Madrid, 17 abr (Prensa Latina) España rechazó hoy la decisión de Estados Unidos de activar el Título III de la Ley Helms-Burton contra Cuba por considerarla contraria al Derecho Internacional.
'El Gobierno de España expresa su tajante rechazo a esta decisión de la Administración estadounidense', indica el Ejecutivo en un comunicado a raíz de la decisión de Washington de permitir reclamaciones en cortes norteamericanas sobre propiedades 'confiscadas' (como llaman a las nacionalizaciones de la Revolución cubana).
Disuadir y penalizar el comercio y las inversiones de empresas de terceros Estados en la nación caribeña atenta contra los intereses de España y de otros socios europeos en Cuba, y deteriora las relaciones bilaterales entre países aliados, además de perjudicar seriamente el bienestar de la población cubana, expresa en el texto.
También explica que la aplicación extraterritorial de la legislación, contraria al Derecho Internacional, dará lugar a una espiral de demandas y contra-demandas que enturbiarán la relación económica transatlántica sin que de ello se desprenda ventaja o avance alguno, ni para los demandantes estadounidenses ni para la población cubana en su conjunto.
España aseguró que trabaja de forma activa junto con la Comisión Europea, el resto de Estados miembros de la Unión Europea (UE) y otros socios internacionales, en la adopción de medidas oportunas en foros multilaterales que permitan defender sus intereses y el futuro de las empresas españolas en Cuba.
En particular, la UE baraja distintas opciones con el fin de proteger sus intereses, en el marco de la Organización Mundial de Comercio y por medio del Estatuto de Bloqueo de la UE, agrega la fuente.
mv/lla
Disuadir y penalizar el comercio y las inversiones de empresas de terceros Estados en la nación caribeña atenta contra los intereses de España y de otros socios europeos en Cuba, y deteriora las relaciones bilaterales entre países aliados, además de perjudicar seriamente el bienestar de la población cubana, expresa en el texto.
También explica que la aplicación extraterritorial de la legislación, contraria al Derecho Internacional, dará lugar a una espiral de demandas y contra-demandas que enturbiarán la relación económica transatlántica sin que de ello se desprenda ventaja o avance alguno, ni para los demandantes estadounidenses ni para la población cubana en su conjunto.
España aseguró que trabaja de forma activa junto con la Comisión Europea, el resto de Estados miembros de la Unión Europea (UE) y otros socios internacionales, en la adopción de medidas oportunas en foros multilaterales que permitan defender sus intereses y el futuro de las empresas españolas en Cuba.
En particular, la UE baraja distintas opciones con el fin de proteger sus intereses, en el marco de la Organización Mundial de Comercio y por medio del Estatuto de Bloqueo de la UE, agrega la fuente.
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