Otras Paginas WEB

viernes, 6 de diciembre de 2024

No me hagan caso, que últimamente no entiendo lo que veo

Por Karima Oliva Bello

Comprendo la molestia con la actitud de Sandro Castro,aunque realmente no es algo nuevo y, además, no demerita la obra de Fidel, que ya, por razones obvias, poco tiene que ver con lo que haga el nieto.

Que esta molestia no nos lleve a pensar que nada sirvió de lo que nos legó, que es el tipo de pensamiento que conviene a los adversarios de Cuba. Están usando al nieto para golpear a Fidel y su legado, porque no pudieron con él vivo y tampoco muerto, no les importa Sandro. De hecho, él encaja perfectamente en el tipo de sociedad que desean para la isla.

En cambio, me inquieta más lo que están haciendo los líderes vivos. Me preocupa si es verdad o no que el hijastro de Díaz Canel (actual presidente de Cuba), y su asesor más crítico -"la oposición" en la familia-, según palabras del propio mandatario, sea quien ande paseándose con una ciudadana extranjera por circuitos de lujo en Madrid.

A qué viene tanta algarabía por Sandro y respecto al asesor del presidente, solo se dice que es la vagina de la chica, que se la abre a quien quiera (una obviedad), como si no hubiese implicaciones políticas y hasta de seguridad nacional de por medio. O no vamos a hablar de lo que moralmente significa tal aburguesamiento de quien fuera o es, quién sabe, funcionario del más alto nivel de un estado socialista donde hay gente resistiendo, el asesor del hoy máximo líder de la Revolución. Viendo el panorama con otros cuadros una se pregunta también con preocupación, qué criterios sigue el presidente para sentar gente a su lado? Quién lo está asesorando en cuanto a política de cuadros?

Supongo que todo sea mentira, porque si fuera verdad y nadie nos lo ha explicado, sería el colmo de la impostura política. Ante cuántas cosas tenemos que hacernos de la vista gorda los cubanos.

La pésima proyección de Sandro, además de reflejar su mala educación, es sintomática de la sociedad en que nos estamos convirtiendo. No voy a alarmarme por Sandro sin antes criticar el modelo de cambio que se está llevando a cabo con tantos costos políticos y problemas, que invitan, por lo mínimo, a un análisis serio y una rectificación.

La falta de explicación sobre las contradicciones pareciere expresión del voluntarismo político de quienes no están dispuestos a rectificar, ni a asumir responsabilidades, ni a dejar atrás un camino que, a pesar de no favorecer a la mayoría, ya beneficia el bolsillo de unos cuantos que toman decisiones y hay muchos intereses y presiones de por medio.

O es Sandro el único dueño de una empresa que se da una vida totalmente anacrónica con lo que vive la mayoría de los cubanos? O no hay otros hijos, parientes, prestanombres que andan con las manos metidas en negocios gracias a medidas económicas aprobadas por funcionarios que están sacando ventajas personales de ellas, sin que abramos el debate, que ya hace falta, sobre los conflictos de intereses de los políticos, a tono con el crecimiento del sector privado y los últimos hechos de corrupción? Esas aguas nos han traído estos lodos. Aún ni sabemos qué fue de Gil y los amigos de tu ambia, hasta donde tengo entendido, siguen facturando sin problemas.

Pero todavía tenemos que oir a un periodista decir, junto a otro fulano, que las mipymes son la solución, sin reconocer que por el modo como se están implementando -sin previsión, sin control y de forma corrupta-, están siendo parte del problema, por el listado de cosas que están pasando, que para qué mencionarlas aquí, si todos las sabemos y de las que no quieren hablar ni el gobierno, ni los medios oficiales, ni los intelectuales.

Por más que me duela reconocerlo, cada vez que se paran frente a las cámaras a tapar el sol con un dedo, nos están mintiendo. La falta de compromiso con la verdad en lo que respecta al desarrollo del sector privado, raya en el absurdo.

Sería el colmo, que hijos de ministros en funciones anden en carros de lujo y un hijo de un miembro de la dirección del partido sea dueño de una empresa. Que se sepa que, aunque aquí no lo mencione, el pueblo comenta los nombres de los altos funcionarios en cuestión. Están en evidencia.

Lamentablemente no sabemos si es verdad o mentira, porque por convicción no queremos creerle a la contra pero, al mismo tiempo, nuestro gobierno ha optado por la falta de transparencia, en un escenario insólito, aunque muy cómodo para algunos y perjudicial para la nación, en que quienes nos dirigen y sus familiares no tienen que declarar sobre sus bienes patrimoniales.

El solo hecho de no esclarecer y desmentir acusaciones como esas, en las circunstancias actuales, mella la confianza de la gente, con un importante costo político.

Entonces, hay tantas cosas que discutir que trascienden la cortina de humo de Sandro, sobre la forma como se está gestionando la crisis y a dónde se está conduciendo al país, siempre considerando y denunciando, claro, el escenario de guerra económica que vive Cuba.

Ni tan siquiera sabemos la postura ideológica de nuestros representantes políticos, porque sus redes están cargadas de fotos de reuniones, viajes y trivialidades sin que expresen un solo criterio con fundamento ideológico sobre el presente de la nación.

P.D Agradezco a Oscar Martin por compartirme este texto.

3 comentarios:

  1. Humberto, tienes la primicia. Luego va ser publicado en el Cubadebate de Randy el irredento y reproducido por el curador de arte Néstor del Prado.

    ResponderEliminar
  2. Lo que nos ha ocurrido en realidad es que cuando usted se pone por encima del Bien y del Mal pues se cree con derechos divinos y entonces concluye que "los placeres humanos y divinos" le son consustanciales y naturales a usted y los que lo rodean, eso pasa en Cuba.
    "El hombre no piensa según vive" sino que vive según el poder que detenta y cree que favoreciendo a sus cercanos y a la familia su poder se extenderá ad infinitum.
    No se puede culpar a un joven porque no piense igual que nosotros porque los hombres se parecen más a su época que a sus padres, pero si sus padres se empeñaron en criarlos en valores del Capitalismo y la riqueza no puede esperarse otra conducta.
    Cauba es una Catástrofe en todos los órdenes y la culpa no es de los hijos, es e los padres.

    ResponderEliminar
  3. La fiestecita de Sandro a un costo de 16 mil pesos X persona en medio del ejercicio contra la corrupción e ilegalidades, en medio de una aguda crisis economica incrementada con caida del servicio electrico ciclones y sismos. es una burla al Presidente y Secretario del PCC demuestra su vulnerabilidad e incapacidad paraxrestablecer el orden en el pais

    ResponderEliminar