Al cierre de junio pasado, la cantidad de actores económicos cubanos creció a 12 486, número que supera al mayor de la serie histórica: 11 857 entidades en 2010, de acuerdo con el informe Organización Institucional. Principales Entidades, de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI).
Si bien las mipymes son las principales responsables de ese incremento, el comportamiento de las empresas estatales arroja elementos interesantes.
Pero, antes de entrar en el análisis, hay que aclarar que los datos publicados por la ONEI muestran una fotografía incompleta del mundo empresarial cubano. Están incluidas las empresas estatales, sociedades mercantiles, mipymes, cooperativas y unidades presupuestadas, mientras que quedan fuera los trabajadores por cuenta propia, las empresas mixtas y otras formas de asociaciones económicas internacionales que operan en la isla.
El aumento significativo de las entidades se observa a partir de 2021. Por primera vez desde 2015 se registra un número de cinco dígitos (10 010), propiciado fundamentalmente por la aparición de las mipymes –270 en su primer año de aprobación–, salto mucho más visible al cierre de junio último, con el estreno de otras 2 440.
No obstante, aun excluyendo del cálculo a esas novedosas formas de gestión, el número de entidades también crecería (aunque en menor medida).
¿Qué otros actores económicos propician el alza? En 2021 se añadieron 72 empresas estatales y este año (al cierre de junio último) otras 74, deteniéndose la tendencia a la baja de los últimos años.
Recordemos que a partir de 2011, tras la implementación de los lineamientos socioeconómicos, se aprobaron varias transformaciones que trajeron consigo que algunas empresas fueran extinguidas o fusionadas, mientras otras quedaron rebajadas a UEB.
De acuerdo con Evelyn Martínez Mendoza, directora de Metodología de la Información en la ONEI, el incremento registrado en ambos periodos está asociado fundamentalmente con el traspaso de más de 40 centrales azucareros de UEB a empresas. Con esto, esas estructuras recuperan la autonomía perdida en el perfeccionamiento anterior.
En las estadísticas publicadas por la ONEI, las unidades presupuestadas aparecen con crecimientos notables, tomando en cuenta que su número se había mantenido similar en los últimos años. En 2021 se reportaron 172 más con respecto al año anterior, lo que pudiera resultar contradictorio con la necesidad del presupuesto estatal de disminuir sus gastos.
Sin embargo, no son “las típicas unidades de puro gasto”, como aclaró Dania Loraine Fuentes, especialista del área reguladora de las mipymes en el Ministerio de Economía y Planificación.
Explicó a Cubadebate que esas organizaciones fueron creadas en cada municipio para actuar como socios en las nuevas micro y medianas empresas estatales. Su misión es representar los intereses del municipio.
Son estructuras que permanecen engavetadas y se van activando en la medida en que el municipio lo necesita, en dependencia de las mipymes aprobadas. Para su conformación, se tomó de referencia el modelo de las “sociedades mercantiles instrumentales”.
“No requieren de mucho personal” ni significan un gasto para el presupuesto porque reciben dividendos de las mipymes, precisó la joven especialista y destacó que el caso más exitoso está en el municipio Los Palacios (Pinar del Río), donde funcionan cuatro mipymes estatales.
Al cierre de 2021, el salario medio mensual más alto lo tienen los trabajadores de la actividad de explotación de minas y canteras (7 698 pesos). Las tres actividades que le siguen son ciencia e innovación tecnológica (4 548), suministro de electricidad, gas y agua (4 532) y transporte, almacenamiento y comunicaciones (4 286).
Mientras, el pago medio mensual más bajo lo tienen las actividades de servicios comunales, de asociaciones y personales (3 330 pesos); agricultura, ganadería, silvicultura (3 352); comercio, reparación de efectos personales (3 513); industria azucarera (3 679); hoteles y restaurantes (3 696), e industrias manufactureras (3 728).
El número de entidades ha crecido en momentos tensos para la economía cubana, prácticamente paralizada en el primer trimestre de 2021 debido al impacto de la covid-19. Si bien a finales de ese año comenzó una cierta recuperación, tendencia que continúa en este 2022, las actividades no alcanzan los niveles prepandemia.
Según el informe de la ONEI, la actividad de agricultura, ganadería, caza y silvicultura incluye la mayor cantidad de actores (5 010), seguida de las industrias manufactureras (excepto industria azucarera), con 1 649. En ambos sectores, los resultados distan mucho de lo esperado, sobre todo si se comparan con la demanda de la población y la economía.
Que el alza del total de entidades cubanas esté acompañado de efectivos encadenamientos que generen más producción es un reto. Según expertos, esto requiere generar un clima de trabajo flexible, sin ataduras, tanto en el sector estatal como en el no estatal. Las medidas aprobadas –y las anunciadas– por el Gobierno son pasos en esa dirección.
Sobre el tema del título han tenido lugar dos
sesiones de información en la Mesa Redonda protagonizadas por el compañero
Alejandro Gil y por la Presidenta del BCC y una sesión de información por parte
de la Ministra del MINCIN y de una Vice Ministra del MINCEX.
En este último se señalan, como un preludio de sus
valoraciones críticas más generales, algunas inconsecuencias e incongruencias
que presenta el propio diseño de lo propuesto.
Comienzo por decir que comparto, con algunas
diferencias totalmente secundarias, al 100% lo expresado por estos compañeros
en sus artículos.
Es muy necesario que los organismos decisores
atiendan y tengan muy en cuenta lo expresado por estos autores.
Por mi parte solo recordare, como preámbulo de
este comentario que ahora les hago llegar, lo que exprese por anticipado en mis
dos cartas dirigidas al compañero Alejandro Gil y a la máxima dirección del
país circuladas la primera a fines de julio, a raíz de lo anunciado en la
Asamblea Nacional, y la segunda a comienzos de agosto motivado por la primera
comparecencia conjunta del Ministro de Economía y de la Presidenta del BCC.
Ambas, acompañadas por varios anexos y textos complementarios, fueron divulgadas en el blog “Cuba y la Economía” del compañero Humberto Herrera
Carles, por “Otra Cita” y otras páginas de la web.
En la primera de mis cartas comentaba que:
“Muchas de las medidas anunciadas son de compleja y no confiable implementación
y ejecución, con resultados a esperar muy demorados, inciertos y de efectos
parciales y cuantitativamente insignificantes.”
Y concluía dicha carta con un párrafo que
resumidamente decía lo siguiente: “Te auguro que pasado un tiempo “el cuartico
se mantendrá igualito en lo fundamental”, que se habrá hecho un gran esfuerzo
burocrático para la implementación de algo que se juzgará como “más de lo
mismo” con la consiguiente pérdida sucesiva de cuotas de la confianza política
por parte del gobierno.
En la segunda de mis cartas enviada en losprimeros días de agosto manifestaba: “Ya empezaron los esfuerzos burocráticos
por una de las principales de las 75 medidas”. Como entonces apunte: “La
intención es plausible pero el camino es evidentemente tortuoso, impreciso,
impredecible y, en mi opinión, resultara impracticable en varios de sus
propósitos con un efecto inflacionario asimétrico inmediato que no estoy seguro
se haya valorado bien. Además, constituirá una demora más en lo que hay que
hacer de manera drástica y realista para lograr lo más importante y urgente que
es el aumento de la oferta de bienes y servicios a la población que se haga
notable para el pueblo consumidor”.
Creo que ya desde su inicio han aflorado ya
múltiples manifestaciones de hechos fortuitos, impredecibles unos y predecibles
otros, pero no inteligentemente previstos, que evidencian lo tortuoso e
impreciso del camino escogido, por no ser lo suficientemente realistas, según nos
llega por las entrevistas que se le han hecho a la población que empieza a
concurrir a las Cadecas recién abiertas con el propósito de comprar divisas.
Hasta ahora se ha eludido, sin ninguna
explicación convincente y satisfactoria, el camino expedito que se debía haber
tomado hace tiempo pero que no se ha tomado por diversas razones multicausales
entre las que se entremezclan prejuicios y temores infundados por falta de
conocimiento y dominio de la teoría económica y de las leyes objetivas del
devenir económico y del mercado en particular, aplicaciones dogmáticas de
lecturas parciales o mal interpretadas de los marxistas fundadores, conservadurismo
por intereses creados y estandares de vida y de gerencia que se desea conservar
por las comodidades que genera el establishment. Interpretación indebida e
insuficiente del momento y contexto histórico en que existimos como país y como
patria y en medio del cual se desarrolla actualmente nuestro proceso socialista,
falta de audacia y dinamismo en la voluntad política necesaria para cambiar todo
lo que tiene que ser cambiado y una larga lista de etcéteras más.
Hago una deferencia y diferencia con los
máximos dirigentes del Gobierno a los que no se les puede pedir más esfuerzo,
dedicación, trabajo y política acertada de principios en defensa de la
independencia, dignidad y soberanía nacionales y por mantener el rumbo
socialista del proceso, sin lo cual nuestro país y nuestro futuro resultarían
inaceptables para todos los cubanos patriotas.
Pero dentro de todos los obstáculos y factores
retardatarios existentes está la tendencia exagerada hasta el extremo de los
criterios centralistas y estatalistas en la dirección del país. Y esto si lo
considero responsabilidad de los máximos niveles.
La propuesta de medida en la que vengo
insistiendo desde hace años, acompañada y apoyada por el criterio favorable de otros varios
compañeros de alta autoridad y capacidad teórica y académica y altas y
positivas experiencias de dirección económica y política, y que es la de
legalizar el comercio minorista de los entes económicos privados, bajo las
debidas cautelas y regulaciones de enmarcamiento y control, indudablemente es
radicalmente descentralizadora pues significa renunciar a que todas las divisas
que entren al país sean captadas por las arcas del estado y administrado al
detalle su gasto e inversión.
Con el mercado cambiario actualmente en
proceso tortuoso de aplicación se pretende que todas o casi todas las divisas
que entren o estén destinadas a entrar al país lleguen, desde sus tenedores
de origen (turistas, visitantes o inversores extranjeros y remesantes) o receptores en Cuba (cubanos residentes
en el país en su carácter de remesarios, captadores de propinas y otros), a las
arcas del Estado y que solo o casi exclusivamente desde estas arcas se
determine su uso.
Nuestra propuesta significa permitir que una
parte de esas divisas no sea captada por el Estado como ente intermediario
entre fuentes y destinos de las mismas, sino que el Estado actúe promoviendo y
facilitando que se manejen desde sus propias fuentes, que los poseedores de las
mismas puedan decidir su destino y por parte del Estado crear las condiciones
para que este destino sea fundamentalmente en interés del país, de su economía
y de la población.
Hoy el cubano que recibe y posee divisas
(directa o indirectamente) las usa para consumir en el mercado MLC, para
cambiarlas por CUP en el mercado informal o legalmenteen los bancos y cadecas habilitados para
ello, viajar al extranjero, irse del país, o adquirir productos en el
extranjero para entrarlos como importación no comercial (parte de las cuales
van a parar “por la izquierda” al mercado informal de bienes y servicios que
recibe la población consumidora como
simplemente consumidora o para emplearlos como insumos en sustpcp o mipymes).
¿No le resultaría más conveniente y redituable
a estos cubanos poseedores de divisas, (legalizados como comerciantes) el
emplearlos en comprar en un comercio mayorista dado situado en un país
extranjero o en una zona especial dentro del país, para venderlos a la
población en general? Considero que
también estarían incluidos entre sus consumidores todos los productores
privados del país incluidos los campesinos.
¿No estarían llevados los poseedores a
invertir de esta manera la mayor parte de las divisas que posean?
Si se ha entendido adecuadamente las
características de este capital comercial a ser autorizado, que yo explique con
abundantes razonamientos y datos en uno de los artículos anexos que aparecen en
mi segunda carta al compañero Alejandro, si se ha entendido que estas divisas
que se autorizaría invertir fuera no se quedan fuera ni se fugan del país sino
que retornan sistemáticamente al país en la forma material de mercancías a
venderle a la población, y que mayor seria la parte empleada por estos
comerciantes en convertir divisas en mercancías a vender mientras menor sea la
parte que deban emplear en pasajes al extranjero, hospedaje, alimentación,
transportación, embalajes, etc. si los mercados mayoristas a los cuales acudir
no estuvieran situados en países extranjeros sino dentro de nuestro país, el
que sería adicionalmente beneficiado por arrendamientos y concesiones a los
suministradores extranjeros que acepten establecerse dentro de frontera
mediante mecanismos comercialesde
consignación o deposito, ¿Qué es lo que no hace aconsejable esta medida?.
Esto provocaría de manera mucho más rápida, y
evitando los caminos tortuosos, imprecisos y poco realistas emprendidos, que la
oferta de bienes y serviciosque reclama
nuestra inflada demanda se vea más rápidamente satisfecha, que el pueblo
encuentre en este mercado parte de la respuesta que está esperando, que los
precios de todos los mercados tiendan a disminuir por la competencia que se
generaría, y que se vea favorecida la producción del sector privado y
cooperativo por los equipos e insumos que este mercado pudiera aportarle.
Exhorto una vez más a los organismos decisores
a revisar el paquete de medidas anunciado en la última Asamblea Nacional, a
rectificarlo en lo que corresponda, a incluir esta medida propuesta por
nosotros inexplicablemente demorada y rehuida.
Y que no se olviden de la descentralización
real de la empresa estatal atiborrada de planes de medidas a cumplir que no
logran el objetivo y que se revisen los conceptos sobre el monopolio del
comercio exterior que no parece bien entendido ni aplicado.
Con mucho placer publicamos aquí las fotos del primer contenedor de Harina que saldrá mañana día 25 desde Panamá hacia Cuba.
Se trata de Harina Dura tipo DNS que fue comprada por 6 FGNE a través de la importadora @Alimpex.
La próxima salida de barco desde Panamá a Cuba será aproximadamente el día 9 de septiembre por lo que los interesados podrán contactarme por el privado para recibir sus ofertas.
Contamos con 2 salidas mensuales por lo que es posible establecer un ciclo lógico y regular de abastecimiento.
Caracas, 25 de agosto de 2022 VTV.- El Ministro del Poder Popular para el Turismo, Alí Ernesto Padrón Paredes, anunció en la actividad presidencial Plan Vacacional Comunitario y Juvenil 2022 realizada en Falcón, que debido a las buenas relaciones comerciales que Venezuela tiene con la República de Cuba, se está realizando vuelos de turismo de compras desde La Habana hasta la Isla de Margarita.
Estos vuelos se están dando dos veces a la semana. Padrón destacó que en las próximas semanas seguirán realizando vuelos desde La Habana, Cuba hasta Punto Fijo, Venezuela.
“Este es un turismo de alta gama, el promedio de compras del turismo cubano es de tres mil, cuatro mil y cinco mil dólares en cuatro días”, explicó el ministro.
Las potencialidades de la caña de azúcar y del sistema agroindustrial cañero son colosales, pese al grave deterioro económico-productivo que registra en la actualidad.
El efecto multiplicador económico, social, territorial, energético, generador de fondos exportables y sustituto de importaciones de la agroindustria azucarera es de gran magnitud. En el crítico escenario actual, puede contribuir a la solución de tres grandes problemas que enfrenta, no solo Cuba, sino la humanidad en su conjunto : la producción de alimentos, el déficit energético y la preservación del medioambiente.
No obstante la situación deprimida que presenta en el caso cubano, la evolución histórica-económica y social de este sector ha dado lugar a una cultura sustentada en una importante y sólida base de saberes.
Esto constituye una valiosa premisa que contribuye al desarrollo de una economía apoyada en el conocimiento tecnológico trasladado de generación en generación y fortalecido por los resultados científico-técnicos y de innovación. De modo que la infraestructura de la agroindustria cañera y su impacto económico-social-territorial es un factor de gran importancia que hay que tener siempre presente.
El grado de deterioro tecnológico que presenta en Cuba, a lo largo de su encadenamiento productivo, parte desde la producción agrícola de la gramínea, eslabón fundamental de todo el proceso.
En los últimos años la producción de caña y por supuesto de azúcar ha registrado descensos significativos precisamente en sus pobres cosechas anuales, donde se manifiesta de forma acentuada el grado de obsolescencia tecnológica en cuanto al equipamiento, maquinaria, infraestructura y logística.
La industria procesadora (central azucarero), de igual forma registra desgaste y atraso tecnológico. De modo que aprovechar su capacidad industrial para producir anualmente 4 millones de toneladas de azúcar requiere de modernización, una empresa que necesita de financiamiento externo.
Hay que decir además que la baja disponibilidad de caña, y el desgaste industrial y logístico, ponen en riesgos los objetivos de incrementar su participación en la generación de energía renovable situada para 2030, donde la biomasa dentro de sus aspiraciones pretende alcanzar una participación del 14 %. Ello requiere de un fuerte proceso inversionista en todo el sistema agrícola industrial cañero del país.
Economía Diversificada
Desde 1959 y hasta principios de los años noventa del siglo pasado, la economía cubana se caracterizaba por ser mono productora y mono exportadora, donde la producción de azúcar desempeñaba un papel determinante, en la conformación del PIB y de los ingresos casi exclusivos de las exportaciones del dulce con destino al hoy ex mercado socialista de Europa del este.
Sin duda la economía cubana demandaba un proceso de diversificación en sentido general, por cuanto registraba una alta vulnerabilidad y era necesario el surgimiento de otros sectores.
El desarrollo del turismo y la biotecnología favoreció la diversificación, pero en modo alguno se justifica el detrimento de un sector consolidado, como el agroindustrial cañero.
Además, estos nuevos sectores que emergieron presentan sus vulnerabilidades, por ejemplo la industria turística resulta en extremo sensible a desastres naturales, conflictos bélicos o epidemias que traspasan fronteras, como quedó evidenciado con la pandemia mundial de covid.
De igual forma la industria biotecnológica suele ser altamente especializada y exigente en sus parámetros, pues las CGVE (Cadenas Globales de valor Externa) acostumbran dominar el mercado internacional, resultando en extremo difícil penetrar en el mismo, aun disponiendo de productos resultantes totalmente novedosos e inclusive únicos.
Por lo general requieren buscar vías de inserción, cómo encadenarse, lo cual no siempre se puede lograr en un corto periodo.
El mercado internacional
Los precios del azúcar tanto crudo, como el refino se han mantenido al alza. Tomando como referencia el período entre el 4 y 18 de agosto de 2022, se movieron entre 17.55-18.24 centavos libra, lo cual representó una ganancia de 0.69 centavos USD, por libra. A la vez un incremento de 1 520.0 USD por tonelada.
Inclusive permanecen altos aún en Nueva York y Londres, pese a estimados de un
excedente global de este producto para la temporada 2022 – 2023.
Los factores que han incidido en los precios incluyen el déficit mundial de sacarosa en la
temporada 2021/22 (el cual se viene reduciendo), compras especulativas de fondos de inversión y la caída de la producción de azúcar en Brasil. Además, un mayor desvío de caña para producir etanol en ese país suramericano.
Los costos del dulce han estado altos durante más de un año, según fuentes de los mercados. Las elevadas cotizaciones brindan incentivos para expandir la producción de caña y están aumentando considerablemente por los altos precios de la energía, los productos químicos y los fertilizantes a nivel mundial, lo cual preocupa a agricultores y a la industria.
Basándose en los precios de los fertilizantes de febrero/marzo de 2022, los productores apuntaron que los costos se han incrementado entre un 15 % y un 27 %, dependiendo de los países.
Se muestra preocupación ante la posibilidad de que estos productos escaseen. Estos problemas se suman, añadieron, a los ya existentes como la disminución de la superficie plantada y el cambio climático, entre otros.
De acuerdo con las previsiones presentadas por los expertos en la última reunión del Observatorio del Mercado del Azúcar de la Unión Europea, en mayo pasado, tanto los precios como el consumo se muestran muy volátiles desde la guerra Ucrania-Rusia. Las cotizaciones subieron desde el comienzo del conflicto y se han mantenido en niveles altos debido a la escalada del precio de la energía y a la incertidumbre en el mercado.
Como consecuencia del precio de la energía cabe esperar que se destine más azúcar a la producción de etanol no solo en Brasil sino también en la India. Según expertos, un ascenso de la cotización del petróleo estimula a los ingenios a desviar más caña de azúcar a la fabricación de alcohol etílico
Sin embargo, analistas coinciden en la posibilidad de que las cotizaciones de ese alimento aumenten aún más, pese a las previsiones de un superávit del endulzante para la temporada 2022/23, impulsadas por los factores mencionados.
El caso de Cuba
En los últimos años la producción de caña y por supuesto de azúcar ha registrado descensos significativos. En la pasada zafra 2021-22, molieron unos 29 centrales azucareros (de 56 existentes), los montos de producción de azúcar se estiman en unas 600.000 toneladas métricas, niveles ya alcanzados en época de la colonia española.
En la próxima zafra 2022-23, se prevé que tan solo 23 centrales azucareros puedan moler y se pronostica una producción de azúcar de unas 400.000 toneladas, inferior a lo alcanzado en la zafra anterior, todo ello dado por la baja disponibilidad de caña.
Los incumplimientos de los niveles de siembra e incremento de las áreas ociosas, comprometieron los resultados de la pasada zafra y también impactarán a la baja los resultados productivos en la zafra 2022-23.
Se trata de una agroindustria montada sobre una tecnología extensiva, de altos insumos (fertilizantes, herbicidas, combustible), ante una economía deprimida con pocos recursos financieros y alta dependencia alimentaria externa.
Evidentemente la agroindustria cañera, no ha constituido una prioridad en el destino de las limitadas divisas disponibles. Tampoco lo han sido las formas y vías novedosas para la atracción de la inversión foránea.
De igual forma poco se ha avanzado en busca de un tránsito hacia una agricultura agroecológica, que pudiera sustituir los elevados insumos de agroquímicos por lo general importados. Sin duda ello conlleva, a un re análisis de las escalas productivas actuales y de los métodos de gestión económico- productivo.
Sugerencias
-Se requiere examinar la forma organizativa, el funcionamiento de la estructura que se identifica como AZCUBA, (anterior Ministerio de Azúcar), por parte de un equipo constituido por expertos, académicos, integrantes de institutos de investigaciones, funcionarios y universidades, a fin de precisar si es capaz, o no, de dar respuesta a las exigencias y transformaciones que necesita la agricultura cañera.
Este examen debe incluir vínculos, encadenamiento con la agricultura, ganadería, y la industria procesadora, entre otros. Además tiene que analizarse en su contexto, es decir en el municipio, tener en cuenta su interacción con las demás actividades económicas del territorio.
-La industria (central azucarero) y sus diferentes bases productivas agrícolas cañeras tributan materias primas y se encuentran en el municipio, eje central de las transformaciones actuales. Ellas deben estar asociadas o correlacionarse e interactuar, de una forma u otra, con las restantes formas productivas de la agricultura, ganadería e industria procesadora de alimentos.
Sin duda la agroindustria de la caña de azúcar forma parte indisoluble del desarrollo económico de la nación y encierra importantes potencialidades que pueden contribuir al fortalecimiento del sector agroalimentario, reducir importaciones de alimentos, atenuar el déficit energético e incremento de los ingresos por exportaciones. (2022)