Fidel


"Peor que los peligros del error son los peligros del silencio." ""Creo que mientras más critica exista dentro del socialismo,eso es lo mejor" Fidel Castro Ruz

domingo, 18 de julio de 2021

¿A dónde va La Habana?

Algunas reflexiones sobre el recién aprobado e inadvertido Plan General de Ordenamiento Urbano de la capital.

en Cuba



El pasado 22 de junio se publicó en la Gaceta Oficial el Acuerdo 9101 del Consejo de Ministros sobre la aprobación del Plan General de Ordenamiento Urbano de La Habana, hecho que ha pasado casi desapercibido. Solo el periódico provincial Tribuna de La Habana redactó una breve nota en la que anunciaba la aprobación del Plan, entre otros, como los de las pequeñas cabeceras municipales de Trinidad, Baracoa o Caibarién. Ninguno de los periódicos ni de los canales televisivos nacionales mencionó el acontecimiento. En efecto, se trata de un acontecimiento.

Desde 1984 —hace ya casi 40 años— el Consejo de Ministros no aprobaba actualizaciones del Plan para la capital. Se trataría, entonces, de una muy buena noticia dado el descontrol actual del desarrollo urbano en la ciudad más grande del país. Pero, por desgracia, la noticia tiene sus claroscuros.

El contenido del Acuerdo del Consejo de Ministros se refiere a la aprobación de un documento elaborado en su mayor parte en el año 2013. Por razones que desconozco su examen se fue dilatando a lo largo de ocho años (¡!) y no fue hasta ahora que tuvo aprobación. Dicho Plan debiera constituir, en principio, el principal instrumento de dirección del Gobierno para la conducción del proceso de renovación y transformación de la capital; pero tengo mis dudas de que pueda cumplir su cometido y explicaré, a continuación, por qué.

Boulevard de San Rafael. Foto: Otmaro Rodríguez

El contenido del Plan

El primer punto del Acuerdo dice que “para su implementación, evaluación y control el Plan contiene:

  1. El modelo de ordenamiento urbanístico y sus determinaciones;
  2. las regulaciones urbanísticas; y
  3. el programa de acciones para su gestión y control”.

A continuación, se puede examinar el enunciado de casi un centenar de “determinaciones”, pero, por desgracia, tanto las “regulaciones urbanísticas” como el “programa de acciones” para su gestión y control brillan por su ausencia.

Las determinaciones comprenden desde objetivos de una excesiva generalidad como “Revertir el deterioro de las áreas centrales” o “Rehabilitar y completar las infraestructuras y viales” hasta otras precisas en extremo como “trasladar la estación 19 de noviembre (Tulipán) para áreas aledañas a la Ciudad Deportiva”. El conjunto es demasiado heterogéneo como para poder constituir una efectiva guía para la acción gubernamental. Hay, sin embargo, indicaciones que, aunque van a contrapelo de lo que hoy se está haciendo, si se implementaran adecuadamente podrían ser de mucho beneficio para la ciudad.

Pondré algunos ejemplos:

  • Controlar el crecimiento hacia la periferia (es decir, revertir la dirección actual de crecimiento de muchas inversiones, en particular de vivienda)
  • Realizar obras con un alto nivel de diseño y ejecución a partir de la convocatoria de concursos y el fomento de otras formas de gestión en la ejecución de las obras (cosa que hoy no existe).
  • Desarrollar el proceso inversionista de forma integral como sigue:
    1. En las nuevas zonas garantizar la urbanización previa a la construcción de viviendas (en general, se hace a posteriori)
    2. Diseñar tipologías de viviendas para diferentes destinos (superar el proyecto típico)
    3. Incorporar la modalidad de construcción de viviendas por cooperativas de ayuda mutua (hoy no existe)
  • Controlar la tala y poda indiscriminada de árboles [reclamo popular]
  • Desarrollar el ferrocarril urbano y suburbano
  • Jerarquizar el espacio público en el borde marítimo [se refiere a la Bahía de La Habana]
  • Desarrollar y potenciar las industrias locales
  • Promover el desarrollo de las industrias creativas y evaluar el patrimonio industrial en desuso.
  • Eliminar o remodelar los barrios precarios, ciudadelas y edificios en estado crítico, priorizar la zona central donde se concentra el deterioro.

Pero son muchas las preguntas al respecto: ¿quién se ocupará de controlar el cumplimiento de tales indicaciones? ¿Quién tomara la decisión de incluir las inversiones necesarias para llevarlos a cabo? ¿Deberán cumplir los Ministerios las indicaciones de este Plan? ¿Tiene la capital el presupuesto suficiente para llevarlas a cabo?

Mientras estas preguntas no tengan respuesta las determinaciones no van más allá de los buenos deseos.

Calles Belascoain y Reina. Foto: Otmaro Rodríguez

Las regulaciones urbanísticas y el programa de acciones

El segundo componente del Plan lo constituyen las regulaciones. En el Acuerdo solo se apunta su objetivo y se aclara que “son de obligado cumplimiento para la acción constructiva tanto estatal como ciudadana”, pero su contenido no se expresa. Dado que el quinto punto del Acuerdo aclara que el Instituto de Planificación Física (IPF) publica en su sitio web, de manera integral, el Plan, me dirigí a la página web mencionada. En ella encontré un “Documento General” del Plan que tampoco muestra el contenido de las regulaciones que hay que cumplir. Un rastreo detallado solo desembocó en las regulaciones de dos municipios (los de Guanabacoa y Centro Habana). Esto es llamativo porque se han publicado, a mi conocimiento, al menos tres libros contentivos de las regulaciones del Vedado, del Malecón Tradicional y de La Habana Vieja.

¿Cómo puede ser de obligado cumplimiento ciudadano una norma que se desconoce porque no se publica?

El tercer componente del Plan, el que permite convertirlo en realidad es el programa de acciones. Pero este también brilla por su ausenciaAl menos las regulaciones merecieron un capítulo del Acuerdo (aunque de un solo artículo), pero el programa de acciones desaparece y se convierte en un Capítulo cuarto titulado “Gestión y Control”, que abordaré más adelante. La factibilidad del Plan depende, en buena medida, del programa de acciones. Si estas no se especifican todo puede diluirse en un conjunto de buenas intenciones. 

El Acuerdo culmina con un Anexo único que explica la estructura del Documento del Plan General (el publicado en la página web del IPF) y especifica que su alcance es para el período de 2019 al 2030 (¿cómo un plan publicado en 2021 va a dirigir lo realizado en años anteriores?).

Cuando se consulta el documento en la página web se constata que, a su vez, tiene tres anexos:

  1. Los planos (que delatan en su cuño la verdadera fecha de redacción del Plan: 2013)
  2. Un estudio de producción (¡con las instalaciones a desactivar y reubicar en los años 2014-2016!)
  3. El plan de acciones que ahora se convierte en un plan de acción (en singular). Lo paradójico es que no contiene ninguna acción.

Se trata, de hecho, de una estimación del presupuesto necesario para cada uno de los sectores basándose en el nivel de gastos de los años 2017 y 2018 y extrapolándolo al período 2019-2030. Y la tabla sin duda contiene errores groseros: el primer renglón se refiere a las inversiones en el sector de educación. En el 2017 fueron 57 millones, al año siguiente 86 millones. Sin embargo, el promedio anual para el periodo 2019-2030 se reduce a menos de tres millones anuales, sin más explicaciones.

¿Cómo dirigir y controlar la ejecución de un Plan si se desconoce buena parte su contenido? El valor real de un Plan no es otro que su factibilidad de ejecución. ¿Qué trascendencia puede tener entonces un plan que no prevé ni especifica las inversiones necesarias para llevarlo a cabo?

Avenida de los Presidentes (calle G) y calle 25, El Vedado. Foto: Otmaro Rodríguez

El control del Plan

El último capítulo del Acuerdo afirma en su artículo 15 que: “la gestión y el control del Plan se realiza en correspondencia con el programa de acciones a ejecutar en el corto, mediano y largo plazos”. Si el programa no existe, es obvio que el Plan no es ejecutable ni controlable. Y termina el artículo: “el programa contiene los objetivos, las acciones, las prioridades y secuencias, agrupados en tres líneas estratégicas”. ¿Dónde se encuentra ese contenido? ¿Cuáles son las tres líneas estratégicas?

A continuación, se afirma que “El Gobernador de la provincia de La Habana entrega al IPF, antes del 30 de abril de cada año, el informe anual de la evaluación de la implementación del Plan”. Si no existe un programa de acción ni un sistema de indicadores, ¿cómo el Gobernador podrá elaborar su Informe anual? Informe que, dicho sea de paso, sería extremadamente importante que fuera de conocimiento público. Al fin y al cabo, el Gobierno no solo se debe al Presidente del IPF sino, en primer lugar, a sus conciudadanos. ¿Cómo se puede llamar a la participación ciudadana sin dar a conocer esta elemental información?

Por último, resulta llamativo que el Plan ni siquiera mencione el hecho de que en el año 2019 se ejecutó el que debió ser sin duda el programa más abarcador de inversiones en la ciudad en lo que va de siglo. ¿Bajo qué Plan se organizó el programa del 500 aniversario? ¿Cuáles fueron sus resultados?

El presente Plan ni lo menciona, por la sencilla razón de que ya estaba redactado mucho antes de que se organizara ese programa.

Calle Reina. Foto: Otmaro Rodríguez

El (des)ordenamiento de La Habana

El cambio de siglo ha significado para La Habana un importante punto de inflexión: se trata de una ciudad que ya no crece demográficamente desde hace más de 20 años. Ello exige un cambio de paradigma en su crecimiento físico, que debe pasar de extensivo a intensivo, conteniendo su expansión y centrándose en la oportuna transformación, rehabilitación, restauración y mantenimiento de lo existente. Los costos sociales de su crecimiento periférico (en tiempos de transportación) y los costos económicos de la ampliación de las infraestructuras necesarias son ya excesivos e inasumibles. Asimismo, hay que poner al servicio de la ciudad sus espacios libres e intersticios, como las edificaciones vacías, abandonadas o inutilizadas, de todos los organismos del Estado, con el fin de otorgarles un uso acorde a su localización, tipología y valor cultural.

Por otra parte, La Habana constituye un patrimonio cultural excepcional, fuente de orgullo e identidad nacional. Es una ciudad reconocida internacionalmente como una joya urbanística. Si hay que crecer dentro de ella, debe hacerse con cuidado y con conocimiento. La mera yuxtaposición de edificaciones no hace una ciudad. Se requiere proporción, armonía y de no comprometer áreas estratégicas con urbanizaciones inconexas de pobre diseño. Todo ello demanda de una nueva visión del urbanismo y la arquitectura que trasciendan al buldócer y al proyecto típico. Los recursos materiales siguen siendo importantes, pero ahora los decisivos son los intelectuales y científicos. Planeamiento, proyecto, gestión, diseño y nuevas tecnologías se convierten en instrumentos esenciales.

La realidad, sin embargo, difiere de lo que la ciudad requiere y merece. De una parte, se sigue creciendo en su periferia, localizando por aquí y por allá pequeñas comunidades —más rurales que urbanas— sin identidad, alejadas del centro, con poca o ninguna urbanización y, a veces, sin los servicios primarios. Por otra parte, la inserción de edificaciones en el interior de la ciudad es frecuentemente inarmónica, desarticulada de su contexto (por ejemplo: nueva vivienda en áreas del aeropuerto de Ciudad Libertad), violatoria de las regulaciones, con volúmenes de construcción a veces insuficientes, a veces excesivos (como el hotel en construcción en 23 y K, El Vedado). Por último, la muy necesaria reutilización y refuncionalización de edificios es, fuera del Centro Histórico, prácticamente excepcional y no siempre afortunada, en particular en las adaptaciones a vivienda.

Avenida Las Misiones. Foto: Otmaro Rodríguez

 Las raíces del problema

Un análisis de las raíces del problema identifica diversas causas que sugieren, por sí mismas, vías de actuación:

  • La debilidad del planeamiento: El Plan General de ordenamiento urbano, las regulaciones urbanísticas y las ordenanzas de la construcción son muy poco divulgadas, por lo que su cumplimiento es limitado. El programa de acciones que debería coordinar las inversiones sectoriales no existe, por lo que el Plan recién aprobado no está en condiciones de dirigir el proceso inversionista en la ciudad. No solo esta desactualizado, sino que se trata de un documento incompleto. Es urgente el reforzamiento de la escala de proyecto de zona, intermedia entre el planeamiento urbano y la arquitectura. Para ello será útil la alianza con las Universidades.
  • Los Proyectos insuficientes y repetitivos por el facilismo constructivo: La construcción de urbanizaciones y edificios de baja calidad comprometen un valioso suelo y afectan sensiblemente la imagen urbana, con modelos repetitivos de pobre expresión arquitectónica o, en ocasiones, diseños importados acríticamente de contextos ajenos al nuestro. Su solución, paradójicamente, depende esencialmente del principal recurso con el que cuenta el país: sus profesionales, en este caso los arquitectos e ingenieros, y de su capacidad de innovación y creatividad. Los proyectos debieran ajustarse a cada demanda y contexto y, por ello, tener un diseño específico. Es esencial preservar el capital humano ya formado, abrir las perspectivas para promover la joven arquitectura cubana y defender la prioridad de los profesionales nacionales frente a la intervención no justificada de los extranjeros. Hay que reglamentar y convocar los concursos, así como restablecer las licitaciones para adjudicar los contratos públicos.
  • Un suelo administrado sectorialmente: el suelo urbano está administrado por organismos sectoriales que se consideran dueños de él, lo que les induce a tomar decisiones inconsultas o arbitrarias sin estar facultados para ello. Es necesaria una norma jurídica que defina los derechos privados y públicos sobre el suelo y, en particular, las competencias del gobierno de la ciudad sobre el patrimonio inmobiliario estatal (suelo y edificaciones).
  • La carencia de urbanización: aun estando proyectada, a menudo no se ejecuta, o no se articula con la preexistente, o sigue a la construcción de las viviendas cuando debía precederla, comprometiendo con ello valiosísimas zonas de la ciudad. El Estado debiera centrar su esfuerzo en proveer urbanización, dirigiendo, ordenando y facilitando la edificación por medio de ella, sin olvidar la calidad de los espacios públicos y las áreas verdes.
  • Tecnologías constructivas inadecuadas: las tecnologías constructivas actualmente disponibles —tanto para vivienda nueva como para rehabilitación— son poco utilizables en el tejido urbano existente. La intervención en la ciudad construida necesita innovación, flexibilidad y variedad, y también que las tecnologías empleadas permitan una relación armónica entre lo nuevo y lo viejo.
  • La (in)disciplina urbanística y el (des)control urbano: con demasiada frecuencia se altera el debido proceso inversionista y se comienza la ejecución de obras sin los estudios y trámites pertinentes. De forma reiterada se inician obras que violan procedimientos, regulaciones y dictámenes incluso en zonas protegidas por leyes de Patrimonio, obviando las autorizaciones de la Comisión de Monumentos. Las Direcciones de Planificación Física requieren de refuerzo técnico (Consejos Técnicos Asesores, Arquitectos Municipales, etc.), así como apoyo político para poder resistir las presiones —en ocasiones improcedentes— de inversiones priorizadas.
Paseo del Prado. Foto: Otmaro Rodríguez

Es evidente que el gobierno de una ciudad necesita de un instrumento que compatibilice las inversiones sectoriales sobre el territorio urbano, de un presupuesto que le permita suplir las insuficiencias de los programas sectoriales y, también, de instituciones técnicas y administrativas fortalecidas, capaces de coordinar e integrar los esquemas de desarrollo municipal que se han comenzado a elaborar. La Habana no es, ni mucho menos, la suma de sus municipios. La capital del país requiere de una atención mucho mayor que la que se ha dedicado al llamado Plan General de Ordenamiento Urbano.



Carlos García Pleyán

Barcelona, 1946. Sociólogo cubano. Doctor en ciencias técnicas, profesor e investigador titular. Trabajó durante treinta años en el campo del urbanismo y el ordenamiento territorial en el Instituto de Planificación Física y diez en la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación, COSUDE. Fue profesor en la Universidad Tecnológica de la Habana y la Universidad Politécnica de Cataluña en Barcelona.

¿ Cómo marcha la vacunación de ciclo completo contra el covid en Cuba en relación a países líderes seleccionados?*

Por Humberto Herrera Carlés

La vacunación contra la covid de ciclo completo en los países, es uno de los  requisitos para aspirar a la inmunidad y tener en control la pandemia. Y la disciplina en el comportamiento individual sigue siendo el mejor de todos los requisitos.

Hay 197 países que vienen informando la vacunación de ciclo completo, entre ellos hay pequeños territorios que son en la práctica islitas,  que por cierto ocupan los lugares del (1-9), y hay 109 países por debajo de Cuba a pesar de que se está casi empezando la misma. 

Cuba  ( con sus vacunas) ocupa el lugar 87 en el mundo  con el 18.14 % de su población vacunada completamente,  es decir 1 918 333 ciudadanos. 

 En el ritmo de vacunación, en la última semana, ocupamos el 4to lugar en el mundo. Y nuestras autoridades aspiran al finalizar el año tener a toda la población vacunada, a pesar de las dificultades por comprar hasta jeringuillas por el bloqueo de EEUU. .


Todo lo que abarca el continente americano, los países que se encuentran por encima de Cuba son los siguientes:


Mientras esto ocurre, hay un proceso contrario de incremento de casos de covid en niveles importantes en nuestro país, desde enero a la fecha cada mes ha superado el número de casos confirmados, y el de fallecidos a su precedente, que por tanto constituyen récords y aumento de la propagación de la pandemia.

Vacunación y covid.

He tomado de muestra siete países, que tengan millones de habitantes a diferencia de los 9 primeros en el ranking,  que se encuentran entre los lugares 10 al 27  de  ciclo completo de vacunación,  y además Cuba. 
 

¿Cuál es la situación actual de estos países con los confirmados de covid por millón de habitantes?



Reino Unido ocupa el primer lugar, a pesar de tener el país el 52.64 % de su población con ciclo completo de vacunación, le sigue Cuba y en tercer lugar España con el 49.99 % de su población vacunada. Esto es importante, porque estos dos países comparados con el 18.14 % de Cuba, tienen mayor contagio relativo acorde al nivel de vacunación. 

Pero incluso Chile,  que exhibe un formidable 61.28 % de la población vacunada con ciclo completo, y está entre los 5 países de la parte baja de la gráfica anterior,  semanas atrás (5 de junio) se reportaban nuevos confinamientos a la población para controlar la pandemia y tenía una tasa de contagio de (378.05%) , y hoy tiene ya (99.55 %). 

Cierto además que depende en un porciento,  de la vacuna aplicada, donde hay que ver la tríada de efectividad en  ( protege de contagio, impide  ingresos en UCI, e impide la muerte). 

O sea, Cuba con su 18.14 % de vacunación de ciclo completo hasta el presente,  le queda un trecho por recorrer. Pero la buena noticia es que la vacuna Abdala  con el 92.28 % de eficacia ante el padecimiento y el 100 % ante la muerte, deben esperarse resultados esperanzadores, siempre que estén acompañados de la disciplina individual como  se ha demostrado en otros países.

Fallecidos

Obsérvese estos mismos países con la tasa de fallecidos por millón de habitantes acumulado, que es en última instancia, lo mas importante, salvar vidas humanas.


Como se observa, la diferencia entre Cuba y Canadá ( 2do lugar) en la tasa de fallecidos es de 542.69 %, y con los Estados Unidos de 1 681.19 %. Incluso con el rebrote actual de Cuba y el incremento del número de fallecidos.

Este es el comportamiento promedio a 7 días en la actualidad. 



En el gráfico anterior Cuba se encuentra en estos momentos en  2do lugar (4.29 %) detrás de Chile (5.03%), solo que este último viene a la baja y Cuba a la alta y  no se percibe una disminución aún. Así un elemento que llamo la atención es que los "picos" anteriores del resto de los países del gráfico,  fueron mucho mas altos que los que exhibe Cuba en la actualidad, y estos países llevan meses vacunando a su población.  Así por ejemplo los EE. UU. el 13 de enero del 2021 tenía una tasa de fallecidos a 7 días de 10.35 % y hoy tiene 0.79 %, y empezó a vacunar en la 2da quincena de diciembre del 2020, es decir han transcurrido 7 meses. 

Hay que seguir observando el comportamiento en Cuba , pero en momentos similares de la vacunación, ellos pasaron y pasan aún por estos rebrotes, solo que en el caso de Cuba todo lo quieren politizar y presentarlo como algo extraordinario, a pesar del bloqueo genocida de los EEUU. Pero la realidad incuestionable está ahí. 

Sería conveniente que se publicaran por el MINSAP en que territorio se encuentra la población de ciclo completo de vacunación.  Veremos cuando tengamos 6 meses de vacunación o el 90 % de la población vacunada,  en que situación nos encontramos, pero hay razones para poder avanzar contra esta pandemia y abrir la economía y el país. 

* Fuente de Datos: MINSAP y Ourdata.

ACELERAR, AVANZAR SIN DETENERNOS NI PERDER TIEMPO.

 Por Joaquín Benavides Rodríguez *

 La respuesta dada por el Gobierno casi de un día para otro al reclamo de facilitar la entrada al país a través de las aduanas, de productos alimenticios, de aseo y medicinas y medicamentos, establece una pauta; lo anuncio a principios de semana, el viernes fueron a la Mesa Redonda la Ministra de Finanzas y el Jefe de la Aduana, con las regulaciones ya publicadas en la Gaceta Oficial, y el lunes 19 comienzan a aplicarse. Alguien pudiera señalar que pudo hacerse antes, y posiblemente sea verdad, pero lo realmente importante es que ya está decidido y se comienza a aplicar enseguida, el lunes.

El propio viernes 16 la Ministra de Trabajo anuncio una decisión definida por ella con razón de gran calado, pues introduce un cambio profundo, revolucionario e inédito en las empresas estatales de cómo organizar el salario. Debió haberse hecho antes, pero se hizo ahora y yo por lo menos lo aplaudo. Aplaudo también que la Ministra haya anunciado en la propia reunión que ya tenían el decreto preparado y presentado en las oficinas del Consejo de Ministros, asumo yo que para su firma inmediata. Ella anunció que se comenzara a implementar con agilidad. Esa es de las medidas que efectivamente remueven de arriba abajo y de abajo a arriba a las organizaciones empresariales estatales. Hay que preparar algunas condiciones de capacitación, pero mínimas, pues pienso que hay que confiar en los directores de las empresas, sus consejos de dirección y en la organización sindical correspondiente. Crea condiciones esta medida para que puedan las empresas estatales elevar su eficiencia y competitividad con respecto al sector privado.

Pero donde no noto, al menos yo, la misma diligencia y sentido de urgencia es en lo referente a las micro, pequeñas y medianas empresas privadas, las Pymes. El viceprimer ministro informó que ya tenían lista todas las regulaciones para su firma y puesta en vigor, pero siguió hablando de crear condiciones. Y sabemos que ese es el campo donde la burocracia se empeña en demorarlo todo. Una vez firmados todos esos decretos- leyes, decretos y resoluciones, que sabemos que es un acto formal, porque según explico el vice premier todo eso está trabajado en detalle por los especialistas y dirigentes de decenas de organismos, la preparación de condiciones depende de los ciudadanos que decidan invertir su dinero en las Pymes. Pero en su intervención, el alto funcionario no expreso para las Pymes sentido de urgencia. Más bien una tarea que el Presidente le ha orientado cumplir con rapidez. Pero la que es realmente urgente es esa. Tiene un atraso de años y es determinante para que la economía empiece a moverse y que el grave problema social del desempleo y la marginalidad comience a ceder. Si se lograra que estuvieran firmados todos esos instrumentos legales para la próxima fecha del 26 de Julio, en que conmemoraremos el 68 aniversario del Asalto por Fidel y la Generación del Centenario al Cuartel Moncada, sería una magnífica oportunidad de poner en evidencia de que el Gobierno Va con Todos realmente en la enorme tarea de sacar de la crisis económica y social a la Nación Cubana.

En su comparecencia televisiva desde Palacio, el Presidente señalo críticamente la situación social de amplísimos sectores de nuestra sociedad, que están protegidos con educación y salud, pero no lo están con condiciones de vida, de trabajo, de vivienda y de posibilidades de promoción social. No lo dijo así, pero el fenómeno de los coleros, el trapicheo y los intermediarios ilegales y otros fenómenos irregulares vinculados a la subsistencia, están íntimamente relacionados con los cientos de miles de hombres y mujeres jóvenes que carecen de empleo formal y que la estadística estatal, lamentablemente no expone con claridad. Esa es la base social, sin duda, de la inconformidad de jóvenes que viven en muy precarias condiciones, que no ven futuro, ni siquiera de trabajo, y esa inconformidad se va convirtiendo en actitudes políticas. Para ellos revolución y socialismo es desempleo, marginalidad y vida en condiciones precarias. El discurso y la propaganda oficial va por una parte y su realidad va por otra.

Las MyPymes, los TPCP, las Cooperativas no agropecuarias no son el problema, son la solución. Y son la solución revolucionaria y socialista para salvar no solo la empresa estatal, para que pueda resurgir eficiente y competitiva de esta crisis, sino principalmente para poder incorporar a toda nuestra población productivamente a enfrentar creadoramente los graves problemas que tiene el País. Y no demorar más. El Gobierno no debe seguir permitiendo que la burocracia prevalezca. Y lo ha venido permitiendo. El Presidente, con otras palabras, lo reconoció ayer.

En la Economía, Acelerar, Avanzar sin detenernos ni perder tiempo, debe ser  la Palabra de Orden. En la Política, debe ser Unir.

*Joaquín Benavides Rodríguez.   Ocupó el cargo de Jefe del Departamento económico del Comité Central (1977- 1980). El de Ministro- Presidente del Comité Estatal de Trabajo y Seguridad Social de Cuba (1980-1986). Fue Ministro de Gobierno y Presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Dirección de la Economía (1986-1991). Entre 1991 y 2003 ocupó el cargo de Viceministro de Economía del Ministerio de Transporte

Nuevas medidas para viejos problemas

A propósito del grupo de medidas anunciadas por el gobierno cubano para aliviar la escasez, proveer de mejores condiciones de gestión a la Empresa Estatal, e informar por donde anda el proceso de construcción del entorno regulatorio para las PyMES en general.






En una Mesa Redonda especial el gobierno cubano anunció un grupo de nuevas medidas. Me referiré a aquellas que tienen que ver en lo fundamental con la estrategia económica aprobada. La misma estrategia que ha sido varias veces actualizada para atemperarla a las cambiantes circunstancias que han caracterizado al mundo y a la economía cubana desde su aprobación hace ya casi dos años.

Sin dudas y por diversas razones el contexto es muy diferente al de hace apenas un mes. El crecimiento desproporcionado de los contagios por COVID-19 y sus fatales consecuencias en términos humanos, el sobregasto que ello ha significado, la utilización cínica de la administración Biden de la herencia Trump en materia de política contra Cuba, la creciente insatisfacción de la población, para nada subjetiva, el cerco mediático, los dolorosos hechos ocurridos este pasado fin de semana, el sórdido reclamo a la intervención foránea, todos ellos hacen que el contexto sea diferente y la urgencia alcance otra dimensión.

Es en este contexto que el gobierno cubano anunció un grupo de medidas, algunas dirigidas a aliviar la escasez, otras a proveer de mejores condiciones de gestión a la Empresa Estatal, y a informar por donde anda el proceso de construcción del entorno regulatorio para las PyMES en general.

“Autorizar excepcionalmente y con carácter temporal la importación vía pasajero con equipaje acompañante, alimento, aseo y medicamentos sin límite de valor de importación y libre de pago de aranceles hasta el 31 de diciembre de 2021. Los límites los pone la aerolínea”.

La eliminación temporal de las restricciones para la importación de medicamentos, productos alimenticios y artículos de aseo puede aliviar el déficit de oferta, sin dudas. No dispongo de datos actualizados para poder hacer una estimación del impacto positivo de dicha medida sobre la oferta total, pero cualquiera sea este, será bienvenido.

No obstante, es bueno entender que el número de vuelos internacionales se ha reducido sustancialmente desde que comenzara la pandemia. De volar a prácticamente todos los aeropuertos internacionales del país, de tener varias decenas de vuelos diarios, hoy sólo quedan tres líneas aéreas estadounidenses operando en el país, todas obligadas por la administración Trump a utilizar únicamente el aeropuerto de la Habana. Hoy American Airlines, Jet Blue y Southwest sólo pueden utilizar este aeropuerto, y debido a las restricciones de la pandemia han visto reducido el número de vuelos a uno semanal. Es cierto que emigrantes cubanos hay en todos los países, pero también lo es que más del 85% de toda la emigración se concentra en Estados Unidos. De esta suerte, hay una restricción sobre la cual poco podemos hacer que limita el potencial beneficioso de la medida.

También debería permitirse que aquellos negocios privados que venden artículos varios pudieran vender de forma abierta estos productos. De todas formas va a ocurrir, ya sea a través de la avanzada tecnología del susurro, a través de grupos de Whatsapp o usando palomas mensajeras. Es preferible que sea abierto y transparente a que ocurra de esa otra forma que genera ese otro mercado negro/gris/alegal que, entre otras cosas, permite la evasión impositiva y multiplica los precios. Una vez, creo que en esta misma columna defendí la existencia de las “quincallas”, siempre que fueran legales y hoy las vuelvo a defender. Legalizarlas no debe demorar tanto como otras regulaciones y así evitamos el asedio de los inspectores y la corrupción que le acompaña.Pero no todo está perdido. Otro canal para incrementar la oferta por esta vía, sería extender esas excepciones temporales al envío de paquetería, incluso sería más barato para las familias cubanas y establecer un canal especial de pronta entrega para los envíos consistentes en medicinas, alimentos y artículos de aseo y limpieza. Estoy seguro que es posible hacerlo y la relación costo/beneficio será muy favorable, tanto en lo económico como en lo social.

El bloqueo poco podrá contra esta medida, excepto que la Administración Trump, perdón, Biden, se empeñe en lo contrario de forma abierta y se haga más evidente aun su cinismo. Cierto que esta tampoco es LA MEDIDA que resolverá la RESTRICCIÓN DE OFERTA, pero ayudará a reducirla, sin lugar a dudas. Eso sí, hagámoslo como es y no a medias.

La empresa estatal y su fondo de salario

No es esta la primera vez que una idea así se maneja. No hacía falta la unificación cambiaria y monetaria para hacerla. Pero tampoco vale la pena deshacer el camino y preguntarse por qué no se hizo antes. Lo cierto es que debe proveer a los empresarios de mejores condiciones para manejar su empresa. Sin embargo, se debería fijar una tarifa mínima horaria; es algo que no debe quedar a la discreción de la administración de cada empresa. Incluso existe una regulación así sobre el salario para el sector cuentapropista. Pues bien, usemos esa y así vamos nivelando las reglas de juego. También los sindicatos deberán jugar un papel más activo, pues aparecerán contradicciones que tendrán que ser resueltas vía negociación.

“(…) remover la empresa estatal socialista (…) un fondo de salario aprobado y tenga la autonomía de distribuir ese fondo en correspondencia con las diferentes plazas (…) Es una transformación audaz.

Sin dudas será un proceso de aprendizaje, sin dudas habrá que preparar a los empresarios, sin dudas habrá que escoger empresas para empezar con éxito, pero no repitamos la fórmula del experimento perpetuo que tanto nos ha retrasado. Una parte de ese aprendizaje será por el método de aprender haciendo, porque no hay manera de reproducir en un seminario todas las complejidades que genera la conducción de una empresa en un ambiente de negocios tan poco estándar como el que tiene nuestro país. ¿Acaso cuántos se dieron para emprender el “ordenamiento”?

Un viejo empresario, muy buen amigo, además, me dijo una vez hace varios años ¿Y cómo quieren que exporte si nunca me han dejado hacerlo?

Las PyMEs estatales

Siempre han existido de facto pequeñas y medianas empresas estatales. ¿Qué es sino una UEB con 30 trabajadores? ¿O un “establecimiento” con cinco?

Es verdad también que si fuéramos consecuentes y aplicáramos la definición de medios de producción fundamentales que aparece en la conceptualización, muchas de esas futuras PyMEs estatales no tendrían porque seguir siendo estatales, pero también es cierto que la resistencia no creativa puede mucho, incluso en contra de la eficiencia y de la productividad, que es como ir en contra del país.

Lo relevante, la intención de separar la propiedad de la gestión es, sin dudas, el término medio. Aquí también habrá que aprender, pero igual que en el caso anterior, distribuyamos la carga de aprendizaje entre los cursos y la práctica del aprender haciendo. Ojalá llegue rápido el cambio, porque la demora cuesta.

¿Quiénes serán los dueños? “(…) las unidades presupuestadas, empresas u Organizaciones Superiores de Dirección Empresarial y también centros científicos y universidades que puedan actuar como socios o dueños de micro, pequeñas y medianas empresas estatales (…)” Hará falta un buen catalejo para hacer una muy buena selección y encontrar algunas que sean buenas representando al dueño, que es todo el pueblo de Cuba.

Que se haya avanzado en el sistema de normas que regularán el funcionamiento de todas las PyMES es una muy buena noticia. Que resulta un trabajo arduo parece indudable:

(…) seis decretos leyes, un decreto y 16 resoluciones de ocho organismos.

Las PyMES deben renacer (existieron antes, allá por la década del 60) en un entorno muy difícil, el más difícil que haya existido en Cuba desde que fueran desaparecidas hace varias décadas. Ha sido este un parto con dolor y con fórceps, inexplicablemente demorado. Pudimos lograr dos candidatos vacunales en apenas la sexta parte del tiempo requerido y en franca lucha contra el bloqueo estadounidense, pero el parto PyMEs ha demorado más de 10 años desde que fuera anunciada la gestación.

¿En esa consulta a todos los organismos, defenderán ellos los intereses del país o los propios? Que conste que no es una conjetura sin fundamento en hechos, la resistencia destructiva que se atrinchera en esos proceso iterativos de consulta ha cosechado mas de un éxito. Qué decir de lo que nos ha ocurrido en nuestra agricultura.

Ese marco regulatorio debería responder positivamente al menos a estas tres preguntas:
  1. ¿Permite el marco regulatorio un proceso ágil de creación que no demore mas de 30 días?
  2. ¿Garantiza la reducción al mínimo de la incertidumbre?
  3. ¿Facilita la relación con el resto de los actores económicos con el mínimo costo de transacción posible?
Las respuestas no deberían ser ni tal vez, ni quizás, ni vamos a ver. En este caso deben ser binarias, o lo facilita o lo entorpece y si lo entorpece entonces es mejor cambiarlo antes de que se apruebe y divulgue porque garantizar en todo lo posible un buen ambiente de negocios es crucial para que estas pequeñas y futuras recién nacidas criaturas crezcan saludables, y aporten lo que deben a nuestra economía. De este modo, los cubanos no tendrán que buscar fuera de Cuba lo que pueden alcanzar adentro gracias a su ingenio, a su voluntad y a la instrucción que la Revolución Cubana ha garantizado para todos por igual.

Madera plástica y el tejido empresarial necesario en Cuba

Los cambios en la empresa estatal no han avanzado con la velocidad ni la consistencia necesarias, mientras el sector no estatal ofrece ejemplos de buenas prácticas.



Un emprendimiento dinámico para la producción de bienes, basado en el conocimiento y el talento que se forma en Cuba.

Foto: Tomado del perfil en Facebook de Plástico Bahamonde

Existe un consenso bastante extendido acerca de la imperiosa necesidad de dinamizar los resultados de los actores económicos en Cuba, en tanto creadores de riqueza, para enrumbar al país por una senda de crecimiento, transformar la naturaleza de su inserción en el entorno internacional y superar el persistente déficit de oferta de bienes y servicios que ha caracterizado a la economía cubana por no pocas décadas.

En medio de tan complejas circunstancias internas y externas en las que transcurre hoy la vida de cubanas y cubanos, esta necesidad resulta aún más evidente.

Si bien en diferentes documentos del proceso de cambios del modelo económico desde su inicio formal hace ya 10 años, y en sus actualizaciones (la última de ellas en el 8vo Congreso del Partido) se hace referencia a la necesaria diversidad del tejido empresarial en Cuba, con el rol protagónico de la empresa estatal, lo cierto es que los cambios requeridos y el fomento e interrelación entre estos actores no han avanzado con la velocidad ni la consistencia necesarias.

Entre otras razones, por la secuencia y prioridades en las transformaciones. Los costos de oportunidad por dilatar las transformaciones en el nivel del tejido empresarial son evidentes.

De hecho, las Bases para el Plan hasta el 2030, aprobadas en el VII Congreso del PCC, si bien enunciaban desde una perspectiva general los pivotes y sectores líderes del desarrollo, no hacían mención a la necesidad de conformar agendas de desarrollo del tejido empresarial ni aumentar la capacidad empresarial del país como soporte para lograr las aspiraciones contenidas en la visión de la nación.

Dicho de otra forma, el considerar la dimensión empresarial en el proceso de desarrollo, con sus diferentes actores y nexos, de conjunto con los niveles territorial, sectorial y nacional.

El sector no estatal

Marchas y contramarchas en los límites de actuación, un enfoque restrictivo en el otorgamiento de las licencias para ejercer el mal llamado -en no pocos  casos- Trabajo por Cuenta Propia, mercados mayoristas que no pasaron de anuncios, experimentos sin conclusión, cooperativizaciones forzosas,  amarras sin soltar desde el sector estatal,  ambiguedades en disposiciones que dejan espacios para la alegalidad  y prejuicios, han caracterizado el relanzamiento de los actores del sector no estatal.

Y sin embargo, se mueven. Basten los   ejemplos de resiliencia y aportes de varios de estos actores en el combate contra la pandemia, expuestos en medios nacionales y en foros de emprendedores y académicos.

Un ejemplo muy reciente que da pie al título de estas líneas también lo ilustra en buena medida, y muestra cuanto puede hacerse, aún en medio de estas circunstancias.  (Granma, 6 de julio de 2021 p.1). El reportaje trata de un emprendimiento en Las Tunas para la fabricación de madera plástica.

Las claves del proyecto: la fabricación de una extrusora – máquina industrial para la obtención del producto- el trabajo en equipo multidisciplinario de jóvenes profesionales, los encadenamientos con una empresa estatal  del territorio como proveedora de la materia prima reciclada y la vinculación con la Universidad tunera.

O sea: investigación y desarrollo, innovación, un emprendimiento dinámico para la producción de bienes, basado en el conocimiento y el talento que se forma en Cuba, encadenamientos con actores estatales, reciclaje y protección del medio ambiente, potencial para sustituir importaciones, aplicación en prácticamente todos los sectores de actividad.. .. ¿acaso no es esa la empresa que necesitamos?

Interrogantes

Me hago varias preguntas, volviendo al ejemplo: ¿Acaso no hay alguna empresa estatal, de alcance nacional incluso, que podría haber hecho lo mismo que hizo el gestor del proyecto ? ¿Detectar esta necesidad, convertirla en un proyecto y poner a un equipo de sus profesionales a gestionarlo, involucrar a otras entidades, buscar colaboraciones, y un largo etcétera? ¿Acaso los emprendimientos empresariales sólo pueden ser privados, comenzando desde cero, con una empresa totalmente nueva?

Aunque narrativas más extendidas lo sostienen, el emprendimiento empresarial no es sólo privado, ni sólo en empresas de nueva creación.

En los últimos tiempos, se han adoptado varias decisiones encaminadas a fomentar un contexto más propicio para un mejor desempeño e interrelación de los actores económicos. Son expresión de ese propósito el cambio de enfoque respecto a las licencias para el trabajo por cuenta propia, su acceso al comercio exterior – mediante empresas estatales- , las 43 medidas dictadas para aumentar la autonomía de las empresas estatales, las relativas a la comercialización de productos agropecuarios y más recientemente las bases para la creación de Pequeñas y Medianas Empresas y el relanzamiento de las cooperativas, con trabajos en proceso para crear nuevos marcos legales.

Recientes declaraciones de la dirección del país, sin embargo, apuntan a que en el caso de las empresas estatales, no se producen las reacciones esperadas ante las decisiones dirigidas a ellas. Ello amerita un análisis posterior. (2021)