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jueves, 10 de febrero de 2022

Dólar: cambio negro: 1994 y 2021, años tremendos. ¿Qué presagia el 2022?

Por Jorge Rodríguez Hernández*

Si bien algunos califican a 1993 como el año más difícil de la crisis económica del denominado Período Especial (PE) en tiempos de paz, 1994 clasifica como un año tremendo pues entre marzo y junio 12 productos seleccionados dentro de la llamada canasta familiar básica de alimentos (arroz, granos, pollo, huevo, leche, aceite, etcétera) se adquirían entonces en el mercado negro a precios que, de conjunto, ascendían a cifras de cuatro dígitos: entre 1 180 y 1500 pesos en moneda nacional (MN).

En ese cuatrimestre de 1994, la compra-venta del dólar en la economía subterránea reportó, de forma estable, las cotas más altas, desde el inicio del PE- septiembre de 1990-: 100 y 120 pesos en MN por la divisa extranjera. Es decir que transcurrieron tres años y medio, para que el dólar subiera de 7 pesos en MN por la moneda extranjera, a cifras de tres dígitos.

En enero de 2021 se inició la Tarea Ordenamiento Monetario y Cambiario (TOMC), y en marzo el cambio del dólar en la economía negra, reportó compra-venta de 50 pesos en MN por la divisa-dos veces más que el cambio oficial : 24x1-, similar a como se ofertaba en abril de 1993, y en diciembre de 2021 se adquiría a 70 CUP por dólar, en transacciones ´´cara a cara´´, mientras que el ´´dólar virtual´´ (MLC) se adquiría a 87 CUP, aunque a inicio de enero se cotizaba a 95 CUP, lo cual además de abrir una interrogante al respecto, confirma su ´´virtualización´´.

Paralelo a la ´´dolarización´´ de la economía, después del comienzo de la TOMC- en los años 90 del pasado siglo XX se hizo más visible hacia finales de 1993 y el primer cuatrimestre de 1994-, se produce una ´´eurorización´´ de la misma, dicotomía que complejiza aún más el entramado socioeconómico, pues la moneda oficial de la Unión Europea asumió un protagonismo nada despreciable, tras la medida del Banco Central de no permitir más depósitos de dólares en las cuentas abiertas en MLC, lo cual se hizo público en junio de 2021. De ahí la existencia de un cada vez más creciente mercado informal de euros, para realizar disímiles transacciones.

En cuanto a los 12 productos alimenticios seleccionados para la encuesta realizada, al cierre de diciembre de 2021, año también tremendo, se ofertaban, de conjunto, entre 3 100 y 4 100 CUP en el mercado negro- a saber en 2 y 3 veces más de como se adquirían en 1994. Todos, sin excepción, reportan actualmente una espiral ascendente: te acuesta con un  con un precio y te levantas con otro.

Así las cosas, el 2022 no presagia buenos augurios en ese ámbito, a juzgar por el comportamiento reportado en enero por la informalidad y la economía real. El rebrote de casos de la COVID-19 por nueva cepa, aunque se advierta un control de la enfermedad, no hace pensar, al menos, en un primer trimestre, con señales alagüeñas, y se toma en cuenta la histórica estacionalidad de la economía cubana en cuanto a posibles pronósticos sobre un buen desempeño en el primer trimestre del recién iniciado año , no parece objetivo el exceso de optimismo en ese sentido.

Mientras tanto, cada minuto que pasa las tensiones y económicas aumentan , ante la creciente devaluación del CUP con respecto al dólar y el propio euro, y los nocivos efectos generados por la espiral inflacionaria. Hay más interrogantes que certezas entre los ciudadanos, a juzgar por las expresiones cada vez más frecuentes de un segmento importante de personas:  ¿¡Algo tiene que pasar!?, tal como ocurría en 1994.

Bibliografía

Jorge Rodríguez Hernández: Viacrucis por la supervivencia. Revista Espacio Laical Proyecto del Centro Cultural Padre Félix Varela, Año 14 No 2, 2018, pp.17-25

https://espaciolaical.net/?s=Viacrucis+por+la+supervivencia&submit=Search

 Ibídem Blog Cuba y la Economía

https://cubayeconomia.blogspot.com/2020/09/viacrucis-por-la-supervivencia.html

*Periodista de investigación, especializado en temas económicos

 

 

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