Fidel


"Peor que los peligros del error son los peligros del silencio." ""Creo que mientras más critica exista dentro del socialismo,eso es lo mejor" Fidel Castro Ruz

martes, 5 de julio de 2022

Defender la Revolución es también criticar nuestros propios errores; pero, el Bloqueo es lo que más nos daña…Comentario HHC



Por Félix Sautié Mederos

A las agresiones imperialistas que estamos sometidos, se debe sumar la insistencia de lo que podríamos denominar “un intento de chantaje político” que se afanan en plantearnos quienes se han comprometido servilmente y de manera oportunista con el objetivo central del Bloqueo Imperialista, dirigido a culpar a la Dirección de la Revolución de las penurias que nos crean las genocidas medidas del Imperio contra nuestro país; y que personalmente, se hacen copartícipes, de los propósitos iniciales del Bloqueo planteados en el Memorando del Vicesecretario de Estado de los EU Lester Mallory en abril de 1960 de “provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del Gobierno”.

Me explico: en las actuales circunstancias, se nos presentan unas disyuntivas al respecto en la defensa creativa de la Revolución que no debemos eludir su análisis para definirnos al respecto. Que son, solo plantear lo concerniente al Bloqueo en sí mismo sin tomar en consideración nuestros propios errores que afectan también al desenvolvimiento de la vida en sociedad; y/o tomarlas en consideración además de las consecuencias del Bloqueo, definiendo nuestros propios errores. En función de Identificarlos, denunciarlos y plantear medidas para su solución, lo que se plantean utilizar torcidamente nuestros enemigos y algunos ingenuos que se creen sus patrañas para incluirnos en su culpar a la Dirección de la Revolución de todas las penurias que nos crea el Bloqueo.

Eso está sucediendo con insistencia en un “todo vale”, que nos aplican con sistematicidad persistente nuestros enemigos imperialistas y pro imperialistas, acompañados de los ingenuos que coinciden con ellos como el burro que toca la flauta. Quiero referirme abiertamente a ese accionar de conjunto en contra de consecuencias del Bloqueo y de nuestros propios errores, para que no me confundan en sus oscuras maniobras, porque solo la verdad por complicada que pueda ser nos hará libres.

El Bloqueo es la causa general y más decisiva que está afectando nuestro desarrollo en su conjunto desde hace más de 60 años; pero, también se suman nuestros propios errores e insuficiencias, y ahí es donde tenemos una oportunidad de actuar efectivamente con audacia y creatividad para encontrar soluciones y alternativas que son esenciales para el desenvolvimiento de nuestro propio desarrollo; a los efectos pasar por encima del Bloqueo, que por nuestra cuenta no podemos eliminar porque eso solo le corresponde incluso por Ley al Congreso de los Estados Unidos. A esa alternativa de conjunto se oponen nuestros enemigos y los críticos cargados de ingenuidades que intentan confundirnos con sus perversos propósitos eludiendo las consecuencias del Bloqueo y refiriéndose solo a nuestros propios errores. En consecuencia, actúan abiertamente aprovechándose de nuestras críticas justas a nuestros propios errores e insuficiencias, magnificándolas, confundiendo las cosas y utilizándonos para sus perversos propósitos.

En este sentido, considero que nuestra acción debe ser integral con todo en cuenta, enfrentando sus intentos de “chantajes” y buscando las mejores soluciones al conjunto de los problemas tanto para las consecuencias nefastas del Bloqueo como para la solución de nuestros propios errores. Nunca dejarnos engañar y muchos menos “chantajear” al respecto.

Así lo pienso y así lo afirmo en mi derecho a opinar, con mis respetos para el pensamiento diferente y sin querer ofender a nadie en particular.


Comentario HHC: Ningún modelo económico de desarrollo en el mundo está diseñado  y tampoco se ha probado, que se puede alcanzar el desarrollo bajo las condiciones de guerra económica que nos ha impuesto EEUU. Sudáfrica, con un bloqueo parecido duro dos años, nosotros vamos por 60 años, por lo cual el desafío es aún mayor.

Hay varias ideas a exponer.

¿ Vamos a eliminar el Bloqueo con las condenas anuales en la ONU por la inmensa mayoría de los países de este mundo , con una resolución, que además, es no vinculante?. En mi opinión creo que no,  y el indudable triunfo politico que hemos logrado al exhibir a la principal potencia del mundo, no ha sido suficiente. Porque EEUU ha asumido el costo de la misma y de ahi no pasa.

La hipocresía y el doble rasero de la politica exterior de EEUU  ha continuado, digamos, se  ha incrementado, prueba de ello son las 243 medidas adicionales de Trump. Es decir , no solo no les importan las resoluciones de la ONU, sino ademas lo han incrementado a niveles de situación de estado de guerra. Y en este sentido la diplomacía nuestra no ha encontrado y por tanto no ha logrado, la ruta para revertir esta situación aunque sea en pequeños pasos, NADA. Todavía un alto funcionario nuestro con las medidas de Trump, dijo publicamente que las mismas "no iban a impedir nuestros planes de crecimiento y desarrollo ", un desafío lanzado innecesariamente.

El Bloqueo que en su esencia y por la Carta de la ONU, es un acto de genocidio contra el pueblo cubano, se ha codificado de tal forma, que el Congreso y el Senado de EEUU  deben votar a favor de eliminarlo, previo cumplimiento de condicionantes injerencistas. Para ello, quizás deben darse, mayoría del mismo partido en el Congreso , en el Senado y que el Presidente quiera impulsar esa vía. Biden con mayoría en el Senado y en el Congreso de demócratas en sus inicios, hubiera podido hacer algo, pero las huestes fascistoides y anticubanas de la Florida  se encargaron de eliminar esa ruta, mediante el chantaje y la politiquería. Es decir, hay una dependencia de la política interna de los EEUU y su curso.  

En tres momentos de iniciar posibles cambios, ocurrieron hechos que lo malograron. Recuerdo que la Helms Burton se aprobó por Clinton a raíz del derribo de las avionetas de Hermanos al Rescate, una provocación que interpretamos que debíamos actuar contundentemente. Así paso con Carter y la apertura del Mariel con los balseros, y también paso otro tanto con Obama, donde solo en su segundo mandato se dignó hacer algo, y donde no se pudo avanzar más, por la lentitud del proceso, y lo que había que dar a cambio según esperaban los EEUU , o no era admisible para nosotros o no fue suficiente para los EEUU. Cuba la agredida, le exigen hacer concesiones, su agresor, todo un contrasentido.

Por otra parte, también recuerdo que China y Vietnam, amén de las medidas implementadas a lo interno, pudieron " despegar" cuando EEUU les quito el Bloqueo, antes no avanzaron al ritmo que lo hicieron con posterioridad. Por cierto, Clinton que nos impuso la Helms Burton fue el mismo que levanto el Bloqueo a Vietnam, lo cual dice mucho que en  última instancia, los gobernantes de EEUU  le dan importancia al pragmatismo, a lo que políticamente les convenga, y la ideología que es la misma en esencia, para ambos partidos, queda siempre subyacente.

Hace poco oí al Presidente Diaz Canel con un mensaje críptico dirigiéndose a EEUU cuando dijo que " Cuba había cambiado y el gobierno de EEUU no lo había hecho aún".  En el libro de la "Diplomacia Encubierta con Cuba" de LeoGrande quedo la evidencia de que Cuba y EEUU hasta en los peores momentos, han negociado por decenas de años. 

Tenemos algunas cosas que podemos hacer. Por ejemplo, contamos con inmensas reservas por aprovechar en nuestra economía, y debemos crear para ello, un verdadero ambiente de negocios en el sentido amplio del término que sea atractivo para todos los países. Esta es una de las rutas para eliminar el Bloqueo, y ser un país lo suficientemente atractivo en lo económico  para el mundo, que pese en la balanza más que la politiquería del Norte. Ese es el punto de inflexión, de quiebre, de la política actual de EEUU hacia Cuba.  Si no se logra, el costo del bloqueo para los EEUU lo seguirán asumiendo. 

En esencia hay que hacer lo que dijo en 1992 Juan Pablo II: “Que Cuba se abra al mundo con todas sus magníficas posibilidades, y que el mundo se abra a Cuba”, y lo que dijo el Comandante en Jefe en su Concepto de Revolución, pero no como consigna, sino en la práctica  " cambiar todo lo que debe ser cambiado".

Tenemos el deber ineludible de eliminar el bloqueo de EEUU al pueblo cubano.  "Emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos".

De cómo investigábamos en el Departamento de Filosofía y en la revista Pensamiento Crítico

 Revista Temas 

 TEMAS - MARTA NÚÑEZ SARMIENTO - Catalejo - julio 4, 2022

 


MARTA NÚÑEZ SARMIENTO 

 

Este artículo –escrito especialmente para Temas– forma parte del dossier dedicado al Departamento de Filosofía y la revista Pensamiento Crítico (1963-1971), que dio inicio a la serie titulada La historia no siempre bien contada, dedicada a temas y problemas en el curso de la Revolución cubana. Su objetivo es contribuir a dar luz sobre acontecimientos que, por su carácter o desenlace, han dado lugar a polémica, y que resultan relevantes para entender etapas del proceso.

*Todos los textos que aparecen en esta serie han sido escritos especialmente para Temas. 

Comentaré aquí cómo los miembros del Departamento de Filosofía y de la revista Pensamiento Crítico emprendimos investigaciones sociales concretas sobre la contemporaneidad cubana que vivíamos entre 1967 y 1971, imbuidos de la filosofía marxista “viva” que aprendimos. Esta experiencia nos sirvió para entender las transformaciones de la población en la transición socialista cubana, identificar ciertos problemas y comprenderlos, así como sugerir soluciones y participar en su implementación. 

En sus artículos para esta serie, Marta Pérez Rolo y Elena Díaz explicaron los contenidos de los programas de estudio que nos permitieron aprender sobre los textos originales de los clásicos del marxismo y sus continuadores en el siglo XX, a partir de los momentos históricos concretos que vivieron. Solo así comprendimos lo importante que fue para ellos reflexionar sobre los hechos contemporáneos, así como sus historias, para no solo limitarse a entender el origen de las injusticias, sino a enfrentarlas. 

Más de medio siglo después del Departamento, recapacito sobre cuánto nos sirvieron aquellos aprendizajes para realizar los estudios sobre Cuba que nos solicitaba la dirección del país, a través del entonces rector de la Universidad de La Habana (UH), Dr. José Miguel Miyar Barruecos (“Chomi”). Fue la época en que la UH salió de sus murallas para adentrarse en la entrañas de un país en Revolución con mayúscula. Desde entonces se sembraría la semilla del Estudio-Trabajo, que reorganizó la docencia para dedicar semanalmente la mitad del tiempo a las asignaturas impartidas en las aulas y la otra mitad a labores prácticas vinculadas a conocimientos relacionados con ellas. 

Aquella práctica generó que profesores y estudiantes indagáramos cuestiones de interés local y nacional. Nos lanzamos a estas pesquisas sin los entrenamientos metodológicos y de procedimientos de las ciencias sociales, inmersos como estábamos en los dilemas que investigábamos, y en las urgencias que requerían sus soluciones. 

En el estudio de caso realizado en 1998 sobre la apropiación de Antonio Gramsci por los miembros del Departamento y de Pensamiento Crítico,[1] entre ellos yo misma, les pregunté a algunos de ellos cuánto les había servido el filósofo italiano para entender  la sociedad cubana. A continuación, reproduzco varias respuestas. 

“La Filosofía marxista debe servir para entender la filosofía común de las personas», “Gramsci entendió el marxismo como ideología y la ideología como una forma de conocer la realidad”, “Gramsci ayudaba a comprender las cuestiones de la cotidianidad que pasaban en Cuba y en América Latina y que no explicaban las versiones dogmáticas el marxismo. Por ejemplo, ¿por qué hay personas que son humildes y no están con la revolución de los humildes, e incluso llegan a luchar contra ella? En aquellos años recién pasábamos la lucha contra bandidos en Cuba. ¿Por qué la mayor parte de la gente no se subleva contra la opresión a que son sometidos?” 

Todos los entrevistados mencionaron la función del intelectual orgánico gramsciano “como aquel que contribuye a las acciones del partido revolucionario con sus reflexiones, aunque los resultados de sus razonamientos no se tradujeran en políticas del partido”. 

“Gramsci retoma al marxismo como una filosofía que forma parte de la cultura y de la historia”. Aplicado al caso de Cuba se entendía el papel del filósofo dialogando con su cultura, con el partido, con el gobierno. 

“En Gramsci hay una enorme riqueza de hechos concretos, sobre todo en Italia. La ingeniosidad de su pensamiento para tratar problemas pequeños sirvió para el quehacer sociológico”. 

Metodológicamente, Gramsci permitió pensar las categorías sin anquilosamientos, y ayudó a unir lo teórico y lo práctico. 

Este “giro filosófico” permitió realizar muchas investigaciones concretas, en las que habíamos estado implicados todos los entrevistados.[2]

 

Los de la calle K y su contexto en la UH

 

Artículo de Marta Núñez¿Quiénes éramos y cuál era el contexto histórico y social concreto de la UH entre 1967 y 1971? Tomando como muestra a los veintitrés miembros del Departamento y de la revista que respondieron mis preguntas en 1998 y en 2013, sus datos sociodemográficos eran los siguientes: 

Catorce eran hombres y nueve, mujeres. Nacieron entre 1939 y 1949, excepto una compañera que había nacido antes. Por tanto, al triunfar la Revolución tenían entre 10 y 20 años, mientras que cuando ingresaron al Departamento contaban entre 20 y 31 años. De manera que tenían cercanas las vivencias del capitalismo, un referente empírico importante para interpretar los cambios en los modos de vida de los cubanos, así como para enriquecer y actualizar nuestros debates intelectuales. 

La mayoría absoluta era oriunda de La Habana, dos de Las Villas, uno de Holguín y otro de Santiago de Cuba. 

Trece de ellos procedían de la pequeña burguesía y dos de la burguesía media alta. El resto venía de familias obreras urbanas. Dieciséis eran blancos; siete, mestizos. 

Al entrar al Departamento, catorce no habían concluido sus estudios universitarios; nueve, sí. Procedían de todas las carreras de las entonces facultades de Humanidades, Economía y Ciencias de la UH. 

El contexto histórico y social de la UH en aquellos años estaba marcado por la Reforma universitaria de 1962, recién aplicada. Los bisoños docentes del Departamento habían sustituido a los profesores emigrados en los primeros años de la Revolución. Podría afirmar que fuimos los “maestros emergentes” de entonces. El Dr. Miyar Barruecos había asumido como rector en 1966; e inmediatamente vinculó a la UH a la vida del país. 

La Universidad experimentó un evento único cuando la institución académica y el Partido Comunista de Cuba (PCC) se unieron en la figura del rector. Así se llevó a cabo la construcción de esta organización en la UH entre 1967 y 1969. En el Departamento y en Pensamiento Crítico nos organizamos por grupos para celebrar las asambleas de balance los fines de semana. Durante decenas de horas, cada quien contó su vida, en un ejercicio de reflexión autocrítica que nos ayudó a conocernos más. 

Siendo profesores “emergentes”, teníamos prácticamente las mismas edades de los alumnos de los cursos diurnos. Cuando impartíamos docencia nocturna, los alumnos eran mayores que nosotros y muchos tenían cargos en la dirección del país. Fue una verdadera formación pedagógica “con carburo”. 

Convivíamos permanentemente con los alumnos en los trabajos voluntarios de la agricultura, en las escuelas militares y en las investigaciones. 

El director del Departamento creó y dirigió la Edición Revolucionaria, donde se publicaron textos de los marxistas clásicos y contemporáneos que utilizamos en la docencia. Los del Departamento publicamos en las antologías preparadas por esa editorial. Además, ayudábamos a preparar los números de la revista Pensamiento Crítico, escribiendo artículos, sirviendo de traductores o enmendando las pruebas de galera que salían de la imprenta. 

Era la época en que Fidel visitaba regularmente la entonces Plaza Cadenas, bien entrada la noche, para no interrumpir los cursos nocturnos. 

Los estudios sobre Cuba 

Luego de este preámbulo para contextualizar nuestras pesquisas de entonces, las explicaré. He preferido no mencionar los nombres de quienes trabajaron en ellas, para no correr el riesgo de omitir a ninguno. 

Aquellas fueron las primeras experiencias investigativas para todos, como ya señalé, sin dominar todavía los procedimientos de indagación de las ciencias sociales. Todos los temas fueron solicitados por las máximas instancias de la dirección del país, en su afán por conocer mejor a una Cuba que se transformaba. 

Contábamos con diferentes niveles de conocimiento sobre las teorías marxistas de la sociedad. Me refiero a los textos originales fundamentales de los clásicos, y de sus seguidores en el siglo XX, entre quienes estaban Lenin y los pensadores que lo acompañaron en la Revolución de Octubre; así como los que promovieron las revoluciones en Europa occidental entre 1918 y 1919. Leímos a Antonio Gramsci y a José Carlos Mariátegui. También a los filósofos y politólogos de los 60, como Georgy Lukacs, Louis Althusser, Umbert Eco, Michel Foucault, Amílcar Cabral, Franz Fanon, entre otros.  Y, por supuesto, bebimos de Julio Antonio Mella y Antonio Guiteras, así como de Fidel, Che y Osvaldo Dorticós. 

Todas las investigaciones las hicimos en medio de tormentas provocadas por la Revolución, con la que estábamos comprometidos hasta la médula, y que vivíamos en carne propia. Esto dificultó que nos pudiéramos distanciar de los problemas que estudiábamos para hacer ciencia; un pecado que cargo hasta ahora, al menos yo, a pesar de mis exorcismos con el compromiso y el distanciamiento. 

Comprendimos que los manuales soviéticos de filosofía marxista no servían para entender las realidades cubanas ni las que existían en otros países en revolución. De ahí la urgencia que teníamos de pensar con cabeza propia y de leer mucho, a la vez que criticábamos las ideas dogmáticas.  

Los estudios concluían en informes internos para consumo de quienes los solicitaban, en ponencias para presentar en eventos, en artículos publicados o no, y en fuentes de apoyo a la docencia de la Filosofía marxista. 

Todos los resultados los discutíamos en el Departamento, que se convirtió en una suerte de “tanque pensante”. En esos debates perdimos el miedo a que nos criticaran lo que habíamos escrito y, así, aprendimos a reescribir varias veces las versiones originales. El ambiente era casi interdisciplinar, porque todos procedíamos de carreras distintas. 

En los trabajos de campo, tratábamos de “hacer hablar” a las personas sobre las situaciones que vivían. Evitábamos imponerles nuestras ideas preconcebidas. 

Estas indagaciones nos hicieron valorar la relevancia de participar como “intelectuales orgánicos” inspirados en nuestras posiciones ideológicas. Reconocimos los beneficios de comparar lo que sucedía en Cuba con las realidades de otros países. 

¿Cuáles fueron algunos de los temas que desarrollamos en estas investigaciones? 

En 1967, el Ministerio del Interior solicitó a la UH que analizara las percepciones que sobre la Revolución tenían los presos contrarrevolucionarios internados en la penitenciaría de Ciudad Sandino, en Pinar del Río. Para las entrevistas, colaboramos con la escuela de Ciencias Políticas, que elaboró las guías. Resumo los resultados más relevantes. 

Entre los alzados y colaboradores había personas que no provenían de la burguesía, sino eran trabajadores y pequeños propietarios agrícolas del Escambray, que se enfrentaron a las fuerzas de la Lucha contra bandidos. Sus comportamientos estaban enraizados en el odio al comunismo; estimaban que la Revolución no podía “ganarle” a los Estados Unidos; y creían que Fidel les había tronchado sus caminos para hacer dinero. Desgraciadamente para ellos, no iban a ver el fin de la Revolución. 

Aunque fue el primer trabajo de campo que hicimos, nos ratificó lo que habíamos aprendido de la Filosofía marxista no dogmática: pertenecer a una clase sojuzgada no genera espontáneamente que los oprimidos piensen y actúen contra sus reales opresores. Estos, al contrario, se habían unido a ellos para combatir con las armas una Revolución que les había dado o les aseguraba en el futuro gozar de una vida digna.

A fines de ese mismo 1967, la dirección revolucionaria solicitó al rector Miyar que enviara a profesores de diferentes facultades para investigar las situaciones sociales, económicas y políticas existentes en Santiago de Cuba, Bayamo y Guantánamo, después de sustituir al Primer Secretario del PCC en la entonces provincia de Oriente. 

Estudiamos todas las opiniones sobre las distintas esferas de las vidas de las personas, especialmente los daños que les ocasionó la destituida dirección política provincial. Los entrevistados hablaron sin tapujos sobre las maneras autoritarias de dirigir, alejadas de los intereses de la población y de la Revolución. 

Aunque el informe de la investigación no se publicó, sino que se envió a quienes la encargaron, sirvió para redactar artículos, presentar ponencias en el Congreso Cultural de La Habana (enero, 1968) y ante los jóvenes europeos y norteamericanos que trabajaron en el campamento “5 de Mayo” (1969), y se utilizó para enriquecer la docencia. 

En la segunda mitad de 1967, un grupo de nuestros profesores se unió a otros de la Facultad de Humanidades para indagar sobre la situación social en las montañas del Escambray. 

En 1968 elaboramos una propuesta sobre lo que podría ser el sistema de dirección económica en la transición al comunismo en Cuba. La solicitó el presidente Osvaldo Dorticós, y dirigieron su elaboración Luis Álvarez Rom (ministro de Hacienda) y Miguel Cossío Woodward (director en JUCEPLAN). Los participantes, miembros del Departamento de Filosofía y de la Facultad de Economía de la UH, analizamos críticamente las experiencias históricas y contemporáneas de la transición socialista en la URSS y en los países socialistas de Europa del Este, incluida la de Yugoslavia. Hicimos énfasis en la Nueva Política Económica (NEP) soviética, en los sistemas de cuentas nacionales de la URSS y otros países europeos miembros del CAME, y en la autogestión yugoslava. 

Conocimos los debates sobre el socialismo que sostenían los líderes de los partidos comunistas de Europa occidental, especialmente de Francia y de Italia. Consultamos los textos sobre el tema de Louis Althusser, Erich Fromm y los publicados en la revista inglesa New Left Review. Analizamos los trabajos de Paul Baran y Paul M. Sweezy, además de su revista Monthly Review. Leímos sobre la Revolución cultural en China, en particular, los libros de K. S. Karol. 

Finalmente, estudiamos los debates cubanos sobre las propuestas para el sistema de dirección de la economía en transición, contenidos en los discursos y trabajos de Fidel, Osvaldo Dorticós, Che, Carlos Rafael Rodríguez, Alberto Mora y otros, muchos de ellos reproducidos en la revista Nuestra Industria Económica del Ministerio de Industria de Cuba. 

También consultamos textos sobre las experiencias cubanas en la transición del capitalismo al socialismo, no solo en la economía, sino en el Estado, la ideología y las políticas sociales.

 En todo este proceso, los debates fueron los que aportaron más conocimientos para elaborar las propuestas finales. En ellos llevamos nuestras vivencias personales de los cambios ocurridos entre 1959 y 1968. Mencionaré algunas de ellas. 

Era imposible trasladar acríticamente a Cuba las experiencias de la URSS y del resto de los países miembros del CAME. La transición no podía limitarse solo a la economía, sino tenía que trascenderla, para tratar la política, la sociedad y la ideología. Siempre se resaltó la necesidad de promover la participación popular para asegurar la identidad entre el gobierno y el pueblo. La transición socialista sería un camino largo, bajo las condiciones del bloqueo de los Estados Unidos. 

Los resultados finales se presentaron a la dirección del país y sirvieron de base para varios artículos publicados luego en Lecturas de Filosofía (tomo II). 

Desde fines de 1969 hasta mediados de 1970, el Estado mayor de la Zafra de los Diez Millones en Oriente solicitó a los miembros de varias facultades de la UH que laboraran en los centrales azucareros, que indagaran varios asuntos, mientras trabajaban en los cortes de caña. Parte de este grupo fueron los profesores del Departamento. Entre otros aspectos, evaluaron las líneas de dirección y de participación en el central Antonio Guiteras; analizaron las ineficiencias de la zafra y comprobaron cómo cambiaba la vida cotidiana de las familias campesinas y de los obreros en siete centrales del norte de la provincia de Oriente. Como consecuencia, el INRA pidió investigar el funcionamiento de la agricultura cañera y no cañera en esa zona del país. 

En el ámbito de la cultura, el Departamento colaboró con el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) y el Instituto Cubano de Radiodifusión (ICR, hoy ICRT), sin abandonar su docencia en las aulas universitarias.  Igualmente, varios de sus integrantes fueron ponentes en el Congreso Cultural de La Habana de 1968. 

En el caso de la primera institución, prácticamente todos participamos en los debates ideológicos en torno a las películas seleccionadas, realizados en las salitas del ICAIC, para después mostrarlas a los estudiantes que cursaban Filosofía Marxista y así apoyar los temas que les impartíamos. Dos profesoras colaboraron en la creación del programa televisivo 24 por Segundo. 

A solicitud del comandante Jorge Serguera, presidente del ICR, varios profesores del Departamento colaboraron con la institución. Junto a especialistas de la TV, les tocó analizar los contenidos de varios programas y su grado de aceptación por la teleaudiencia, para sugerir cambios en la programación; así como asesorar programas televisivos. 

Un evento trascendental de la época fue el Congreso Cultural de La Habana, celebrado en enero de 1968, a escasos meses del asesinato de Che, con la presencia de intelectuales relevantes de todo el mundo, solidarios con Cuba, aislada diplomáticamente entonces del resto del continente americano, con la excepción de México y Canadá. Profesores del Departamento expusieron sus trabajos sobre juventudes, ideología y mujer, en distintas comisiones, intercambiaron con intelectuales extranjeros y participaron con jóvenes representantes de los Estados Unidos en la creación de la brigada Venceremos. 

En todos estos espacios incursionaron miembros de la calle K, mediante estudios sobre la cultura cubana y sus medios, en un intercambio de conocimientos para mejorar las funciones educativas del cine, la TV y las universidades cubanas. 

Pero hubo más… 

Participantes en el grupo de estudios sobre “Pensamiento revolucionario cubano” aportaron indagaciones sobre documentos y debates acerca de las obras de Martí, Mella, Villena, Guiteras, Che y Fidel. Los resultados culminaron en textos para la docencia y en artículos, publicados o no. Además de recopilar estudios, reflexionaron sobre los momentos históricos concretos en los que vivieron estas figuras, y sus aportes al pensamiento y la cultura nacionales. 

Otro miembro del Departamento fue nombrado director de la Biblioteca Nacional José Martí y copresidió el programa de actividades para conmemorar el centenario del inicio de la revolución cubana, el 10 de octubre de 1868. 

Otros se dedicaron a indagar sobre la juventud cubana. Además de la ponencia presentada en el Congreso Cultural de La Habana, un profesor publicó “Generaciones y Revolución”, en El Caimán Barbudo, artículo ampliamente debatido en las clases. 

Otras dos acciones requirieron cierto grado de investigación sobre la juventud. La primera fue la contribución de profesores que colaboraron con la recién creada Columna Juvenil del Centenario, mediante sus testimonios en el informe “Camagüey Año I”. La segunda fue el “Material de estudio para los círculos políticos de la UJC de la UH”, a petición del Comité de dirección de esta organización. 

Por último, a solicitud del Dr. Miyar Barruecos, cuatro jóvenes de la calle K que cursaban postgrados en Santiago de Chile analizaron la imagen de Cuba en la prensa opuesta al presidente Salvador Allende durante su primer año de mandato, en noviembre-diciembre de 1971. Además de su interés académico, este análisis contribuyó a que Fidel, de visita en ese país, tuviera una visión sintética sobre esta oposición.  

Experiencias como estas favorecieron, posteriormente, que enrumbáramos nuestros caminos como sociólogos, politólogos, historiadores, economistas y otras ramas de las ciencias. Muchos permanecimos en la UH, mientras otros trabajaron en centros de investigación del Comité Central del PCC, del CITMA y del Ministerio de Cultura. 

Esa gran prueba que es la vida demostró cuánto sirvieron nuestras primeras experiencias investigativas para mantenernos como intelectuales orgánicos al estilo cubano. 

La Habana, 27 de junio de 2022

 


[1] “La apropiación de Gramsci en Cuba en los años sesenta: un estudio de caso,” presentada en el Primer Taller cubano-mexicano sobre la vida y obra de Antonio Gramsci, organizado por el Centro Juan Marinello en 1998, y publicada en Hablar de Gramsci (CJM, 2003). Y la ponencia con Ángel Hernández en “Coloquio científico 50 aniversario del Departamento de Filosofía de la Universidad de La Habana,” en septiembre de 2013.

[2] Solo resumiré lo que hoy llamaríamos estudios de caso sobre Cuba. Ya Marta Pérez-Rolo y Elena Díaz, en los textos referidos antes, comentaron las indagaciones sobre América Latina llevadas a cabo en esos años, que contribuyeron a entender la historia y la contemporaneidad de la región a la que pertenece Cuba.

La inflación abrasa Europa: nueve países superan el 10% y España sufre un claro contagio a bienes y servicios

 La menor productividad y competitividad de la economía española aumentará el impacto de la inflación

Las millonarias medidas adoptadas por los gobiernos europeos no consiguen de momento relajar la espiral de precios, que alcanza el 8,6% en la zona euro


La inflación se dispara hasta un 8,6% en la zona euro en junio. Europa Press

3 de julio de 2022 19:50h

“Creo que ahora entendemos mejor lo poco que entendemos sobre la inflación”. La frase es del presidente de la Reserva Federal de EEUU, Jerome Powell, el hombre cuya misión es precisamente frenar la venenosa subida de precios que sufre su país. Lo dijo hace sólo unos días en Sintra (Portugal), donde el Banco Central Europeo (BCE) celebró su foro anual. Allí se conjuraron los guardianes de la inflación, además de Christine Lagarde, el gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, para actuar contra la escalada de precios con toda la contundencia de que son capaces. Tanto Powell como Bailey han comenzado ya a subir los tipos de interés tras una década de congelación, mientras que Lagarde lo hará este mismo mes y de nuevo en septiembre. Aun así, la batalla no ha hecho más que comenzar y el resultado no sólo es incierto: el presidente de la Fed advirtió también de que el enfriamiento de la economía derivado del encarecimiento del dinero no va a estar exento de “dolor”.

Pero Powell sabe, y lo dijo, que Estados Unidos puede resistir el envite mejor que Europa. En ambos lados del Atlántico la inflación se ha disparado a una velocidad que no se recordaba desde hace 40 años. Pero las causas no son exactamente las mismas, ni las economías a las que daña comparten el mismo estado de salud. EEUU no depende del gas y el petróleo rusos y, aunque sí ha subido la gasolina, sobre todo se han desatado la vivienda, los servicios… y los salarios. Además, su tasa de paro es sólo del 3,6% –¡del 2% en Minnesota y Utah! –, técnicamente se trata de pleno empleo. En la Unión Europea, por el contrario, el cierre del grifo ruso amenaza con poner al borde del colapso a un buen número de países completamente dependientes de la energía de Vladimir Putin. En otros, la recuperación económica de la pandemia, con un aumento de la demanda, por un lado, y los elevados déficit y deuda públicos, por otro, conspiran con unas tasas de paro que casi cuadriplican la estadounidense.

La inflación en la zona euro alcanzó en junio el 8,6%, al menos a tenor de los indicadores adelantados y armonizados que utiliza Eurostat, la oficina estadística de la UE. Estados Unidos aún no ha hecho público el dato de junio, pero en mayo ya se situaba también en ese mismo 8,6%. De los 20 países europeos que han revelado la cifra del último mes, nueve tienen un IPC superior al 10%. Uno de ellos es España, con un 10,2% –dos décimas menos el armonizado–. La superan los países bálticos, totalmente supeditados a la energía rusa y con IPC de pesadilla: Estonia alcanza el 22%, Lituania está en el 20,5% y Letonia en el 19%. Con dos dígitos aparecen también dos países del Este, Eslovaquia –12,5%– y Eslovenia –10,8%–, y Grecia –12%–. Al igual que Bélgica –10,5%– y Luxemburgo –10,3%–. Tampoco van muy a la zaga Países Bajos –9,99%–, Irlanda –9,6%– y Portugal –9%–.

Alemania, que antes de la invasión de Ucrania importaba de Rusia el 55% del gas que consume, ha conseguido reducirlo a un 35%. También compraba en el gigante eslavo un 35% del petróleo, que ahora es sólo el 12%. Así, es casi el único país europeo que ha conseguido rebajar en algo su inflación en junio, hasta el 8,2% desde el 8,7% –IPC armonizado– de mayo. También Países Bajos, otro país con una fuerte dependencia energética de Rusia, ha recortado su IPC, del 10,2% de mayo al 9,9% de junio. En cualquier caso, son cifras estratosféricas. En Alemania el precio de la energía se ha disparado un 38% en el último año.

Italia ha llegado en junio al 8,5% armonizado, tras una subida de 1,2 puntos porcentuales en un mes. En el país de Mario Draghi la energía se ha encarecido aún más que en Alemania, un 48,7%. Sólo Francia parece escapar, hasta cierto punto, de la escalada. Aun así, en junio ha alcanzado el 5,8%, la cifra más alta desde 1985 –un 6,5% armonizado–. Los precios de la energía también están en niveles de escándalo, un 33,1% por encima de hace un año, pese a que hasta ahora el mayor recurso a sus centrales nucleares parecía haber librado a Francia de la carestía que atenaza al resto de los europeos. Finalmente, el Reino Unido, que aún no ha publicado el dato de junio, dejó la inflación en el 9,1% en mayo. Y el Banco de Inglaterra avisa de que, en octubre, cuando en teoría está previsto que se levante el tope de precios a las facturas domésticas de la luz, el IPC puede llegar al 11%. Únicamente Suiza vive a salvo de la ola de precios, con un IPC que en mayo sólo era del 2,7%. El motivo es su moneda. El franco suizo es considerado una divisa refugio en momentos de crisis y su fortaleza permite a la confederación importar barato.

Inflación subyacente, nueva protagonista

Hace sólo dos meses, España y el resto de Europa aún podían decir que la principal causa de su elevada inflación era la energía. Pero a las puertas del verano, y pese a las medidas de los gobiernos, la subida de los precios de la luz, el gas y los combustibles ha contagiado ya a toda la economía. Lo desvelan las cifras de la inflación subyacente, la que excluye la energía y los alimentos. Y ahí España lidera en Europa. En junio se ha encaramado en el 5,5%, lo que la convierte, de momento, en la más alta de la UE a excepción de Grecia, un 6%, y Malta, que alcanza el 5,9%, la misma que ya en mayo sufre el Reino Unido. Sólo se le acerca Bélgica, con un 5,07%. La de Estados Unidos también es superior, un 6% en mayo: sólo un tercio de su inflación se debe a los precios de la energía –la mitad en el caso europeo–, pero su economía se ha recalentado más la de la zona euro, que en junio tiene una inflación subyacente del 3,7% de media. En Italia, Francia y Alemania están entre el 3,2% y el 3,8%. Sólo Países Bajos toca el 4%.

Ese contagio indica ya a las claras que la inflación desatada no va a ser un fenómeno transitorio como se preveía en un principio y, al quedarse más tiempo, se corre el peligro de que parte de ella se convierta en estructural. No sólo por la guerra en Ucrania y el precio de la energía. “La desglobalización de la economía que ya se está produciendo va a aumentar el precio de los bienes y servicios, que serán más cercanos, pero también más caros”, explica José García Montalvo, profesor de Economía de la Universitat Pompeu Fabra, “No podemos depender de un solo suministrador, necesitaremos varios, y eso encarece el producto final; si aumenta el riesgo de que se rompa la cadena de suministro, como ya ha ocurrido, ese mayor riesgo también encarece el producto, y luego hay que tener en cuenta la volatilidad de los fletes”, enumera.

Desventaja española

En este nuevo escenario inflacionista, impensable hace un año, España cuenta además con una desventaja. Por culpa de su menor productividad y competitividad, el impacto de los precios desbocados es mayor, resalta García Montalvo. “España siempre ha sido más vulnerable a la inflación que otros países”, apunta igualmente el economista Javier Santacruz. También ha generado mayor conflictividad social, recuerda, porque el encarecimiento de los alimentos y otros bienes o servicios básicos perjudica más a las rentas más bajas. Y el daño económico de la pandemia, cuando los salarios aún no se habían recuperado de la anterior crisis, ha dejado en España un reguero de damnificados. Según la última Encuesta de Condiciones de Vida el INE, el 7,3% de los ciudadanos sufre carencias materiales severas, tres décimas más que hace un año.

A juicio de Santacruz, el riesgo ahora es que esa contestación social se traduzca en un aumento de los salarios y las pensiones que retroalimente la subida de los precios. Los temidos efectos de segunda ronda. Sin embargo, ni en España ni en el resto de la UE han mejorado aún los salarios. Y sólo en el Reino Unido han empezado a bullir las protestas, con huelgas en los ferrocarriles y el metro y convocatorias en la educación y la sanidad públicas, así como en Correos.

Como ventaja española, el catedrático de la Universidad de Granada Santiago Carbó menciona el pico de actividad que este verano proporcionará el turismo, un tirón que puede ayudar a evitar la recesión si la subida de tipos de interés enfría demasiado la economía. Estar más lejos de Rusia, depender menos de sus exportaciones energéticas gracias al suministro alternativo de gas por barco y por el tubo argelino, también cuenta a favor de España, indica Carbó.

De subvenciones a rebaja de impuestos y recargos a las eléctricas

Cuestión distinta es la eficacia de las medidas que han adoptado los gobiernos para hacer frente a la espiral de precios. El abanico de ayudas y descuentos es muy parecido entre los países. Rebajas de impuestos, ayudas a las familias y empresas más vulnerables a la subida de precios, reformas de los mercados energéticos y medidas de ahorro.

Tanto España como Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Portugal, además de algunos Estados americanos, han aprobado subvenciones a los carburantes: desde 15 céntimos el litro en Francia hasta 30 céntimos la gasolina en Alemania e Italia. El descuento de Boris Johnson son cinco peniques el litro reduciendo impuestos sobre los combustibles.

Reino Unido e Italia ya han puesto en marcha un impuesto del 25% a las compañías eléctricas, mientras que Bélgica y España lo están preparando. Al mismo tiempo, los gobiernos están rebajando impuestos a los consumidores de energía. Reduciendo el IVA de la electricidad –Reino Unido, España, Bélgica– y del gas –Italia– o eliminando ciertos recargos, como el gravamen especial con que alemanes y austriacos financiaban hasta ahora la transición hacia las renovables. En Francia, Emmanuel Macron ha limitado al 4% la subida del precio de la electricidad que pagan los consumidores.

Como se sabe, en España y Portugal lo que se ha topado ha sido el precio del gas para producir electricidad, un mecanismo complejo que hasta el momento ha rebajado la factura de la luz un 14%, por debajo de las previsiones del Gobierno.

También han sido generalizadas las compensaciones a empresas y familias. En Alemania el Gobierno paga cheques a los hogares con rentas más bajas de 300 euros, de 100 euros para los desempleados –200 euros para los de larga duración–, 135 euros para los estudiantes. En Francia se pagaba ya antes de la guerra un chèque energie de 100 euros y a partir de septiembre habrá otro chèque alimentaire para familias de bajos ingresos. Además, las pensiones subirán un 4% a partir de este mes de julio, un poco menos de lo que hasta ahora ha aumentado la inflación. En Italia el cheque para quienes ingresen menos de 35.000 euros al año, tanto trabajadores como pensionistas, asciende a los 200 euros. A las empresas con mayor consumo de electricidad el Gobierno de Mario Draghi les otorga créditos fiscales del 20% si su factura crece por encima del 30%.

Alemania también ha elevado hasta los 10.347 euros anuales el mínimo por encima del cual el contribuyente está obligado a pagar el IRPF. Y ha dejado en nueve euros el precio del abono mensual de transporte, en un intento por incentivar el uso de autobuses, trenes y metro para ahorrar combustible. Algo similar pondrá en marcha a partir de septiembre el Gobierno español, reduciendo en un 50% el abono mensual de Renfe y de las líneas de autobuses con concesiones del Estado, así como un 30% los abonos emitidos por las comunidades autónomas y ayuntamientos.

¿Cuánto cuestan estas armas contra la inflación? Unos 22.000 millones a los alemanes, 27.000 millones a los franceses, 26.500 millones más a los italianos y 25.000 millones a los españoles. Otra costosa factura.

Noam Chomsky culpa a la provocativa expansión de la OTAN de la guerra en Ucrania

29 junio, 2022

El Nuevo Orden Mundial, que se está definiendo en la singularidad de Ucrania y sus varias guerras en una, toma el camino (aquí proyectado) de la bipolaridad regional geoestratégica del bloque EU/OTAN/Unión Europea (UE)/G-7 frente al dúo euroasiático de Rusia y China, al que se inclinan, desde el punto de vista geoeconómico, un tanto cuanto los BRICS+, al que buscan incorporarse por lo menos 16 países, entre ellos Argentina e Irán (https://bit.ly/3OK2Kyk).

Las cumbres de finales de junio e inicios de julio –los BRICS+, el alicaído G-7 y la OTAN– reflejan la nueva bipolaridad regional geoestratégica cuando el presidente Putin, exorcizado por Occidente, se siente ya más libre para realizar dos visitas en el mero corazón centroasiático: Turkmenistán y Tayikistán.

La alta probabilidad de una Guerra Termonuclear entre EU y Rusia, que aniquilaría a los seres vivientes de la biosfera –con excepción de las cucarachas–, ha valido que dos jázaros, ideológicamente antagónicos entre sí, Kissinger, de 99 años (https://bit.ly/3Nu1dLV), y Chomsky, de 93 años, se desmarquen de su correligionario: el comediante Zelensky (https://bit.ly/3OK1POk), quien sin tapujos ha sentenciado que su objetivo (sic) es convertir a Ucrania en el “ Gran Israel (https://bit.ly/3NsDpry)”. Ucrania –población de 43.5 millones (hoy con 8 millones de refugiados), ¡0.2 por ciento (sic) de judíos jázaros (de origen mongol centroasiático (https://amzn.to/2MR0PfM)!– es el asiento del sionismo histórico con el jázaro Zeev Jabotinsky (https://bit.ly/3OKupzd).

Los dos graves escollos de la irredentista cosmogonía racista del Gran Israel del comediante Zelensky son que Israel no es frontera con Rusia y la población jázaro-israelí de Ucrania es una micro-minoría (¡0.2 por ciento!).

Ya en una previa entrevista al periodista británico Owen Jones (https://bit.ly/3bwJUwg), Chomsky había fustigado al sistema de propaganda occidental que ha llevado a la escalada militar en Ucrania, que puede acabar siendo destruida. En ese momento, Chomsky abogó por la neutralización de Ucrania y el olvido de su alucinante ingreso a la OTAN.

En una reciente entrevista al académico y periodista palestino-estadunidense Ramzy Baroud y a la periodista italiana Romana Rubeo, Chomsky aduce que las raíces etiológicas de la guerra en Ucrania se deben a la provocación de la expansión de la OTAN que la prensa occidental omite en forma deliberada mediante una censura que jamás ha visto en su vida (https://bit.ly/3y4kfT5).

Chomsky es una celebridad por su aportación a la neurolingüística y la gramática generativa, además de impulsar la revolución cognitiva en las ciencias humanas. De ahí que sea muy crítico de la histeria de los multimedia de Occidente, donde no se permite la racionalidad (sic), ni siquiera conocer el punto de vista de Rusia.

Según Chomsky, no es sólo su opinión, sino la de cada funcionario de alto (sic) nivel en EU familiarizados con Rusia y Europa oriental: desde George Kennan y, en la década de 1990, el embajador Jack Matlock con Reagan, incluyendo al presente director de la CIA, quienes han estado advirtiendo a Washington que es temerario y provocativo ignorar (sic) las muy claras y explícitas líneas rojas de Rusia.

Chomsky juzga que las líneas rojas son anteriores a Putin –no tienen nada que ver con él–, ya que Gorbachov siempre dijo lo mismo. Ucrania y Georgia no pueden integrarse a la OTAN, que son el corazón (sic) geoestratégico de Rusia.

Chomsky culpa a Bill Clinton de haberse pasado por su Arco del Triunfo las líneas rojas respetadas por Daddy Bush.

Peor aún: Baby Bush llegó a la temeridad de invitar a Ucrania a integrarse a la OTAN, al unísono de su pequeña camarilla (sic) de Cheney y Rumsfeld, mientras Francia y Alemania lo vetaban. Pues sí: eran otras Francia y Alemania…

Después de desglosar la provocación de Biden y su secretario de Estado, el jázaro Antony Blinken, Chomsky sentenció que es imposible (sic) dañar a Rusia severamente, por lo que si Ucrania prosigue la guerra, será devastada. Tal es la política de EU.


Facebook: AlfredoJalife





Manos voluntarias aportan a la siembra de caña en Baraguá

 

 
ECONOMÍA
 

Toda ayuda cuenta para recuperar el crecimiento cañero. Fotos: Alden

La primera siembra de caña de azúcar de la campaña de frío (de julio a diciembre) en áreas de la Empresa Agroindustrial Azucarera (EAA) Ecuador se realizó este domingo a partir de un trabajo voluntario, necesario impulso para una actividad que reporta atrasos, fundamentalmente a causa del marcado déficit de combustible de los últimos meses.

Con la participación de afiliados de sindicatos de empresas y de organizaciones políticas y de masas de carácter provincial y otros del municipio de Baraguá se emprendió la siembra de 19 hectáreas (ha) en terrenos de la Unidad Básica de Producción Cooperativa Nguyen Van Troi.

La calidad, un factor importante en labores de este tipo, marchaba por buen camino luego de algunas inspecciones. Así comentaba a Invasor el ingeniero Jorge Luis Navarro Conde, director adjunto de la EAA Ecuador, al registrarse promedios de 22 yemas por metro lineal de surco, cuando la norma indica que para una buena población se debe conseguir entre 19 y 21.

“Ante la imposibilidad de cumplir el plan de primavera (de enero a junio), reajustamos el de la campaña de frío con vistas a recuperar atrasos y llegar hasta unas 1900 ha, en el que priorizaremos el cultivo de unas 400 ha para semilla”.

Para nada satisfecho con la producción de la dulce gramínea en la entidad, Navarro Conde añadió que para la venidera zafra el estimado es moler en el central refinería Ecuador la misma cantidad de materia prima que en la 2021-2022, o una cifra modestamente superior, pese a las grandes limitaciones materiales afrontadas.

La promoción de este movimiento político productivo desde el aporte sindical voluntario inyecta masividad y motivación para reanimar al sector de la agroindustria azucarera, que resulta estratégico en el desarrollo del país.

siembra de caña En el trabajo voluntario participaron Liván Izquierdo Alonso, primer secretario del Partido en la provincia, y el gobernador Tomás Alexis Martín Venegas