Si todo esto que está ocurriendo y ocurrirá fuera el resultado de no haber hecho nada en los últimos años, entonces sería más fácil de entender. Pero no es así.
por Dr.C Juan Triana Cordoví, OnCubaseptiembre 18, 2023
en Contrapesos
Sin embargo, tenemos ya algunas certezas de lo que nos queda todavía durante este año:
-No se logrará un incremento sustancial de la oferta.
-No se alcanzará la cantidad de turistas proyectada.
-La inflación no será contenida en la medida que hace falta.
-La asignación de los recursos de inversión no se habrá modificado para orientarla preferentemente hacia aquellos sectores que pudieran paliar, al menos en parte, la escasez de productos de primera necesidad.
-Seguiremos padeciendo el susto eléctrico por falta de generación, y la escasez de combustibles.
-La empresa estatal seguirá aún lejos de alcanzar la dinámica que justifique ese rol fundamental que se le reconoce en atención a su peso en el PIB y habrá que seguir esperando en el muro de la paciencia por una ley —la ley de empresas— que contribuya a su tan ansiada autonomía.
-La inversión extranjera permanecerá limitada por todos aquellos obstáculos que fueron listados por las autoridades del Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera hace ya casi dos años.
-La renegociación de la deuda con proveedores aún se demorará.
-Las pymes seguirán cargando con el San Benito de ser las causantes de la inflación y se mantendrán sumergidas en un océano de incertidumbres legales y políticas.
-Para lo que queda de año se mantendrá el drenaje de cubanos jóvenes y no tan jóvenes hacia el exterior.
-La bancarización generará más preocupaciones que soluciones, más colas delante de los cajeros allí donde existen y funcionan, y más tiempo empleado por la población en lograr un servicio que está lejos de satisfacer la necesidad que de él se tiene.
-No tendremos un verdadero mercado cambiario y la capacidad de una intervención eficaz en él parece más inalcanzable que el horizonte.
Recuerdo en los primeros años de la década del noventa, cuando se abrieron los tiendas en dólares norteamericanos, constantes y sonantes, el tremendo rechazo que las mismas tuvieron en una parte de la población. Luego se convirtieron en mucho más que un complemento de la oferta de bienes y hoy casi todos las recuerdan con añoranza, al igual que al CUC.
Sin hacer esos cambios estructurales en toda su profundidad, no se alcanzará una victoria real, sostenida, en la lucha contra la inflación. Un programa de estabilización macroeconómica que trate a medias este problema, que posponga lo que hay que hacer por temor al costo político presente, solo contribuirá a costos políticos mayores en el futuro inmediato.
Hemos escogido desde hace ya varias décadas la “gradualidad” como la manera de conducir los cambios. Al final, al menos en economía, no hemos resuelto los problemas esenciales y hemos prolongado tanto la cura, que para muchos se hizo imposible la espera y se fueron del país.
Es cierto que las curas de shock son dolorosas, pero el shock sin cura es mortal
No hay liderazgo político. La nación está acéfala!
ResponderEliminarSusto eléctrico??? Aquí en mtzas los apagones son de 12 horas al día.....no se hace lo q se tiene q hacer, ya este cuerpo lleva trasplantes de organos.
ResponderEliminarBla, bla, bla. . No se cansan.
ResponderEliminarNo se preocupen que al ritmo que vamos no habrá nadie ni en presupuestado o el estatal, todos estarán en Miami viviendo de la explotación del hombre por el hombre.
ResponderEliminarDetrás de toda esta sarta de "disparates" (grupos de medidas, audaces innovaciones, estremecimientos...) debe existir un plan maestro elaborado en los Estados Unidos. Ninguno de estos "disparates" sobra, todos encajan perfectamente en el proyecto de destruir a la Revolución. Nada es ingenuo ni fruto de la incapacidad: todo lo contrario.
ResponderEliminarSi son los OVNIS y el Deep State, todo encaja. Desde Trump a Murillo, jaja.
EliminarEstablecer la economía de mercado al estilo asiático socialista, quitar lo del enriquecimiento en la Constitución de la República de Cuba
ResponderEliminarSi a partir del Vl Congreso del PCC con la genialidad de Murillo todo se privatizó con la prevalencia del mercado sin ningun tipo de regulacion en un pais bloqueado y con escasez cronica, tomando un rumbo neoliberal, tipo perestroika, entonces ¿ De que se asombran? Tenemos lo que sembramos Los ricos mas ricos amasando su fortuna a partir de una espiral de precios diabolica y los pobres mas pobres.
ResponderEliminarEn el periodo especial la situacion del pais era mucho mas dificil desde el punto de vista externo y salimos adelante. Fidel siempre advirtio que no confiaba en la propuedad privada para resolver nuestros problemas. La situacion actual le da toda la razón. Perdimos el Socialismo y tenemos un capitalismo salvaje contando con la inmovilidad del partido y el gobierno