A partir de la recepción de este producto en los puertos de La Habana y Santiago de Cuba, desde este viernes 31 de mayo inició la distribución del mismo
Muchas de las batallas cubanas contra los demonios de las dificultades se están ganando con la fórmula de adaptar el pensamiento a los tiempos que corren, de buscar nuevos caminos cuando, por múltiples causas, se han cerrado otros tantos conocidos.
Tal filosofía asomó en el municipio de Sagua la Grande, de la provincia de Villa Clara, hasta donde llegó, en la tarde de este jueves, el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, como parte de un recorrido iniciado en 2024 –municipio a municipio, y a lo largo del país–, el cual busca pulsar de primera mano diversas experiencias y esfuerzos productivos que tienen como meta mover la nación hacia adelante.
Uno de los lugares en la agenda de la dirección del Partido por el territorio central del archipiélago fue la Empresa Electroquímica de Sagua (Elquim), productora de cloro y sus derivados, cuyos destinos son los espacios nacionales y la zona del Caribe, región hacia la cual la fábrica ha acrecentado notablemente sus exportaciones.
Allí, el Jefe de Estado –acompañado por el miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central, Roberto Morales Ojeda– preguntó por el estado actual de la tecnología, renovada no hace mucho tiempo, y fue puesto al tanto de cómo la planta no sufre escapes de productos químicos, algo que los visitantes que suelen llegar al lugar han constatado con admiración, porque no se percibe olor alguno de las sustancias derivadas del proceso productivo.
A propósito de ir adaptando los modos de razonar según los tiempos que corren, los anfitriones explicaron que la Empresa no ha podido repartir utilidades, porque los gastos del comedor no han sido pocos. Entonces, la opción del autoconsumo se ha hecho imprescindible, y será un camino que ya comenzó, pues, en su función de beneficio y de conferir autonomía, esa decisión podrá aligerar cargas financieras de la Planta.
La unidad empresarial de base (UEB) Taller Ferroviario 9 de Abril –último punto en la agenda de la tarde– también es ilustrativa de cómo puede irse moviendo el pensamiento: allí el mandatario elogió las nuevas maneras a que acude el colectivo obrero, el cual tiene a su disposición una alta capacidad de innovación. Desde tal escenario, por ejemplo, se enfrascan hoy para obrar la reconversión de ómnibus Diana en ferrobuses.
Porque los tiempos actuales lo exigen, los directivos del taller han pensado –y así lo ejecutarán– en montar un grupo de paneles fotovoltaicos, lo cual será cardinal en el cambio de la matriz energética, y además, será la posibilidad de ofertar energía eléctrica a otras zonas.
La tarde de este itinerario-taller había comenzado por el central Héctor Rodríguez, donde el dignatario fue informado acerca de que el coloso incumple su plan de producción; entre otras razones, por falta de combustibles y de lubricantes, y por adversidades climatológicas.
Allí, donde el mandatario preguntó por los tiempos futuros del central, los directivos y trabajadores se comprometieron a seguir moliendo mientras sea posible, y así entregar 2 000 o 3 000 toneladas más por encima de las 7 000 ya entregadas.
Otra vez, en uno de los encuentros sostenidos este jueves con los hijos de Sagua la Grande, el Presidente recordó que, en lo novedoso, en el ingenio de emprender caminos que abran el diapasón para las soluciones, está la posibilidad de dejar atrás, lo antes posible, las situaciones difíciles.
EL CAMINO AL ÉXITO HA SIDO PENSAR Y HACER TODO DIFERENTE
En la mañana, Díaz-Canel y Morales Ojeda habían estado en el municipio espirituano de Yaguajay, donde el primer punto del itinerario fue la UEB Productos Lácteos Mérida.
«Este es un buen ejemplo», expresó el mandatario, luego de dialogar con Ignacio González Más, director de la entidad, que en sus inicios solo fabricaba queso y hoy ostenta la gama de una decena de productos, aunque el Queso Mérida sigue siendo su oferta distintiva.
En un escenario de orden y limpieza, en el que 173 cubanos no solo se enfrascan en producciones de valor, sino que, además, irradian la eficiencia de la UEB hacia la comunidad, Ignacio contó que el centro ha hecho posible que la población más cercana tenga garantizada, en su totalidad, agua potable; y que los niños de la escuelita, los maestros y el médico de la familia, tengan almuerzo en la UEB.
«Imagínense, aquí, con las utilidades disponibles, cuánto más podrían hacer», razonó el dignatario, al conocer que la unidad productiva no puede contar con ese dinero porque la empresa a la cual pertenece –la provincial de Lácteos– absorbe las ganancias.
«La ineficiencia de la Empresa se traga la eficiencia de la UEB. Esas son de las cosas que tenemos que cambiar en el pensamiento empresarial», ratificó el Jefe de Estado.
Ante un empeño que cuenta con autoconsumo, con espacios para cría de animales, con la aspiración de poseer más tierras para acrecentar producciones, el Presidente volvió a una idea que suele compartir en estos tiempos: ¿Por qué bajo la misma gravitación del bloqueo, por qué en medio de las mismas adversidades, unos salen adelante y otros no? La respuesta hay que buscarla, como él ha enunciado en varios momentos, en los métodos de dirección y en la manera en que se ha dado participación a los trabajadores.
La misma línea de razonamiento marcó la llegada y el intercambio en la UEB Santos Caraballé –perteneciente a la Empresa Pecuaria Venegas–, donde la dirección del país pudo constatar varios logros en la Vaquería Típica Dos, una de las 18 con que cuenta esa Empresa, y de las cuales hay diez recuperadas.
Antes de escuchar la explicación detallada de César Liván Franco, director de la Empresa Pecuaria, ya el orden y la belleza del lugar le habían hecho decir al mandatario: «Aquí hemos visto cómo es que queremos ver a la ganadería». Y su expresión fue fundamentada por el cuidado en las señalizaciones, por cercas bien construidas, por una cultura presente, esa que lleva y exige el mundo de la ganadería.
A lo anterior se añaden –a nivel de Empresa– las áreas de autoconsumo, los espacios en los que son cultivados el arroz, las viandas y las hortalizas, la siembra de plantas proteicas con las cuales alimentar a los animales. En ese universo, los ingresos son altos, no hay atrasos con el banco, hay comunicación con la Universidad, se cuenta con tiendas de insumos agropecuarios, con clínica veterinaria, se hacen casas hermosas para los vaqueros… Y todo eso llevó a que Díaz-Canel preguntara: «¿Qué es lo que está mal aquí?».
El pasado año –explicó César Liván– hubo más de 30 casos de hurto y sacrificio de ganado mayor; y en este 2024 van por solo tres. Los pasos en buena dirección motivaron que el dignatario expresara: «Sí podemos salir de este lío. Lo que pasa es que tiene que ser así: trabajando».
Cuando el mandatario comentó al directivo que, si ellos se hubieran achantado, esperando por un barco de importación para salir adelante, no hubieran llegado al éxito de hoy, César Liván fue tajante, en clara alusión a la urgencia de andar despiertos y a no esperar por fuerzas externas: «Eso está prohibido hablarlo aquí».
El políclínico Mario Muñoz fue el tercer punto en la agenda de la visita, sitio que atiende a casi 10 000 personas del consejo popular de Venegas. Son 16 los consultorios que pertenecen al centro de Salud y, entre otros logros, la importante instalación ostenta cifras de cero mortalidad materna y de cero mortalidad infantil.
Minutos antes de iniciar la reunión que suele cerrar la visita a cada municipio, el Jefe de Estado comunicó a los pobladores del consejo popular de Venegas su convicción de que la Mayor de las Antillas, con inteligencia y trabajo, puede salir adelante, y que, luego de ver experiencias loables de municipios como el de Yaguajay, es indudable que quienes llegan al éxito es porque han hecho las cosas de una manera distinta, diferente de quienes todavía no rompen la inercia. HHC: negritas y subrayados nuestras