Delenda
est Carthago (Cartago debe ser destruida) es la frase histórica con la que Catón el Viejo terminaba sus discursos
en el Senado Romano. Cualquiera fuera el tema, insistía en esta alocución
relacionada con las guerras Púnicas[1].
Cuba entona de manera parecida un Delenda Est Bloqueo. Pero en este caso
no se trata de una aspiración imperial sino justiciera. Se opone a lo que
Washington llama embargo comercial,
económico y financiero. Fue impuesto en octubre de 1960 y en años
posteriores se blindó con disposiciones legales. Es el bloqueo más prolongado
que registra la historia moderna. Ha sido condenado 24 veces en Naciones
Unidas. Durante la pasada administración de Obama tendió a suavizarse. Con la
de Trump se ha agudizado.
Es una
medida prepotente, injusta, cruel e inmoral. Su propósito perverso es derrocar
a un gobierno ideológicamente adverso.
Durante años Cuba ha reclamado su cese ante el
foro de Naciones Unidas. El primero de
noviembre de 2018 una nueva ronda arrojó 189 votos de países opuestos
verticalmente a dicha medida. No hubo abstenciones y se reportaron dos ausentes
y dos votos en contra. También se produjo la derrota de 8 intentos de Estados
Unidos por introducir enmiendas tendientes a desdibujar la inmoralidad del embargo. Como hecho curioso se registra
la última intervención de la renunciante delegada de aquel país ante Naciones
Unidas, quizás abrumada por los hechos.
Estados Unidos desprecia soberbiamente el
criterio mundial. Su arbitrariedad imperial solo cuenta con el apoyo de Israel.
Dios los cría y ellos se juntan.
No obstante, hay fugas. Numerosos productos
agrícolas norteamericanos son importados por Cuba al cash. Muchos pudieran ser obtenidos localmente pero razones
variadas dan ventaja a los del Norte. La productividad principalmente.
La Geografía es inexorable. Cuba y Estados
Unidos son vecinos y su cercanía favorece sus relaciones comerciales. La
política puede obstaculizarlas y hasta enemistarlas si se despiertan ambiciones
en el más fuerte. La Florida es un Índice
que apunta hacia Cuba, dijo en sus versos Rubén Martínez Villena[2].
Cuba ha realizado estimados sobre las afectaciones
económicas del asedio. La suma es astronómica. En aspectos humanos y prácticos
no tiene cuantificación. El monto consignado últimamente es de US$ 134 499
millones durante todo el periodo y US$ 4 321 millones en el último año. Según
estimados, de no existir el bloqueo, el PIB de Cuba hubiera crecido a razón de
un 10% anual a precios corrientes en los últimos años[3]. No se
divulga la metodología seguida. Quizás influyó más el criterio político que la
afectación real. Dicho incremento es superior a los más elevados del mundo
incluyendo a los olímpicos China y Viet Nam. Parece hiperbólico.
En su reciente reporte de 2018, la Comisión Economica para América Latina y el
Caribe (CEPAL) precisó que el crecimiento del PIB en Cuba será del 1.1% en
el presente año. O bien el cálculo de perjuicios es inflado, o el embargo daña seriamente la economía
cubana.
También es posible la contraposición a una
demanda de indemnización. Seria, por supuesto, ante una eventual mejoría de las
relaciones entre ambos países. En estos momentos no se vislumbra.
[1] Las 3 Guerras Púnicas se desarrollaron entre 254 ANE y 146 ANE entre
Roma y Cartago. Esta última fue finalmente destruida y desapareció de la
Historia. Eran rivales imperiales y comerciales.
[2] Martinez Villena, Ruben. Mensaje Lirico Civil. Editorial Letras Cubanas La Habana. 1962.
[3] Intervención de Bruno
Rodríguez Parrilla, Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba en NNUU, el 1 de
noviembre de 2018. Se debatía el tema del bloqueo norteamericano que fue
condenado por la casi totalidad de Estados.
* SINE DIE. es una locución latina que significa 'sin plazo, sin fecha' y es muy usada en Derecho y Administración para decir que algo se pospone.
JMFO: "Se trata de una especie de columna particular en la que expongo reflexiones"
JMFO: "Se trata de una especie de columna particular en la que expongo reflexiones"
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