Fidel


"Peor que los peligros del error son los peligros del silencio." ""Creo que mientras más critica exista dentro del socialismo,eso es lo mejor" Fidel Castro Ruz

miércoles, 11 de diciembre de 2024

Cuba: indagar en El Gran Apagón (IV)

Por Manuel David Orrio del Rosario



Vista parcial del óleo El Gran Apagón, de Pedro Pablo Oliva .

Si la dirigencia criolla considera al bloqueo la causa principal de El Gran Apagón, es obligado al menos estimar su real alcance, habida cuenta de que a lo largo de esta indagación surgen preguntas sin aún respuestas. Al parecer, lo que inspiró el óleo magistral del pintor Pedro Pablo Oliva, devenido dramática realidad, tiene más sierpes que la Gorgona Medusa  en su cabeza.

Gorgona Medusa. Rusters

De inicio, aparecen entre víboras y cobras la ya mentada desmemoria nacional - que siempre conduce a repetir errores -, más la improvisación y el voluntarismo, entendida aquella como la ausencia o incumplimiento de estrategias previamente acordadas, y subsiguientes "maratones", como el propósito de instalar  a toda carrera 2000 MW de energía solar en apenas dos años- lo que pudo iniciarse desde mínimo el 2015 -; o,  en el caso del voluntarismo, ya se sabe:  "¡ésto hay que hacerlo de Patria o Muerte!" Aunque se derrumbe el monumento a José Martí en la Plaza de la Revolución.

Súmese el rol de una prensa que hasta Ricardo Ronquillo Bello, presidente de la Unión de Periodistas de Cuba, consideró desde el 2021 que "hoy no responde a los actuales presupuestos de la comunicación; por ello, construir un nuevo modelo de prensa no es una opción sino una necesidad... el modelo de comunicación debe responder a los mecanismos de control popular.

Ricardo Ronquillo Bello. Presidente de la Unión de Periodistas de Cuba. Cubaperiodistas

Según parece, el  "control popular" al que aspira El Ronco - como el gremio  le llama con auténtico aprecio -, "ni vio pasar" el pitcheo de El Gran Apagón - se dice en baseball criollo -, que no fue  un lanzamiento sorpresivo, sino  lo que  se llama "ponerte en tres y dos...y poncharte".

Pudieran sumarse otros venenosos reptiles que hacen de cabellos de la Gorgona Medusa, como son las políticas aprobadas en congresos del Partido Comunista, el parlamento y el gobierno...pero incumplidas. A lo largo de esta indagación ha presentado este periodista algunos ejemplos, como el misterioso caso de los 3500 millones de dólares aprobados para invertir en 15 años en energías renovables ¿Cuáles han sido los resultados de  los más o menos 2330 millones  que serían  correspondientes al decenio 2015- 24, habida cuenta de que la política respecto a energías renovables se aprobó en el 2014? Éso hubiera significado poder instalar mínimo 2000 MW en granjas solares, a tenor de promedios internacionales de costos,  y éstos se están abaratando, afirmó el profesor emérito de la Universidad de La Habana Daniel Stolik: "...hoy (la energía solar) es la más barata, con un promedio en el orden de los 18 a 30 centavos de USD por watt".

¿2330 hipotéticos millones de dólares en un decenio? Las estadísticas de la ONEI revelan que la generación bruta de electricidad cayó 26% entre el 2019 y el 2023. En igual período, la generación por hidroeléctricas descendió de 124,5 a 106,5 GWh, y la eólica y fotovoltaica de 250,5 a 236,7.  Es decir, la hidroeléctrica cayó 15% y la eólica y fotovoltaica 5,5. Las preguntas son por qué y quién rinde cuentas, sagrado principio de lo que se llama democracia socialista.

Anuario Estadístico Cuba 2023. ONEI

Por cierto, parece que no ha faltado moneda dura para invertir, si se recuerdan las estadísticas de remesas que Los Angeles Times publicó y se presentan en el tercer capítulo de esta serie; sin contar, por ejemplo, los no publicados ingresos por colaboración en el exterior.

Añádanse a las sierpes los intereses creados, esa burocracia que actúa como "clase en sí y para sí" y, ojo atento, ¡pero muy atento!,  con un áspid llamado corrupción: pero no la del que acepta un sobornillo, sino la de Grandes Ligas, la de al parecer el ex- vicepremier Alejandro Gil Fernández  que ¿desde cuándo no se sabe del hombre, supuestamente arrestado  el 7 de marzo del corriente?¿Ha investigado la prensa cubana como se supone debiera? ¿ Ha pensado alguien en la puñalada trapera a la credibilidad del proyecto socialista cubano que representa semejante secretismo?

Alejandro Gil Fernández, ex- vicepremier y ex-ministro de Economía y Planificación, acusado de presunta corrupción. Cubadebate.

El tiempo apremia y una reforma integral de la economía nacional urge - y ésta incluye lo energético -, no se cansa de advertir el destacado economista Julio Carranza, entre otros; pero parece que la sordera  es grave. Algunos "andan por ahí" a la caza de los pecados reales  o supuestos de las más  o menos 11 mil micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) existentes en Cuba,  mientras las trompetas de El Gran Apagón tronaban en sus oídos...y no las escucharon.

Nota "al paso": el Producto Interno Bruto (PIB) de Cuba decreció 1,9% en el 2023, a precios constantes; pero de acuerdo con declaraciones de la viceministra de Economía y Planificación Yohana Odriozola, "esas bandoleras" de las mipymes aportaron al PIB 7,7% del total en ese año. De suponer que ese porciento también sea a precios constantes, las "chicas del antifaz asaltante" habrían impedido una caída del 5,8% en ese estratégico índice. O sea, se mantiene con muy buena salud la "tradición nacional" de perseguir centavos y dejar escapar pesos.

Curiosamente, las "miserables bandidas" no tienen problemas mayores para importar desde Estados Unidos, por lo cual son un recurso legal y viable para combatir el bloqueo. Es decir, que las supuestas èmulas de Jesse James son, mínimo, aliadas.

Con el debido respeto, "algo huele a podrido", y ni lo dijo Hamlet, ni es en Dinamarca.

Deber obliga: este periodista emprende el análisis, sin olvidar la frase preferida de Carlos Marx: omnis dubitando. O sea, duda de todo, más una salvedad: la insuficiencia de las estadísticas oficiales criollas  es un nada despreciable obstáculo, en lo cual la pregunta es si existen o no se publican las demasiado "inconvenientes" - ¿para quién?

Conste y soy testigo: la labor de la ONEI es muy, muy elogiable; es hija de una tradición proveniente de la de los excelentes contadores criollos de "la vieja escuela", pero sus insuficiencias son reales. Por tanto, "a falta de pan, casabe": análisis con lo que a mano esté, si procede de fuente seria.

Bloqueo y "cuentas de almacenero"

Según el último informe cubano presentado a Naciones Unidas en virtud de la resolución 78/7 de la Asamblea General,tituladoNecesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba (julio, 2024), "A precios corrientes, los daños acumulados durante más de seis décadas de aplicación de esta política ascienden a 164 mil 141,1 millones de dólares...Se estima que, de no existir el bloqueo, el PIB de Cuba a precios corrientes pudo haber crecido alrededor de un 8 % en 2023". Así pues, vengan observaciones:

1)     sin prejuicios respecto a la calidad del informe, en cuya elaboración consta la participación de expertos criollos de primera clase,  ¿cuándo en la historia de Cuba se ha crecido a semejante nivel, incluso sin bloqueo? ¿ Cómo se explica que ese crecimiento superaría al de la pujante economía vietnamita, la cual creció 5,05 % en 2023?  De paso, Vietnam es hoy el segundo exportador de arroz del mundo, por si el lector no lo sabe; la "tierra arrasada" devino vergel; inició su audaz reforma económica integral (Duo Moi) en 1986, ¡con bloqueo estadounidense!;  Clinton "el gozador" lo eliminó en 1994 porque "business is business", aunque también fue un motivo de peso el tema de los soldados de Uncle Sam desaparecidos en la guerra entre ambos paises;

  2) El informe abarca seis décadas de bloqueo ¿Considera el efecto compensatorio de tres decenios de ayuda soviética y sus diz que aliados del campo  mal llamado socialista? ¿Toma en cuenta el también efecto compensatorio de los intercambios comerciales de seis décadas con los países capitalistas, con períodos en  los cuales la fama cubana de honrar sus compromisos crediticios fue casi proverbial? ¡No!, afirma una fuente de alto crédito que pidió anonimato;

  3) como no se dispone de suficientes estadísticas oficiales, no queda de otra que aferrarse al "clavo ardiente", pero no a cualquier clavo. La elección recae en Carmelo Mesa -Lago,  Profesor Emèrito de la Universidad de Pittsburgh considerado por muchos de sus colegas - dentro y fuera de Cuba - el mayor economista cubano vivo, aunque no simpatice con el proyecto socialista criollo, pero tampoco es hostil. De paso, digamos que "se entretiene" con Cuba; es un renombradísimo experto en temas de seguridad social en América Latina.


Carmelo Mesa -Lago. Cubans in America

El Maestro publicó en 1994 un estudio sobre la ayuda soviètica a Cuba, por vía de altos precios del azúcar y el níquel, y bajos del petróleo, respecto al mercado mundial, a los cuales llamó subsidios (Cuba after the Cold War); concluyó que en términos netos - y hasta señaló períodos de pérdidas para Cuba -, la ayuda económica sumó 65 mil millones de dólares. No es el único estudio, pero sí parece el más equilibrado. También Mesa-Lago estimó que la ayuda militar gratuita, sumó 13 400 millones de dólares entre 1960-85.

Por su parte, la revista Russia beyond the Headlines  -cito  de memoria  -, informó que esa ayuda militar total sumó 17 mil millones de dólares . Asúmase entonces un estimado promedio de 15 mil millones, que fueron vitales para la seguridad nacional criolla, el apoyo a la independencia de Angola y el fin del ominoso apartheid en Sudáfrica. También ha de añadirse una deuda de 35200 millones de dólares, de vieja data y arduas discusiones ,  que aunque en el 2014 Rusia condonó en un 90% y se renegoció en nuevos términos de pago, financiamiento fue.

O sea, que entre estimados y datos, Cuba habría recibido recursos por valor de unos 115 200 millones de dólares de la URSS o Rusia. Por simple aritmética, los 161141,1 millones de dólares de daños causados por el bloqueo, según el informe criollo a Naciones Unidas, se reducirían a unos 45,941.1.

Si se acepta que también, según Mesa-Lago, "La Venezuela chavista entra el rescate con ayuda de 110 mil millones de dólares" y además  -afirma el economista - "Cuba tuvo también acceso a mercado de capitales en Europa y Asia y adquirió deuda por 19 mil millones de dólares, que entró en litigio judicial por el incumplimiento de pago", más que "las remesas de los exiliados" regularizadas durante el gobierno de Obama,  sumaron "31 mil millones de dólares";  lo resultante es 160 mil millones:  si se restan a los mismos los 45941,1 millones de pérdidas  por el bloqueo antes ajustados, Cuba contó en seis décadas con 114058,9 millones de dólares a su favor. El Maestro fue más lejos: 280 mil.

"Por si las moscas ": Mesa-Lago se opone al bloqueo desde 1968, que recuerde. Tenía entonces 34 años de edad. Ahora, 90.

Nada de los anteriores cálculos niega la criminalidad del bloqueo yankee a Cuba ni su carácter "éticamente inaceptable", al buen decir de Juan Pablo II, como tampoco que pese a las injerencistas sanciones, incluso bajo el gobierno de Donald Trump , Cuba importó de Estados Unidos cifras nada despreciables en el grupo de países de América ¿Parece increíble? Pues aquí está:

Fuente: Anuario Estadístico de Cuba 2023. ONEI.

Consejo sano para quien quiera seguirlo: "mira más la viga en el ojo propio, que la paja en el ajeno"... aunque éste haya votado por Donald Trump .

"La Historia es la más implacable de las maestras", gustaba decir Orrio padre. Si bien las "cuentas de almacenero" parecen favorables a Cuba, pese al bloqueo, surge una escabrosa pregunta. Por citar algunos entre sabe Dios cuántos ejemplos, ¿cuántas pérdidas ocasionaron?:

1)      el Cordón de La Habana, un intento voluntarista y sonado fracaso de sembrar café en zonas inapropiadas para su cultivo en la antigua provincia de La Habana, con masivas movilizaciones y subsiguientes gastos de medios y transporte;

2)      la Zafra de los Diez Millones que nunca han sido, y cuyo resultado fue el inicio de una dependencia de la URSS que llegó a ser mayor que la habida de Estados Unidos, más daños agrícolas y ecológicos;

3)      el cambio de patrón genético de la ganadería vacuna y el uso posiblemente excesivo de la inseminación artificial, que al parecer provocó por la endogamia algo así como reses  mentalmente discapacitadas. Cuba tuvo en 1967  alrededor de 7 millones de cabezas de ganado vacuno; tenía 3 516 400 en el 2022 (última cifra disponible, ONEI); la virtual destrucción de la sí salvable agroindustria azucarera en el 2002 por la mal llamada Tarea Álvaro Reynoso, por su alrededor de 7 millones de cabezas de ganado vacuno; tenía 3 516 400 en el 2022 (última cifra disponible, ONEI);

4)     la virtual destrucción de la sí salvable agroindustria azucarera en el 2002 por la mal llamada Tarea Álvaro Reynoso, por su nombre una ofensa al legado del gran sabio agrícola cubano. Según el economista Juan Triana Cordovì, en una conferencia por él impartida en el 2012, en la sede de la Asociación Cubana de Naciones Unidas (ACNU), a esas alturas la tarea de marras habría provocado pérdidas por 10 mil millones de dólares. No participaría en ese estimado el aporte de la industria del dulce a la generación de electricidad, el cual llegó a ser de más o menos 10% de la total en sus mejores momentos, pero que aún en el 2000 aportaba alrededor de un 6, apuntó "el malvado" El Toque, que a diario hace recordar una cita de Lenin: "En el juicio de un enemigo inteligente, es rara la total confusión; dime quién te alaba, y te diré en qué te has equivocado".

Indagar en El Gran Apagón parece uno de los 12  trabajos de Hércules . Pero el deber llama. Como proclama cierta consigna: ¡vamos por más!.

Continuará

Parte I https://cubayeconomia.blogspot.com/2024/12/cuba-indagar-en-el-gran-apagon-i.html

Parte II https://cubayeconomia.blogspot.com/2024/12/cuba-indagar-en-el-gran-apagon-ii.html

Parte III https://cubayeconomia.blogspot.com/search/label/Manuel%20David%20Orrio

Omar Everleny: La economía cubana es una sola

10 diciembre 2024


La Joven Cuba comparte la transcripción de la entrevista al economista cubano Omar Everleny a propósito de la serie de entrevistas por los 10 años del anuncio del 17 de diciembre de 2014.

La normalización duró dos años. Aunque se aprobaron las relaciones entre Cuba y Estados Unidos el 17 de diciembre del 2014, hubo un periodo anterior donde realmente existió intercambio, por lo menos en el área donde yo trabajaba: la academia y la economía. Tuvimos visitas de grandes empresarios de la Florida que tenían interés en Cuba o habían sido expropiados en la Isla. Me refiero a grupos como los azucareros, por ejemplo. Hicimos seminarios, presentaciones sobre el tema de la economía cubana. La Brookings, una institución muy importante en los EE.UU., y Diálogo Interamericano empezaron acercándose. O sea, nosotros no sabíamos que iba a haber una normalización, pero sí el clima fue cambiando, no sucedió de la noche a la mañana.

Reconfiguración del vínculo entre naciones

Yo creo que realmente hubo mucha flexibilización. Primero tuvo lugar la cooperación en el tema migratorio, en la lucha contra el narcotráfico; se ampliaron las remesas, se tomaron más de 22 acuerdos… Ahí empezaron a otorgarse las visas de cinco años a muchas personas que tenían un negocio. Hubo una flexibilización de las sanciones que pesaban sobre Cuba: estaba la famosa Lista de países que apoyaban el terrorismo, en la que incluyeron erróneamente a la Isla, pues nunca debió estar. En el caso particular del bloqueo, tiene todo un andamiaje legal que no es fácil eliminarlo, pero sí pudieron haber órdenes ejecutivas que permitieron ajustar determinados aspectos. Entonces, yo creo que en esos años iniciales hubo bastante voluntad y cambio.

No fue significativo, no cambió la economía cubana, pero sí el ambiente era totalmente distinto. Las empresas norteamericanas (muchas de ellas ya vendían determinados alimentos en Cuba) vieron una flexibilización, una posibilidad de vender más. En el caso de la economía cubana, no hubo tanta restricción a las empresas cubanas para comprarle a las norteamericanas. Aunque yo creo que el mayor aporte, desde mi punto de vista, fue al sector privado. Muchos países empezaron a relacionarse con Cuba. Hubo discusiones en el Club de París para condonar las deudas. Todo eso pasó en el mismo periodo. Las ciudades se inundaron de turistas norteamericanos y esos turistas empezaron a gastar en paladares, restaurantes. O sea, llegaron nuevos bríos.

Se pensaba que eso iba a trascender el periodo presidencial. Sin embargo, fue en los últimos dos años del mandato de Obama. Tampoco se puede decir que en dos años un país cambia, pero sí en la población cubana logró suavizar ese ambiente de tensión que hubo anteriormente. Una persona que tenía restricciones para recibir remesas del exterior pudo recibir cualquier monto, o sea, un monto superior al que estaba aprobado. Entonces sí, la flexibilización fue muy beneficiosa para la sociedad en general.

Beneficios potenciales

Una mejoría de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos significaría para la población en general y para Cuba una gran oportunidad. En primer lugar, para las transacciones bancarias. Ya no estamos hablando solo del sector estatal, sino del sector no estatal que necesita comprar algún bien en EE.UU. porque es el mercado más cercano. Hoy no lo puede hacer porque no tiene cuenta bancaria en ese país, lo debe hacer a través de terceros con las comisiones.

Permitiría de nuevo recuperar el número de turistas que venían a Cuba. Por ejemplo, a República Dominicana le llegan en estos momentos cinco millones de turistas norteamericanos, ninguno de esos viene a Cuba. Ahora, yo creo también que a un presidente, cualquiera que esté en el poder, le es muy difícil cambiar 65 años de medidas, pero sí sería una mejoría. De igual modo, Cuba tiene que poner de su parte, no solo presionar a aquellos que nos tienen presionados, sino también ceder algo. Permitir inversión extranjera concreta. En esos dos años se negociaron muchos acuerdos con EE.UU. y casi ninguno se materializó.

Los recursos provenientes de Estados Unidos casi siempre se miran con recelo, ¡y si vienen de cubanoamericanos más! Yo creo que hay que dejar esa política. Independientemente de todo, los recursos hacen falta y da lo mismo que sea un empresario privado vietnamita, que un empresario privado norteamericano y, si es cubanoamericano, mejor. Las condiciones están.

Retroceso en las relaciones bilaterales

El fin del acercamiento de las relaciones que se habían «normalizado» en el periodo anterior, cuando asumió el nuevo presidente, fue inmediato. Yo soy economista y me gusta ver hechos. Para mí, el hecho más visible fue la suspensión de los cruceros. Alrededor de los cruceros se había creado todo un andamiaje de grupos ofreciendo servicios: guaguas de turismo, carros americanos de los años 50, gente que vendía souvenirs, es decir, se fueron articulando y, de pronto, se quedaron colgados.

Las paladares mismas empezaron a no tener sillas ocupadas porque decían: «Es que los turistas que venían eran de los cruceros, tenía contrato y ahora me quedé…». Estoy hablando de los grandes restaurantes que tuvieron mucho éxito. Realmente fue muy drástico el cambio porque ocurrió en pocos meses.

Un enfoque integral para el desarrollo económico cubano

A pesar de todas las situaciones de la economía, la Cuba de hoy es totalmente diferente a la de la época de Obama, donde se abogaba por tener pequeñas y medianas empresas. Hoy funcionan ya pequeñas y medianas empresas en casi todos los sectores de la economía. Es decir, hay un tejido empresarial más articulado que podría tener muchos beneficios si EE.UU. otorgara excepciones bancarias, créditos, si se pudiera comprar directamente sin muchas restricciones, si se dieran visas para todos los empresarios cubanos, que no tienen necesariamente que fijar su residencia en EE.UU., porque tienen el negocio en Cuba.

Yo siempre digo que hay que mirar la economía cubana como una sola. No estoy de acuerdo con eso división entre sector estatal y sector no estatal.



La destrucción de la confianza: un mal de la economía cubana

La pérdida de confianza y su correlato, la incertidumbre, destruye los incentivos positivos y estimula el abandono, las soluciones individuales, una de las cuales es la emigración, tanto la geográfica, como la laboral.

Por  Dr.C Juan Triana Cordoví
diciembre 11, 2024
en Contrapesos



Foto: Kaloian.



El mayor costo de cualquier decisión, ya sea política, económica, personal, administrativa, jurídica, etc., es el costo de la misma en términos de confianza perdida. No he encontrado ninguna unidad de medida que me permita cuantificar la pérdida de confianza; sin embargo, sí es posible identificar y de alguna forma medir ese costo en actitudes y comportamientos de los seres humanos.

Por lo general, el costo en confianza de una mala decisión se transforma en actitudes negativas: indiferencia, incredulidad, incertidumbre, miedo, pérdida de perspectiva, renuncia a hacer y a participar, apatía, etc.

La pérdida de confianza y su correlato, la incertidumbre, destruye los incentivos positivos y estimula el abandono, las soluciones individuales, una de las cuales es la emigración, tanto la geográfica, como la laboral.

Entre 2021 y 2023, la pérdida de profesionales en el sector de la salud fue de 89 954 personas, en la educación 32 789, 4 375 en el sector de la ciencia e innovación, 51 492 en el agropecuario. Hay que recordar que la formación de un profesional tarda entre 15 y 17 años.

Por eso me cuesta tanto pensar que quienes toman las decisiones le dan poco valor a la confianza, a la palabra empeñada, a las “reglas de juego” adoptadas que establecen ciertos compromisos por los cuales las personas toman determinadas decisiones, arriesgan recursos, proyectan el futuro de ellos mismos y de sus familias.

La confianza lo es todo. En la relación de pareja, cuando se decide crear una familia, se hace sobre la base de la confianza. Cuando se decide afincar los pies en un pedazo de tierra y echar raíces, lo que sustenta esa decisión es la confianza. Cuando se decide apoyar un proyecto social y/o político, la confianza tiene un peso decisivo.

Lo que sustentó la Revolución cubana en esos primeros años donde se libró una guerra sin cuartel defendiéndonos de las agresiones orquestadas por los gobiernos de Estados Unidos fue, sobre todo, confianza.

Cuando se invierte en un negocio, lo primero es la confianza. El dinero es confianza —inscrita en una tablilla de arcilla, en un pequeño disco metálico, en un papel, en un billete de banco, en una tarjeta plástica—. El crédito, del latín credere, que significa creer, es confianza; la inversión es y no es más que confianza en el futuro; el comercio, ya sea al por mayor o al por menor, también lo es. El valor de los bonos y de las acciones es, en buena medida, confianza, seguridad en que la inversión en esos valores tiene una garantía, ya sea dada por el Estado o por alguna empresa.

La relación sana entre los tres grandes y únicos actores de una sociedad, a saber, el estado, las familias y las empresas, solo es posible en base a la confianza.

El marco institucional dentro del cual esos tres actores desarrollan su actividad debe, primero que todo, garantizar esa confianza. Si falla, la opacidad se enseñorea dentro de esas relaciones, la incertidumbre crece y las palabras se convierten en recipientes vacíos de contenido real.

Se ha sostenido en las tribunas, una y otra vez, que no hay una guerra contra las mipymes ni contra el sector no estatal; sin embargo, si se hace un balance de las medidas —resoluciones, decretos, decretos leyes, circulares, indicaciones, etc.— que durante este año se han ido adoptando, la conclusión es otra diametralmente diferente.

La Resolución 56/2024, regalo de fin de año, hay que situarla junto a las otras que han ido encerrando al sector no estatal en una jaula regulatoria cada vez más estrecha.

Como las otras, horada el cimiento más importante de cualquier economía: la confianza, y afecta directamente a un sector que hoy emplea al 35 % de los ocupados de los cuales dependen numerosas familias. ¿Cuánto nuevo desempleo generará esta medida? ¿Tiene el Estado una opción para esos futuros desocupados? ¿Se convertirán algunos de ellos en esa figura que hoy eufemísticamente llamamos “deambulantes”?

Ese sector genera el 15 % del PIB. ¿Tiene capacidad el sector empresarial estatal para suplir esa pérdida, si hoy sabemos que la tasa de inversión alcanza apenas el 10 % del PIB, cuando la misma debería estar al menos en el 25 %?

¿Cuál es el sucedáneo con el que cuenta el Estado cuando hoy sabemos que alrededor del 50 % del sector empresarial estatal se encuentra en un estado realmente vulnerable, y el 22,5% de esas empresas están en pérdidas, siendo las empresas municipales de comercio y las del sector agropecuario la mayoría de ellas? Parece un contrasentido que, ante esta realidad, se apruebe una resolución que crea un intermediario con ineficiencia demostrada.

Tampoco es posible pensar en la inversión extranjera. Los flujos de IED están muy lejos de ser los necesarios y mucho más cerca de Haití que de República Dominicana, lo cual es, al menos en buena parte, el costo de la confianza perdida.

El sector no estatal en su conjunto representa hoy el 44 % de las ventas minoristas y las mipymes son el 25 %. ¿Tiene el comercio estatal capacidad para suplir el déficit de oferta que todas estas resoluciones generarán? ¿Tendrá además ese comercio estatal la habilidad suficiente y la autonomía necesaria, así como los incentivos mínimos para encontrar los mejores proveedores?

Lo que he aprendido de los hechos, luego de observar pacientemente ese sector desde hace unos cuarenta años, es que tiene una demostrada capacidad para ser ineficiente. Ni siquiera en los tiempos de las “vacas gordas” de la ayuda soviética lo logró.

Cuba enfrenta hoy una coyuntura crítica, factores externos sobre los cuales no tenemos capacidad para influir y una multicrisis interna causada por errores, tanto en la adopción de políticas, como en la conducción de las mismas, así como en el momento de adoptarlas, conforman los rasgos esenciales de la misma.

La utilización indiscriminada del bloqueo inhumano al que las administraciones norteamericanas nos han condenado, como casi única explicación de nuestros problemas, ha reforzado la convicción de esas administraciones de que, incrementándolo, alcanzarán el objetivo de destruir nuestra independencia.

Construir confianza es indispensable si queremos salir exitosos de este reto. Destruirla con medidas que desconocen el momento histórico que vivimos y el que se nos aproxima, que convierte en enemigos a los que un día reconocimos como parte indisoluble de nuestra sociedad, es entregarnos mansamente, consciente o inconscientemente, a los propósitos e intereses de aquellos que desde hace seis décadas nos declararon sus enemigos.

La esperanza va de la mano de la confianza. Si la confianza está renga, la esperanza escasea. Venga la esperanza, sin ella no hay porvenir.