaron 199 entidades a las mil 630 que en 2019 registraron beneficios económicos por concepto de innovaciones.
Por sectores, sobresalieron los de la construcción, energía y minas, la agricultura, la industria alimentaria y la pesca, así como las entidades del Ministerio de Industrias, precisó Machado López.
Subrayó que las esferas de la ciencia y de la salud se distinguieron extraordinariamente por su desempeño, integrándose a otros organismos en la lucha contra la Covid-19.
El presidente de la Anir resaltó que los más de 200 mil miembros de la Asociación convierten el talento en el recurso económico que el país está limitado de adquirir, debido al bloqueo económico, comercial y financiero del Gobierno de Estados Unidos.
Los afiliados permiten que se mantengan funcionando maquinarias y medios que tienen un alto grado de obsolescencia tecnológica, lo cual ratifica la importancia de estos trabajadores en la búsqueda de la eficiencia en los procesos productivos y de servicios de nuestra economía, concluyó.
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