La economía cubana pasa por sus peores momentos y especialistas consideran urgente implementar una reforma integral que frene el estancamiento y favorezca el cambio.
En los últimos años hablar de economía cubana se torna cada vez más monótono. De pronto surgen noticias o anuncios interesantes, sin embargo, nada cambia en sentido positivo, al contrario, se fortalecen las tendencias hacia la deformación estructural de la economía.
Por ejemplo, la economía cubana en 2023 decreció 1.9% con respecto a 2022 a precios constantes y en años anteriores o también decrecía o los crecimientos eran insignificantes.
Sucede que en la actualidad continúan presentes un grupo de distorsiones que afectan el desempeño económico, cuya solución es anhelada por la población cubana. Al cierre de diciembre de 2023 persistían, entre otros problemas:
- El déficit fiscal según estimaciones en ese año, era uno de los más altos de los últimos tiempos y uno de los más altos del mundo.
- Presencia de una alta inflación, que, aunque disminuyen los ritmos de crecimiento, se encuentran en valores muy altos.
- La producción material casi no crece y en rubros relacionados con la alimentación de la población decrecen, como las carnes, arroz, frijoles, huevos, entre otros.
- Se mantiene el déficit comercial de bienes y servicios, aunque en este último caso, las exportaciones se recuperan con respecto a años anteriores.
- El turismo crece, pero incumple los planes acordados.
- El déficit de combustibles ha propiciado largos apagones en los hogares.
- La canasta básica se ha cumplido intermitente fuera de los plazos acordados.
- El transporte está en una situación de crisis en todo el país, especialmente en las zonas rurales.
Esos elementos permiten conocer que la situación en el primer semestre del 2024 nada ha cambiado en datos concretos. Nos lleva a que se siguen repitiendo esos factores o distorsiones.
- Alto déficit fiscal
- Exceso de emisión monetaria que no se logra recuperar vía ingresos al presupuesto estatal, por la baja oferta estatal de bienes.
- Poca producción
- Limitaciones de combustibles.
- Poco crédito, balanza insuficiente de divisas.
- Zafra azucarera más baja de los últimos 100 años.
- Continúa el deterioro del poder adquisitivo de los salarios y pensiones.
- Canasta básica con grandes dificultades para su completamiento a las familias cubanas.
- Incumplimiento de los ingresos de los rubros exportables como níquel, azúcar, miel, ron y camarones de mar.
- Las importaciones se cumplieron al 58%, solamente priorizando los alimentos, combustibles, medicamentos e insumos médicos.
Estos indicadores permiten afirmar que la economía cubana está en bancarrota, es decir, en su peor momento económico, y las autoridades toman medidas que no favorecen el cambio de esas tendencias. En vez de intentar frenar el avance de una parte de esa economía (sector no estatal) que le quieren decir complementaria, a pesar de que vendieron 44% de los bienes y servicios que consumió el país en 2023, lo que deberían es competir importando mercancías y vendiendo a mejores precios.
Analizaremos algunos indicadores generales de la economía cubana en este primer semestre.
Inflación
Aunque se mantiene una tendencia a la desaceleración desde 2023, se manifiesta una resistencia a la reducción de la inflación que se encuentra en el entorno del 30%. Esto no significa que bajen los precios, que siguen creciendo, pero a un ritmo menor.
Así, en junio de 2024 el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se ubicó en un 417, 79 respecto al año base de 2010, con una variación interanual del 30,79% según gráfico.
El gráfico solo es demostrativo de que los precios se mantienen creciendo, a pesar de las más de 400 medidas económicas que dicen las autoridades cubanas que se han implementado para hacer crecer la economía. En ese crecimiento de los precios se destacan los alimentos, pero dentro de ellos especialmente se encuentra la carne de cerdo y los frijoles.
Es decir, la inflación se mantiene creciendo con fuerte impacto sobre el poder adquisitivo de las familias cubanas.
Aunque el gobierno cubano ha mencionado que se actualizará el costo de la canasta familiar normada (cuota básica de alimentos que distribuye el Estado a cada persona mediante la libreta de abastecimiento), elemento que no conlleva tanto análisis, está más que demostrado que los cálculos iniciales se hicieron con una tasa de cambio de 1 por 25, pero hoy la población compra con precios que incluyen la tasa de cambio informal siempre superior a 300 pesos por dólar.
Hay que destacar que los salarios han tenido incrementos, pero insuficientes para los niveles de precios existentes. Así el salario medio del país ascendió en el primer semestre de 2024 a 5750 CUP mensual y en el sistema empresarial el promedio mensual fue de 5 955 CUP.
En el ámbito del redimensionamiento del mercado cambiario, el primer ministro Manuel Marrero en las sesiones parlamentarias concluidas el pasado 20 de julio mencionó el mercado ilegal de divisas. Recordó que, en la pasada sesión del Parlamento, a fines de 2023, “nos referimos a que tenemos que ponerle fin, a que desde un país en el extranjero y desde una computadora, se proyecte cuál es la tasa de cambio que debe regir en el país (Cuba)”.
El redimensionamiento lleva una implementación gradual, explicó, “ir reduciendo la brecha cambiaria en la economía, administrando los desequilibrios”. “Ir directo a una nueva tasa de cambio traería una devaluación del peso y un efecto no deseado en la inflación, los precios y los bajos salarios. Los análisis realizados indican que, con el propósito de crear condiciones, se deben implementar varias medidas”, agregó.
Esas medidas son recoger el exceso de circulante del peso, avanzar en la dolarización parcial de la economía y en el proceso de bancarización, e incrementar la recaudación tributaria y fiscal.
Lo que piensan las autoridades tiene cierta lógica, pero lo primero que hay que aclararles a ellas es el término ilegal para referirse a la venta o compra de divisas, porque eso induce que hay un mercado legal. La pregunta es: ¿cuál es ese mercado al que podría acceder una mipyme (micro, pequeña y mediana empresa) a comprar las divisas necesarias para sus importaciones?
Es decir, el estado compra divisas en CADECA a una tasa de 1 dólar por 120 pesos cubanos, pero no le vende a las mipymes a esa tasa.
Precios
La inflación de la economía cubana tiene su manifestación evidente en los altos precios de alimentos, bienes y servicios y su relación con los ingresos de la población.
Evidentemente hay una disminución de las ventas que el estado ofrece con respecto a períodos anteriores, y ese espacio lo han venido ocupando las formas no estatales, especialmente las mipymes.
Son frecuentes los comentarios que se esgrimen para atribuirle a las mipymes una responsabilidad significativa en la situación de crisis actual, en particular, de la inflación, baja recaudación fiscal y creciente desigualdad. Pero en realidad, las causas de esa situación se deben al inadecuado uso de los instrumentos existentes.
Además, se ha venido orquestando una campaña de los altos precios de los productos de esas formas de propiedad, y es cierto que hay altos precios. Pero hay mucho conocimiento de que en las tiendas estatales, ahora en manos del Grupo de Administración Empresarial S.A. (Gaesa), mantienen altos márgenes de ganancias por diferentes motivos, lo cual conlleva que sus precios en la mayoría de las ocasiones superan a las mipymes.
El primer ministro cubano reconoció que en las tiendas MLC los productos pueden ser más caros que en las mipymes, porque no se importan desde los mismos países, y afirmó que las TRD (Tiendas de Recaudación de Divisas) tomarán medidas sobre el asunto.
Se han aprobado 408 mipymes con la comercialización mayorista y minorista como actividad principal y otras 4 636 con esta actividad como objeto secundario. Y a mi entender deben aprobarse todas las que los empresarios cubanos soliciten. El mercado y los precios se ajustan, en este caso los riesgos van por parte del empresario, sin embargo, ellos ofrecen más bienes y servicios.
La tarea del estado es cobrar los impuestos correspondientes, no permitir la evasión fiscal. Pero no desde el poder desestimular estas formas de propiedad, que es el mensaje que se está ofreciendo. Me pregunto ¿en qué lugar de la tierra, un estado tiene que estar administrando los negocios de alimentación y gastronomía? Y si lo hace, lo debe hacer en base a la competencia y no a la imposición de medidas que van en contra de los bienes que necesita la población.
La tabla siguiente muestra el elevado dinamismo que estaban teniendo las ventas de las mipymes en un año, (11 046 mipymes aprobadas desde 2021) a pesar de que las autoridades han expresado que muchas evaden información. No obstante, aceptándola como válida, las ventas de las mipymes crecieron casi 900% en 2023 con respecto a 2024, lo que estaría evidenciando que este año 2024 el crecimiento sería descomunal.
Turismo
Un sector que llegó a tener el papel de la locomotora cubana, hoy sus resultados están distantes de las necesidades de divisas que necesita el país.
Aunque el turismo creció 1.8% en 2023, esos 1.8 millones de visitantes fueron solo 85% del plan y 51.6% de lo alcanzado en 2019. Los principales mercados emisores fueron Canadá, Rusia, los cubanos residentes en el exterior y Alemania. Lo llamativo es que los mercados más cercanos y competidores de Cuba, como la Rivera Maya y Cancún en México y República Dominicana, ya han superado los indicadores de precrisis.
No se puede desconocer que a esos países viajan los turistas estadounidenses, pero lo que es real también es que en el 2018 tampoco esos turistas venían a Cuba y se lograron más de 4.7 millones de visitantes.
El turismo no puede ser ajeno a la situación de la economía del país. Eso deriva en que la industria del ocio está sometida a muchas carencias como la falta de mantenimiento en los principales polos turísticos del país, las dificultades con la alimentación, la falta de fluido eléctrico, el estado de las carreteras, la falta de aviones propios, entre otros elementos adversos.
Es por eso que, al cierre del mes de junio del 2024, el turismo apenas crece en comparación con 2023, según la siguiente tabla:
Agricultura
Un sector tan necesario para enrumbar la economía cubana es la agricultura, por lo estratégico en la alimentación de la población. Sin embargo, al cierre de junio del 2024, se informaba que se incumplieron la mayoría de las producciones agropecuarias, por el déficit de fertilizantes, plaguicidas, fungicidas, combustibles y alimento animal como una de las principales causas de los déficits productivos.
Se destacan los incumplimientos en productos básicos como el huevo, la carne y la leche.
Alexis Rodríguez Pérez, director general de Economía y Desarrollo Agropecuario del Ministerio de Agricultura decía en la pasada Asamblea lo siguiente:
“En las producciones pecuarias, los índices de producción de carne bovina y equina han estado afectados por el deficiente trabajo organizativo entre las empresas y el cárnico para la contratación de los productores, la insuficiencia en la transportación de los animales al matadero por falta de combustible, el bajo peso de los animales sacrificados por déficit en la alimentación y la sequía en algunos territorios. De un plan acumulado de 20 400 toneladas de esta carne, se produjeron solo 15 200 toneladas.”
“En la carne de cerdo se evidencia un decrecimiento en 1 800 toneladas en igual periodo del año 2023. De un plan acumulado de 11 300 toneladas, se produjeron solo 3 800 toneladas en el periodo analizado. En el caso del huevo, la situación es similar. Se produjeron 231 900 000 unidades, 94 070 000 unidades menos del plan previsto. Otros productos también marcan la tendencia a la baja con respecto al plan: el frijol, el tabaco agrícola, la leche, el café, el cacao y la miel.”
Lo evidente es que, si la agricultura no acaba de resolver el aumento de la producción agrícola al menos en los productos esenciales en la dieta familiar cubana, es muy difícil que se logren resultados positivos en la llamada estabilización macroeconómica, término muy en boga en la actualidad, pero cuyo plan se desconoce en concreto.
La pregunta es la siguiente, ¿para qué le sirven a la población esas informaciones de la Asamblea Nacional, si la ciudadanía no lo siente en su vida cotidiana? Lo que necesita el país es saber qué medidas concretas se han tomado para revertir ese escenario, qué nudos se les han quitado a los productores, si ya Acopio les pagará las cuentas pendientes a los productores, entre otras disposiciones.
Y cuándo empezará a pagársele a los productores en una parte con divisas los productos alimenticios que se importan y que fue una de las medidas que se anunció que se tomarían, especialmente en el arroz.
Lo evidente es que, si la agricultura no acaba de resolver el aumento de la producción agrícola al menos en los productos esenciales en la dieta familiar cubana, es muy difícil que se logren resultados positivos en la llamada estabilización macroeconómica, término muy en boga en la actualidad, pero cuyo plan se desconoce en concreto.
Zafra Azucarera
Algo relacionado con la agricultura es la zafra azucarera, ya que uno de los problemas fundamentales es la falta de caña para la industria y cada vez decrece más, debido a disimiles factores, los recursos que no llegan a tiempo y la desmotivación de los agricultores, por el aún bajo precio que se paga por la tonelada de caña, aunque es justo plantear que el precio de la caña se ha subido en varias ocasiones, pero aún resulta insuficiente.
A los factores ya conocidos de los retrasos en las inversiones, la falta de piezas y repuesto, entre otras carencias, según directivos del grupo empresarial Azcuba se le suma “la poca disponibilidad de lubricantes, combustibles y otros insumos. La mayoría de las empresas agroindustriales incumplieron su plan de producción, mezclándose problemas subjetivos con limitaciones reales de carencias, lo cual revela indisciplinas y falta de exigencia de presidentes de cooperativas y jefes de áreas en la industria”.
Julio García Pérez, presidente de Azcuba, se refirió también a la fluctuación de la fuerza de trabajo como uno de los elementos distintivos de los últimos años en el sector. El directivo señaló entre los principales motivos de la migración la búsqueda de oportunidades laborales de mayor remuneración y la demanda de fuerza de trabajo calificada por parte de los nuevos actores económicos.
En concreto, las zafras apenas sobrepasan las 300 000 toneladas, valores de más de 100 años atrás, cuando no existía la mecanización actual.
El siguiente gráfico ilustra por sí mismo la situación existente con la producción de azúcar del país:
Industria Manufacturera
Cuando se analiza la producción industrial del país, se concluye que es un sector en franco deterioro, con grandes obsolescencias tecnológicas y muy distante de su potencial técnico. Así vemos que el índice del volumen físico de la industria continúa retrocediendo cada año. Nada muestra que en el primer semestre del 2024 esos indicadores hayan mejorado, sino todo lo contrario.Determinadas producciones industriales relacionadas con dos temas sensibles por los efectos en la población han tenido un deterioro ostensible en estos años, como la elaboración de productos para la alimentación y de materiales de la construcción para la reparación y mantenimiento de las viviendas.
Estos indicadores de la producción de materiales de la construcción en decrecimiento ilustran que solucionar el tema de la vivienda es una de las promesas incumplidas desde el inicio del proceso revolucionario cubano, y no se vislumbra que el país logre obtener las 100 000 viviendas anuales que un programa especial de 2006 esperó construir. Es falta de materiales los ilustra.
La directora general de la Vivienda del Ministerio de la Construcción, Delilah Díaz expuso durante las sesiones parlamentarias que el déficit habitacional en Cuba suma más de 850 000 hogares, y que el deterioro de la vivienda incluye la persistencia de 8 915 cuarterías y ciudadelas y 87 368 casas con pisos de tierra..
Conocer que en el primer semestre de 2024 se construyeron solamente 4 159 viviendas, que representaron 49% del plan para la fecha, podemos concluir que el tema de la vivienda estará irresuelto por un periodo muy largo.
En resumen, la industria cubana no se recupera, pero, sobre todo, un grupo de esas empresas industriales figuran entre las 340 con pérdidas al cierre del primer semestre del 2024, donde 67 de ellas están en el sector agropecuario, 45 azucareras y 11 de la industria alimentaria.
Evidentemente el gobierno no aborda con el énfasis necesario el tema de la descapitalización industrial, y eso se demuestra en que no aparecen medidas concretas para evitar ese deterioro.
Hay muchos temas que servirían para hacer el balance actual de la economía cubana, pero hoy la mayoría de los sectores presentan una situación compleja.
Por ejemplo, en el Transporte continua la tendencia de decrecimiento en la transportación de pasajeros en el país y que tiene su base, entre otros factores, en el deterioro del coeficiente de disponibilidad técnica y las limitaciones de combustible. Para 2024, el plan contempla 1 306 millones de pasajeros y, hasta abril, se alcanzaban 908 millones.
El ministro de Transporte Eduardo Rodríguez Dávila señaló que, al cierre de abril, el 52% de las rutas de las Empresas Provinciales de Transporte estaban paralizadas y de las activas, el 86% contaba con solo un viaje en la mañana y otro en la tarde. Las provincias de Camagüey, Granma, Villa Clara, Ciego de Ávila, Holguín, Matanzas y Artemisa son las que presentan una situación más crítica.
En general, hay dificultades en todos los sectores económicos. Se le suman los de la Higiene Comunal, especialmente en la capital del país. El déficit de medicamentos en las farmacias, algunos de venta controlada, es también alarmante. Muchos centros de salud sufren un deterioro importante. Las instalaciones deportivas y culturales tienen el mismo escenario de desgaste.
Deuda externa
Unas de las trabas principales que sufre la economía cubana, es su abultada deuda externa, especialmente las que han sido renegociadas varias veces con el Club de Paris, después que una parte importante de su total le fuera condonado. Un acuerdo del Club de París de 2015 perdonó 8500 millones de dólares de los 11 100 millones en deuda soberana que La Habana incumplió desde 1986.
No olvidar que la deuda de Cuba con ese Club sigue siendo alta por las condiciones de pocos ingresos en divisas que tiene la economía cubana en estos momentos. La deuda de Cuba con el Club de París ascendía a 4620 millones de dólares al cierre de 2023, la segunda mayor de toda América Latina y el Caribe.
En su informe, con cifras al cierre del pasado año, el Club de París precisa que, de la deuda cubana, 259 millones obedecen a sumas otorgadas a La Habana por instituciones (incluyendo créditos a la exportación o de agencias para el desarrollo) como asistencia oficial al desarrollo, y los 4360 millones restantes son de ayuda no oficial al desarrollo.
En la cuenta X el economista cubano Pedro Monreal (@pmmonreal) expresaba el pasado 25 de julio, que:
“Aunque la deuda de Cuba con el Club de París era el 15,7% de la deuda total del país en diciembre de 2023 (29.400 millones de dólares), el impago de la deuda soberana es un factor importante en la valoración del ‘riesgo país’ e influye en el acceso al crédito internacional”.
La falta de divisas a la economía cubana, hace de nuevo recurvar hacia la redolarización directa de la economía, que además le dicen dolarización parcial. El propio primer ministro Manuel Marrero anunció ante la Asamblea Nacional que sectores de la economía serían redolarizados, entre ellos el turismo y un segmento de la comercialización interna, así como los impuestos de importación al sector privado, mediante el uso directo de la moneda estadounidense.
La medida, in extremis, es una vuelta atrás en las promesas oficiales de erradicar progresivamente la circulación del dólar, al tiempo que es una reversión, al menos parcial, del proceso de bancarización, uno de los programas estratégicos del gobierno.
En septiembre de 2023, durante la visita anual que realizaron a Cuba los representantes del Club de París a La Habana, el entonces ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Ricardo Cabrisas, reiteró “la voluntad del gobierno cubano de honrar los compromisos asumidos con nuestros acreedores” siempre que sean en condiciones viables para la isla. Pero en la concreta es que no se ha producido ningún pago para hacer rebajar el monto pendiente.
Conclusiones
Solo se han analizado algunas áreas de la economía cubana que demuestran que la economía cubana no remonta periodos anteriores de mejor situación económica. Sin embargo, las autoridades cubanas no exponen con claridad las insuficiencias que presenta el esquema de planificación centralizado que utilizan, y sigue solo en anuncios el llamado programa de estabilización macroeconómica. Además, sus prometidos resultados positivos hacia el crecimiento económico no aparecen hasta el día de hoy.
Cuando han existido trabajos académicos rigurosos que plantean ciertas soluciones, la defensa que esgrimen las autoridades es que las redes sociales solo se concentran en los males y no en el sacrificio de las autoridades para resolver las dificultades. Como sucedió cuando se comentaba que los conglomerados estatales tienen mayores precios en sus productos que los de las mipymes.
Mientras el estado no reconozca que debe dar rienda suelta al aumento de las mipymes, cosa que no está haciendo en la actualidad, no tiene sentido que no se le otorgue también mayor autonomía a la empresa estatal, y no se acabe de aprobar la llamada Ley de Empresas, una de las primeras medidas que deberían haberse aprobado y que se conoce que ha sido torpedeada por algunas instituciones, que no quieren perder prerrogativas.
La evidencia de la situación de la economía cubana impone que el estado acabe de tomar medidas redistributivas en la sociedad, dejar de subsidiar empresas irrentables recurrentes e incrementar las jubilaciones otorgadas antes del ordenamiento monetario en un primer momento, terminar con los subsidios generalizados por el subsidio a los grupos sociales más bajos. Medidas de corto plazo.
La solución ya repetida por todos, es implementar la pospuesta reforma integral de la economía y darle al mercado el papel que debe ocupar en una sociedad con tanta ineficiencia económica y que para los malentendidos no es pasar al capitalismo neoliberal, sino un modelo social con mercado, como ha aplicado China y Viet Nam. (2024)