19/O1/23
Frente
al debate que ha surgido y está teniendo lugar desde comienzos de este mes de enero
entre varios compañeros alrededor de algunos pronunciamientos públicos del
compañero Agustín Lage sobre temas económicos, y tratándose de asuntos acerca
de los que yo me he pronunciado reiteradamente durante los últimos 7 u 8 años y
en los que ahora estoy explicita e implícitamente involucrado considero mi
deber manifestar algunos comentarios y reflexiones.
Lo
hare mencionando en estas notas directamente al compañero Agustín Lage. No me
gusta dirigirme ni referirme a nadie indirectamente y menos si es para debatir
algún criterio.
No
conozco personalmente al compañero Agustín Lage ni he tenido nunca la
satisfacción de compartir con él ni laboral ni socialmente, pero sigo y estoy
informado de su meritorio quehacer desde hace años y soy un sincero admirador
suyo como uno de nuestros más destacados y prestigiosos científicos. Asimismo,
conozco, se y respeto su exitoso trabajo como empresario en la producción y
exportación de nuestros productos biofarmacéuticos.
Adicionalmente
lo he seguido por curiosidad e interés profesional en los escritos que sobre
temas económicos viene produciendo desde hace años, por lo menos desde el 2016.
El día 23 de mayo del pasado 2022 publico en Cubadebate un trabajo titulado “¿Por
qué los científicos cubanos hablan de economía?”. Magnifico y convincente.
Había
leído y he vuelto a revisar además todos los demás artículos que publico en
esta página el pasado año y que son 14 o más a partir del mes de mayo. Debo
destacar que en el compañero Lage siempre se nota, y es confirmable en sus
propios textos, que se preocupa por estar bien informado y actualizado de
aquello sobre lo que va a escribir, con datos, cifras, fechas y autores, aunque
se trate de temas que no correspondan a su especialidad profesional.
Teniendo
presente esto último, para los actuales comentarios tendré en cuenta todos
estos trabajos y no solo la intervención por tv que hizo en el programa “Cuadrando
la Caja”, la cual motivo el comentario critico que le hizo July Carranza el
3 de enero, y su reciente conferencia en la SEAP que fue comentada en estos
últimos días por los compañeros Juan Triana y July Carranza.
Lage
ha expresado que “bienvenidas sean las discrepancias de opinión sobre como
alcanzar la sociedad que queremos” y que “debemos evitar la tendencia a incluir
solo a compañeros que piensan como nosotros y a tratar a todos los demás como
enemigos”. Muy plausible esta posición para la ética del debate.
En
otros lugares precisa que “necesitamos que existan esas polémicas sobre los
procedimientos, pero no sobre los objetivos.” Y aclara que estos objetivos son
“la soberanía, la independencia, la justicia social y la prosperidad”, porque
“está en juego la existencia misma de la Nación”. De acuerdo, aunque apuntaría que me parece
mejor llamarle “principios”, no obstante, esto es secundario.
Pero
en otro momento añade que entre los no enemigos hay “propuestas no descartables
para problemas específicos, pero que pueden ser corrosivas para los objetivos”.
Y precisa que “Esto es entre compañeros con formación en ciencias económicas
pero que tratan la economía como un sistema cerrado”. Sobre este aspecto en
otro lugar dice que “Hay quienes polemizan que no son enemigos, sino que buscan
aportar con urgencia solución a nuestros problemas económicos. Aun así, estos
compañeros no logran distinguir entre la lógica de la economía y la de la
economía política” y concluye que “el antídoto está en la política y no en la
teoría económica”.
A la
vez el compañero Lage repite en varios de sus artículos y enfatiza ahora en la
conferencia de la SEAP un reconocimiento que manifiesta una actitud de modestia
y humildad: “No soy economista (muy lejos de ello).”
Esto
desde luego no inhabilita a Lage para hablar y escribir sobre economía. Ya más
arriba califico de magnifico y convincente su artículo ¿Por qué los
científicos cubanos hablan de economía?
Tampoco
era profesionalmente economista el Che y por su dedicación, esfuerzo, estudios
especificos y talento excepcional se convirtió, según mi criterio, en el mejor
economista que hemos tenido en la etapa revolucionaria, independientemente de
las coincidencias o no coincidencias que tengamos con su pensamiento económico.
Esto lo reconocí públicamente ya en 1979 en el discurso que a nombre del
Gobierno y el Partido pronuncié en la clausura del acto de fundación de la ANEC,
el que fue televisado y radiado en vivo y en los días siguientes divulgado por
la prensa escrita.
No
obstante, y aunque no es lo cardinal en los presentes comentarios, me parece
que hay cierta incoherencia y contradicción entre su declaración de modestia y
humildad con otras partes de su discurso en las que parece sentirse con
autoridad suficiente como para dictar catedra de economía a compañeros que
somos economistas de carrera y con una larga experiencia, académica y práctica,
en nuestras profesiones.
Lage
justamente descalifica, como polemizantes a tener en cuenta, a los que plantean
una privatización total en el país, no les importa la justicia social, piden o
aceptan la intervención del imperio o proclaman la anexión al mismo. Estos son
merecidamente descalificados no solo por no ser revolucionarios (no es una
obligación serlo), ni por ser incapaces, sino por no ser lo mínimamente cubanos,
patriotas y solidarios que debieran ser.
Por
su parte a los economistas que no estamos incluidos dentro del enemigo la
descalificación nos llega, según plantea, por “tratar a la economía como un
sistema cerrado” y por “no distinguir entre la lógica de la economía y la de la
economía política”. Como si tuviéramos capacidad disminuida y por tanto resultamos
unos economistas minusválidos, que requerimos del auxilio y asesoramiento de una
sapiencia superior.
Parece
que Lage considera, además, que la economía no es una ciencia autentica y
completa como las naturales. En un artículo suyo publicado en Cubadebate el 22
de julio de 2022 dice que “El problema con la economía es que este campo del
conocimiento está a mitad de camino entre los extremos del reduccionismo
objetivo y de la intuición educada”.
Y
aquí si comienzo a abordar problemas cardinales de mis comentarios.
Esto
refleja una posible confusión en que entender por ciencia y que entender por
economía, la diferencia que existe entre los agentes a través de los cuales se
cumplen las leyes naturales y los agentes a través de los cuales se cumplen las
leyes sociales (las económicas dentro de ellas) dotados de conciencia,
voluntad, intereses y facultades individuales de decisión que a veces se contraponen
entre si convirtiendo el cumplimiento de las leyes sociales en una resultante
de todas estas contraposiciones, sin perder con ello su carácter objetivo como
leyes científicas.
No
recuerdo haber leído en ningún texto de Marx, Engels, Lenin y Fidel nada que
ponga en dudas que la economía es una ciencia autentica y completa, sino todo
lo contrario.
No
parece que fuera esta comprensión de Lage la del Che cuando escribió que “se
debe ser marxista con la misma naturalidad con que se es ‘newtoniano’ en física
o ‘pasteuriano’ en biología, considerando que, si nuevos hechos determinan
nuevos conceptos, no se quitara nunca su parte de verdad a aquellos otros que
hayan pasado” (ver Notas a la Ideología de la Revolución Cubana. Compilación,
Tomo I, págs. 353.)
Adicionalmente
creo que también resultan de mucho interés para los temas que hoy se debaten
entre nosotros los siguientes planteamientos del Che en una reunión bimestral
del Ministerio de Industrias celebrada el 22 de febrero de 1964 y que aparece en
“Apuntes Críticos”, págs. 276-277 y en la Compilación de Borrego, págs.
438-439):
“…no
hay que caer tampoco en el espejismo de considerar que el estímulo moral es el
centro del Sistema Presupuestario. El centro del Sistema Presupuestario es el
conjunto de acciones, dentro del cual lo fundamental es la organización, la
capacidad organizadora para dirigir y al mismo tiempo el desarrollo de la
conciencia y el elemento de desarrollo, sobre todo a niveles de masa, a niveles
más generales, es la conjunción del estímulo material correctamente aplicado y
del estímulo moral, dándole un énfasis cada vez mayor al estímulo moral, a
medida que van avanzando las condiciones.
“…es
idealista que todo lo va a resolver el llamado de la conciencia, el estímulo
moral y que ahí se acaba todo, y el hombre come y la barriga del hombre es la
que está determinando su acción, y en definitiva eso es cierto…Ahora el
estómago del hombre se traslada un poquito a todas las necesidades del hombre.
Entonces ya no es estómago, como estómago, sino el estómago representando todas
las necesidades del hombre… Es decir, cuando un hombre tiene hambre, hambre
física, que le faltan cosas para meter en las mandíbulas, es difícil hablarle
de otras cosas, y el esfuerzo fundamental hay que hacerlo para darle esas cosas
físicas, cualquiera que fuera. Y pensar que un país entero va a responder a
estímulos superiores teniendo hambre, eso a mí me parece un sueño… este
problema de las necesidades materiales es muy importante determinarlo… hay una
cantidad de necesidades que son vitales y esas hay que satisfacerlas, si no las
satisfacemos, en verdad difícilmente podremos avanzar.”
Creo
que es de suma importancia, finalmente, traer a colación un artículo poco o
nada conocido del Che porque solo aparece en la Compilación hecha por el
compañero Borrego (Tomo I, págs. 87-93 de la primera edición limitada de los
años 70). El artículo se titula ¨Rumbos de la industrialización¨ y fue escrito entre
el último trimestre de 1959 y el primero de 1960, período que transcurrió desde
la creación del Departamento de Industrialización del INRA, el 7 de octubre de
1959 --a cuyo frente estuvo el Che-- y julio de 1960, en que comienza la etapa
de nacionalizaciones que concluyo en lo fundamental en octubre de ese año,
momento que en la práctica la Revolución adquiere un carácter socialista,
aunque ello no fuera proclamado formalmente hasta el 16 de abril de 1961, en
vísperas de los combates de Playa Girón.
Teniendo en cuenta la
situación histórica de Cuba en ese periodo, el Che en el artículo referido
escribió lo siguiente, refiriéndose al resultado de los trabajos realizados por
el Departamento de Industrialización:
“Se
estableció entonces una división que estudiara las grandes líneas de los
proyectos básicos con la idea directriz de poner estos proyectos al servicio de
la nación entera,
1)
con participación exclusiva o casi exclusiva del Estado. Ellos son: a) Energía
y combustible, b) Industria siderúrgica y metálica en general, c) Industria de
la caña y sus derivados, d) Industria química en general, e) Plan de desarrollo
minero y f) Industria de productos agropecuarios. En este más alto nivel
industrial, el Estado dirigirá toda la política económica.
2)
“En industrias derivadas de estas fundamentales, pero no tan importantes,
particulares y estado podrían o no estar asociados en una serie de ellas
3)
y, en un plano más bajo, solamente particulares intervendrían en la
industrialización total del país.”
Vemos
pues que en la situación histórica concreta de la Cuba de finales de 1959 y comienzos
de 1960, el Che proponía una estructura de la propiedad de los medios de
producción industriales similar a la que hoy se plantea en la
Conceptualización:
1)
Los medios fundamentales de producción en manos exclusivas o casi exclusivas
del Estado. 2) En un segmento de industrias derivadas de los medios
fundamentales de producción, pero no tan importantes, con la participación de
los privados y el estado con posible asociación entre ambos sectores de
propiedad. 3) Un segmento más bajo de industrias en las que solo intervendría
la propiedad privada.
Esta estructura de la propiedad y la gestión reitero que me resulta bastante parecida a la que hoy se plantea en los contenidos presentes en el documento de la Conceptualización y en la última Constitución, en lo referido al nuevo modelo económico social de construcción socialista a implementar. Solo falta legislar que es lo que debemos entender concretamente en nuestra actualidad por medios fundamentales de producción.
Leyendo
a Lage en su conferencia ante la SEAP, es
mi parecer que excluyendo todo lo relativo a los avances que ha tenido la tecnología
mundial con su 4ta. Revolución, la actual etapa de la globalización, el
predominio de la economía financiera sobre la real, los cambios demográficos,
el creciente deterioro del medio ambiente y los efectos residuales de la
pandemia, el contexto externo de Cuba en
los momentos en que el Che hizo la propuesta anterior tenía aun muchas
similitudes con la situación actual que describe en lo fundamental el compañero
Lage.
Permanece
el rasgo de nuestro país de ser pequeño, con una economía abierta y con
ausencia de recursos naturales descubiertos, que tengan un papel determinante
para el desarrollo económico. Solo las condiciones naturales para el turismo
con sus peculiaridades no todas favorables, salvan la cara en este sentido.
Por
otro lado, y entre otros parecidos, hoy no existe la URSS ni el campo
socialista. Tampoco existía aun en aquellos momentos, como aliado en el cual
apoyarnos. Estábamos llamados a buscar como integrarnos al mundo capitalista de
entonces al igual que, en lo fundamental, lo estamos hoy al mundo capitalista
actual.
En
cuanto a la situación interna presenta ventajas sobre entonces principalmente
en todo en lo relativo al nivel de educación, cultural y científico de la
población y en el espíritu de solidaridad que se ha desarrollado en ella.
Después vinieron numerosos más avances, que hoy lamentablemente se han perdido
en gran medida y que nos coloca en una situación de desventaja económica y
política en relación con la que existía en esos primeros años de efervescencia,
entusiasmo, esperanza y fe y confianza en la Revolución y en sus principales
lideres.
-la
infraestructura y la planta industrial están muy deterioradas.
-Ausencia
de fuentes de ahorro interno para enfrentar las necesidades existentes.
--endeudamiento
externo e incumplimientos repetidos con los acreedores lo que dificulta
extraordinariamente la obtención de financiamientos foráneos.
--sociedad
interna fracturada y desgarrada. Gran ansiedad de gran parte de la población
por emigrar sobre todo entre los jóvenes lo que acrecienta las divisiones
familiares.
--Logros
sociales, que han sido nuestras banderas de triunfo, muy lastimados y reducidos
tanto en salud, como en educación, deportes y otros frentes.
--los
ingresos de la población no cubren sus necesidades básicas y hay un proceso
inflacionario creciente y sin control.
--escasez
acentuada y muchas veces ausencia de medicinas, alimentos y casi de todos los
bienes de consumo y de servicios fundamentales.
--participación
democrática insuficiente y manifestaciones de la población al respecto.
-situaciones
muy complicadas a las que no se le ven perspectivas de solución en casos tan
importantes como los de la electricidad, los materiales de construcción y la de
una industria tan emblemática como la del azúcar.
-Esfuerzo
denodado del compañero Diaz Canel y del principal grupo dirigente que lo
acompaña pero que, por lo errático y zigzagueante de muchas de las políticas y
medidas aplicadas, se han producido incumplimientos y perdida creciente de la
confianza por gran parte de la población.
Fidel,
no obstante su carisma excepcional y la fuerza unificadora de su convocatoria,
se vio a veces ante el riesgo de perder la fe de las masas y como testimonio
esta lo ocurrido ante el fracaso de la zafra de los 10 millones y aparece expresado
en un su autocritico Informe ante el Primer Congreso del Partido.
Mucho
antes de ese momento, en pleno año de 1962, ante subjetivismos e incumplimientos
del Gobierno expuso en una comparecencia pública las siguientes palabras a ser
tenidas muy en cuenta hoy en día:
“¿Cuál
ha sido la principal deficiencia nuestra? ¿Cuál ha sido? Pues un gran
subjetivismo. Por ese subjetivismo nuestro y de los que dan datos y cifras y
hacen compromisos de producción, resulta que nos vemos en la triste situación
de anunciar determinadas cantidades de producción que después no resultan. Y no
hay que olvidar que hace apenas unos meses, cuando la asamblea de producción,
hicimos promesas, compromisos que no hemos cumplido. Estamos abochornados. Yo,
por mi parte lo digo sinceramente, siento vergüenza de estas cosas, y ojalá que
todos sintamos en pareja medida la vergüenza de ofrecer cosas que no se
cumplen.
“Hemos
hecho promesas que no hemos cumplido, sencillamente porque nos hemos
equivocado, porque no hicimos análisis objetivos, porque caímos en un
subjetivismo, en una serie de ilusiones y comenzamos a ofrecer que para tal mes
estarían resueltos tales problemas, que para tal otro estarían resueltos otros
tales problemas, según todos los datos, todos los cálculos. Pero los datos y
los cálculos eran equivocados, no eran análisis objetivos”.
Un
año después, el 10 de abril de 1963, en otro discurso, Fidel insistía con énfasis:
“No
olvide nunca un revolucionario, no olvide nunca un marxista que lo primero es
pisar firme sobre las realidades y de esas realidades partir”
Por
otra parte, quiero expresar que comparto todas las tareas que plantea Lage al
final de su conferencia a los miembros de la SEAP.
Comparto
la idea de que la empresa estatal tenga predominio dentro de todas las formas y
de todos los actores que se plantean en el nuevo modelo. Sobre esto también he
escrito en más de una ocasión incluso con propuestas concretas al respecto. Lo
fundamental es que debe tratarse de una empresa dentro de una estructura
empresarial modificada en comparación con la actual y una empresa estatal que
sea eficiente a diferencia de las que hoy tenemos, sobre las cuales las más de
las veces no lo son, no lo son en medida suficiente o ni siquiera sabemos si lo
son o no.
En
cuanto a un conjunto de medidas que enumera Lage en su conferencia, y que entiendo
le parecen no aplicables o cuando mejor un tanto peregrinas y riesgosas o
corrosivas, es mi criterio que casi todas deben aplicarse lo más rápido posible.
Así lo he propuesto más de una vez e insisto en ello.
Estas
medidas a que me refiero son las siguientes:
-la
elegibilidad de los directivos de las empresas estatales por parte de sus
trabajadores ampliaría la democracia en su actuación y posibilidades de
influencia.
-la
ampliación del sector privado más allá de los marcos actualmente autorizados
permitiría la incorporación al mismo de tareas como las de los agentes de
viaje, y de profesionales no autorizados hoy. Claro que no se debe violar la
frontera de las actividades estratégicas.
-la
transferencia a sus trabajadores de empresas en perdida puede ser la solución más
adecuada en muchos casos.
-La
eliminación de la obligatoriedad de que las importaciones tengan que hacerse
utilizando siempre como intermediario a una empresa de comercio exterior
facilitaría y haría más rápidas muchas de las operaciones que hoy se ejecutan.
Esto debe ser opcional pero no obligatorio, sin que se abandone el control en
ningún caso y el asesoramiento cuando ello se solicite o sea aconsejable.
-legalizar
las importaciones comerciales de bienes de consumo e insumos de producción por
parte de privados, es una medida que debió tomarse hace rato. Con ello saldrían
a la luz divisas que hoy existen en las manos o en las posibilidades de los
privados y que no son captadas por el Estado, las cuales se convertirían en
capital comercial que aumentaría sensiblemente y de manera expedita la oferta
de bienes y servicios a la población, lo que contrarrestaría la inflación
galopante que padecemos con la consiguiente reducción de precios minoristas.
Hoy esas divisas van al mercado informal de cambio, elevan las tasas, deprecian
al CUP y actúan como un factor inflacionario.
Por
otro lado se eliminarían las ilegalidades que hoy cometen a diario los
eufemísticamente llamados importadores no comerciales que simplemente actúan
como “mulas” e incurren en gastos de pasajes de avión, hospedajes y comidas y
embalajes que podrían convertir en fuente adicional para aumentar su capital comercial, si esta
legalización se complementa además con la apertura dentro del país de zonas
tipo Colon de Panamá donde suministradores externos arrendarían espacios y
traerían a consignación los productos que serían adquiridos por los naturales
del país. Con esto Cuba obtendría un ingreso adicional por el arrendamiento de
espacios, continuaría cobrando los aranceles y comisiones correspondientes y no
tendría que hacer desembolsos de divisas ya captadas. Ya en la zona de Berroa
existen experiencias anteriores al respecto.
-darle
iniciativa inversora a los capitalistas extranjeros y el derecho a hacer
estudios de factibilidad en lugar de entregarle listas de parte nuestra como
único lugar del cual seleccionar las nuevas inversiones a realizar. Con ello se
incentivaría a los posibles inversionistas y se ahorraría tiempo en el proceso
de decisión de las nuevas inversiones a ser acometidas por el CE. La decisión
sobre qué propuesta aprobar o no quedaría en manos cubanas.
--la
eliminación de las actuales empleadoras en el proceso de contratación de fuerza
de trabajo por parte de las empresas mixtas y de CE, incentivaría a estos. La
existencia de estas empleadoras surgió en 1982 como complemento del Decreto Ley
50, primer cuerpo legal en el país que autorizo la inversión extranjera, a
propuesta de Carlos Rafael, Osmany Cienfuegos, Roberto Veiga y mía como
ministro presidente de la Juceplan.
En
aquellos momentos se pensaba en crear empresas mixtas, más que con inversores
procedentes de los países capitalistas, con empresas de los países del CAME
para incentivar a estas en lo relativo a las inversiones en Cuba tarea que
cumplían obligadas por sus gobiernos y mediante subsidio de estos, pero a veces
a regañadientes y sin ninguna motivación como empresarios. El destino que se
preveía para estas producciones mixtas no era solo el mercado cubano sino
además el caribeño y centroamericano sirviendo Cuba de puente o catapulta para
estos desarrollos.
Como
estas empresas extranjeras, con las cuales se conformarían las nuevas empresas
mixtas, tendrían que lidiar en cada centro de trabajo con los sindicatos,
núcleos del PCC, org. de base de la UJC y tareas derivadas como el trabajo
voluntario para zafras y otros, con los aportes a las MTT, etc. se pensó por
parte nuestra en liberarlas de todos estos engorros y crear las empleadoras que
los asumirían en representación del Estado y de todas las organizaciones
mencionadas.
Hoy
la situación es otra y no tiene sentido insistir en mantener las actuales
empleadoras que tienen el rechazo generalizado de los inversionistas.
Las
empresas mixtas y de CE al 100% que sea creadas solo deben estar obligadas a
cumplir la legislación laboral y salarial vigente en el país.
La
situación que enfrentamos actualmente es de riesgo político y se necesita tener
la dosis de audacia suficiente para que el remedio no llegue cuando el paciente
ya sea cadáver, sin que ello lleve a no tener la prudencia indispensable.
Gobernar
es prever, lo dijo Martí y lo recordó Raúl.
Creo
además que el esfuerzo que está haciendo el compañero Diaz Canel junto a otros
compañeros merece que lo acompañemos todos y que cuente con un asesoramiento
que, como dijo Fidel, “pise sobre las realidades y parta de esas realidades”
por más que se aparten de lo que en ciertos momentos concebimos como el
socialismo que entendíamos el adecuado pero que ha dejado de serlo.
Creo
que el caso de Viet Nam es una magnifica referencia sin hacer calco ni copia
del mismo, sino para injertarlo inteligentemente en nuestro tronco.
Por último,
siento la necesidad de referirme a otra cuestión que me inquieta y que no puedo
explicarme satisfactoriamente.
¿En qué
medida algunos componentes del pensamiento de Lage y de otros que coinciden con
él, actúan como un centro que sugiere o propone lo que debe ser divulgado o no
en los medios de comunicación y divulgación oficiales o semioficiales y a
partir del cual se decide y practica el monopolio de dichos medios que solo
publican y divulgan lo que escriben los que coinciden con dicho pensamiento,
echando por la borda la “bienvenida” que en sus escritos da el propio Lage a
las discrepancias y a su llamado a evitar la tendencia a considerar como
enemigos a los que no coinciden con su pensamiento, como aparece citado más arriba?
¿Por qué no se ha publicado ni en general se publica lo que escriben July Carranza, Juan Triana, Benavides, Vascos y otros varios compañeros que lo hacen en discrepancia leal y espíritu constructivo?
HUMBERTO GENIAL !!!!!!!
ResponderEliminarNo soy economista, soy psicóloga, pero trato d comprender la complejidad d lo q está ocurriendo xq recibo a diario mucha información de lo q está sufriendo nuestro pueblo. Este texto debería ser publicado en los medios oficiales. Lo considero excelente !!!
ResponderEliminarSi leemos el próximo post ya la decisión esta clara, capitalismo de oligarcas. Gaesa Ltd ...la KGB disfrazada de cosa nostra.
ResponderEliminarBla bla de un exburocrata retirado.
ResponderEliminarMe parece espectacular y si creo q deben publicarse todas las opiniones de los economistas mencionados
ResponderEliminarLage tiene resultados, Humberto que resultados ha tenido?,
ResponderEliminarQue yo sepa el Dr Lage no tiene ningún resultado en la Economía. Y no debería meterse en un campo que no conoce y en el que Humberto Pérez le da salida y rayas
ResponderEliminarCoincido. Genial por Humberto. Decir que no tuvo resultados es simplista. Hay que mirarlo en el contexto donde le tocó dirigir.
EliminarDemasiado largo el.articulo. llega a aburrir.
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