Fidel


"Peor que los peligros del error son los peligros del silencio." ""Creo que mientras más critica exista dentro del socialismo,eso es lo mejor" Fidel Castro Ruz

miércoles, 14 de diciembre de 2022

Díaz-Canel: La participación popular es esencia de la democracia y sin ella no es posible el socialismo

El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez clausuró, este miércoles, el Décimo Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder en su IX Legislatura






14 de diciembre de 2022 12:12:53


El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez clausuró, este miércoles, el Décimo Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder en su IX Legislatura.

En su discurso, el mandatario hizo un resumen del balance de su gestión en el año 2022 un proceso que asume «con entera responsabilidad y con la convicción que tengo de la importancia del mecanismo de la rendición de cuenta para el fortalecimiento de la institucionalidad; que fue un decreto permanente del liderazgo de la Revolución que nos precede y guía y, en particular, del General de Ejército Raúl Castro Ruz», dijo.

Añadió, además, que la rendición de cuentas, a todos los niveles, es un mecanismo que debe perfeccionarse, sistematizar, desarrollar con rigor ante el pueblo y como una vía para perfeccionar la labor de dirección en búsqueda de resultados con mayor impacto para la sociedad.

Respecto al contexto internacional en que se ha desempañado su trabajo, apuntó que ha sido un año marcadamente complicado en el escenario internacional y que se sucede a dos años también complicados, a causa de la pandemia de la COVID-19.


Foto: José Manuel Correa

Destacó que el conflicto militar en Europa ha generado muchos problemas y exacerbado otros ya existentes.

Destacó, además los altos precios a nivel mundial de los alimentos, medicinas y transporte. «Es un escenario amenazado a demás por el nocivo empeño imperialista de pretender dividir al mundo y generar divisiones y estigmas, a lo que su suma el uso de poder para aplicar la coerción económica», denunció.

Recordó que avanzamos en las relaciones con nuestra región con la facilidad de la llegada al poder de Gobiernos comprometidos con la justicia social y la defensa soberanía; convencidos en la integración y defensa de una zona de paz.

Detalló también que en la región se evidencian niveles alarmantes de pobreza, desempleo e desigualdad que a la largo favorecen el ascenso al poder de fuerzas de extrema derecha.

Recordó que la Cumbre de las Américas resultó un fracaso para Estados Unidos que quedó aislado en su propio evento. Mientras, la mayoría de los países participantes denunciaron la exclusión y el bloqueo contra Cuba.

Apuntó que resultó un año de importantes acontecimientos en la política exterior. Se mantuvo la estrecha concertación política con Venezuela. Reiteró su apoyo al Gobierno de su homólogo venezolano, Nicolás Maduro.

También agradeció la ayuda brindada por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tras los complejos incidentes que sufrió nuestro país a lo largo de este año.

Recalcó además la solidaridad con el comandante Daniel Ortega, presidente de Nicaragua y de Luis Arce, de Bolivia. Resaltó también el nivel político de las relaciones con Argentina y celebró la reanudación de los diálogos de paz entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional, en los mantuvimos la disposición de mantenernos como garantes.

Respecto a las relaciones con Estados Unidos apuntó que la característica fundamental continúa siendo el bloqueo como arma de coacción para limitar el desempeño económico de Cuba.

De igual forma, denunció la subversión y los intentos de desestabilizar a la Mayor de las Antillas, con el empleo de millones dólares de su presupuesto, hecho que ha sido denunciado en varias ocasiones por vías diplomáticas y públicas.

Hace pocos días, recordó, Estados Unidos nuevamente dio muestras de su conducta deshonesta, con la inclusión de Cuba en la lista de país que no respetan la voluntad religiosa. «Se trata de una falsedad más». Apuntó que a pesar de lo anterior se han dado pasos discretos, en especial para el cumplimiento de los Acuerdos Migratorios y en otras áreas prioritarias.

Detalló que la ayuda ofrecida tras el incendio en la base de Supertanqueros de Matanzas y el paso del Huracán Ian fue aceptada porque se ofreció sin condicionamientos.

Recalcó que la intención sigue siendo establecer una relación respetuosa entre ambos países y mutuamente beneficiosa, con total apego al derecho internacional y las prerrogativas soberanas de cada país.

El Jefe de Estado también subrayó el estrecho vínculo con los países de la Caricom.

La comunidad del Caribe –añadió– certificó su apoyo al reclamo por el levantamiento del bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba, así como la eliminación de la lista de países patrocinadores del terrorismo.

El mandatario cubano reiteró la solidaridad con el hermano pueblo de Puerto Rico, al tiempo que expresó «nos animan los procesos políticos que se inician en Brasil y Honduras, nuestra región reclama independencia y justicia social».

Las recientes visitas a Argelia, Rusia, Turquía y China respondieron a invitaciones de sus Gobiernos y al interés de promover y consolidar lazos con esos países, tanto políticos como económicos comerciales, considerando sus resultados trascendentes.

En la Asamblea General de Naciones Unidas, dijo, la comunidad internacional volvió a pronunciarse casi unánimemente en rechazo al bloqueo económico de Estados Unidos, ratificando el rotundo aislamiento de una política tan cruel como injusta.

«Estamos conscientes de que la naturaleza polarizada de la política estadounidense da lugar a que el bloqueo económico se prolongue por muchos años más; es por ello de máxima prioridad aunar los esfuerzos y la creatividad popular en función de resolver los más agudos problemas, enfrentar las limitaciones y encauzar el desarrollo», destacó.

FAVORECER EL EJERCICIO LEGISLATIVO EN EL PAÍS

Hemos favorecido el más amplio ejercicio legislativo para que, en el menor tiempo posible, se promulguen las leyes que desarrollan los contenidos de la Constitución y esta legislatura es la mejor expresión de ese ejercicio por el elevado número de leyes aprobadas en cada una de sus sesiones, comentó.

En este sentido, destacó el proceso de aprobación del Código de las Familias en referéndum, después de una amplia consulta popular; un ejercicio que constituyó una evidencia más del carácter democrático del sistema socialista cubano y que evidenció un amplio consenso social alrededor de temas muy complejos y diversos.

Precisó que este proceso se realizó, además, en medio de la más difícil situación económica y en el peor momento de la crisis electroenergética que ya vamos superando, «bajo un huracán de carencias y dificultades el pueblo votó y aprobó el Código, dando muestra de una elevada e inequívoca conciencia social, que volvió a expresarse con absoluta transparencia y limpieza en las más recientes elecciones para delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular».

En la sesión que hoy concluye, señaló, se aprobaron cuatro leyes que reforzarán el orden institucional del país con un papel determinante en el ámbito económico y social de la nación. Asimismo, a la próxima legislatura le corresponderá igualmente enfrentar un arduo trabajo legislativo y conformar, desde sus inicios, un nuevo cronograma que dé respuesta a nuestra demanda normativa.

PROGRESAR CON MAYOR EFECTIVIDAD Y RAPIDEZ

Estas sesiones de la Asamblea han sido particularmente tensas e intensas al abordar los problemas de la difícil cotidianidad cubana, cada uno de ustedes, como cada cubano, tiene su propia percepción de esos problemas; «pero no conozco a un patriota que se mantenga al margen de las angustias y los esfuerzos para que el país logre superar los colosales desafíos de una economía bloqueada por quienes se han elegido como amos de las finanzas y los mercados del mundo, pero también por ineficiencias y obstáculos generados por nuestra propia impericia y errores».

Decir que la economía transita por una compleja situación –dijo– donde se combinan el reconocimiento del bloqueo, los efectos de la pandemia y la inflación internacional, entre otros factores adversos, es lo cierto, lo innegable; pero no resuelve. Lo que toca, precisó, es buscar salidas, innovar y romper el cerco.

En el Plan de la Economía para el año 2023, explicado por el Ministro, se definen objetivos que resultan de vital importancia para enfrentar todas las problemáticas ya diagnosticadas en la economía nacional, así como para continuar avanzando en la creación de capacidades y entornos institucionales que permitan progresar con mayor efectividad y rapidez.

Acotó que las medidas aprobadas con ese fin deben dar las condiciones para avanzar con mayor dinamismo, si se implementan con celeridad, sin frenos, siempre identificando los riesgos para minimizar sus impactos.

No es secreto que en los últimos años se han producido importantes desequilibrios macroeconómicos como resultado de la pérdida de ingresos en divisas, los elevados déficits fiscales, el incremento de los ingresos de personas naturales sin respaldo productivo, la parcial dolarización de la economía y la débil respuesta productiva para generar ofertas de bienes y servicios, entre otros, reconoció.

Detalló que la mejora en el bienestar del pueblo requiere de la reactivación de las capacidades productivas nacionales y de la captación de un nivel de divisas que garanticen el incremento gradual –pero sostenido– de la oferta de bienes y servicios, lo cual no será posible sin la corrección, dentro de determinados límites, de los desequilibrios macroeconómicos señalados.

En este sentido, subrayó, el Plan de la Economía presentado y aprobado, consigue la implementación de un programa de estabilización macroeconómica que supone una transformación esencial en la gestión macroeconómica y la coordinación entre el Plan, el Presupuesto del Estado y la programación monetaria.

Según los expertos, un programa de este tipo no impulsa por sí solo el crecimiento económico, pero sí sienta las bases para que el resto de las políticas con carácter sectorial, como la transformación colectiva o el desarrollo local, sean efectivas y cumplan sus objetivos, manifestó.

El Presidente acentuó que el Plan y el Presupuesto del Estado para 2023 arrojan luces, pero alcanzar sus metas implica trabajar duro, innovar, aplicar la economía circular, exportar y aumentar la competitividad de nuestras producciones.

Por otra parte, resaltó, se requiere continuar implementando medidas que garanticen que la empresa estatal verdaderamente ejerza su papel como sujeto económico principal del modelo de desarrollo económico y social.

LAS ADVERSIDADES NO HAN SIDO MOTIVO DE DESALIENTO

Enfrentar adversidad tras adversidad, como los tres eventos más terribles de este año 2022 (los accidentes del Hotel Saratoga y de la Base de Supertanqueros de Matanzas, y el devastador Huracán Ian), en paralelo con un bloqueo reforzado y los costosos efectos de una pandemia que nos paralizó durante dos años, no ha sido motivo para el desaliento, señaló el mandatario.

«Lo que hemos sufrido nos obliga a superarnos», afirmó, al tiempo que recordó que, en cada confrontación con la dificultad, se producen aprendizajes, se alcanza en crecimiento y se gana en experiencia para asumir los momentos difíciles con decisión y con la ecuanimidad necesaria para sopesar cada acción.

Ante los diputados del Parlamento que representan al pueblo de Cuba y los que escuchaban la Sesión, Díaz-Canel reconoció que sentía «una enorme insatisfacción por no haber sido capaz de lograr, desde la conducción del país, los resultados que necesita el pueblo cubano para alcanzar la anhelada y esperada prosperidad».

«Pero creo en la dirección colectiva y he actuado y actuaré como fiel seguidor y defensor de lo acordado en el 8vo. Congreso de nuestro Partido», sentenció.

Afirmó el Jefe de Estado que en su condición de Presidente de la República, como servidor público, ha velado por el respeto a la Constitución, por el cumplimiento de la legalidad socialista y por mantener un vínculo permanente con el pueblo del que también es parte.

Ponderó que, convencido de la naturaleza popular del sistema político cubano ha insistido en promover el perfeccionamieto del sistema del poder popular, propiciando más democracia y participación.

En cada visita realizada a los territorios, en cada encuentro con los diferentes sectores de la sociedad, en el trabajo diario desde la Presidencia, insisto en la importancia de escuchar al pueblo y gobernar en consecuencia, ratificó.

Es en función de ese objetivo, dijo, que apela a los aportes de la ciencia e innovación, en especial las ciencias sociales, que mucho contribuyen a la consolidación de la democracia socialista.

«Así de conjunto con diferentes grupos de expertos, académicos y especialistas analizamos cómo generar más ámbitos de participación, en aras de perfeccionar los mecanismos e instrumentos democráticos», expresó.

La participación popular es esencia de la democracia y sin ella no es posible el socialismo, sentenció el mandatario, y subrayó que debemos privilegiar las diferentes formas del control popular sin que impliquen ir en detrimento del control administrativo.

Asimismo, refirió que, en virtud de la convicción socialista que caracteriza a nuestro país, se ha propiciado el desarrollo de diversos Programas, orientados a buscar soluciones a nuestros más acuciantes problemas económicos y sociales.

Entre ellos, mencionó, el programa de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional; la estrategia para lograr la estabilidad del Sistema Electroenergético Nacional; el enfrentamiento a los planes de la subversión político e ideológica del enemigo; la estrategia para controlar la epidemia de la COVID-19; la implementación del sistema de gestión de Gobierno basado en ciencia e innovación; así como programas sociales orientados a disminuir las desigualdades, la situación de vulnerabilidad; en función del adelanto de la mujer; contra la discriminación racial, entre otros.

El jefe de Estado insistió en que es imprescindible barrer con la burocratización que se ha instalado en muchos espacios, ámbitos y dimensiones de la administración que no podemos seguir consintiendo.

«Creo firmemente que cada ley que aquí se aprueba será más legítima en la medida en que más personas participen en su elaboración; hemos estimulado mayores niveles de participación en los procesos de creación normativa», añadió.

Resaltó, además, que en estos años desde la dirección del Estado se ha orientado la profundización del estudio y análisis de los derechos humanos (DDHH), convencidos de que somos un sistema garante de esos derechos y de la dignidad humana que lo sustenta, pese al permanente esfuerzo de los enemigos de la Revolución por establecer una mitología de mentiras y difamación en torno al tema.

«Me niego a aceptar la satanización del socialismo, particularmente en el tema de los derechos humanos, porque el socialismo es por esencia un sistema orientado a conquistar la mayor justicia social posible», sentenció.

«Mostrarnos como un sistema enemigo de las libertades y los derechos políticos es negar sus motivaciones y esencias».

El Primer Secretario del Partido resaltó que el ideal socialista considera siempre insuficiente lo que se haga por la protección integral de los DDHH y en Cuba nos interesa profundizar en ese ideal, tomando como referente nuestros valores y consolidando nuestra democracia; pero una democracia coherente con nuestras necesidades y demandas; una democracia socialista, genuina, no importada: una democracia cubana.

Destacó que la Revolución Cubana desde su primer día es eso, una búsqueda infatigable de la justicia, una batalla sin tregua por derechos que comenzó generando acceso universal y gratuito a servicios públicos, que habían estado históricamente limitados o negados para las mayorías y que hoy disfrutan todos los cubanos.

Por supuesto que no conquistamos ya toda la justicia y hacia ese elevado propósito orientamos esfuerzos y acciones, conscientes de que siempre será preciso hacer más. Por esto, durante nuestra gestión, añadió Díaz-Canel, «remarcamos la necesidad de alcanzar mayores niveles de educación, cultura cívica, formación ciudadana y decencia, comunicación social que resultan indispensables para formar conciencia en DDHH dentro del sistema social».

Manifestó que entendemos que no habrá mayor garantía para su sostenimiento y defensa que la consciencia ciudadana y que todo lo que tenemos hoy es el resultado de siglos de lucha de la humanidad por sus derechos y, en nuestro caso como nación es, además, el fruto de más de 150 años de pelea con el machete y el fusil, con las ideas y por la dignidad, por una Cuba independiente, soberana, humanista, solidaria y por siempre socialista.

«Eso es lo que tenemos y lo sostengo, si aprendimos de las más duras lecciones del año que termina, podemos disponernos a enfrentar en mejores condiciones el próximo año que está muy cerca de comenzar» subrayó.

El mandatario dijo que sus insatisfacciones son personales, reconocerlo le ayuda a visibilizar los caminos para superarlas, en ellos están las únicas fuerzas capaces de enfrentar y vencer cada reto.

El gobierno, agregó, está más desafiado que todos a innovar y crear; los órganos del Poder Popular en los municipios y las provincias convocados a dar el salto definitivo sobre sus limitaciones actuales; los legisladores claves en el enfoque a cuanto aprobamos y acordamos; las organizaciones políticas y de masas a completar el círculo de fuerza de la más alta participación ciudadana.

«Las satisfacciones son colectivas, en ellas me afirmo para agradecer a Fidel, a Raúl y a la generación histórica que nos ha educado en el optimismo frente a las adversidades», concluyó. HHC: Negritas, subrayados y sobre todo rojitas son nuestras.

Díaz-Canel rinde cuenta de su gestión: Hay que escuchar al pueblo y gobernar en consecuencia

Por: Oscar Figueredo Reinaldo, Lissett Izquierdo Ferrer, Abel Padrón Padilla, Karina Rodríguez Martínez, Claudia Fonseca Sosa

 


El presidente cubano Miguel Díaz-Canel rindió cuenta de su gestión en 2022. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate

En el décimo periodo ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en su novena legislatura, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, rindió cuenta de su gestión en 2022, “un año extremadamente complicado en el escenario internacional”. 

Destacó que asume este mecanismo con responsabilidad y con la convicción de su importancia para el fortalecimiento de la institucionalidad.

La rendición de cuenta, a todos los niveles, es un mecanismo que debemos perfeccionar, sistematizar y desarrollar con rigor ante el pueblo, con transparencia y como una vía para superarnos y perfeccionar la labor de dirección en busca de resultados de mayor impacto en la sociedad, dijo en el Palacio de Convenciones de La Habana. 

“Acepto esta responsabilidad con compromiso y entrega”, dijo, y agregó que lo hace protegiendo la unidad y asumiendo la continuidad desde una perspectiva dialéctica, en defensa de la Revolución y de su rumbo en el camino de la construcción socialista.

El presidente rindió cuenta refiriéndose al contexto en que ha vivido Cuba y su política exterior, y valoró las situaciones por las que ha transitado el país y de las cuales, dijo, se siente el principal responsable.

Díaz-Canel mencionó los desafíos y adversidades que nos han impedido avanzar como nos propusimos. “Espero que nadie los reciba como justificación”.

El que finaliza “ha sido un año marcadamente complicado en el escenario internacional, que sucede a dos años también extremadamente complicados”, apuntó.

Estamos convencidos de la importancia de la integración

“El conflicto militar en Europa ha generado nuevos problemas y agravado muchos de los ya existentes en un mundo castigado por crecientes desigualdades, con la ausencia de un compromiso real para hacer frente a las amenazas contra el medioambiente, por los efectos socioeconómicos y sanitarios de la pandemia de covid-19 y sus consecuencias para los precios de los alimentos y las medicinas, el transporte, la logística y los requerimientos esenciales de los países en desarrollo”, afirmó el mandatario.

Insistió en que “es un escenario amenazado, además, por el nocivo empeño imperialista de pretender dividir al mundo y generar exclusiones y estigmatizaciones”, a lo que se suma “la tendencia a abusar del desproporcionado poder económico y financiero de Estados Unidos para aplicar la coerción económica como instrumento preferido de política exterior”. 

En el año que culmina avanzamos en las relaciones con nuestra región, donde “los cambios experimentados posibilitaron la llegada al Gobierno de fuerzas políticas comprometidas con proyectos orientados a la justicia social y la defensa de la soberanía”.

Ratificó que “estamos convencidos de la importancia de la integración y de la defensa de una región de paz unida y solidaria”.

Señaló, asimismo, que la región continúa marcada por niveles alarmantes de pobreza, desempleo, desigualdad y exclusión, que “a la larga favorecen el ascenso de fuerzas políticas de extrema derecha y corte fascista, que intentan detener el avance de los movimientos progresistas comprometidos con los intereses y necesidades de las mayorías”.

En referencia a la pasada Cumbre de las Américas, manifestó que “el evento continental y excluyente que depende de Estados Unidos en la ciudad de Los Ángeles terminó siendo un fracaso político y una demostración del aislamiento que sufre la política imperialista de ese país en la región que José Martí llamó Nuestra América”. 

“Constituyó un duro golpe a la OEA y su dirigencia institucional actual, cuyo desprestigio no tiene comparación”, subrayó, y reiteró el reconocimiento a los países que rechazaron la exclusión de Cuba de ese evento. “Lo denunciaron y además condenaron la política de bloqueo recrudecida”.

Ha sido un año de importantes acontecimientos en el ejercicio de la política exterior cubana

Díaz-Canel recordó que ha sido un año de importantes acontecimientos en el ejercicio de la política exterior cubana, “lo que ha exigido constancia, pensamiento y riguroso accionar apegado a los principios y tradiciones de la política exterior de la Revolución”.

Resaltó que se mantuvo la estrecha concertación política y cooperación con la hermana República Bolivariana de Venezuela, y reiteró el agradecimiento a ese país por su apoyo en el enfrentamiento a los desastres naturales y accidentes que sufrió Cuba este año.

Igualmente, Cuba consolidó las relaciones con México, lo que fue ratificado con la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien también agradeció la solidaridad ante los eventos que vivió la Isla.  

El mandatario cubano reiteró la solidaridad con el Estado Plurinacional de Bolivia y su presidente, Luis Arce, frente a los intentos de desestabilización promovidos y orquestados por fuerzas de derecha, al tiempo que saludó al comandante Daniel Ortega Saavedra y al pueblo de Nicaragua.

Comentó que fueron identificadas áreas de cooperación, de beneficio mutuo, con la Argentina, se contribuyó a la reanudación de los esfuerzos de paz en Colombia y se mantuvo la disposición de continuar como garantes de la mesa de diálogo.

El bloqueo sigue siendo el obstáculo fundamental para el desempeño de nuestra economía

En el caso de Estados Unidos, la característica fundamental y definitoria del vínculo bilateral continúa siendo el bloqueo económico, “como arma de coerción, cruel, ilegítima e inmoral” que “constituye el obstáculo fundamental para el desempeño de nuestra economía”.

Díaz-Canel denunció que es evidente la abierta política de subvenciones y los intentos de desestabilizar el país promovidos desde EE.UU.. “Con el respaldo de decenas de millones de dólares del presupuesto federal, junto a la tolerancia frente a quienes desde territorio de Estados Unidos orientan, financian y hasta entrenan a individuos para que cometan actos violentos contra Cuba”.

Recordó que todas estas situaciones han sido denunciadas directamente por los canales diplomáticos y de forma pública, y señaló que, hace pocos días, el Gobierno de EE.UU. dio muestra de la conducta deshonesta de su política exterior, al designar a Cuba como un país en el que supuestamente se persigue la religiosidad.

“Se trata de una falsedad más de un Gobierno que no encuentra justificación para cumplir con el sistema de medidas económicas coercitivas más abarcador aplicado contra un Estado”, dijo, y manifestó que, no obstante, “se han dado pasos muy discretos, dirigidos a encaminar la cooperación bilateral para el cumplimiento de los acuerdos migratorios y también en otras áreas de prioridad entre ambos países”.

Cuando ocurrió el incendio en la base de supertanqueros de Matanzas, el Gobierno estadounidense ofreció asesoría técnica, recordó el presidente, y agregó que esta iniciativa fue agradecida y aceptada.

También aceptamos –dijo– el ofrecimiento de unos 100 trajes de bomberos con el correspondiente equipamiento de protección, que llegaron al país la semana pasada y se están distribuyendo entre las brigadas del cuerpo de bomberos.

De igual modo, el Gobierno norteamericano ofreció ayuda material, valorada en dos millones de dólares, con motivo del huracán que afectó a Pinar del Río en septiembre pasado. “Al igual que con el caso de Matanzas, fue ofrecida sin condicionamientos, por lo que también la agradecimos y aceptamos”.

“Nuestro objetivo sigue siendo promover lazos más amplios con ese país y su pueblo, que incluye ya cerca de dos millones de personas de origen cubano o descendientes de ellas”, sostuvo el mandatario.

Recalcó que el Gobierno de Cuba mantiene la disposición de construir una relación respetuosa y mutuamente beneficiosa, con pleno apego al derecho internacional y las prerrogativas soberanas de cada país. “Esto lo conoce el Gobierno de Estados Unidos y se lo hemos expresado directa y públicamente”.

Los países de Caricom se consolidan

En su intervención ante el plenario del Parlamento, Díaz-Canel afirmó que los vínculos con los países de la Caricom se consolidan, cuando se cumplen los 50 años del establecimiento de las relaciones diplomáticas con Barbados, Guyana, Jamaica y Trinidad y Tobago, en momentos de mayor aislamiento promovido por el imperialismo contra Cuba.

Comentó que durante la reciente gira por naciones del Caribe reafirmó la vigencia del legado del Comandante en Jefe, continuado por el General de Ejército, en las relaciones con la región, “que se basan en la hermandad, la cooperación y el respeto”, y destacó la voluntad común de avanzar en planes de integración y desarrollo.

“La Comunidad del Caribe ratificó su apoyo al reclamo por el levantamiento del bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba, así como la eliminación del país de la espuria lista de Estados patrocinadores del terrorismo”, dijo.

Reiteró la solidaridad con el hermano pueblo puertorriqueño y su derecho a la autodeterminación. “Nos animan los procesos políticos que se inician en Brasil, Colombia y Honduras. Nuestra región reclamó independencia y justicia social”.

Se refuerzan los lazos con Argelia, Rusia, Türkiye y China

El presidente cubano se refirió también a las recientes visitas a Argelia, Rusia, Türkiye y China, que respondieron a invitaciones de sus Gobiernos y al interés de promover y consolidar lazos con esos países, tanto políticos como económicos y comerciales.

Calificó de trascendentales los resultados en la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde la comunidad internacional volvió a pronunciarse este año casi unánimemente contra el bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos, calificando esta política como cruel o injusta.

“Estamos muy conscientes de la naturaleza polarizada y la agenda de la política estadounidense, que puede ayudar a que el bloqueo económico se prolongue por muchos años más.

“Es por ello de máxima prioridad aunar los esfuerzos y la creatividad popular en función de resolver los más agudos problemas que enfrentamos, las limitaciones, y encauzar el rumbo del desarrollo.

“También asumimos la responsabilidad de denunciar esa política cruel e inhumana en cada oportunidad y cada escenario”.

A la próxima legislatura le corresponderá igualmente enfrentar un alto trabajo legislativo

Díaz-Canel hizo referencia al amplio ejercicio legislativo que ha sido favorecido para que, en el menor tiempo posible, se promulguen las leyes que desarrollan la Constitución.

Resaltó la aprobación del nuevo Código de las Familias después de una amplia consulta popular y un referendo, ejercicio que fue una evidencia más del carácter democrático del sistema socialista cubano y del amplio consenso social alrededor de temas muy complejos y diversos.

Otro de los momentos destacados por el presidente fueron las recientes elecciones de delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular, y la aprobación en esta sesión del Parlamento de cuatro leyes con un papel determinante en el ámbito económico y social de la nación.

A la próxima legislatura de la ANPP le corresponderá igualmente “enfrentar un alto trabajo legislativo y conformar, desde sus inicios, un nuevo cronograma que dé respuesta a nuestra demanda normativa”.

A su juicio, estas sesiones de la Asamblea han sido intensas para abordar los problemas de la difícil cotidianidad cubana.

La economía cubana transita por una compleja situación

El mandatario cubano señaló que la economía nacional transita por una compleja situación, debido al efecto combinado del recrudecimiento del bloqueo, la pandemia y la inflación internacional, entre otros factores adversos.

De cara al 2023, manifestó que es importante innovar y romper el cerco, y apuntó que en el plan de la economía se definen objetivos que resultan de vital importancia para enfrentar todas las problemáticas ya diagnosticadas en la economía nacional, así como para continuar avanzando en la creación de capacidades y entornos institucionales que permitan progresar con mayor efectividad y rapidez.

“Las medidas aprobadas con ese fin deben crear las condiciones para avanzar con mayor dinamismo si se implementan con celeridad, sin frenos, siempre identificando los riesgos para minimizar sus impactos”.

Apuntó que en los últimos años se han producido importantes desequilibrios macroeconómicos, como resultado de la pérdida de ingresos en divisas, los elevados déficits fiscales, el incremento de los ingresos de personas naturales sin respaldo productivo, la parcial dolarización de la economía y la poca respuesta productiva para generar la oferta de bienes y servicios, entre otras causas.

Esos desequilibrio se expresan principalmente en los niveles de inflación, escasez de oferta, depreciación e inconvertibilidad de la moneda nacional, “fenómenos que han producido un deterioro sustancial del poder adquisitivo de los ingresos de los trabajadores y pensionados y de las condiciones de vida de la población”.

La mejora del bienestar del pueblo requiere reactivar las capacidades productivas nacionales y captar un nivel de divisas que garanticen el incremento gradual, pero sostenido, de las ofertas de bienes y servicios, sostuvo el mandatario cubano ante los diputados.

El plan de la economía para 2023 incluye la implementación de un programa de estabilización macroeconómica que supone una transformación esencial en la gestión macroeconómica y la coordinación entre el plan, el presupuesto del Estado y la programación monetaria.

Díaz-Canel aclaró que un programa de este tipo no impulsa por sí solo el crecimiento económico, pero sí sienta las bases para que el resto de las políticas de carácter sectorial, como la transformación productiva o el desarrollo local, sean efectivas y cumplan sus objetivos.

Recordó las explicaciones ofrecidas por el ministro de Economía y Planificación sobre el plan y el presupuesto del Estado para 2023. “Aunque arroja luces para alcanzar esas metas se debe trabajar duro, innovar, aplicar la economía circular, exportar y aumentar la competitividad de las producciones”. 

Por otra parte, “se requiere continuar implementando medidas que garanticen que la empresa estatal verdaderamente ejerza su papel como sujeto económico principal del modelo de desarrollo económico y social”.

Subrayó que es imprescindible alcanzar las exportaciones proyectadas en el plan para respaldar las importaciones con el objetivo de asegurar los niveles de producción que se planifican y que son la fuente fundamental del crecimiento.

“La atención a las comunidades y personas en situación de vulnerabilidad, el tránsito definitivo del subsidio a productos hacia el subsidio a personas para comenzar la verdadera transformación social, aplicando un enfoque no asistencialista, forma parte del necesario perfeccionamiento de la sociedad y deben priorizarse el próximo año”, dijo.

El 2023 debe ser un año mejor, afirmó el presidente cubano y señaló que para lograrlo se demanda más que un plan integral. “Exige sacudir la inercia, desterrar el burocratismo, quitar más trabas y superar la autocomplacencia”.

“Confío en la dirección colectiva. He actuado y actuaré como fiel defensor de lo acordado en el 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba”. 

Díaz-Canel afirmó que en su condición de presidente de la República, como servidor público, ha velado por el respeto a la Constitución, por el cumplimiento de la legalidad socialista y por mantener un vínculo permanente con el pueblo.

De cada adversidad se saca un aprendizaje

En su intervención, el presidente cubano dijo estar convencido de la naturaleza popular del sistema político cubano e insistió en la necesidad de promover el perfeccionamiento del sistema del Poder Popular, propiciando más democracia y participación.

“El socialismo requiere de una ciudadanía activa y del involucramiento popular en todas las esferas”, manifestó, y añadió que en cada visita a los territorios, en los encuentros con los diferentes sectores de la sociedad y en el trabajo diario desde la presidencia, escucha al pueblo y gobierna en consecuencia. 

Reiteró que la participación popular es la esencia de la democracia y sin ella no es posible el socialismo. “Debemos privilegiar las diferentes formas del control popular sin que implique ir en detrimento del control administrativo”.

Sostuvo que, en virtud de estas convicciones, se ha propiciado el desarrollo de diversos programas orientados a buscar soluciones a los más acuciantes problemas económicos y sociales que afectan la realidad cubana, entre ellos el Programa de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional, la estrategia para lograr la estabilidad del sistema electroenergético nacional, el enfrentamiento a los planes de la subversión político-ideológica, el desarrollo y la estrategia para controlar la pandemia de covid-19 y programas sociales para reducir las desigualdades y las situaciones de vulnerabilidad.

“Enfrentar adversidad tras adversidad, en paralelo con el bloqueo y una pandemia que nos paralizó durante dos años, no ha sido motivo para el desaliento. De cada adversidad se saca un aprendizaje. Ya lo dije una vez, ‘la confianza en la victoria cuando se tiene una historia descomunal empujando tus pasos y un pueblo heroico dando y exigiendo más’”, reafirmó.

Dijo sentir “una enorme insatisfacción por no haber sido capaz de lograr desde la conducción del país, los resultados que necesita el pueblo cubano para alcanzar la anhelada y esperada prosperidad.

“Pero creo en la dirección colectiva. He velado por el respeto a la Constitución y por mantener un vínculo permanente con el pueblo del que soy parte. He insistido en el perfeccionamiento del sistema del poder popular. El socialismo necesita participación activa. Hay que escuchar al pueblo y gobernar en consecuencia”. 

El presidente destacó la importancia de las ciencias sociales para enfrentar los desafíos del país e insistió en continuar fortaleciendo estrategias para el enfrentamiento de los planes de subversión política e ideológica del enemigo.

“Es imprescindible barrer con la burocratización que se ha instalado en muchos espacios, ámbitos y dimensiones del Gobierno”, que “no podemos seguir consintiendo”.

Reafirmó que desde el Estado se promueve un sistema garante de los derechos y de la dignidad humana que los sustentan, “pese al permanente esfuerzo de los enemigos de Cuba por establecer una mitología de mentiras y difamación en cuanto al tema.

Me niego a aceptar la satanización del socialismo, particularmente en el tema de los derechos humanos, porque el socialismo es, por esencia, un sistema orientado a conquistar la mayor justicia social posible, mostrándolo como un sistema enemigo de las libertades y los derechos políticos en general”, dijo.

Añadió que “el ideal socialista considera siempre insuficiente lo que se haga por la protección integral de los derechos humanos, y en Cuba nos interesa profundizar en ese ideal, tomando como referente nuestros valores y consolidando nuestra democracia, pero una democracia coherente con nuestras necesidades y demandas. Una democracia socialista genuina, no importada. Una democracia cubana”.

Díaz-Canel también se refirió a los logros del sistema cubano de salud, con acceso universal y gratuito, algo históricamente disputado por las mayorías en el mundo y que los cubanos disfrutamos.

“Por supuesto que no conquistamos ya toda la justicia”, afirmó, y agregó que “se ha elevado el propósito, orientando los esfuerzos y acciones, conscientes de que siempre será preciso hacer más”.

Por eso, “en nuestra gestión marcamos la necesidad de alcanzar mayores niveles de educación, cultura cívica, formación ciudadana, comunicación social, indispensables para formar conciencia en derechos humanos dentro del sistema socialista”.

El mandatario cubano declaró que “sus insatisfacciones son personales”. Reconocerlas –dijo– le ayuda a visibilizar los caminos para superarlas. En ellos están las únicas fuerzas capaces de enfrentar y vencer cada reto.

“El Gobierno, más desafiado que todos a innovar y a crear; los órganos del Poder Popular de los municipios, de provincia, convocados a dar el salto definitivo sobre sus indicaciones actuales; los legisladores, claves en el empuje a cuanto aprobamos y acordamos; las organizaciones políticas y de masas, para completar el círculo de fuerzas con la más alta participación ciudadana”, afirmó.

Díaz-Canel  agradeció a Fidel, a Raúl y a la generación histórica, que nos educaron en el optimismo frente a las adversidades.

“Gracias por toda la fuerza de la que nos nutre la Revolución que ustedes forjaron.

“Al bravo pueblo cubano, gratitud infinita y nuestras felicitaciones en el año 65 de la Revolución cubana. Venga la esperanza. Hasta la victoria siempre”, concluyó.

Convoca la Asamblea Nacional a enfrentar, por todo el pueblo, el delito, la corrupción, las ilegalidades y la indisciplina social

 Respalda el Parlamento directrices generales del Gobierno para enfrentar estos flagelos en todos los ámbitos, durante la segunda jornada del Décimo Periodo Ordinario de Sesiones de la IX Legislatura, a la que asistió el General de Ejército Raúl Castro Ruz


Marrero Cruz dijo que, para ganar el combate contra la corrupción, es vital romper el triángulo conformado por la necesidad, la posibilidad y la codicia. Foto: José Manuel Correa

El enfrentamiento al delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales en todos los ámbitos requiere «librar un combate inteligente y decidido», señaló el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, durante la segunda jornada del Décimo Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en su IX Legislatura.

Con la asistencia del General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución Cubana, la sesión contó con la presencia, también, del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y fue encabezada por el miembro del Buró Político y presidente de la ANPP, Esteban Lazo Hernández.

Marrero Cruz hizo una reseña sobre el contenido y los resultados iniciales de la implementación de las directivas generales para el enfrentamiento a esos fenómenos, aprobadas en octubre último por el Consejo de Ministros.

Este martes, dichas directivas recibieron el respaldo del Parlamento, que hizo un llamado a todo el pueblo al apoyo y a la lucha rigurosa y sistemática contra estos flagelos.

Al final del debate, Díaz-Canel afirmó que este es un tema estratégico, que tenemos que tratar de resolver definitivamente. «Llevamos mucho tiempo diagnosticando los problemas, contemplando los problemas, y aquí lo que se trata es de ir a un combate sistemático, eficiente, eficaz, realista, objetivo y con la participación de todos», subrayó.

CAUSAS Y EFECTOS

En la introducción de su informe al Legislativo, el primer ministro Manuel Marrero Cruz aseveró: «La actualidad de nuestro país se caracteriza por una compleja situación, matizada por un bloqueo recrudecido, el impacto de la crisis internacional provocada por la pandemia y una guerra mediática, política e ideológica, dirigida por el Gobierno de EE. UU., con el empleo de todos los medios a su alcance, incluidas las redes sociales.

«Lo anterior, conjugado con nuestras propias insuficiencias y limitaciones, los desabastecimientos de mercancías, la crisis energética y los elevados niveles de inflación, y con ello los precios altos, contribuye al incremento de las ilegalidades, los delitos y la corrupción», agregó.

Pero para ganar «el combate contra la corrupción –dijo–, es vital romper el triángulo conformado por la necesidad, la posibilidad y la codicia.

«Conscientes de nuestras limitaciones para satisfacer las carencias en el corto o mediano plazos, nos queda entonces incrementar el control de los recursos, para evitar que las tentaciones y la codicia se consoliden».

Al hacer una caracterización sobre el tema, el Jefe de Gobierno subrayó que en el mercado informal de productos y mercancías de alta demanda predominan los delitos de especulación, acaparamiento, receptación y actividad económica ilícita, y las redes sociales se posicionan como una de las principales vías utilizadas para su materialización.

Abundando en particularidades de estas dañinas manifestaciones, Marrero Cruz enfatizó en que un peso importante en ellas lo están teniendo «los delitos contra el patrimonio; que incluyen el hurto, los robos con fuerza, con violencia y los que se cometen contra el ganado».

También persisten «afectaciones en las viviendas, almacenes y bodegas, la sustracción de ciclomotores eléctricos o motorinas y teléfonos celulares, en ocasiones sometiendo a las víctimas con el empleo de la fuerza física».

PREVENIR Y ENFRENTAR CON TODOS

Profundizando en las directivas generales, el Primer Ministro expuso que estas son una respuesta al reclamo del pueblo, y deben ser implementadas por todos los organismos, entidades nacionales y gobiernos territoriales.

Sus objetivos –enunció– son fortalecer la prevención y el enfrentamiento a estos fenómenos, y con ello contribuir a alcanzar las metas de desarrollo económico y social y la prosperidad a la que aspiramos, en un ambiente de orden, disciplina y exigencia.

Tras recalcar que todas las indicaciones tienen identificados sus responsables, Marrero Cruz explicó que no «se trata de otro plan, sino de integrar las acciones para la implementación de las directivas generales con las tareas y planes que ya existen, conformándose un plan único en el que se establecerán los indicadores para medir su cumplimiento y mejoras».

La tarea –añadió– fue asumida, con la trascendencia y prioridad que demanda, por los principales cuadros de los organismos de la Administración Central del Estado (OACE) y autoridades territoriales, y ha contado con el aseguramiento político conducido por el Partido.

Al mismo tiempo –añadió– las acciones y las propias directivas requerirán de ajustes continuos, según las características y necesidades de cada cual, y «sin esperar por indicaciones de niveles superiores de dirección, evitando caer en la rutina, el burocratismo y los formalismos».

Al abundar en las condiciones necesarias para esta batalla, enumeró, entre otras, el imprescindible perfeccionamiento de las estructuras administrativas de las provincias y municipios, el cual se implementa, así como un efectivo sistema de inspección territorial, el completamiento y preparación de sus cuadros y funcionarios y su articulación con la inspección de los OACE y las entidades nacionales.

HECHOS Y ACCIONES

Entre las medidas para enfrentar el delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales, el Primer Ministro enumeró algunas que ya se implementan, como:

  • Jerarquizar la prevención y el enfrentamiento a las conductas ilegales en la comercialización de productos y prestación de servicios a la población.

Comienzan así a implementarse medidas diferentes para la venta de mercancías –sobre todo en la capital– en sustitución de la Operación Lucha Contra Coleros (LCC), que será eliminada gradualmente en todo el país.

Esto incluye generalizar la venta controlada por núcleos en los establecimientos comerciales.

  • Ordenar las zonas o espacios de ventas de artículos y productos por las formas de gestión no estatal.
  • Controlar la licitud de los productos de todo tipo, puestos a la venta, incluidos agropecuarios e importados sin carácter comercial.
  • Establecer horarios de venta extendidos.
  • Concluir la informatización de las oficinas del Registro de Consumidores, entre otras medidas.

Las acciones prevén, además, avanzar hacia la bancarización obligatoria de los flujos monetarios vinculados con los ingresos y ventas de las formas de gestión no estatal, y precisar las regulaciones para la comercialización de productos en la red de tiendas en MLC y CUP.

También, añadió el Jefe del Gobierno, se impone «robustecer el enfrentamiento a las ilegalidades en la contratación de fuerza de trabajo y a los deudores del pago de multas e indisciplinas en el pago de los impuestos, con la aplicación de medidas que pueden abarcar el cierre de los establecimientos, retiro de la autorización para ejercer el trabajo por cuenta propia de forma temporal o definitiva, hasta la formulación de denuncias penales».

También se avanzará en la eliminación de trabas, manifestaciones de corrupción e ilegalidades que se cometen en la realización de los trámites de la población.

Al ejemplificar sobre resultados en el enfrentamiento, Marrero Cruz informó sobre los operativos en las áreas de venta de 100 y Boyeros y La Cuevita, en La Habana, que demostraron cuál es la manera en que debe actuarse contra las ilegalidades y la necesidad de ser sistemáticos.

El enfrentamiento –agregó más adelante– «debe ser enérgico e inteligente; combatir al vendedor ilegal es necesario, pero la prioridad es llegar hasta la fuente o el origen de lo que se comercializa ilegalmente».

«Trabajar en la profundidad –añadió, refiriéndose a la labor de los órganos competentes– es una premisa, identificando las casas almacenes, las cadenas delictivas, los medios de transporte utilizados y el destino de las ganancias; esto es lo más importante y la prioridad en los procesos investigativos a cargo del Ministerio del Interior».

Tras un análisis minucioso del problema del delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales, del perfil de quienes se involucran en estos hechos, y de la actuación de las instituciones encargadas del enfrentamiento y la aplicación de la ley, el Primer Ministro enfatizó en que esto «es un asunto de seguridad nacional».

Nosotros, afirmó Marrero Cruz en el plenario del Décimo Periodo Ordinario de Sesiones de la IX Legislatura de la ANPP, tenemos la sagrada misión de proteger una de las conquistas de la Revolución, que es la tranquilidad ciudadana, tranquilidad que motiva el reconocimiento y elogio de todos los que visitan nuestra Patria e, igualmente, la defensa de los intereses de nuestro pueblo trabajador.

Se indicó jerarquizar la prevención y el enfrentamiento a las conductas ilegales en la comercialización de productos y prestación de servicios a la población. Foto: Ricardo López Hevia

LA REVOLUCIÓN NO SOLO ES BIENES MATERIALES

Al introducir el debate de las diputadas y diputados sobre la información presentada por el Primer Ministro, el presidente de la ANPP, Esteban Lazo Hernández, señaló que la inmensa mayoría de nuestro pueblo rechaza estas conductas, y está consciente de los peligros que ellas significan para la Revolución.

La Revolución –enfatizó– no solo es bienes materiales; la Revolución son actitudes, son esos valores que están en el concepto de Revolución de Fidel, y cuando permitimos que esto suceda, no estamos siendo consecuentes con ese concepto.

El delito, la corrupción, las ilegalidades, las indisciplinas sociales –afirmó– son manifestaciones contra las que se luchó, porque no tienen nada que ver con los valores del socialismo.

Estos problemas –acotó– solo benefician al enemigo, nunca al pueblo, porque cuando se pierde el sentido de la honradez, de la honestidad, de la laboriosidad, de la solidaridad, entonces qué queda de los principios del socialismo.

El diputado por el municipio de La Lisa, en La Habana, José Castañeda Martínez, afirmó que este enfrentamiento es «asunto de primera prioridad», y que se necesitan medidas de control institucional más eficientes y participativas, control contable eficaz, fiscalización sistemática y control popular permanente.

Es necesario la integralidad de las acciones, que sean concretas y diferenciadas, y que involucren a todos los sujetos que intervienen en los procesos productivos y de servicios, sentenció.

El diputado por el municipio de Nueva Paz, en Mayabeque, general de División José Antonio Carrillo Gómez, afirmó que están creadas las condiciones para enfrentar estos fenómenos, lo que incluye fortalecer el trabajo de prevención y enfrentamiento, una tarea –dijo– que tiene que ser de todos: instituciones, organizaciones y pueblo general, cada cual en lo que le toca.

TODO CONTRA EL EGOÍSMO

La lucha contra el delito, la corrupción, las ilegalidades y las indisciplinas sociales es un tema que se ha reiterado y se ha abordado en múltiples ocasiones, y que no hemos logrado resolver como necesita nuestra sociedad, comentó el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al cierre del debate.

En un análisis autocrítico del asunto, sentenció que, desde el accionar del Partido, del Gobierno y de las administraciones, no se ha profundizado lo suficiente en estos fenómenos.

«Se han estado contemplando, se han estado evaluando, pero no se ha promovido un enfrentamiento realmente efectivo, y (en esto) tiene que ver cómo se trabaja desde el punto de vista institucional, porque aquí, independientemente de la situación compleja que ha estado viviendo el país, todo lo que condiciona hechos de corrupción, delito e ilegalidades tiene que ver también con el mal funcionamiento de las entidades nuestras, fundamentalmente de entidades estatales».

La comprensión de estos asuntos, añadió, «pasa también por la inadecuada relación entre entidades estatales, ya sean empresariales o presupuestadas, con las formas no estatales de gestión.

«Cada vez que se analiza una problemática de esta, en la cual estuvo involucrada una forma de gestión no estatal en un hecho de delito o de corrupción, detrás de eso busquen la relación inadecuada que hubo con una empresa estatal o con una unidad presupuestada que pagó lo que no tenía que pagar, que no chequeó lo que tenía que chequear, que no controló lo que tenía que controlar, porque se dejó robar lo que tenía, en vez de preservar y defender, como representantes del pueblo, los medios fundamentales de producción».

Nosotros –orientó el Primer Secretario– tenemos que actuar desde todas las instituciones, desde el Partido, desde el Gobierno y desde las administraciones, con conciencia de la necesidad de enfrentar esto, de ser catalizadores para hacer más eficientes la transformación y el cambio que tenemos que lograr.

En este asunto –añadió– tenemos que analizar todos los mecanismos que reproducen y amparan el egoísmo, tanto el individual como el que se genera en determinados colectivos de personas. Tenemos que dar una lucha contra el egoísmo.

«La vocación humanista de la Revolución para alcanzar la mayor justicia social posible no se construye con egoísmo, se construye con una práctica solidaria, con una conciencia de compartir, con una conciencia de llegar a los que más necesidades tienen, sobre la base de la honestidad, sobre la base de la transparencia, sobre la base de la decencia y sobre la base de la virtud», afirmó.

«Nosotros –añadió– tenemos que dar el combate contra aquellas personas que se quieren enriquecer sin producir, sin trabajar, sin aportar, utilizando mecanismos de oportunismo, de ilegalidad, aprovechando la situación y aprovechando las brechas que nosotros mismos propiciamos por el ineficiente control en nuestras instituciones».

Pero ahora –acotó Díaz-Canel en otro momento de su intervención–, más que hablar en tono despectivo de quienes cometen estos hechos, «preocupémonos por qué una sociedad como la nuestra, que educa, que instruye, que forma en valores, por qué en esa sociedad se ha propiciado el surgimiento de este tipo de personas.

«¿Cuáles son los problemas que se nos han acumulado, cuáles han sido nuestras estrategias de trabajo hacia lo social que no han funcionado; por qué, si buscamos la mayor justicia social posible, hay personas que se han quedado atrasadas en relación con esto, que no trabajan, que no aportan, y que, sin aportar ni trabajar, pueden vivir mejor que los demás?

«Eso lo tenemos que enfrentar definitivamente; y no se trata de discriminar, al contrario, tenemos que pasar de una política asistencial a una verdadera transformación social; y todo el que pueda aportar en nuestra sociedad, que aporte, que se distinga por su aporte, por su trabajo; y que, en función de eso, reciba los ingresos con los cuales pueda tener una vida decorosa y apoyar a su familia.

«Lo contrario es una desviación de lo que queremos, una desviación de nuestros principios, una desviación de la sociedad que queremos construir», razonó el Presidente Díaz-Canel.

Avanzando en el análisis, el Jefe de Estado ahondó en el papel del pueblo y del control popular en la lucha contra estos flagelos. Además de control partidista, de gobierno, administrativo –dijo–, es con la participación del pueblo, con el control popular, donde ganamos la batalla, y esas son las enseñanzas que nos han dado Fidel y Raúl a lo largo de la Revolución.

Los grandes retos –sentenció– hay que asumirlos con participación popular, pero para eso hay que explicar, hay que compartir, porque estas medidas no se pueden quedar aquí, en el marco de la Asamblea Nacional, ahora tenemos que ir a un debate popular. Y estoy convencido de que, en ese debate popular, nuestra gente va a enriquecer estas acciones, una parte importante va a comprometerse con estas medidas, se convertirán en defensores de ellas».