Publicado: 7 abr 2016 04:24 GMT
La tecnología de la 'cadena de bloques', conocida también como 'blockchain', excluye la necesidad de mediadores para realizar operaciones financieras.
Foto ilustrativapixabay.com
La 'cadena de bloques' se convirtió en objeto de discusiones entre financieros a finales de los años 2000, tras la aparición de los bitcoines, cuyo funcionamiento aseguraba. La tecnología permite a todos los usuarios controlar en tiempo real el valor de las operaciones realizadas y que cada transacción se registre públicamente. Este tipo de sistemas permite el intercambio de dinero y activos de manera más rápida y barata, sin que se dependa de una larga cadena de intermediarios y por ende puede llevar a la desaparición de los bancos, opina el autor de la publicación en el portal Lenta.ru.
Recientemente el vicepresidente del banco ruso Sberbank, Andréi Sharov, anunció que al cabo de 10 años quienes trabajan en los bancos podrían perder sus puestos debido al desarrollo de las 'cadenas de bloque' y plataformas de créditos del tipo 'peer-to-peer', o red entre iguales. El presidente de Sberbank y exministro de Desarrollo Económico de Rusia, Herman Gref, expresó el año pasado una opinión parecida al anunciar que la tecnología de la 'cadena de bloque' abría grandes oportunidades para un intercambio de información seguro.
Sin embargo, cabe destacar que la capacidad de tráfico de las 'cadenas de bloque', por ejemplo de bitcoines, es muy baja, cientos de veces inferior a la de sistemas de pago como Visa o MasterCard. "Además, muchas funciones bancarias, como guardar depósitos o dar préstamos, sobre todo grandes sumas, seguirán siendo actuales", sostiene Dmitri Migunov.
Entre los que más sufrirán las consecuencias del desarrollo de dicha tecnología el periodista señala a los 'brokers' y sistemas de compensación, puesto que millones de usuarios podrán jugar en la bolsa directamente sin mediadores. "De una manera u otra, el sistema financiero global está a la espera de una verdadera revolución a corto plazo. Es poco probable que todas las instituciones de crédito la sobrevivan, pero los que consigan adaptarse serán los nuevos líderes en el mercado", concluye Migunov.