"Soportes autolastrados" para paneles solares buscan un productor nacional. ¿Se podrá ?

Por Humberto Herrera Carlés

Hace dos días en el portal de facebook de la destacada PYME estatal "Soluciones energeticamente eficientes" se publico la siguiente información: 

" Acaba de concluir el Precongreso de la Electrónica y la Automática. Se presentaron y aceptaron 48 trabajos de alto nivel técnico, lo que denota el papel central que se le concede a la ciencia en GELECT. El trabajo conjunto "Soportes autolastrados para paneles solares. Una alternativa factible para Cuba", de Rolando Esteban Simeon Monet, del Centro de Estudios CAD-CAM, y de Luis Gutiérrez Urdaneta, de Soluciones Energéticamente Eficientes, obtuvo Mención y fue seleccionado para ser presentado en el Congreso Cubaindustria 2024, a celebrarse en el Palacio de las Convenciones en junio. Su aplicación representaría una significativa sustitución de importaciones, y un menor costo bajo en cualquier variante de tipo de cambio".

Estoy convencido, como muchos, que el futuro de nuestro pais es el aprovechamiento de las energías renovables, en especial la fotovoltaica. El sol es " gratis" en nuestra Cuba, los 365 días del año. Pero aprovechar las ventajas competitivas como nación , se ha convertido en un via crucis. 

Reconozco que ni idea tenía, que eran los "soportes autolastrados"* , y que además, no se hacían en Cuba, pero con los resultados obtenidos, ya existe la posibilidad de hacerse en territorio nacional , y sustituir importaciones y eventualmente ¿ exportarlos?.

 

Soportes autolastrados y los autores del trabajo.

En realidad, no se cuantas soluciones se almacenan, en el sueño eterno de una " oportunidad" en nuestro país. Por ello, creo que los autores del trabajo ya tienen otro obstáculo quizás mayor, maxime cuando la burocracia , y los viajes para importar, compiten en este empeño. Por ello plantean : "El reto ahora es que la industria nacional apoye esta tecnología, que podría ahorrar más de 250 mil dólares en importaciones directas por Megawatt de potencia fotovoltaica, fundamentalmente para ser instalados en techos".

Para ponerlo en números mas claros, y tener una idea de lo que puede llegar a representar, la capacidad de generación eléctrica que tenemos en Cuba, según el Anuario Estadistico del 2022 es de 6 235.2 Megawatt, si de la misma aspiraramos a tener el 25 % en energía renovable fotovoltaica, es decir 1 558.8 Megawatt , y produjeramos en Cuba los "soportes autolastrados", se ahorrarían aproximadamente 389,7 millones de  usd en importaciones, solo por este concepto.

El reto y la oportunidad esta " sobre la mesa" .¿ Habrá alguna industria nacional que se decida a producirlos como una linea de producción estable, o hay que seguir importando para poder desarrollar las energias renovables fotovoltaica a un mayor costo en Cuba?.

*Ya sean metálicas o de hormigón (autolastradas), conceden al panel solar una orientación y un ángulo fijo, que ha de determinarse en base a la latitud de la instalación o que queda determinado por la propia cubierta cuando la instalación es coplanar.

En 2024, las experiencias son las protagonistas

Por Gabriel Escarrer

Presidente y Consejero Delegado

Llega el nuevo año y con él las tendencias que nos esperan. En el turismo, sin duda alguna, hemos visto que el lujo toma cada vez más protagonismo entre ellas, en una combinación en la que los viajeros buscan experiencias únicas, sostenibles y de ‘slow travel’.

Sabemos que es la unicidad, también sabemos qué es la sostenibilidad, pero… ¿Qué es el ‘slow travel’? Es una manera de viajar que pone su foco en la experiencia, tomándose el tiempo necesario para descubrir el destino y sumergirse en la cultura local; es un concepto en el que el que la conexión con el destino y también la sostenibilidad se abren paso a través del enriquecimiento personal y el bienestar.

Precisamente, la idea de ‘slow travel’ encaja perfectamente con las experiencias de lujo más actuales en las que descubrir lugares únicos, vivir experiencias locales y potenciar el bienestar. Buen exponente de esta forma de viajar es nuestra marca de resorts de lujo Paradisus by Meliá que, bajo el concepto Destination Inclusive®, se centra en ofrecer una experiencia enriquecedora en la que predomina la conexión con el destino.

La marca, que hasta hace aproximadamente un año solo estaba presente en destinos del Caribe, ha llegado a Europa en 2023 con dos excepcionales propuestas en las Islas Canarias: Paradisus Gran Canaria y Paradisus Salinas Lanzarote. Ambos hoteles se ubican en islas de gran interés natural y cultural, en las que la gastronomía y la artesanía, junto a la diversidad de paisajes, ofrecen un entorno único.

Aunque los destinos alternativos y “menos típicos” o “más inexplorados” forman parte de las tendencias que vienen este 2024, los destinos urbanos siguen siendo algunos de los más elegidos a la hora de viajar. Y, ¿Cuáles son los destinos urbanos preferidos para viajar? Según un estudio elaborado por Euromonitor International, de entre los 100 mejores destinos urbanos para viajar 63 son europeos.

En el Top 20 encontramos una de la ciudades en las que el lujo toma mayor protagonismo: Milán. La ciudad italiana es famosa por su cultura, gastronomía, arquitectura y también porque el lujo forma parte de su propia esencia. Recién inaugurado en Milán estrenamos el hotel Palazzo Cordusio de Gran Meliá, nada más y nada menos que un hotel de lujo cuidado al detalle, con un diseño espectacular y ubicado en un icónico palazzo de la ciudad a muy pocos metros del Il Duomo.

Este nuevo hotel que llega como un nuevo icono de lujo a la ciudad, se une al ME Milán en la oferta de lujo que Meliá Hotels International ofrece en el destino y a la que pronto se le sumará el Meliá Collection Milán, creando así una propuesta que se complementa con nuestras otras marcas en el destino.

Y en el Top 10 de destinos urbanos del mundo, otra ciudad en la que en las próximas semanas presentaremos un proyecto de gran valor: Barcelona. La ciudad condal nunca falta entre los rankings de destinos más populares como una propuesta llena de vida que ofrece un ambiente cosmopolita en combinación con la gran oferta cultural que se puede encontrar con ella y que es palpable en cada una de sus calles. Allí, con muchas ganas, vamos a abrir esta misma semana el primer hotel Gran Meliá de la Ciudad. Torre Melina, de Gran Meliá, un auténtico “oasis urbano” que será toda una apuesta por el turismo de calidad en Barcelona, gracias a su cuidada oferta de lujo y a los diferentes partners que nos acompañarán para elevar el plano gastronómico. Es, sin duda, una de las aperturas más esperadas en la ciudad y confiamos que sea un nuevo revulsivo para potenciar la economía local, además de que se convierta en un punto icónico también para el disfrute de los residentes.

Como veis, el lujo no solo está presente en las tendencias de viajes y consumo que nos esperan en 2024, si no también en nuestras aperturas y firmas. De hecho, siguiendo la línea de los destinos más deseados, la unicidad que está tan de moda se combina con las experiencias de lujo en nuestra más reciente firma de un hotel Meliá Collection en Cádiz. Este será el primer hotel de cinco estrellas ubicado en el centro de la ciudad de Cádiz y con una ubicación espectacular repartida en dos edificios históricos, ofrecerá una experiencia sin igual.

Turismo experiencial, turismo de lujo, auge de la sostenibilidad… son algunas de las tendencias de viajes que vienen este 2024 y para las que ya estamos poniendo los motores en marcha. Además, también se augura el regreso del interés por Asia Pacífico, según indican varios informes, concretamente el impulso turístico de la región liderado por China y Vietnam, que todavía tienen que recuperar parte del dinamismo detenido a causa de la pandemia, deparándonos a buen seguro un interesante crecimiento a lo largo de 2024.

Está claro que el viajero ahora busca experiencias en las que se priorizan el bienestar y la buena compañía, siendo algo que debemos de tener muy en cuenta a la hora de enfocar nuestra oferta. Con esta tendencia llegan nuevas palabras, que tratan de definir y reiterar conceptos que muchos de nosotros ya habíamos comenzado a incorporar. Lisness, como concepto consolidado del bleisure ( es decir, la fusión del business y el leisure) con la diferencia de que se prioriza aún más el disfrute o leisure; Spafari, término con el que se combina la aventura (especialmente en el continente africano) con la experiencia relajante de belleza y wellness; o incluso Painmoon como término para describir un tipo de viaje pensado para la reparación personal.

Bienvenidos al año de las experiencias de viajes únicas.

Cuando los millonarios se preparan para el colapso

Raúl Zibechi La Jornada

08 de marzo de 2024 00:02

El 1% más rico está construyendo refugios de seguridad para sobrevivir ante posibles colapsos ambientales, sociales y nucleares. La tendencia no es nueva, pero se ha multiplicado desde la pandemia y la invasión de Ucrania. Sobre todo, las modalidades han cambiado, a tono con los tiempos neoliberales.

Las cientos de páginas web que ofrecen refugios o búnkeres, aseguran que el negocio está al alza. Desde un crecimiento de 400 por ciento en Estados Unidos, según New York Post (4/4/20), hasta una empresa de Berlín que asegura que las consultas se centuplicaron según un informe de la Deutsche Welle (18/1/23).

El portal xataka.com destaca que las empresas dedicadas a la “gestión de emergencias” o “preparacionismo”, como lo denominan, ganarán 149 mil millones de dólares en 2025. Estima que 50 por ciento de los multimillonarios de Silicon Valley tiene al menos un refugio blindado, cuyo costo oscila entre 40 mil y 2.5 millones de dólares (2/8/23).

Un recorrido por los portales dedicados a ofrecer refugios, permite aquilatar la sofisticación propia de una clase dominante que no escatima recursos para vivir mejor.

Durante la guerra fría los países europeos, la Unión Soviética y China –donde era más probable una conflagración nuclear– construyeron enormes refugios para sus poblaciones. La República Federal de Alemania contaba con unos 2 mil refugios que podían albergar a 3 millones de personas, 5 por ciento de la población. En Finlandia se construyeron más de 50 mil refugios, para 80 por ciento de la población.

En China, Mao llamó al pueblo a construir refugios. La respuesta fue rápida y masiva, al punto que “las 75 ciudades más grandes del país habían cavado suficientes túneles como para albergar a 60 por ciento de sus poblaciones” (Clarin, 10/8/20).

La URSS construyó ciudades subterráneas para millones de personas.

Sin embargo, ahora los refugios son bien diferentes, como destaca un reciente informe de Asia Times (1/3/24) titulado “Los búnkeres de los multimillonarios son el nuevo tecnofeudalismo”. Mark Zuckerberg, el multimillonario creador de Facebook, ha estado comprando grandes extensiones en la isla hawaiana de Kauai, donde está construyendo un complejo de 400 millones de dólares australianos. La finca está vigilada por numerosos guardias.

Además del “enorme búnker subterráneo”, tiene varias mansiones de gran tamaño, maquinaria dedicada a la potabilización, desalinización y almacenamiento de agua. “Está criando su propio ganado, alimentándolo con nueces de macadamia cultivadas en el rancho y también con cerveza elaborada allí”, señala el informe de Asia Times firmado por los profesores Katherine Guinness, Grant Bollmer y Tom Doig.

Al parecer, unos cuantos multimillonarios entienden que ya no alcanza con construir refugios subterráneos blindados, sino que buscan crear ecosistemas propios, porque la supervivencia de la clase dominante depende de desarrollar y controlar un ecosistema propio, en el que no sólo pueda salvarse del colapso, sino continuar con sus vidas.

Como se ve, ya no se aspira a proteger a las poblaciones de las catástrofes, sino apenas a la propia familia, lo que muestra el triunfo de un individualismo feroz que no toma en cuenta al resto de la humanidad. Ambos hechos están mostrando la deriva actual de los sectores dominantes en el mundo.

Para los sectores populares no son éstas las alternativas posibles ante el colapso. No pueden construirse refugios, ni ecosistemas propios. Apenas pueden sobrevivir bajo el capitalismo de guerra que los condena al sótano sistémico. Los estados y los gobiernos en América Latina no tienen la menor previsión sobre las catástrofes por venir. Alcanza con recordar que millones de personas en grandes ciudades, como la Ciudad de México o Sao Paulo, no tienen agua potable ni alcantarillado.

Los pueblos no pueden encarar el colapso de modo individual sino comunitario, con base en trabajos y cuidados colectivos. A la luz de lo que hace el 1% más rico, podemos comprender mejor la tenacidad de los pueblos en el cuidado de su mundo natural y el empeño de los de arriba en destruir los ecosistemas que pueden proteger la vida en común.

Por lo que conozco, sólo el EZLN ha promovido un debate sobre el colapso, hace ya nueve años en el seminario El pensamiento crítico frente a la hidra capitalista. Han sido coherentes y se preparan para sobrevivir a la multiplicación de desastres, como enseñan los 21 comunicados desde octubre de 2023 hasta el 30 aniversario del levantamiento del 1º de enero de 1994.

Lamentablemente, ni las izquierdas progresistas, ni las academias ni el grueso de los movimientos, están adoptando una actitud similar de pensar y hacer ante el colapso. Sólo algunos pueblos originarios comparten las preocupaciones zapatistas, en base a sus propias cosmovisiones.