Por Ranchuelo, en Villa Clara, y Aguada de Pasajeros, en Cienfuegos, continuó el ya habitual recorrido del Presidente Díaz-Canel por los municipios
29 de junio de 2024 00:06:45
Sobre el control de precios y el abastecimiento de los mercados dialogó Díaz-Canel en su visita a Aguada de Pasajeros. Foto: Modesto Gutiérrez Cabo
En una visita a fondo, realizada a Aguada de Pasajeros por la estructura auxiliar del Comité Central del Partido, a lo largo de tres jornadas, quedaron evidenciadas diversas problemáticas, y una de las más acuciantes resulta la insatisfacción general de la población ante los precios abusivos y especulativos de muchos de los productos ofertados hoy día.
No en balde, en el colofón del valioso examen al más occidental de los municipios de Cienfuegos, el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, hizo énfasis en la contradicción que lo anterior supone, habida cuenta de las potencialidades de Aguada y la observancia de indicadores de producción cumplidos en frentes principales, salvo en la leche y la carne.
Por tanto –sostuvo–, es preciso darle un vuelco inmediato a esta situación, así como a la falta de abastecimiento en mercados estatales. Lo segundo, en buena medida, determina lo primero, fenómeno al cual también tributan la falta de control y el no acertado funcionamiento de sistemas de trabajo a los que el mandatario llamó a fortalecer.
En el carácter abusivo y especulativo de los precios también inciden fenómenos nunca resueltos, antes bien agravados en la actualidad, como el de los intermediarios, figura traída a colación en el debate por la presidenta de la Asamblea Municipal del Poder Popular, Yudelkis de la Caridad Barreiro Rangel.
La consolidación de la Empresa Agropecuaria del territorio, unida a una mayor eficacia en la contratación, debe contribuir, a juicio de la Presidenta, al autoabastecimiento total de Aguada en arroz, viandas, carnes y leche.
El Jefe de Estado manifestó su certeza de que existen las condiciones necesarias para seguir obteniendo buenos resultados, como los que históricamente ha acostumbrado la provincia, y también este municipio. «Confiamos mucho en Cienfuegos», subrayó.
Es este un municipio en el cual se trabaja en la transformación de la política de cuadros, la unidad, la cohesión entre el pueblo y el sistema de instituciones, el perfeccionamiento de los programas arrocero y cañero-azucarero, la atención a los desvinculados (1 600, de los 8 200 existentes en la provincia, viven aquí y son mayoritariamente jóvenes), el mejoramiento de módulos pecuarios, organopónicos y autoconsumos, y el enfrentamiento al delito (sobresale el hurto y sacrificio de ganado mayor, con bajos índices de esclarecimiento).
El mandatario también visitó la Unidad Básica de Producción Cooperativa (UBPC) Vietnam, de la modalidad cañera, a cuyos directivos y trabajadores pidió mayores incrementos (32 toneladas por hectárea en la actualidad, contra rangos históricos cercanos o superiores a cien, como significó Carranza Valladares).
De acuerdo con lo explicado por su administrador, Luis Alfonso López, en el declive intervienen elementos como la falta de combustible, insumos y neumáticos; pero ello no es óbice para que la maquinaria y los hombres estén listos para continuar las siembras una vez cesen las lluvias registradas desde hace varios días.
Díaz-Canel no solo pidió plantar más caña en lo adelante, sino, además, se interesó por las condiciones de vida de los trabajadores –siembra de alimentos para ellos y sus familias, sueldo, repartición de utilidades–, antes de desplazarse hasta la cercana comunidad Primero de Mayo, comarca en la cual también prestó atención a las problemáticas puntuales, de cara a su transformación o solución.
En intercambio con los residentes del lugar, el Jefe de Estado destacó la relevancia del control popular en tanto mecanismo de supervisión para el funcionamiento de la comunidad, al tiempo que se interesó por temas de prioridad como el abasto del agua, la producción de alimentos, los precios y el comportamiento del empleo.
Otro efusivo intercambio con el pueblo sostuvo el mandatario, suscitado en el parque de Aguada, un diálogo honesto y sensible que fue muestra de la democracia existente en Cuba, pues no es algo usual en todos los contextos.
«SEGUIMOS ADELANTE, CONFIANDO EN USTEDES»
Acercar la ciencia al surco es prioridad para los especialistas y trabajadores del Instituto de Investigaciones de la Caña de Azúcar (Inica) de Villa Clara, un centro científico que cumple en septiembre próximo 40 años de fundado.
La entidad cuenta entre sus trabajadores con una masa científica de siete doctores en Ciencias, diez másteres, varios especialistas cursando maestrías y estudiantes universitarios que hacen sus prácticas en proyectos específicos que desarrolla la institución, y que deben seguir a lo largo de la carrera, hasta la elaboración de sus tesis finales.
Por el Inica, en el municipio de Ranchuelo, comenzó su recorrido ayer en la mañana el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, quien señaló que este es un lugar inspirador, aunque criticó que el enorme potencial de ciencia e innovación que aquí se atesora no sea aprovechado adecuadamente por el sistema cañero-azucarero.
El Inica villaclareño es la única institución de AzCuba que cuenta con una biofábrica para el fomento de semilla de caña mediante estas técnicas, fortaleza que también utilizan para la obtención de vitroplantas.
Los resultados de la entidad tienen que ser más aprovechados por AzCuba y la Agricultura, insistió Díaz-Canel, al intercambiar con líderes de proyectos de investigación. «Aquí todo lo que se ha logrado es importante, nada de lo que se ha obtenido aquí es desechable», enfatizó el Presidente.
La fábrica de cigarrillos Ramiro Lavandero Cruz, una de las industrias que desde hace más de un siglo es centro de la actividad económica del pueblo, fue el segundo punto del recorrido de Díaz-Canel por el municipio.
Detenida momentáneamente por dificultades en áreas de elaboración final, la factoría no detiene el alistamiento de la picadura, porque la materia prima no le ha faltado en lo que va de año.
La cigarrera de Ranchuelo ha logrado utilidades de forma sostenida, al punto de que paga, como promedio, 10 072 pesos mensuales por trabajador; un incentivo que, además del sentido de pertenencia de sus obreras y obreros, les ha permitido mantener una alta estabilidad laboral.
El Presidente recorrió cada lugar de una clásica construcción industrial de la tabaquería cubana, cuya cadena productiva empieza por el tercer piso, donde se prepara la hoja para la picadura, y termina en la planta baja, con las máquinas de envoltura. En varias áreas saludó y conversó con los obreros, a quienes exhortó a seguir trabajando para el bien propio, del municipio, de la provincia y del país.
La circunscripción No. 16 del consejo popular Ranchuelo-Jagua, comunidad en transformación, fue otro de los lugares visitados por el Jefe de Estado. En la Casa de Abuelos, en el que se atiende a 25 ancianas y ancianos del barrio, desde el inicio de la mañana hasta la caída de la tarde, conoció del trabajo que se realiza en una circunscripción con más de 200 personas de la tercera edad.
Era una barriada con dificultades sociales e infraestructurales; la reanimación ha permitido devolver vitalidad y estética a las dos bodegas, al consultorio médico, al centro de Salud Mental, entre otras intervenciones materiales.
Las acciones se han extendido a la incorporación de más de 30 jóvenes desvinculados del estudio o el trabajo; a la atención de una veintena de familias vulnerables, a la que se ha entregado recursos como sábanas, toallas, enseres; y a cinco madres solteras, con tres hijos o más.
La jornada de trabajo matutina concluyó con un crítico intercambio con cuadros del Partido, administrativos y otros dirigentes del municipio y la provincia.
Amplio fue el debate sobre los déficits presupuestarios municipales, y a la par de ello, o entre sus causas primeras, la evasión fiscal de actores económicos no estatales; los elevados precios; y la bancarización, la que no ha avanzado todo lo que se debe, explicó Díaz-Canel, al intercambiar más tarde con más de un centenar de ranchueleros que lo esperaban en el paseo que se levanta frente al Comité Municipal del Partido.
Discutimos, les informó, sobre la producción de alimentos y sobre cómo comercializarlos mejor, y así bajar los precios, lo que exige –reflexionó– mayor acopio estatal. También se analizaron problemas con el abasto de agua en el municipio, los viales, la vivienda, la producción de materiales de la construcción y otros asuntos que requieren de la intervención del municipio y la provincia, pero también de entidades y organismos nacionales, señaló. HHC: Negritas nuestras
Comentario HHC: Los efectos secundarios que se plantean, se pueden "atacar" para minimizarlos, pero la solución tiene varias acciones.
1- Producir, producir y producir.
2- Para producir hay que invertir en tecnologías eficientes, crear incentivos a la fuerza de trabajo y eventualmente contratarla. Además de analizar el uso de las tierras mas fertiles, por provincia y municipios.
3- Monitorear todo mediante indicadores de medidas, para corregir las desviaciones.
4- Pagar a tiempo y sin demora, los resultados productivos y evitar las perdidas de alimentos. Acopio debe modernizarse o desaparecer.
5- Eliminar el papel de la burocracia en los procesos productivos e implementar lo que cientificamente ha dado resultado en Cuba y en muchos países.
6- Fuente de financiamiento: Parte de los 1 800 a 2 000 millones de dólares que se dedican anualmente a importar alimentos. Producir esos mismos alimentos que importamos, pero en Cuba, de manera paulatina, hasta lo que logremos sustiruirlo por completo, con el complemento de inversiones extranjeras y esque ma de financiamientos en divisas cerrado, es decir lo que se logre exportar, por ejemplo en miel de abeja, reinvertirlo en ese rubro para modernizar y ampliar y estimular a los trabajadores.
Lo otro son paliativos temporales, y de lo que se trata es hacer autosustentables y sostenibles la producción de alimentos en Cuba para siempre.