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jueves, 30 de junio de 2022

Cuba enfrenta una recuperación lenta con elevada inflación



1. SITUACIÓN ECONÓMICA

ACTIVIDAD ECONÓMICA

La economía cubana continúa mostrando señales de debilidad extrema, asociada a un entorno externo muy adverso, que se ha complicado aun más a partir de la invasión a Ucrania por parte de Rusia.


En 2021, el PIB creció a una tasa de 0,5% de acuerdo con estimaciones de la CEPAL (Economist Intelligence Unit calcula un decrecimiento de 0,1%). Las autoridades cubanas indicaron que la cifra sería de un 2%, pero no han ofrecido datos definitivos a mediados de 2022. A juzgar por las continuas dificultades en el arranque de 2022, y el desempeño del turismo internacional en 2021, es más probable que la cifra esté muy cercana a cero. Adicionalmente, las exportaciones e importaciones continuaron descendiendo, por lo que no se obtuvo ninguna compensación del decisivo sector externo.

La evolución de la economía en 2022 exhibe un panorama mixto, con un balance que se inclina hacia el lado negativo.

La zafra azucarera en 2022 es la peor en más de un siglo, con unas 431 mil toneladas. Habría que remontarse al siglo XIX para encontrar volúmenes de producción tan bajos. El sector viene acusando un declive sostenido desde 1990. Sin los buenos precios y los créditos que ofrecía la Unión Soviética, la producción comenzó a descender. A su vez, la rama sufre las insuficiencias del modelo agrícola cubano y la falta de inversiones para modernizar las instalaciones. Una parte notable de los ingresos del sector durante la década de los noventa se dedicó a financiar la inversión en otras ramas como el turismo y la bio-farmacéutica, mientras que tampoco se apostó por la inversión extranjera. Otrora columna vertebral de la economía, Cuba puede convertirse en un importador neto de azúcar en 2022.

La escasez de datos impide hace un análisis exhaustivo de la evolución de los distintos sectores. No obstante, se observan cambios en el desempeño de algunas actividades importantes. En relación con el turismo internacional, el número de visitantes se multiplicó por 6,4 hasta el mes de mayo (565 mil), aunque partiendo de una base muy baja.

Sin embargo, las cifras representan un 46% de lo que sería necesario para cumplir el pronóstico del gobierno que aspira a recibir unos 2,5 millones de visitantes. A este ritmo, se llegaría a una cifra entre 1,15-1,3 millones de arribos. Asimismo, entre enero y marzo, las pernoctaciones solo aumentan unas 4 veces, y este indicador es, en definitiva, más relevante para estimar el impacto en la actividad económica. Es una mejoría respecto a 2021, pero distante de las previsiones oficiales, y de los máximos alcanzados entre 2015-2019.

La fabricación de níquel aumenta un 5% hasta marzo, aunque esto refleja específicamente la situación particular del mismo período del año anterior (se refiere a la fábrica Pedro Sotto Alba). Lo verdaderamente relevante en la industria niquelífera es el ascenso continuo de los precios durante 2021, y la extensión de esta trayectoria durante 2022. Sherritt, el mayor productor de níquel en Cuba continúa con sus planes de inversión para incrementar la producción en Moa entre 15-20% hacia 2024.

Con respecto a las inversiones, en el primer trimestre el 35% se destinó a las actividades inmobiliarias y de alquiler, lo que, si bien es alto, representa una disminución de diez puntos respecto a 2021. Por otro lado, el 52% de ellas está concentrada en La Habana (primer trimestre), lo que también es una disminución en relación con los valores del período anterior. Queda por ver si estas proporciones se mantendrán en lo que resta de año.

No obstante, ante la realidad económica y social que vive el país, corresponde cuestionar la racionalidad del programa de construcción de hoteles de alto estándar. Es bien conocido que la mayor parte de esos recursos son de origen doméstico. Para 2022, las autoridades prevén la construcción de más de 4000 habitaciones adicionales, para llegar a un total de casi 85 mil (según un reporte de la prensa oficial, pero otras fuentes como Fitch sitúan el número de habitaciones para 2022 en 79 mil). Sin embargo, el nivel de ocupación en 2021 fue de 11,9%, incluyendo al turismo nacional.

A pesar de la crisis económica, y la contracción del PIB en 2019 y 2020 (pendientes los resultados definitivos de 2021), el volumen de inversiones aumentó un 40%. La inversión inmobiliaria asociada a la actividad turística acaparó la mayor parte de ese crecimiento. Invertir es clave para mejorar las perspectivas de crecimiento futuro. Sin embargo, dos cuestiones saltan a la vista en este caso.

Tradicionalmente el componente más volátil del PIB, la inversión suele exhibir un comportamiento procíclico. En parte esto se debe a que, en medio de los rigores de una recesión, se tiende a proteger el consumo, porque incide directamente en el nivel de vida de los ciudadanos. Como consecuencia, el consumo real ha retrocedido a niveles de 2014. Por otro lado, se puede polemizar sobre los destinos de los ascendentes niveles de inversión total. Esencialmente, los crecimientos se verifican en la infraestructura turística. En contraposición, lo dedicado al conjunto "electricidad, gas y agua” solo aumentó un 20% desde 2016.

Si bien el turismo es un sector clave de la economía cubana, desde mucho antes de la pandemia su eficiencia estaba muy por debajo de sus competidores en el área. La tasa media de ocupación ha venido descendiendo sostenidamente desde 2016, alcanzando niveles críticos en 2020 y 2021. Cuba es uno de los países más retrasados en la recuperación turística dentro del Caribe.

El transporte refleja una situación mixta. Aunque el número de pasajeros transportados se eleva respecto a 2021, los niveles de servicio continúan siendo muy bajos, y distantes de cubrir la demanda. Diversos reportes de prensa indican que la baja disponibilidad técnica de los ómnibus (debido a la escasez de piezas de repuesto) y la escasez de combustible han impactado negativamente sobre esta actividad durante 2022. Hay que tener en cuenta que la brecha de oferta se hace más visible en el período debido al levantamiento gradual de las restricciones asociadas al control de la pandemia de la COVID-19. Por otro lado, la carga transportada decrece en el primer trimestre, lo que no es una buena señal de la marcha de la economía. En gran medida, este comportamiento obedece a la producción de azúcar de caña, que descendió significativamente. Este sector es uno de los clientes principales del transporte ferroviario.

SECTOR EXTERIOR

El comercio exterior ha sido uno de los sectores que manifiesta con mayor claridad la profundidad de la crisis económica, y la lenta recuperación de la actividad productiva. Las propias autoridades cubanas reconocieron en mayo que los ingresos externos se han comportado por debajo de los planes, mientras que los precios de varios productos de importación han crecido más allá de lo pronosticado.

Las expectativas del gobierno respecto al comercio exterior eran ya relativamente modestas, tanto en las exportaciones (+9,8), como en las compras internacionales (+2,8). Y estas previsiones se hicieron sobre una base muy baja, ya que ambos flujos han venido decreciendo en los últimos 3 años. En el caso de las importaciones, la contracción comenzó en 2016. La dinámica actual es perversa. La caída de las ventas externas priva a la economía de las divisas necesarias para pagar la factura internacional, mientras que el descenso de las importaciones repercute negativamente en la actividad productiva, y en el consumo de los hogares.

Se pueden identificar cuatro eventos que van a influir en las perspectivas del sector externo en 2022, y que tienen el potencial de determinar la velocidad de la recuperación. En primer lugar, la invasión de Ucrania por parte de Rusia ha supuesto un movimiento sísmico en dos mercados esenciales para Cuba: alimentos y energía. En ambos casos, los incrementos ocurridos significan gastos superiores por unidad adquirida, lo que, en medio de las restricciones de liquidez supone que probablemente se compren menores cantidades, es decir, una reducción adicional de la oferta para el mercado interno. Asimismo, el turismo ruso se ha evaporado, y era el mercado que había exhibido el comportamiento más resiliente durante la pandemia.

En segundo lugar, las primeras medidas de la administración del presidente Biden respecto a Cuba, crean un escenario un tanto más favorable para la Isla. No tienen un alcance ni siquiera cercano a las de Obama en su momento, pero pueden contribuir a la recuperación de las remesas, y con el aumento de los vuelos, la paquetería que estuvo ausente durante la pandemia y que tanta importancia tiene en medio de la aguda escasez que sufre el país.

En tercer lugar, la producción de petróleo de Venezuela ha comenzado a crecer, desde niveles muy bajos. De acuerdo con las estimaciones de la OPEP, en el primer trimestre de 2022, la extracción llegó a unos 684 mbd de crudo, un 23% superior a 2021. En mayo, la producción se estimó en 717 mbd. El conflicto en Ucrania ha variado el tablero geopolítico. Hay crecientes indicios de que el gobierno norteamericano está considerando un relajamiento limitado de las sanciones a ese país para propiciar el incremento de la oferta en el mercado internacional. Dada la centralidad del petróleo para ese país, una mejoría en la economía venezolana es una buena noticia para Cuba. Asimismo, no solo se trata de su sector energético, de la mano de medidas pragmáticas, otros indicadores comienzan a mejorar. Varias fuentes pronostican crecimiento económico y menor inflación para 2022 y los años venideros.

Por último, al ascenso de nuevos gobiernos de izquierda en Perú, Honduras, Colombia, Chile, y posiblemente Brasil dibujan un escenario latinoamericano más favorable. Si se concreta la vuelta del Partido de los Trabajadores (PT) al poder, la izquierda gobernaría en las seis principales economías de la región. La visita del presidente mexicano a Cuba en mayo arrojó un acuerdo modesto para la contratación de médicos. Por su parte, el expresidente Lula ha indicado que planea retomar el programa Más Médicos. No resulta claro o definitivo si Cuba pudiera participar, y en qué condiciones.

Los ingresos por turismo deben crecer en 2022, pero a niveles muy distantes de los máximos conseguidos en entre 2016-2018. La zafra azucarera fue la peor en siglo y medio, lo que puede convertir a la Isla en importador neto de azúcar, por lo que cualquier aumento de precios es más un problema que una buena noticia. Las propias autoridades han aceptado que la previsión en el futuro inmediato es producir suficiente para cubrir el consumo doméstico, incluido el industrial.

El comportamiento de los precios relevantes deja un saldo mixto (Tabla 3). Por una parte, el incremento observado en el níquel contribuye a mejorar los ingresos, aunque las limitaciones en la oferta impiden capitalizar complemente la coyuntura favorable. En 2022, la producción en la planta propiedad conjunta de capital canadiense se espera consiga niveles similares a períodos anteriores, dado que ya funciona a plena capacidad. Cualquier aumento llegará de 2022 en adelante, de acuerdo con los planes de expansión ya comentados.

Nota HHC. La tabla # 2 no aparece en el original


POLÍTICA MONETARIA

La elevada inflación es el elemento distintivo del momento actual que atraviesa la economía cubana. Si bien entre los años 1996-2019, el índice de precio del consumidor (IPC) creció a un ritmo promedio anual de 0,9%; en el año 2020 su crecimiento fue de 18,5% (ONEI, 2021: Tabla 5.1) seguido de 77% en 2021 (ONEI, 2022: Tabla 1).1

Esta tendencia se atribuye a varios factores. Primero, hay una parte de la inflación que es importada, consecuencia del complejo escenario internacional que dejó la pandemia, y que agravó la invasión rusa en Ucrania.

Segundo, a desequilibrios macroeconómicos domésticos que se acumularon con anterioridad a la irrupción de la Covid-19 en un escenario de desaceleración del crecimiento económico. Este último pasó de promediar 2,8% entre los años 2011-2015, a 1,1% entre los años 2016-2019 (ONEI, 2022a: Tabla 5.5).

En el mismo período el déficit fiscal aumentó significativamente promediando 7,4 del PIB, y también lo hizo el dinero en circulación. Lo anterior unido a una caída en los ingresos externos,2 provocó fuertes tensiones sobre la balanza de pagos con al menos dos canales de impacto sobre la inflación. Por una parte, a través de restringir las importaciones, y, por lo tanto, la oferta agregada. Por otra,presionando a una devaluación del tipo de cambio en el mercado (paralelo) de divisas. El proceso de dolarización parcial que se inició a fines del año 2019 fue una expresión de los desequilibrios macroeconómicos descritos.

La tercera causa de la inflación actual observada se gestó durante la pandemia de la Covid-19, la cual agravó drásticamente la ya delicada situación de la economía cubana. Por una parte, a través de la profundización de los problemas de oferta, y por otra, introduciendo más desequilibrios monetarios a través del gasto público en un contexto de espacio fiscal nulo.

La cuarta razón fue el Ordenamiento Monetario. Éste creó un entorno favorable para la inflación tanto por el lado de la oferta como por el lado de la demanda.

El Ordenamiento supuso la eliminación casi por completo del tradicional sistema de transferencias de la economía basado en subsidios a precios. Para compensar a los trabajadores se diseñó una reforma salarial que multiplicó por cerca de 4 veces el gasto de salario de las empresas. La considerable presión sobre los costes ejercida por el efecto conjunto de ambos canales (devaluación y reforma salarial) - en un ambiente de muy baja competencia empresarial- significó un traspaso de gran escala de costes a precios.

Este incremento de costos y precios en el sistema estatal tuvo repercusiones sobre los precios relativos del resto de los agentes, en particular, del sector privado.

Se activaron, al menos, tres canales de influencia.

Primero, a través de la tasa de cambio informal que reaccionó no solo al contexto de escasez agravado por la pandemia y a la crisis de balanza de pagos antes mencionada; sino también al incremento de liquidez y consecuente demanda de bienes y servicios que supuso la reforma salarial.

Segundo, a través del encarecimiento relativo del empleo en el sector estatal. El incremento de salarios en este último presionó al alza el salario del sector privado el cual necesitó compensar a sus trabajadores debido al incremento general del costo de la vida, y mejores compensaciones en el sector estatal.

Tercero, a través del sistema de suministros y otros costes de insumos productivos. Los costes del sector privado han estado siempre indexados a los precios del sector estatal, bien en el segmento formal (costo de la energía, agua, transporte, por ejemplo) o bien en el segmento informal (a través del mercado negro). El diseño original de El Ordenamiento Monetario presuponía, únicamente alinear el tipo de cambio oficial con el de las casas de cambio (CADECA), y que la devaluación no superara al tipo de cambio (fijo) en este último. En otras palabras, no se esperaba un efecto directo por el canal del tipo de cambio. Sin embargo, sí se esperaba un efecto indirecto, por el canal de la cadena de suministros, que incidiría sobre la competitividad del sector privado.

El Ordenamiento también influyó sobre la inflación desde el lado de la demanda. El canal más importante estuvo en la reforma salarial. Una parte de la reforma sería financiada con los efectos distributivos que suponía la eliminación del sistema de transferencias. Sin embargo, esto no funcionó, primero, por la caída generalizada de la oferta agregada debido a la pandemia. Y segundo, porque los efectos distributivos (que hubiesen sido efectos reales) se fueron atenuando en el tiempo producto de la propia inflación. La evidencia más clara al respecto está en la pérdida del atractivo que han ido experimentando los salarios del sector estatal. Si bien, al inicio, el interés por el empleo estatal aumentó considerablemente, en el mediano plazo el equilibrio se ha desplazado a una situación “similar” a la inicial.

Todos los factores analizados con anterioridad explican en su conjunto el porqué de la inflación actual en Cuba.

2. PERSPECTIVA  ECONÓMICA

Como se ha explicado a lo largo del informe, Cuba presenta una situación económica compleja. Los problemas estructurales tradicionales, en particular, la crónica falta de competitividad, eficiencia y productividad de su tejido empresarial; se han visto agravados por el incierto panorama internacional post- pandémico, y por el erróneo manejo macroeconómico que se implementó en la última década cuyo punto culminante estuvo en El Ordenamiento Monetario.

El gráfico 1 permite poner en contexto las perspectivas futuras de recuperación de la economía cubana.



Hay dos mensajes claves que se pueden extraer de este gráfico.

Primero, como se observa la Tasa de Crecimiento de Largo Plazo (línea discontinua) se mantuvo decreciendo durante toda la década pasada, a pesar de que desde el año 2011 se han venido aplicando un conjunto significativo de reformas estructurales en los marcos del proceso de Actualización del Modelo Económico cubano (conocido como Los Lineamientos). Pero resulta mucho más llamativo que esta dinámica de decrecimiento se mantuvo incluso durante el período 2015-2017 cuando hubo un proceso de mejora en las relaciones bilaterales con los EE. UU., bajo la administración de Barack Obama.

Este hecho sostiene la hipótesis de que se necesitarán transformaciones estructurales más profundas que las aplicadas hasta el momento, si se aspira a cambiar la tendencia del crecimiento en el país durante la próxima década.

El segundo mensaje tiene que ver con la recuperación de la economía tras la crisis creada por la Covid-19, que supuso una caída del 11% del PIB real en el año 2020. Se dibujaron tres escenarios de recuperación. Uno desfavorable, en el cual la economía se recupera al 1% (promedio anual), uno intermedio en el que la economía se recupera al 3%; y otro favorable en el que la economía se recupera al 5%.

En el escenario desfavorable, la economía necesita más de una década para recuperar los niveles PIB real del año 2019. Este escenario no es el más probable pero tampoco es desestimable atendiendo tanto a la profundidad de la crisis -en particular a los desequilibrios macroeconómicos observados- como al lento proceso de implementación de reformas estructurales más profundas.

La recuperación será más rápida, aunque aún larga en el escenario intermedio; pero resulta llamativo que incluso en este escenario se requerirá de mayor efectividad de las políticas aplicadas. El crecimiento de 3% asumido es mayor que el crecimiento medio de la década pasada.

Sólo en el escenario favorable la economía se recupera en corto tiempo y a una calidad superior. Hoy en día es un escenario improbable, porque supondría implementar reformas que van más allá de la voluntad actual mostrada por los hacedores de política; además de un entorno internacional más favorable, tanto económico como político. En cualquier caso, hay un elemento que eleva la probabilidad de ocurrencia de este escenario, a saber, la propia dimensión que va 
tomando la crisis económica actual, cuyas consecuencias sociales y políticas no son sostenibles en el largo plazo.

Llegado a este punto una pregunta clave es: ¿qué reservas tiene la economía cubana para manejar una salida (rápida) de la actual crisis económica?

Hay un conjunto de reformas pendientes que tendrán que ser abordadas más temprano que tarde. Por una parte, es vital iniciar de inmediato un proceso de saneamiento de las finanzas internas del país. Controlar la inflación a través de controlar fuentes de emisión monetaria empezando por el control el déficit fiscal que se ubicó en un entorno de 18% del PIB en el año 2021.

Sin embargo, hoy Cuba tiene una reserva que podría ayudar al crecimiento económico en el corto plazo, a saber, la reducción de sus elevados niveles de mala asignación de recursos. Por mal- asignación se entiende una situación en la cual los factores de producción (trabajo, capital, insumos intermedios) no son distribuidos de forma óptima entre productores heterogéneos.

Algunas de las reformas pendientes son: i) ampliar la lista de actividades autorizadas a convertirse en PYMES, en particular, ii) incluir al comercio mayorista y minorista, y iii) introducir un sistema dual de precios similar al aplicado en China a inicios de su proceso de reformas.

Las autoridades cubanas han establecido una meta de incremento del PIB de un 4% para 2022. Sin embargo, el entorno internacional se ha vuelto más desafiante en lo inmediato, principalmente a partir de la invasión rusa a Ucrania. Respecto al comportamiento de la actividad productiva, el desempeño de algunos sectores claves como el turismo internacional, la industria azucarera, y otros renglones agrícolas (la producción de papa solo llegó a un 77% de lo planificado). Asimismo, teniendo en cuenta las tensiones en el comercio exterior y la profundización de los problemas de la generación eléctrica, la producción industrial y otros sectores de los servicios productivos se mantendrán deprimidos.

Por sus repercusiones económicas, pero también políticas, el regreso de los apagones significa otra escalada en las condiciones socioeconómicas del país. El mal estado técnico de las plantas (debido al incumplimiento de los ciclos de mantenimiento), su creciente deterioro a partir de la utilización casi exclusiva de crudo cubano (muy pesado y corrosivo), y la escasez de combustible (particularmente diesel y fuel oil - más caros- para operar las baterías de generación distribuida) han tensado aún más el complejo panorama doméstico.

El gobierno enfrenta un dilema. Un mayor racionamiento de la energía en el sector público descarrila la incipiente recuperación económica. Por otro lado, mayores interrupciones al sector residencial pueden desencadenar mayores cuotas de descontento social y protestas. Estas últimas se han venido produciendo a menor escala en los últimos meses.

Los molestos apagones a las puertas del período más caluroso del largo verano cubano solo pueden causar un aumento del malestar. Lamentablemente, no hay solución rápida a este problema, descontando el envío de cantidades sustanciales de combustible de parte de aliados como Rusia o Venezuela, junto a un programa de reparaciones intensivo de las termoeléctricas.

En estas condiciones, nuestro equipo anticipa un crecimiento muy por debajo del pronóstico oficial.

3. SITUACIÓN POLITICA

El contexto interno sigue siendo muy desafiante para el gobierno. La crisis económica, la inflación, la lenta recuperación de sectores claves como el turismo, y el empeoramiento de la situación energética suponen retos enormes para un gobierno que enfrenta una tormenta casi perfecta, con un sector público desgastado, y sin un plan claro para sacar al país del abismo en que se encuentra.

En los últimos años, la ciudadanía se ha encargado de expresar públicamente sus descontento y hastío con la situación imperante, y se ha mostrado menos complaciente y tolerante con las explicaciones ofrecidas por las autoridades. El cénit se alcanzó el 11 de julio de 2021. Pero en 2022 han continuado las muestras de desacuerdo con la política oficial.

En relación con la reforma económica, no se anticipan iniciativas de peso para el resto del año. De acuerdo con el cronograma legislativo, en julio de 2022 la Asamblea Nacional debe discutir y aprobar una nueva Ley Tributaria (la tercera desde la reintroducción de los tributos en 1994); y en diciembre debería adoptar una Ley de Empresas. El contenido de ambas leyes no ha sido divulgado, pero ambas pueden tener importantes implicaciones para la conformación del nuevo modelo económico. Sin embargo, por sí solas, no representan una contribución destacada al manejo de la aguda crisis que azota a la Isla.

Por su repercusión social, un evento de gran trascendencia es la votación en referendo del nuevo Código de la Familia, que propone una restructuración profunda de este ámbito en la sociedad cubana, incluyendo transformaciones en la relación entre padres e hijos, la consagración del matrimonio entre parejas del mismo sexo, la expansión de los derechos de adopción, entre otros.

Esta legislación ha generado acalorados debates en el país, y varias de sus propuestas han enfrentado la oposición pública desde sectores variados de la sociedad. Recientemente, el gobierno ha adoptado la revisión no. 25 del documento, lo que denota el accidentado camino para obtener un borrador final, y su eventual aprobación.

Las opiniones vertidas en este informe son responsabilidad del equipo técnico que elabora el informe y pueden no reflejar el criterio individual de las instituciones que integran el CESLA.


1 Economic Inteligence Unit (EIU) estima que el crecimiento interanual de la inflación en el año 2021 fue de 255%.

2 al tiempo que las exportaciones de bienes y servicios a precios corrientes cayeron en 8% en igual período (ONEI, 2022a: Tabla 5.2).


La inflación como juego de poder político salió mal

Jun 22, 2022 YANIS VAROUFAKIS



ATENAS – El juego de acusaciones sobre el alza de los precios está en marcha. ¿Fue la inyección de demasiado dinero de los bancos centrales durante demasiado tiempo lo que provocó que la inflación se disparara? ¿Fue China, donde la mayor parte de la producción física se había trasladado antes de que la pandemia confinara al país y alterara las cadenas de suministro globales? ¿Fue Rusia, cuya invasión de Ucrania eliminó un porcentaje importante del suministro global de gas, petróleo, granos y fertilizantes? ¿Fue algún giro subrepticio de la austeridad pre-pandemia a una generosidad fiscal sin límites?

La respuesta es una que quienes realizan pruebas nunca encuentran: todo lo de arriba o nada de lo de arriba.

Las crisis económicas cruciales frecuentemente suscitan múltiples explicaciones que son todas correctas pero que se olvidan de lo central. Cuando Wall Street colapsó en 2008, generando la Gran Recesión global, se ofrecieron varias explicaciones: una captura regulatoria de parte de financistas que habían reemplazado a los industriales en el orden jerárquico capitalista; una proclividad cultural hacia las finanzas riesgosas; una incapacidad de políticos y economistas para distinguir entre un nuevo paradigma y una burbuja gigantesca; y otras teorías también. Todas eran válidas, pero ninguna llegaba al meollo de la cuestión.

Lo mismo es válido hoy. Los monetaristas del “se los dijimos”, que han venido prediciendo una alta inflación desde que los bancos centrales expandieron masivamente sus balances en 2008, me recuerdan la dicha que sintieron ese año los izquierdistas (como yo) que consistentemente “predicen” la inminente defunción del capitalismo –parecido a un reloj que se paró y que marca la hora correcta dos veces al día-. Efectivamente, al crear enormes sobregiros para los banqueros con la falsa esperanza de que el dinero se derramara a la economía real, los bancos centrales causaron una inflación épica de los precios de los activos (apogeo del mercado bursátil e inmobiliario, la locura de las criptomonedas y más).

Pero la historia monetarista no puede explicar por qué los principales bancos centrales entre 2009 y 2020 no lograron ni siquiera impulsar la cantidad de dinero circulante en la economía real, mucho menos hacer subir la inflación de los precios al consumidor a su meta del 2%. Alguna otra cosa debe de haber desatado la inflación.

La interrupción de las cadenas de suministro centradas en China claramente jugó un papel importante, como lo hizo la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Pero ningún factor explica el abrupto “cambio de régimen” del capitalismo occidental de una deflación prevaleciente a lo contrario: un aumento simultáneo de todos los precios. Esto exigiría que la inflación salarial superara la inflación de precios, causando así una espiral que se perpetúa a sí misma, con aumentos de salarios que se traducen en mayores alzas de los precios que, a su vez, hacen que los salarios vuelvan a aumentar, ad infinitum. Recién entonces sería razonable que los banqueros centrales les exigieran a los trabajadores que “hicieran algo por el equipo” y se abstuvieran de pedir mayores acuerdos salariales.

Pero, hoy, exigir que los trabajadores renuncien a alzas salariales es absurdo. Toda la evidencia sugiere que, a diferencia de los años 1970, los salarios están aumentando mucho más lentamente que los precios y, sin embargo, el aumento de los precios no sólo continúa sino que se acelera.

¿Qué es lo que realmente está pasando entonces? Mi respuesta: un juego de poder de medio siglo, liderado por las corporaciones, Wall Street, los gobiernos y los bancos centrales, ha salido muy mal. Como resultado de ello, las autoridades de Occidente hoy enfrentan una opción imposible: provocar una cascada de quiebras de conglomerados y hasta de estados o permitir que la inflación se descontrole.

Durante 50 años, la economía de Estados Unidos ha sostenido las exportaciones netas de Europa, Japón, Corea del Sur, luego China y otras economías emergentes, mientras que la mayor parte de esas ganancias de extranjeros se encaminaba raudamente a Wall Street en busca de mayores retornos. A consecuencia de este tsunami de capital rumbo a Estados Unidos, los financistas construían pirámides de dinero privado (como opciones y derivados) para financiar a las corporaciones que construían un laberinto global de puertos, embarcaciones, depósitos, plataformas de almacenaje y transporte terrestre y ferroviario. Cuando la crisis de 2008 derribó estas pirámides, se puso en peligro todo el laberinto financiarizado de las cadenas de suministro justo a tiempo globales.

Para salvar no sólo a los banqueros sino también al propio laberinto, los banqueros centrales intervinieron para reemplazar las pirámides de los financistas con dinero público. Mientras tanto, los gobiernos recortaban el gasto público, los empleos y los servicios –nada más ni nada menos que socialismo pródigo para el capital y austeridad dura para el trabajo-. Los salarios se achicaron y los precios y las ganancias se estancaron, pero el precio de los activos comprados por los ricos (y así su patrimonio) se dispararon. En consecuencia, la inversión (en relación al efectivo disponible) cayó a un mínimo histórico, la capacidad se encogió, el poder del mercado se disparó y los capitalistas se volvieron más ricos y al mismo tiempo más dependientes que nunca del dinero de los bancos centrales.

Fue un nuevo juego de poder. La lucha tradicional entre el capital y el trabajo para aumentar sus respectivos porcentajes del ingreso total a través de márgenes de beneficio y aumentos salariales continuó, pero dejó de ser la fuente de la mayor parte de la riqueza nueva. Después de 2008, la austeridad universal produjo baja inversión (demanda de dinero) que, combinada con una gigantesca liquidez de los bancos centrales (oferta de dinero), mantuvo el precio del dinero (tasas de interés) cerca de cero. En un contexto de capacidad productiva (inclusive nueva vivienda) en caída, escasez de buenos empleos y salarios estancados, la riqueza triunfó en los mercados de capital y de bienes raíces, que se habían desacoplado de la economía real.

Luego vino la pandemia, que cambió algo muy importante: los gobiernos occidentales se vieron obligados a canalizar algunos de los nuevos ríos de dinero de los bancos centrales a las masas confinadas dentro de economías que, a lo largo de décadas, habían agotado su capacidad de producir cosas y ahora enfrentaban cadenas de suministro alteradas. Cuando las multitudes confinadas empezaron a gastar parte del dinero de sus cesantías en importaciones escasas, los precios empezaron a subir. Las corporaciones con grandes patrimonios en acciones respondieron explotando su inmenso poder de mercado (producto de su capacidad productiva reducida) para hacer subir los precios por las nubes.

Después de dos décadas de una bonanza sustentada por los bancos centrales de alzas de los precios de los activos y de una deuda corporativa creciente, un poco de inflación de los precios fue todo lo que hizo falta para poner fin al juego de poder que moldeó al mundo post-2008 a imagen y semejanza de una clase gobernante resucitada. ¿Qué es lo que pasará ahora entonces?

Probablemente nada bueno. Para estabilizar la economía, las autoridades primero necesitan poner fin al poder exorbitante conferido a unos pocos por un proceso político de patrimonio en acciones y creación de deuda barata. Pero esos pocos no renunciarán a su poder sin dar batalla, aunque esto implique que se los consuman las llamas, arrastrando a la sociedad con ellos.


YANIS VAROUFAKIS, a former finance minister of Greece, is leader of the MeRA25 party and Professor of Economics at the University of Athens.

miércoles, 29 de junio de 2022

EL BLOQUEO, OBSTINACIÓN IMPERIAL (2DA. PARTE).

 Por: Julio Sergio Alcorta Fernández.


En la primera parte  de un documento que me fue posible redactar y distribuir recientemente, con ese mismo título: “El Bloqueo, obstinación imperial”, pude exponer la insistencia de descubrir los intersticios del llamado BLOQUEO, que el imperio nos ha impuesto desde hace 60 años, acudiendo a su prepotencia, hegemonismo y criminal desvergonzada postura, ante un pequeño país caribeño, a 90 millas de sus costas. Cínicamente lo llaman EMBARGO.

Lo iniciamos en todo el desplegar intervencionista, terrorista, violento y criminal de la corta presidencia del General D.Eisenhower, y su sucesor John F. Kennedy, desde 1959 a 1963.

Precisamente en este periodo de tiempo fue en el que se crearon todas las condiciones que condujeron con artimaña y desfachatez, a engendrar esa locura que invaden la conciencia y son vividos como exagerados o sin sentido, a veces como repugnantes

 Por lo tanto, ahora debemos continuar mostrando los testimonios y las evidencias de otros 9 de los mandatarios del Imperio, para probar fehacientemente que nada ha cambiado en esa nación, que todos se asemejan, que ninguno está  dispuesto a concertar, y, por lo tanto, Cuba, su gobierno y su pueblo debemos mostrarnos firmes y decididos a no admitir “ni un tantito así” en continuar siendo independientes y soberanos.

 Pienso que se trata, ni más ni menos, de seculares y vetustas creencias y convicciones enraizadas hasta la médula, que asombrosamente han sabido inculcar a sus ciudadanos desde que se declararon independientes del imperio Británico hace más de 200 años.

Este convencimiento fundamentalista en su población de que por definición todo lo que hacen los Estados Unidos es  correcto; de ser los elegidos por la Providencia para conducir y guiar al resto de la humanidad y de que otros pueblos no pueden solucionar realmente sus problemas  y mejorar sus vidas, sino lo hacen de la misma manera que los Estados Unidos, los ha convertido en prepotentes y seguros de que son poseedores de la verdad absoluta.

 Veamos a continuación como en la práctica en sus relaciones con Cuba, increíblemente durante más de 60 años, esos mandatarios del imperio estadounidense, a partir del triunfo revolucionario del 1ro. de enero de 1959, se han desenvuelto, permitiéndonos confirmar lo antes expresado de los fundamentos del carácter nacional estadounidense transmitido generacionalmente como parte medular de su identidad.

DURANTE EL PERIODO ENTRE LOS AÑOS 1964-1980, ALCANZARON LA PRIMERA MAGISTRATURA DE LOS ESTADOS UNIDOS , 4 PRESIDENTES:

·         Lyndon B Johnson     (1964-1968)

·         Richard Nixon             (1969-1974)

·         Gerard Ford                (1974-1976)

·         Jimmy Carter               (1977-1980)

En estos 17 años continuaron las agresiones contra Cuba, los planes de subversión y atentados; las medidas de bloqueo establecidas por los presidentes anteriores fueron recrudecidas; aunque es necesario aclarar que se observó cierta distensión en los cuatro años de la administración del presidente Jimmy Carter, aprobándose la creación oficial de las Secciones de Intereses de Estados Unidos y Cuba.

 El 24 de febrero de 1964, el Dpto. de Comercio de Estados Unidos, negó licencia para el ENVIO DE LECHE EN POLVO a Cuba, después de los desastres ocasionados en Cuba por el devastador ciclón “Flora”.

En abril de 1964, Lyndon B. Johnson, presidente, expresó públicamente: “nuestra primera tarea debe ser AISLAR A CUBA DEL SISTEMA INTERAMERICANO”.

El 14 de mayo de 1964, se dictaron las regulaciones 371-27 y 37l-54, del secretario de Comercio estableciendo el requisito de licencias especiales para los ENVIOS DE ALIMENTOS Y MEDICINAS A CUBA.

En julio de 1964, la Novena Reunión de Consulta de los cancilleres de países americanos de la OEA, aprobó las siguientes medidas:

·         Que los gobiernos de los Estados Americanos no mantengan relaciones diplomáticas ni consulares con el Gobierno de Cuba.

·         Que esos gobiernos interrumpan todo su intercambio comercial con Cuba.

·         Que interrumpan todo transporte marítimo entre sus países y Cuba.

En septiembre de 1964, se cometió el acto TERRORISTA contra el mercante español “Sierra Aranzazu”, que conducía mercancías hacia Cuba, en el que resultó muerto su capitán y dos tripulantes, como instrumento destinado a detener el intercambio con Cuba por el miedo.

 Entre 1964 y 1966, se produjeron más de 2000 incidentes agresivos desde el territorio ilegalmente ocupado de la Base Naval de Guantánamo, incluido el asesinato de los soldados cubanos Ramón López Peña, el 19 de julio de 1964 y Luis Ramirez López, el 21 de mayo de 1966.

 Entre 1963 y 1969, se produjeron 25 SABOTAJES a objetivos económicos en Cuba, a través de ataques con CAÑONES Y AMETRALLADORAS provenientes de buques madre de la CIA (del tipo Rex);  bombardeos a centrales azucareros, provocaciones de incendios en fábricas y almacenes, envío de PAQUETES BOMBAS, etc.

Continuando los ACTOS DE TERRORISMO, se produjeron los atentados con BOMBAS a las representaciones diplomáticas d países que comerciaban con Cuba, ocurridos en Miami y Nueva York en 1968 , y amenazas a los jefes de gobiernos de esas mismas naciones.

En la campaña electoral de 1968, Richard Nixon, aspirante a la presidencia de los Estados Unidos, se caracterizó por su agresividad  hacia Cuba, expresando “…al régimen de Castro hay que hacerlo entender que no puede permanecer eternamente como santuario para la exportación del terror a otras tierras”. (New York Times 12 de junio de 1968).

 En el transcurso del año 1970, Richard Nixon, presidente de los Estados Unidos, envió una nota a Henry Kissinger, solicitándole un informe sobre: 1) Qué puede hacer la CIA para apoyar cualquier tipo de acción que irrite a Castro; y 2) Qué acciones podemos tomar que no hayamos tomado todavía para boicotear las naciones que tratan con Castro. (Henry Kissinger, libro White House Years. Librería del Congreso, 1979, p.6412).

 En 1971, según el testimonio de participantes, la CIA entregó a exiliados cubanos un VIRUS que causa la FIEBRE PORCINA AFRICANA. Seis semanas después la aparición de la enfermedad en Cuba obligó a sacrificar 500 mil cerdos para evitar una epidemia. (San Francisco Chronicle, 10 de enero 1977)

Años después, durante un juicio celebrado en Nueva York contra el TERRORISTA CUBANO residente en esa ciudad, Eduardo Arocena, confesó haber introducido VIRUS INFECCIOSOS en Cuba. (Tribunal Federal de New York, declaración de Arocena, ps.2189-1984, Exp.2 FBI NY 185-109). Por esta confesión, el TERRORISTA AROCENA no fue juzgado ni se realizó investigación alguna por parte de las autoridades estadounidenses.

En junio de 1974, Orlando Bosch, TERRORISTA CUBANO  radicado en Miami, admitió haber enviado paquetes BOMBAS a las embajadas de Cuba en Lima, Perú; Madrid, España, Otawa, Canadá y Buenos Aires, Argentina. (Dpto. de Justicia de Estados Unidos. FBI, Miami, Florida, 16 agosto1970, desclasificado por 5668/SLO/JC el 8 de abril 1991, 86-01322.). Bosch vivió sin problemas en los Estados Unidos, sin ser molestado. Fue un TERRORISTA BUENO.

 A partir de 1976, como resultado de una campaña anticubana del gobierno de Estados Unidos, la CIA desató una serie de actividades TERRORISTAS contra las sedes diplomáticas y las líneas aéreas cubanas. El diario New York Times reconoció el 24 de octubre de 1976, página 31, que “los TERRORISTAS  que lanzaron una ola de atentados en7 países durante los últimos años, fueron producto e instrumento de la CIA.

La magnitud total de la GUERRA QUÍMICA y  BIOLÓGICA de los Estados Unidos contra Cuba, nunca será conocida. En 1977, documentos de la CIA recientemente publicados, revelaron que la Agencia “mantenía un programa de investigaciones clandestinas de guerra contra plantas, que se dirigió durante los años 60 contra una serie de países en todo el Mundo. (San Francisco Chronicle, 27 julio1 1981.) (Washington Post 16 septiembre 1977, pag.2).

 Durante este periodo de la administración Carter, se proclamó oficialmente que Cuba era la causa de la subversión en América Latina. Se continuó presionando a los gobiernos que mantenían relaciones con Cuba para que las suspendieran, permitiéndose que las organizaciones TERRORISTAS  actuaran contra los intereses cubanos, lo que trajo como consecuencia la colocación de BOMBAS y el ASESINATO en Nueva York del diplomático cubano Félix García.

 EN EL PERIODO TRANSCURRIDO ENTRE LOS AÑOS 1981 Y 2000 (20 AÑOS), PASARON POR LA PRESIDENCIA DE LOS ESTADOS UNIDOS 3 MANDATARIOS:

·         Ronald Reagan            (1981-1988)

·         George H. Bush            (1989-1992)

·         William Clinton             (1993-2000)

En esta etapa se destaparon hasta extremos demenciales, psicopáticos e inimaginables, medidas y acciones agresivas de todo tipo contra Cuba.

Dentro de estas acciones repugnantemente premeditadas para finalmente darle la estocada definitiva a la Revolución Cubana y a su gobierno, se encuentra las aprobaciones en 1992 de la Ley Torricelli y en 1996 la Ley Helms-Burton, precisamente poco tiempo después que se desintegró el Campo Socialista, y la isla quedó a expensas de un periodo terriblemente funesto, privada de toda fuente de suministros vitales para la economía y la población cubana, incluyendo el petróleo.

Estos dos engendros perseguían asfixiar económicamente al país y llevar a la población a una situación de privaciones extremas, afectando la salud, el bienestar, la paz y la vida; y finalmente derrocar el sistema político, económico y social de Cuba.

 En mayo de 1980, un grupo de neoconservadores del Partido Republicano de los Estados Unidos, le entregaron al candidato presidencial Ronald Reagan, el “DOCUMENTO DE SANTA FÉ”, donde estaban las bases de lo que sería la política de ese gobierno hacia América Latina.

En el capítulo concerniente a Cuba, se exponía una LÍNEA DURA” en la confrontación con la isla. Se enfatizó en la organización de acciones armadas contra los intereses cubanos por parte de los grupos contrarrevolucionarios radicados en los Estados Unidos, los cuales recibieron la correspondiente ayuda militar y financiera de la CIA, sumándose a este hostigamiento constante sobre Cuba, los vuelos espías como maniobras militares provocadoras.

En enero 1981, asumió el poder Ronald Reagan y seguidamente comenzó a poner en práctica medidas agresivas contra Cuba a presionar a gobiernos latino-americanos para que modificaran e incluso rompieran relaciones con Cuba.

La política a seguir respecto a Cuba se precisaba, a principios de 1981, por la Directiva de Seguridad Nacional No.17, del presidente de Estados Unidos, la cual expresaba que el objetivo era: “desarrollar presiones públicas contra Cuba, sacando a la luz los derechos humanos y políticos utilizando a la comunidad cubana en el exterior para trasladar este mensaje. En 1981, surgió, por iniciativa del gobierno de Estados Unidos, como parte del Proyecto Democracia, la Fundación Cubano Americana (FNCA), una idea que impulsó William Casey, jefe de la CIA, con el objetivo de buscar apoyo dentro de Estados Unidos y en el extranjero a la política externa que pretendía llevar a cabo la administración Reagan.

 En 1981, se desató una epidemia de dengue hemorrágico (FDH) en toda la isla. Se reportaron 300 mil casos, con 158 fallecidos, 101de ellos niños. (Cover Action Information Bulletin, Washington DC. Bill Sharp “The 1981 Cuban Dengue Epidemia).

El exilado cubano Eduardo Victor Arocena declaró en el juicio del Tribunal Federal, Distrito Sur de New York, transcripción páginas 2187-89,10 de septiembre de 1984, que un buque viajó de la Florida a Cuba con la misión de transportar algunos gérmenes para introducirlos en Cuba, a fin de utilizarlos contra los soviéticos y contra la economía cubana, para comenzar lo que se denominó GUERRA QUÍMICA.

En 1967, se reportó en la Revista Science que en el Centro del gobierno de Estados Unidos, en Fort Derrick, Maryland, la fiebre del dengue estaba entre aquellas “enfermedades” que al menos son objeto de considerable investigación y que parecen estar entre las consideradas como agentes potenciales en la GUERRA BIOLÓGICA. (Science –Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, Washington DC, 13 de enero 1986, pag. 176).

 A fines de 1983, Ronald Reagan firmó la Ley de Transmisiones Radiales hacia Cuba, dando vida a la mal llamada Radio Martí, emisora que el 20 de mayo de 1985, inició sus trasmisiones. Las funciones de esta emisora era la de fomentar un frente interno que justificara, desde el exterior, eventuales acciones militares o de otra índole, por parte de los Estados Unidos, en defensa de la oposición.

En agosto de 1986, Ronald Reagan firmó una Proclama Presidencial en la que se orientaron distintas medidas contra Cuba, incluyendo la suspensión de visas a cubanos como inmigrantes preferenciales al entrar a los Estados Unidos desde terceros países; la limitación en el envío a Cuba de dinero y regalos a familiares de disidentes en Estados Unidos, y la acción contra algunas empresas panameñas que se consideraban propiedad del Gobierno Cubano. POR ÚLTIMO, SE INICIARON GESTIONES QUE OBSTACULIZARAN A Cuba la negociación de la deuda externa.

En el verano de 1987, dieron a luz los actos de ESPIONAJE Y SUBVERSIÓN  contra Cuba, dirigidos por la Oficina de intereses de los Estados Unidos en Cuba. Por la televisión cubana se observaron varios programas con películas secretas de la Seguridad Cubana, cubriendo varios años de actividades clandestinas de oficiales de la CIA, que suministraban medios sofisticados de comunicación, códigos encriptados para informar, altas sumas de dinero y otros materiales, a un grupo grande de supuestos agentes.

Lo que finalmente resultó fue que esos “agentes” eran miembros de la Seguridad Cubana, que penetraron las estructuras de la CIA para prevenir estos actos de ESPIONAJE Y SUVERSIÓN.

En agosto de 1988, fue hecho público el “SANTA FE II”. Una estrategia para América Latina en la década de 1990. En la “Propuesta No.9” se refiere a: “Estados Unidos debe ampliar sus trasmisiones a Cuba por los medios de difusión como una vía de educación cívica para crear un régimen democrático…”En relación con Cuba, el Documento de Santa Fe, en su parte V (Relaciones Internacionales, Cap.A, sobre relaciones especiales con países claves, proposición 4), afirma: Entre estas medidas, será creada la Radio Libre. Si la propaganda falla, deberá ser lanzada una guerra de liberación contra Castro.

Sobre la voladura en pleno vuelo del avión cubano el 6 de octubre de 1976, donde murieron 73 personas, el 7 de septiembre de 1988, durante una audiencia del Senado de los Estados Unidos, el senador demócrata por Iowa, Tom Harkin, lanzó un grupo de preguntas al entonces vicepresidente y candidato a la presidencia de Estados Unidos, George H. Bush, entre ellas:

“Señor Bush, Ud. Era el director de la CIA cuando ocurrió el sabotaje de un avión cubano en pleno vuelo donde murieron 73 personas… y el conocimiento de la CIA de la conexión cubana (de Miami) en este sabotaje. ¿Por qué no se tomó ninguna acción en aquel momento? LAS PREGUNTAS DEL SENADOR DEMÓCRATA QUEDARON SIN RESPUESTA.

 Entre 1990 y 1992, la NED donó un cuarto de millón de dólares a la FNCA (Fundación Nacional Cubano Americana), el grupo ultra fanático anticubano de Miami, que financió a Luis Posada Carriles, uno de los más prolíferos y despiadados TERRORISTAS  de los tiempos modernos; cómplice del atentado y voladura en pleno vuelo de una aeronave cubana en 1976, muriendo 73 personas; y envuelto en una serie de explosiones en hoteles de La Habana. (New York Times , 13 de julio 1998).

El 27 de septiembre de 1991, el Dpto. del Tesoro de Estados Unidos, impuso nuevas restricciones a la cantidad de dinero que los ciudadanos estadounidenses podían gastar en sus viajes a Cuba, al igual que el valor de los obsequios que podían llevar de regreso a sus familiares; e inclusive regulaba la cantidad de dinero que podían llevar a Cuba aquellos residentes en Cuba que habían viajado a Estados Unidos.

En octubre de 1992, fue aprobada por el presidente de los Estados Unidos, George H. Bush, la Ley para la Democracia en Cuba (LEY TORRICELLI), que promueve el aislamiento político y económico de Cuba, maquillando y afinando, según expresó el subsecretario de Estado, señor Gelbard, el bloqueo, para continuar una política que llevaba entonces más de tres décadas de agresiones contra Cuba. Sus elementos básicos fueron:

·         Prohibir el comercio con Cuba de las subsidiarias de compañías de Estados Unidos.

·         Prohibir a los barcos que entraran en puertos cubanos tocar a puertos de los Estados Unidos.

·         Establecer sanciones a los países que brindaran asistencia a Cuba, según penalidades previstas en la Ley de Comercio con el Enemigo.

·         Promover los contactos de Cuba con Estados Unidos para facilitar el desarrollo de la disidencia dentro de la isla.

 El 21 de septiembre y 19 de octubre de 1995, la Cámara de Representantes y el Senado de los Estados Unidos, aprobaron la Ley para la Libertad y la Solidaridad Democrática Cubana (LEY HELMS-BURTON), y firmada por el presidente William Clinton el 12 de marzo de 1996.

Esta Ley, que consta de cuatro títulos, convirtió en ley todas las decisiones ejecutivas relacionadas con el bloqueo económico a Cuba; la penalización de las inversiones extranjeras en Cuba e introdujo nuevos procedimientos para controlar y sancionar a aquellos extranjeros que violaran sus preceptos, otorgándole un carácter EXTRATERRITORIAL  A LA LEY que, por decreto de Estados Unidos, internacionalizaba la política de bloqueo a Cuba.

Además, incluyó todos los preceptos y regulaciones de la LEY TORRICELLI. De tal forma esa Ley le quitan al presidente las facultades para que pueda disponer todo lo referente al bloqueo, que ahora corresponde al Congreso.

 El presupuesto asignado durante el periodo transcurrido ascendió a 20 millones de dólares, distribuidos en distintos programas y un total de 65 millones de dólares en becas y financiamiento de universidades.

 Adicionalmente a las medidas radicales y subversivas aprobadas por la LEY HELMS-BURTON, el gobierno de los Estados Unidos tomó medidas tendientes a la suspensión de todos los vuelos comerciales a Cuba; a restringir los movimientos de los diplomáticos cubanos en Estados Unidos; a utilizar los fondos cubanos congelados en los Estados Unidos para compensar a los familiares de los pilotos derribados de Hermanos al Rescate.

En marzo de 1997, del reporte de su viaje a Cuba de una prestigiosa organización estadounidense de salud radicada en Washington, la American Association for World Health, publicó un informe con un análisis exhaustivo de los daños ocasionados por el bloqueo en la salud y la alimentación del pueblo cubano.

 En uno de sus fragmentos expresaban: “El embargo de los Estados Unidos ha aumentado significativamente el sufrimiento en Cuba. La reducción de la disponibilidad de alimentos, medicinas y suministros médicos básicos…está cobrando un alto costo humano”.

 El 14 de julio de 1998, Robert Sheer, en los Angeles Times publicó: “A Startling Tale of U.S Complicity”, lo siguiente: “Durante casi 40 años hemos aislado a Cuba, según la idea de que esta pequeña isla era un centro de terrorismo en el hemisferio, y año tras año, tenemos nuevas pruebas de que son los Estados Unidos los que han cometido actos TERRORISTAS contra Cuba y no lo contrario.”

Declaración del TERRORISTA Luis Posada Carriles en una entrevista al The New york Times, el 12 de julio de 1998: ¡La CIA nos lo enseño todo, como usar un explosivo, como matar, hacer bombas…Nos entrenaron en actos de SABOTAJES”. Posada Carriles siguió viviendo tranquilamente en Miami sin ser molestado; es un TERRORISTA BUENO.

En el año 1998, el jefe de la Oficina de Asuntos Cubanos del Dpto.de Estado, de los Estados Unidos, Michael Ranneberg, refiriéndose a la Ley Helms-Burton destacó la satisfacción porque había logrado:…”un impacto significativamente importante en la economía cubana” incrementado en…”las penalidades para aquellos que quieran violar el embargo”, así como porque…”el Gobierno Cubano ha encontrado mayores dificultades para obtener financiamiento y potenciales inversionistas.

”La Ley Omníbus de Asignaciones Presupuestarias para el año fiscal 1999 de los Estados Unidos, incluyó 12 enmiendas que extienden y endurecen el bloqueo, negociadas en secreto por un reducido grupo de legisladores y funcionarios gubernamentales. Se refuerzan sanciones impuestas por el Título IV de la Ley Helms-Burton y se extienden al resto del Mundo. Se amplía el bloqueo sobre los fondos de instituciones crediticias internacionales para concertar cualquier asistencia o reparaciones a Cuba. Se prohibió la realización de transacciones o pagos en Estados Unidos relacionados con una marca o nombre comercial confiscado.

El 28 de abril de 1999, el gobierno de los Estados Unidos reformuló una parte de la política de sanciones que utiliza como instrumento de su política exterior, y autorizó a otros países sujetos a sanciones para comprar medicinas y alimentos, excluyendo a Cuba, ÚNICO PAÍS del Mundo imposibilitado de hacerlo. 

DOS PRESIDENTES FUERON ELECTOS EN EL PERIODO COMPRENDIDO ENTRE LOS AÑOS 2001 Y 2012.

·         George W. Bush             (2001-2008)

·         Barack H. Obama            (2009-2012)   (1)

Durante esos 12 años continuó vigente el amplio inventario de infamias y vilezas urdidas y aprobadas por las  administraciones anteriores;  todas dirigidas a destruir el proceso revolucionario cubano iniciado el 1ro. de enero de 1959.

El año 2001 comienza con la presencia en la Casa Blanca de una figura peculiar: George W. Bush, hijo, que asumió la presidencia de los Estados Unidos al “ganar” las elecciones de noviembre del 2000, por obra y gracia de un escandaloso fraude gestado en la Florida, con la complicidad de su hermano Jeb Bush, en ese momento gobernador de ese Estado y de la mafia cubano-americana, que pudo ser concluido sin más consecuencias gracias a la ayuda del Tribunal Supremo, constituido por jueces amigos de su padre.

Este ejemplar ciudadano, caracterizado por su mediocre inteligencia, su ignorancia abismal, su expresión verbal confusa y permanentemente atraído por la irresistible tentación del disparate, como bien expresara el famoso escritor José Saramago, se consagró a la despreciable tarea de inculcar a sus seguidores y simpatizantes de que él tendría el deleite de ser el primer mandatario estadounidense en acabar con el Gobierno Revolucionario de Cuba.

Y es así como en el año 2004, se presentó un mamotreto de más de 450 páginas, titulado: COMISIÓN PARA LA ASISTENCIA A UNA CUBA LIBRE, y dos años después un segundo informe con las mismas características; los dos con la finalidad de “ACELERAR EL DÍA EN QUE CUBA SEA UN PAÍS LIBRE”.

El diario Miami New Times interrogó a miembros de la FNCA (Fundación Nacional Cubano Americana), con relación a los ATENTADOS TERRORISTAS cometidos contra Cuba. Esta fue la respuesta: “No condenamos a una persona que tratan  de poner fin a las condiciones que oprimen a su pueblo,  su familia y él mismo”. Estas personas tienen derecho a combatir por su libertad.” (Son  TERRORISTAS BUENOS, no importa si niños, mujeres o ancianos perecen en los atentados).

Durante el primer periodo de la administración de Bush, Cuba considerada “Estado villano” se encontraba en cinco listas ignominiosas:

1.       Cuba es capaz de desarrollar armas de destrucción masiva (armas biológicas ofensivas).

2.       Cuba es un gobierno patrocinador del terrorismo.

3.       Cuba es violadora de los derechos humanos.

4.       Cuba es de los países con operaciones agresivas de inteligencia en territorio de Estados Unidos.

5.       Cuba es incluida en la lista negra del gobierno de los Estados Unidos sobre tráfico de personas para la explotación sexual y trabajo forzado 

En mayo 4 de 2003, Colin Powell, secretario de Estado de los Estados Unidos, en el programa “Meet the Press”, de la NBC, declaró que no pensaba que fuese apropiado “POR AHORA”, utilizar la fuerza militar contra el régimen de Castro.

El 13 de abril de 2003,el secretario de Defensa de los Estados Unidos, Donald Rumsfeld, manifestó que no se valoraba una invasión a Cuba, a no ser que se detectara que  tuviese armas de destrucción masiva, que pudieran constituir una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos. (Entrevista en el programa “Meet the Press”, NBC).

 La agresividad del gobierno de los Estados Unidos respecto a Cuba, justo en el momento de la agresión a Irak, se patentizó cuando el embajador de los Estados Unidos en República Dominica, Hans Hertell, tuvo el mal gusto de comentar que la “victoria en Irak debería ser un mensaje para el régimen castrista”.

En marzo 2003, una manifestación de la extrema derecha en Miami situaron el tema: “Irak ahora, Cuba después”; y el gobernador de la Florida, Jeb Bush, hermano del presidente, consideró que era hora de “mirar al vecindario”, pidiendo presionar a la comunidad mundial para derrocar a Fidel Castro.”

El 10 de octubre 2003, el presidente George W. Bush anunció nuevas medidas contra Cuba. Una de ellas creaba la Comisión Presidencial para la Asistencia a una Cuba Libre, bajo la jefatura del secretario de Estado, Colin Powell, y su asistente el secretario de Vivienda, el cubano americano Mel Martínez.

La misión fundamental del grupo sería asesorar al mandatario en su pública intención de fortalecer aún más el bloqueo económico, comercial y financiero contra la isla, así como otras actividades subversivas en aras de asfixiar a la Revolución.

 El 6 de mayo 2004, en los jardines de la Casa Blanca y con la presencia del presidente George  W. Bush, se recibió el informe elaborado por la Comisión encargada por el mandatario para “ACELERAR EL DÍA QUE CUBA SEA UN PAÍS LIBRE”, según las palabras de Bush.

En 6 capítulos y más de 450 páginas, el llamado Informe de la Comisión de Ayuda a Cuba Libre, integra como tareas estratégicas para el logro del derrocamiento del Gobierno Cubano:

·         Incremento del apoyo a la contrarrevolución interna en Cuba

·         Aumento de la campaña internacional contra Cuba.

·          Recrudecimiento de acciones subversivas y de desinformación contra Cuba

·         Adopción de nuevas medidas para afectar la economía cubana.

·         Socavar los planes de “sucesión del régimen”

Unido a esto, como es natural en los intentos de destruir al Gobierno Revolucionario de Cuba, la aprobación de cuantiosas sumas de dinero:

1.       59 millones de dólares en los próximos 2 años para financiar estas acciones.

2.       18 millones de dólares para financiar las trasmisiones de las mal llamadas Radio y TV Martí, incluyendo la utilización de un avión C130 dedicado exclusivamente a ello.

3.       5 millones de dólares para financiar la campaña internacional de desprestigio contra Cuba.

Adicionalmente, las restricciones hasta niveles enfermizos de las remesas y viajes de los cubanos residentes en los Estados Unidos.

El administrador de la USAID (Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos), Andrews Natsios, durante una conferencia que pronunció en la Universidad de Miami, respecto a los planes de ese organismo vinculados a Cuba, proclamó que el fin de la Revolución Cubana esta próximo; “el día del ajuste de cuentas está cerca”.

Este mismo señor Natsios, anunció que ya se habían  invertido 28 millones de dólares en las iniciativas de transición en Cuba, y con destino al 2004, otros 7 millones de dólares.

El 28 de julio 2005, en el Salón de Tratados, Washington DC., la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, de los Estados Unidos, presentó al señor Caleb McCary, como Coordinador de la Transición en Cuba. (EL PROCONSUL). En su retórica agresiva este señor planteó que existe la posibilidad de que se produzca “una intervención abierta una vez que el genio de la transición salga de la botella” en la isla.

El 30 de agosto 2005, el Dpto.de Estado de los Estados Unidos, publicó el informe “Adhesión y cumplimiento de los acuerdos y compromisos sobre el control de armamentos,  la no proliferación y el desarme de 2005”. En él se acusa a Cuba de “tener capacidad técnica para investigar y producir armas biológicas ofensivas”.

El 4 de octubre de 2005, el director de la Oficina de Reconstrucción y Estabilización de los Estados Unidos, el cubano-americano Carlos Pascual, ante la conferencia anual de la Asociación de Expertos del Ejército de los Estados Unidos, enunció expresamente que: “Estamos utilizando esto (la matriz) para trabajar sobre Cuba; para entender como nosotros vamos a manejar el proceso de transición entre la muerte de Fidel Castro y una Cuba democrática, porque sabemos que en determinado momento esto ocurrirá.

El 19 de diciembre 2005, la secretaria de Estado de los Estados Unidos, Condoleezza Rice, anunció que el Grupo de la llamada “Comisión para la Asistencia a una Cuba Libre”, presentaría un Segundo Informe con nuevas recomendaciones para acelerar lo que llamó: “la democratización de la isla”. “Es tiempo de cambio en Cuba”.

Entre los años 2004 y 2005, 85 compañías y bancos y 803 ciudadanos resultaron multados por un monto superior a los tres millones de dólares, por violar las disposiciones contra Cuba.

El 14 de enero 2006, el portavoz del Dpto. De Estado de los Estados Unidos, Sean McCommack, informó que la Comisión de Asistencia para una Cuba Libre, presentaría en mayo un nuevo plan, el segundo de este tipo aún más radical, para el apoyo a la transición cubana; además de señalar la asistencia y recursos necesarios. Se aclaró que el nuevo documento contenía PARTES QUE SE MANTENDRÍAN SECRETAS POR RAZONES DE SEGURIDAD NACIONAL  E IMPLEMENTACIÓN EFECTIVA.

Una declaración del jefe de la SINA (Oficina de Intereses de los Estados Unidos en Cuba), Michael Parmly, manifestó que “EL CAMBIO SE AVECINA”.

Se dio a conocer la decisión oficial de conceder 80 millones de dólares en los próximos dos años fiscales, que se iniciarán a partir del 1ro. de octubre 2007, con destino a “PREPARAR EL CAMBIO EN CUBA

El 10 de julio 2006, de manera oficial se dio a conocer el SEGUNDO INFORME de la llamada “Comisión para la Asistencia a una Cuba Libre”, después que el 5 de julio fuese presentado al presidente Bush en una reunión del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.  Este documento resume el trabajo de más de 100 funcionarios de 17 departamentos y agencias del gobierno. El objetivo central del mismo es evitar una sucesión política y ACELERAR LA TRANSICIÓN A “LA AMERICANA” DE FORMA ACTIVA

 Por otra parte , se encomienda al Dpto. del Comercio a “revisar las reglas de exportación de equipos médicos, para evitar que estos puedan ser usados en los programas de salud” que Cuba ofrece a países del tercer Mundo

La Comisión solicita igualmente rastrear el destino de las exportaciones cubanas clave para asegurar un mayor fortalecimiento del bloqueo comercial, económico y financiero.

El texto recomienda “VIGOROSAMENTE” la aplicación del Capítulo IV de la Ley Helms-Burton, y amenaza a las compañías extranjeras de terceros países que le proporcionen al Gobierno cubano divisas convertibles en áreas económicas como el petróleo, turismo, níquel, tabaco y ron.

El 10 de octubre 2006, se creó un NUEVO GRUPO destinado a reforzar las restricciones contra Cuba con el objetivo de PERSEGUIR a las agencias de viajes, empresas y ciudadanos que quebranten la ley en vigor.

El Grupo de Trabajo para Reforzar las Sanciones contra Cuba (CSETF), lo integran varias agencias gubernamentales:

·         OFAC (Oficina de Control de Bienes Extranjeros.

·         Departamento del Tesoro

·         Departamento de Seguridad Interior

·         Servicio de Rentas Internas (IRS)

·         Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE)

·         Departamento del Comercio y los Servicios de Guardacostas (CBP) 

El gobierno de los Estados Unidos obligó al banco canadiense Scotia Bank, en virtud del Acta Patriótica norteamericana, de negar servicios a Cuba.

En el primer trimestre de 2006, se conoció que el Consejo Nacional de Inteligencia de los Estados Unidos (NIC), agregó a Cuba a la lista de países bajo riesgo de inestabilidad a largo plazo (de 2 á5 años). Esta lista fue una señal para que las agencias del gobierno de los Estados Unidos reforzaran sus estimados y preparaciones para la eventual transición en “Cuba después de Castro”.

En el caso del NIQUEL, se propone que “se establezca una FUERZA DE CONTINGENCIA INTER AGENCIAS, de ubicación del NÍQUEL CUBANO para revigorizar la certificación existente de importación y control del NIQUEL, al igual que el control de importación de COBALTO.

El plan para acelerar el cambio de régimen incluye la creación de un FONDO CUBANO para un FUTURO DEMOCRÁTICO, que se iniciaría con la asignación de 80 millones de dólares para impulsar la CAÍDA del Gobierno Cubano en 2007 y 2008, sumándose a los 35 millones de dólares destinados para las emisoras Radio y TV Martí, así como 10 millones destinados a la USAID.

 El 22 de mayo 2008, durante su campaña electoral, en un discurso ante la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), en Miami, Barack Obama expresó:  “Nosotros no vamos a soportar estas injusticias;  juntos vamos a buscar la libertad para Cuba. Esta es mi palabra. Ese es mi compromiso…” “Voy a mantener el embargo”.

El 4 de enero 2010, la Administración de Seguridad del Transporte de los Estados Unidos , comenzó a aplicar medidas adicionales de control de seguridad en todos los aeropuertos del Mundo sobre cualquier pasajero con pasaporte de los países designados como “patrocinadores del terrorismo internacional”, entre los que injustamente se incluye a Cuba.

El 5 de enero 2010, el portavoz del Depto.de Estado de los Estados Unidos, Philip Crowley, declaro´que Cuba tiene “bien ganada” su designación como Estado patrocinador del terrorismo”.

Las multas de los departamentos del Tesoro y de Justicia de los Estados Unidos contra entidades de los Estados Unidos y de Europa en el 2009, por transacciones realizadas con Cuba, entre otros Estados, superan en conjunto los 800 millones de dólares.

 El 2 de septiembre 2010, el presidente Barack Obama ratificó las sanciones contra Cuba aludiendo al supuesto “interés nacional” de los Estados Unidos.

El 19 de octubre 2010, el presidente Barack Obama calificó de insuficientes los procesos que, a su juicio, ocurren hoy en Cuba condicionó cualquier nuevo paso a la realización de los cambios internos que quisiera ver en nuestro país.

El 25 de octubre 2010, un alto funcionario de la USAID confirmó ayer al periodista Tracey Eaton, que, en el último periodo han hecho llegar 15.6 millones de dólares a “individuos en el terreno en  Cuba”. (Así llaman a sus mercenarios).

 En noviembre 2011, el Dpto. del Tesoro de los Estados Unidos sancionó a la Sucursal Neoyorquina del Banco Alemán “Commerz Bank”, con una multa de 175 mil 500 dólares, por ser de consultor y garante de un nacional cubano en el pago a una compañía canadiense.

 Los Estados Unidos mantiene el impedimento al acceso a la información científico-médica de avanzada, y la negación de visas a científicos cubanos para participar en eventos en esa nación; la no autorización a científicos de Estados Unidos y de estudiantes de viajar a Cuba con iguales motivos; y la prohibición de publicar o difundir artículos científicos de origen cubano en Estados Unidos.

En junio 2012, el Dpto. de justicia de los Estados Unidos anunció la imposición de una multa de 619 millones de dólares al banco holandés ING por supuestas violaciones al régimen de sanciones contra Cuba y otros países. Esta es la multa más alta de la historia, impuesta a un banco extranjero.

 El 10 de mayo 2012, el Dpto. del Tesoro de los Estados Unidos, prohibió los paseos por lugares recreativos, las transacciones  financieras relacionadas con actividades turísticas y tomó medidas estrictas para cerciorarse que los itinerarios y programas de los viajes de ciudadanos norteamericanos con “fines educacionales” que se aprobaran.

En estos 4 años de la administración del presidente Obama, el gobierno de los Estados Unidos continua votando en la ONU contra la Resolución respaldada por más de 180 países, que rechaza el bloqueo impuesto por esa nación a Cuba desde hace más de medio siglo.

A pesar de esas decisiones del máximo foro de la ONU, el gobierno de los Estados Unidos continuó promulgando y aplicando nuevas medidas dirigidas a reforzar y ampliar el bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba.

CONCLUSIONES:

 El análisis de este devenir, unas veces sorprendente; otras confusa e increíble; en ocasiones lúcida, nos  pudo permitir lograr un discernimiento sobre la naturaleza más íntima de los principales protagonistas de esa nación, con sus características afines a un notable pragmatismo; una feroz avidez hacia el enriquecimiento; la creencia obcecada de su excep cionalidad; su acostumbrada prepotencia engendrada de sus predecesores colonizadores, y su enfermiza y aventurada inclinación a la solución militar a todos sus conflictos, convirtiéndose en algo consustancial a su identidad nacional.

Si prescindimos de este examen, se nos hubiera hecho muy difícil escudriñar las verdaderas causas por las que este “colosal gigante” ha venido transitando por nuestro Mundo, desplegando su poderío para lograr sus más anheladas apetencias de dominación.

Por otro lado, en el caso de CUBA, muchas veces he tratado seriamente de intuir cómo se valora por el resto de la llamada comunidad internacional, lo acontecido durante 60 años en las convulsas relaciones entre Cuba y los Estados Unidos.

Me imagino que una parte de la gente a veces no entiende los orígenes de los complejos acontecimientos que con sorprendente regularidad se suceden, en que un gigantesco, opulento y poderoso país, despliega toda su inteligencia, esfuerzo, empeño y empuje, para desvanecer a un pueblo pequeño, que habita  muy cerca de sus costas.

También pudiera darse cuenta, a pesar del gran despliegue propagandístico inculpatorio contra el pequeño, de la fortaleza y estoicidad de ese puñado de hombres y mujeres que ha podido resistir milagrosamente ese enorme empuje del coloso.

En mi caso particular, y pienso que así lo sienten otros muchos, me resulta tan ruin y despreciable como ser humano, haber experimentado, y seguir experimentando, en infinidad de ocasiones, ver y oír a presidentes de los Estados Unidos, durante medio siglo, presentarse por la televisión y con esa prepotencia que a todos ellos los caracteriza, emitir instrucciones, ordenar, hacer declaraciones infamando, calumniando, mintiendo, desbarrando y amenazando a un pequeño país que ellos consideran se ha apartado de sus imperiales disposiciones.

SINO ME EQUIVOCO,CREO QUE, EN LOS ANALES DE LA HISTORIA CONTEMPORANEA, NO EXISTE ALGÚN CASO PARECIDO.

Es por ello que esta deplorable experiencia en las relaciones de Cuba con esa nación, me ha  confirmado lo que se ha verificado con la llegada al poder del troglodita de Donald Trump y del nuevo presidente demócrata, Joe Biden,  de que en los próximos años no se producirían cambios algunos fundamentales en el comportamiento de los gobernantes de ese imperio; al contrario, pienso que seguirá habiendo un significativo retroceso, teniendo en cuenta que fuerzas oscuras y fascistoides pueden ocupar el poder en esa nación , al divisarse una elevada polarización en esa sociedad y la radicalización de sectores sumamente poderosos. Mientras tanto, Cuba no puede , bajo ningún concepto, estar desprevenida, como siempre lo ha hecho y lo hará, ni puede permitirse ningún vestigio o indicio de DESUNION EN SU PUEBLO.       

La Habana, Cuba.  24 de julio de 2021, Año 63 de la Revolución”

JSAF

Notas: (1) Solo se ha incluido la primera etapa de la presidencia de Barack Obama.