Por Delia Reyes García, Bohemia
julio 27, 2022
6:00 am
Desde hace algunos años la producción azucarera encendió bombillo rojo. Por ello, ha sido objeto de múltiples debates en la comisión Agroalimentaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular. No es para menos. Con la larga tradición cañera de Cuba no se entiende por qué cada vez fabricamos menos azúcar, y a simple vista, los cañaverales son diferentes a los de antaño. La dulce gramínea ya ni sabe tan dulce, ni destella con el mismo grosor.
Ante la clara evidencia, algunos achacan los bajos rendimientos agrícolas e industriales a la escualidez de la gramínea. Después de una década al frente del Instituto de Investigaciones de la Caña en Matanzas, Yosel Pérez Pérez, doctor en Ciencias Agrícolas, difiere de tal apreciación.
“Para obtener una variedad, en el proceso de mejoramiento genético, existen parámetros de rendimiento agrícola e industrial. Estos deben comprobarse antes de liberarla a los campos comerciales. La caña de azúcar es un cultivo muy resiliente, se adapta muy rápido al cambio. No importa la tecnología empleada.
“Desde el instituto hemos sido muy enfáticos en esto: la tecnología que tenemos en Cuba hay que utilizarla bien. Pero, ¿qué está sucediendo? Hay mucha inestabilidad e indisciplina tecnológica a la hora de la siembra. Si tiene una buena semilla, prepara adecuadamente la tierra y selecciona de manera correcta lo que va a sembrar, no tiene por qué haber variedades que no alcancen los diferentes parámetros de grosor, altura, etc.
“Las nuevas variedades se obtienen siempre en una estación experimental. Evidentemente, esta no se parece a un campo comercial. En la estación hay una estabilidad en la fertilización, en las labores agro-técnicas, un control permanente por parte de los investigadores.
“No obstante, creemos que el Grupo Azucarero AzCuba tiene condiciones para hacer lo mismo. Sus empresas azucareras están fortalecidas, cuentan con especialistas de la estación experimental, lo cual facilita llevar los resultados de la ciencia a esas entidades. Sin embargo, hemos identificado indisciplina tecnológica entre los productores de caña. Existen unidades muy buenas, y otras que no alcanzan los rendimientos requeridos”.
— ¿Son 35 toneladas por hectáreas?
—Sí, como como promedio. Hacia esas que quedan por debajo hay que enfocar el extensionismo agrario y los trabajos para la especialización de esos productores. Cuando visitamos una unidad productora con altos rendimientos, allí tienen parcelas demostrativas, un jardín de variedades, y un grupo de investigaciones dejadas por nosotros.
De la aplicación de los resultados científicos a la producción también depende la soberanía alimentaria de Cuba, afirma el doctor en Ciencias Agrícolas, Yosel Pérez Pérez. / Asamblea Nacional
“No sucede lo mismo cuando vas a una unidad con menos de 20 toneladas por hectáreas. O sea, independientemente de la labor del extensionista, que es importante, también el productor tiene que sentirse responsable de sus resultados, porque de lo contrario es casi imposible aplicar la ciencia.
“Los que tenemos la responsabilidad científica en el sector azucarero podemos recomendar, y dar muy buenos servicios, pero si el campesino no abre su horizonte cognitivo resulta difícil avanzar”.
— ¿Sólo las indisciplinas tecnológicas son las causantes del desplome de la producción azucarera en Cuba?
—Por supuesto que no. Después de estudiar diferentes publicaciones científicas, llegamos a la conclusión de que el 40 por ciento del incremento del rendimiento azucarero depende del hombre. Por ejemplo, en el municipio matancero de Calimete, todas las unidades son buenas. Esas reciben la misma atención que las ubicadas al sur de Matanzas. Cuando las comparas, tienen igual suelo, similares condiciones climáticas. Sin embargo, los resultados son diferentes. Unas alcanzan rentabilidad, distribuyen utilidades. Las otras, no.
“El promedio de rendimiento en el mundo hoy es de 73 toneladas por hectáreas. En Matanzas solo seis unidades productoras están iguales o por encima de esa cifra. Este es un parámetro importante. Entonces, si el extensionismo agrario que hacemos es para todos por igual, ¿por qué unas alcanzan mejores rendimientos?
“El Instituto de Investigaciones de la Caña de Matanzas -existe uno en cada provincia-, entrega una recomendación de los servicios científicos técnicos a todas las unidades productoras. Sobre la base del rendimiento hacemos los ajustes y explicamos, para crecer deben hacer esto y aquello.
“Es un proceso participativo, debatimos con ellos. Sin embargo, hay unidades productoras que avanzan más que otras. Quiere decir que no es un problema de extensionismo agrario”.
— ¿Es cuestión de dirección?
—Es una cuestión gerencial. Está demostrado. Hay dos unidades productoras de caña dentro de Cultivos Varios. Las divide solo una guardarraya. La de la izquierda tiene 20 toneladas por hectáreas, mientras la de la derecha, más de 70. Es evidente que se trata de un problema gerencial.
“Con independencia de esto, considero que a todos los productores de caña en el país hay que ponerles una medalla en el pecho porque están trabajando a pulmón limpio, sin recursos. Sin nada. Muchos presidentes de unidades productoras no tienen ni en qué moverse, y eso es un problema importante. ¿De qué manera van a resolver sus problemas, controlar la calidad, si no poseen ni un caballo?”
Dale caña…más caña
De los 36 centrales que participaron en la zafra anterior, solo una parte encenderá sus tachos en la venidera contienda. / Alejandro García/ Periódico Invasor
Las empresas de AzCuba arrastran una deuda de 2 100 millones de pesos a las bases productivas. Diariamente los campesinos deben pagar unos 110 000 pesos por intereses financieros a los bancos. Para la próxima zafra menos centrales participarán en la fabricación de azúcar.
—En tales circunstancias, ¿no es contradictorio exhortar a los campesinos a sembrar más?
—“No. Al contrario. Lo único que puede sacar del bache a una unidad productora es sembrar más caña. Mientras más siembre, más sostenible será. Eso está demostrado por diferentes variables económicas, y científicas.
“Ahora, con la decisión de acortar la cantidad centrales a moler, eso traerá dos consecuencias principales. La primera, vamos a ganar en calidad industrial. Algo que nos está faltando. La segunda, las unidades podrán administrar mejor su caña.
“No pasará nada negativo. Si los centrales de Matanzas no la muelen, lo harán los de otras provincias. En otras ocasiones hemos mandado materia prima para Cienfuegos. Cuba necesita tener una estabilidad industrial y también crecer en caña. En cantidad y en calidad”.
—En otros sectores de la agricultura existe déficit e inestabilidad de personal en los institutos de investigaciones, la reserva científica es insuficiente y el promedio de edad elevado. ¿No se supone que los resultados de la ciencia y los productivos deban ir parejos?
—Pero, en muchas ocasiones hay desavenencias. Por eso, sugerí revisar: ¿por qué en esos institutos, de Pastos y Forrajes, no hay una estabilidad del personal? Lo primero, ¿qué salario están recibiendo los investigadores?, ¿realmente es motivante para lo que hacen?
“Cuando hay envejecimiento del personal es porque no existe conexión adecuada con la universidad. ¿En dónde está el trabajo de capital humano de esos institutos? ¿Por qué anda desconectado de las universidades? Con esa conexión puede refrescarse el potencial científico. Son cuestiones que deben revisarse, de conjunto, el Ministerio de Educación Superior y la comisión Agroalimentaria.
“La realidad es la siguiente, para tener sostenibilidad en el azúcar, en la leche, o en la agricultura en sentido general, una buena parte, diría más del 80 por ciento, depende de los institutos de investigaciones. Debe existir por tanto un encadenamiento ahí fuerte. Entonces hay que mirarlo desde esa óptica. Los enfoques deben ser un poco más holísticos, generales a la hora de hacer los razonamientos”.
En la pasada zafra se planificaron unas 910 000 toneladas de azúcar, y a duras penas se logró un poquito más de la mitad. / Arelys Echavarría/ ACN
A juicio de Pérez Pérez, independientemente de que les asignen tareas y exijan un mejor trabajo extensionista, “a las instituciones científicas hay que atenderlas mejor.
“Por otra parte, al Instituto de Pastos y Forrajes le deben 4 200 millones de pesos por los servicios prestados. Es muy difícil tener una estabilidad en el personal científico cuando existe una incertidumbre con los salarios. Independientemente de que los resultados productivos no son nada halagüeños, ni en el caso del azúcar, ni en la ganadería, hay que ver lo que sucede con la ciencia.
“Un ejemplo hipotético, mañana puede desaparecer una empresa, una Unidad Empresarial de Base o una Cooperativa de Créditos y Servicios. Pero lo que sí no puede desaparecer es un instituto de investigación. Para formar a un investigador en Ciencias Agrícolas se necesitan entre 15 y 20 años. Si entra con 24 años, a los 44 es que está formado. Entonces no es tan fácil. Perderíamos un ciclo de variables de investigación, de conducta, de inteligencia, que después no podría recuperarse. Ese caudal no tiene precio”. HHC: Negritas y amarillo nuestros.
Comentario HHC: Cuanto quisiera leer mejores noticias sobre la producción de azúcar y sus derivados, pero no veo que pinte mucho mejor que la pasada zafra.
Lo dice claro, hay un problema de dirección ( en casi todas las ramas de la economía) , hay que capacitar a los que dirigen sino, no se avanzará. Y es muy importante elevar la producción de azúcar. ¿ Y el bagazo para las bioelectricas?
El nivel de las deudas son alarmantes y el gobieno central debe intervenir.
Curiosamente sabemos que con los incentivos salariales contra resultados y otros, se resuelven una parte importante de la escasez de fuerza de trabajo en cualquier sector, aunque lo ideal sería aplicacion de tecnología con maquinarias altamente productivas, en los diferentes procesos. En ocasiones son espontaneos como en el Turismo, asi conoci dependientes gastronómicos que eran ingenieros termonucleares graduados en Alemania, entre otras especialidades. ! Cuanto dinero invertido en formación!
He escuchado por otra parte, al Ministro de Economía Alejandro Gil, hablar que el personal indirecto alcanza niveles de mas del 45 % del fondo salarial de algunas entidades. Se debiera realizar un estudios de carga y capacidad ( OCT) y racionalizar las plazas" infladas", y con ese Fondo de Salario "ahorrrado", incentivar al productor directo, se pagar deudas, construir casas para los trbajadores, etc.
En la rama azucarera hay, según la ONEI , 47 800 trabajadores y tienen un fondo salarial anual de 2 110.3 millones de pesos.
En la agricultura hay 774 500 trabajadores (el que mas, de todos los sectores de la economía) con un fondo de salario anual de 31 153.5 millones de pesos.
La pregunta es ¿ Cuánto personal indirecto hay en ambos y cuales son sus gastos? Para que con los estudios, se pueda realizar dentro del sector la " resdistribución y/o saneamiento de finanzas". Y con el personal productivo mas. ¿ Cuál es la productividad del trabajo, y cuanto mas debemos lograr?. Ya vimos lo que se explica bien en el articulo, rendimientos diferentes en lugares colindantes, y no era por salario.
He leido que algo esta haciendo el MINAG en este sentido, pero no veo respuesta productiva, de AZCUBA en su sitio WEB de eso no se habla, lo que es de agradecer a la autora del articulo la información ofrecida.
P.D En los Hoteles hay por ejemplo un Manual de Operaciones Hotelera y hasta Normas ISO , que hay que cumplir para que se obtengan los objetivos, y cuando no se hace , seguro no se obtienen resultados esperados.
Me imagino por lo que dice el Dr. entrevistado del articulo que es igual en el azúcar, o no se cumple con lo establecido para que se obtengan buenos resultados, y no se organiza eficientemente todo el proceso productivo en algunos lugares. Lo seguro es que, las reservas son enormes.
Se ha planteado que “Es una cuestión gerencial. Está demostrado. Hay dos unidades productoras de caña dentro de Cultivos Varios. Las divide solo una guardarraya. La de la izquierda tiene 20 toneladas por hectáreas, mientras la de la derecha, más de 70. Es evidente que se trata de un problema gerencial.”
ResponderEliminarAl respecto ya el Ché había señalado en la carta a Fidel de marzo de 1965 “ nuestra práctica nos ha enseñado dos cosas para nosotros axiomáticas; un cuadro técnico bien situado puede hacer muchísimo más que todos los obreros de una fábrica y un cuadro de dirección colocado en una fábrica puede cambiar totalmente las características de ellas, ya sea en uno y otro sentido”
La formación gerencial ayuda a formar habilidades directivas, aun con los esfuerzos que se han realizado desde las universidades, no ha sido una prioridad para la gestión empresarial en nuestras condiciones, incluido para el sector cooperativo y privado. Se ha pretendido asumir que al tener la función de gestión, espontáneamente se dispone de habilidades de dirección empresarial, sin negar los casos en que existen personas con dotes personales para ello.
Otro problema central es que muchas veces las habilidades directivas empresariales, requieren que las entidades sean efectivamente empresas, y no los inventos organizacionales que le hemos llamado empresa, pero lo niegan por su esencia
De acuerdo a la experiencia internacional, las capacidades gerenciales se forman desde el punto de vista académico, reconociendo una carrera de Ciencias Empresariales, acompañado de maestrías y doctorados en esta dirección. Desde el punto de vista institucional existe para todos los actores productivos y en particular para emprendedores, mipymes y cooperativas, un entramado institucional de fomento y apoyo para el desarrollo de capacidades empresariales, como: Centro de desarrollo empresarial, Agencia de Fomento, capacitación y asistencia para emprendimientos empresariales y mipymes, Instituto de desarrollo cooperativo, Incubadoras de empresas, entre otras
Todo ello debe comprobarse en la práctica con los resultados de la gestión en una u otra entidad, y la permanencia de un u otro empresario dependerá de los resultados del desempeño en la competencia, así como en el aseguramiento de los objetivos de la entidad. De esta manera unos tendrán que ser sustituidos oportunamente como previsión de una futura quiebra empresarial, de forma tal que antes de que quiebre la empresa debe quebrar los directivos ineficientes, todo lo cual permitirá que el propietario sea estatal, privado o cooperativo; pueda proteger sus intereses ante los resultados de la gestión
No basta con aplicar decretos, resoluciones y medidas, si paralelamente no contamos con entidades diversas y de amplia participación democrática, que fomenten y ayuden a la implementación de lo aprobado, que no puede ser identificado con la función de regulación y control de los ministerios. Los órganos globales y sectoriales no pueden ser juez y parte de los procesos de emprendimiento empresarial sea empresa estatal, privada o cooperativa