Justo donde la calle busca el mar y parece ascender las nubes, una edificación eleva la mística del lugar paradisiaco. El hotel Jagua hace ya seis décadas engalana el área que la toponimia aborigen apodó como Tureira, sugerente de cosa bella, luciente y hermosa.
Como legara José Martí: “Los edificios son las palabras de los pueblos, cuentan su historia”, el inmueble desde su génesis habla de la época republicana en Cienfuegos, durante la década de 1950, época en que gestaron su proyecto, en el espacio de jardines del palacete de Acisclo del Valle Blanco.
Según apuntan Irán Millán Cuétara y Teresa Chepe, en su libro sobre la vida del hotel, este lugar de alojamiento es exponente de la materialización a escala urbana de la presencia norteamericana en la localidad, cuando las clases pudientes hicieron surgir asentamientos alejados del centro histórico y ejecutaron una arquitectura novedosa, en cuanto al uso del hormigón armado y otros elementos.
Más de 140 habitaciones garantizan el confort en esta instalación del grupo Meliá./Foto: Centro de documentación
Más de 140 habitaciones garantizan el confort en esta instalación del grupo Meliá./Foto: Centro de documentación
Para la conexión de la sede citadina con los nuevos repartos construyeron hacia el sur, a continuación del Paseo del Prado, el malecón hasta la actual avenida 20; así surge el acceso a Punta Gorda, espacio urbano que manifiesta la opulencia económica de la clase alta y es área idónea para el esparcimiento y disfrute.
Los mencionados especialistas en arquitectura local registraron múltiples enclaves de alojamiento en la ciudad durante el período colonial, como precedente del destino turístico de nuestra Perla del Sur.
En los albores del hotel Jagua destaca la visita aquí, en 1952, de José M. Vidaña y E. Hurtado de Mendoza, presidente y letrado consultor respectivamente de la Corporación Nacional de Turismo, con el objetivo de evaluar potencialidades territoriales para el ocio. Analizan el Palacio de Valle y su entorno para la construcción de una instalación hotelera y un casino.
Con tales fines contactaron con la viuda de Valle y sus hijos radicados en España, quienes fueron invitados el 10 de octubre de 1956 al acto de fundación de la sociedad Fomento y Turismo Cienfuegos S.A., con capital de un millón de pesos. La entidad legal agrupó varios accionistas y su representante fue José López Vilaboy.

ALBORES DE MODERNIDAD

El hotel Jagua fue inaugurado el 28 de diciembre de 1959 y comenzó a prestar servicios el día 31 de ese propio año. La instalación cuenta desde entonces con un bloque central de siete niveles, más de 140 habitaciones, la piscina, el bar Escambray, el cabaret Guanaroca, entre otros locales.
Sus balcones con barandas y ventanales permiten apreciar significativos paisajes sureños: la bahía y las montañas del macizo Guamuhaya.
Durante 2019, como parte del plan de celebración del aniversario 60 del Jagua, el grupo Meliá dirige acciones para el fortalecimiento de su infraestructura y funciones, según explica Orlando Jiménez Díaz, comunicador y jefe de redes sociales en la entidad:
“Inicialmente propusimos un trabajo muy serio de remodelación para levantar los estándares de calidad y estar a la altura del producto que ofrece nuestra firma, y la final incorporación de los tres hoteles: Jagua, San Carlos y La Unión, en nuestra cartera de negocios”.
Las ofertas gastronómicas complacen a los visitantes./Foto: Centro de Documentación
Las ofertas gastronómicas complacen a los visitantes./Foto: Centro de Documentación
Tales propósitos confirman que imbricar tradición y modernidad no es una utopía: “Somos celosos en el respeto a la historia, por ejemplo, dentro del complejo incluimos al Palacio de Valle, los trabajos actuales de remodelación son coordinados con la Oficina del Conservador de la Ciudad; gracias a esas talentosas manos estará remozado para el bicentenario de Cienfuegos. También será siempre así con el Jagua y La Unión, como salvaguarda del acervo de hoteles de ciudad.
Por otra parte, Yolexis Rodríguez Armada, subdelegada del Ministerio de Turismo en nuestra provincia, refirió que el complejo hotelero Jagua, también abarcador del Palacio azul, cumple las preferencias turísticas, aún cuando algunos indicadores económicos no han sido los esperados, como el llamado “turistas-día”
Agregó que los colectivos hacen esfuerzos por suplir tal déficit, a través de los ingresos medios de los visitantes, y de las ofertas especiales realizadas por fin de año.
Así completa el entorno de la barriada de Punta Gorda este hotel pletórico de historia, emblema de nuestra ciudad y símbolo de cienfuegueridad para todos los visitantes.

Figuras ilustres han sido huéspedes del “Jagua”
El Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, Osvaldo Dorticós Torrado, Celia Sánchez Manduley, el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Ernesto Che Guevara y Tamara Bunke. También Hugo Chávez Frías, Ignacio Villa (Bola de Nieve), Elena Bourke, Luis Carbonell, Joan Manuel Serrat, Isabel Parra, Víctor Jara, Wifredo Lam, Teófilo Stevenson y Déborah Andollo.
Ha servido como apoyo a regatas, torneos y encuentros culturales, y como subsede anual del jurado del premio literario Casa de las Américas.