Diseño regenerativo
En EE. UU., John T. Lyle comenzó a desarrollar ideas sobre diseño regenerativo que podían aplicarse a todos los sistemas, es decir, más allá de la agricultura, para la cual se había formulado anteriormente el concepto de regeneración. Podría decirse que puso las bases del marco de la economía circular, que se desarrolló especialmente y ganó notoriedad gracias a McDonough (que había estudiado con Lyle), Braungart y Stahel. En la actualidad, el Lyle Center for Regenerative Studies ofrece cursos sobre este tema.
Economía del rendimiento: En 1976, el arquitecto y economista Walter Stahel esbozó en su informe de investigación para la Comisión Europea The Potential for Substituting Manpower for Energy, escrito junto con Genevieve Reday, la visión de una economía en bucles (o economía circular) y su impacto en la creación de empleo, competitividad económica, ahorro de recursos y prevención de residuos. Acreditado por ser el inventor de la expresión «Cradle to Cradle» (de la cuna a la cuna) a finales de la década de los setenta, Stahel trabajó en el desarrollo de un enfoque de «bucle cerrado» para los procesos de producción y fundó el Product Life Institute en Ginebra hace más de 25 años.
Cradle to Cradle (de la cuna a la cuna): El químico y visionario alemán Michael Braungart desarrolló, junto con el arquitecto estadounidense Bill McDonough, el concepto Cradle to Cradle™ (de la cuna a la cuna) y su proceso de certificación. Esta filosofía de diseño considera todos los materiales empleados en los procesos industriales y comerciales como nutrientes, de los cuales hay dos categorías principales: los técnicos y biológicos. El marco Cradle To Cradle se centra en el diseño de la eficacia en lo relativo a los productos con un impacto positivo y la reducción de los impactos negativos del comercio mediante la eficiencia.
El diseño Cradle to Cradle percibe los procesos seguros y productivos del «metabolismo biológico» de la naturaleza como modelo para desarrollar un flujo de «metabolismo técnico» de materiales industriales. Los componentes de los productos pueden diseñarse para su continua recuperación y reutilización como nutrientes biológicos y técnicos en esos metabolismos. El marco Cradle to Cradle aborda también insumos de energía y agua.
• Elimina el concepto de residuos. «Los residuos equivalen a alimentos». Diseñar productos y materiales con ciclos de vida que sean seguros para la salud humana y el medio ambiente y que puedan reutilizarse perpetuamente a través de metabolismos biológicos y técnicos. Crear y participar en sistemas para recoger y recuperar el valor de esos materiales tras su uso.
• Hacer uso de la energía renovable. «Aprovechar la energía del sol». Maximizar el uso de la energía renovable.
• «Celebrar la diversidad». Gestionar el uso del agua para maximizar la calidad, promover ecosistemas saludables y respetar los efectos a nivel local. Orientar las operaciones y las relaciones con las partes interesadas mediante la responsabilidad social.
Ecología industrial: «La ecología industrial es el estudio de los flujos de materiales y de la energía a través de sistemas industriales». Centrándose en las conexiones entre los operadores dentro del ecosistema industrial, este enfoque tiene como objetivo crear procesos de circuito cerrado en el que los residuos sirven de entrada para otro proceso, eliminando la noción de un subproducto no aprovechable.
La ecología industrial adopta un punto de vista sistémico, diseñando los procesos de producción atendiendo a las restricciones ecológicas, mientras mira su impacto global desde el principio, y trata de darles forma para que se puedan realizar lo más cerca posible de los sistemas vivos. A este marco de trabajo se le denomina a veces «ciencia de la sostenibilidad», por su carácter interdisciplinario y porque sus principios pueden aplicarse también en el sector de los servicios. Con un énfasis en la restauración del capital natural, la ecología industrial también se centra en el bienestar social.
Lea el artículo de los profesores Clift y Allwood acerca de la ecología industrial aquí
Biomímesis : Janine Benyus, autora de Biomímesis: Cómo la ciencia innova inspirándose en la naturaleza, define su enfoque como «una nueva disciplina que estudia las mejores ideas de la naturaleza y luego imita estos diseños y procesos para resolver problemas humanos». Por ejemplo, estudiar una hoja para diseñar una célula fotovoltaica. Piensa que la biomímesis «es la innovación inspirada por la Naturaleza». La biomímesis se basa en tres principios fundamentales:
• La Naturaleza como modelo: modelos de estudio de la Naturaleza y emular estas formas, procesos, sistemas y estrategias para resolver los problemas humanos.
• La Naturaleza como medida: utilizar un estándar ecológico para juzgar la sostenibilidad de nuestras innovaciones.• La Naturaleza como mentor: ver y valorar que la Naturaleza no se basa en lo que podemos extraer de ella, sino en lo que podemos aprender del mundo natural.
Economía azul: Impulsada por Gunter Pauli, empresario belga y anteriormente Director Ejecutivo de Ecover, la Economía azul es un movimiento de código abierto que reúne una serie de casos prácticos recopilados inicialmente en un informe del mismo nombre entregado al Club de Roma. Como dice el manifiesto oficial, «utilizando los recursos disponibles en los sistemas en cascada, (…) los residuos de un producto se convierten en la entrada para crear un nuevo flujo de caja».
Basada en 21 principios fundacionales, la Economía azul insiste en soluciones que están determinadas por su entorno local y las características físicas y ecológicas, haciendo hincapié en la gravedad como principal fuente de energía. El informe, que sirve también como manifiesto del movimiento, describe las «100 innovaciones que pueden crear 100 millones de empleos en los próximos diez años» y ofrece muchos ejemplos de proyectos colaborativos ganadores Sur-Sur, otra característica original de la intención de este planteamiento de promover su enfoque práctico.
Capitalismo natural : El “capital natural” se refiere a las reservas mundiales de activos naturales, incluidos el suelo, el aire, el agua y todos los seres vivos. En su libro Natural Capitalism: Creating the Next Industrial Revolution, Paul Hawken, Amory Lovins y L. Hunter Lovins describen un economía en la que los intereses empresariales y ambientales se superponen, reconociendo las interdependencias que existen entre la producción y el uso del capital hecho por el hombre y los flujos de capital natural.
Los siguientes cuatro principios son la base del capitalismo natural:
Incrementar radicalmente la productividad de los recursos naturales - A través de cambios radicales en el diseño, la producción y la tecnología, los recursos naturales podrían durar mucho más de lo que lo hacen actualmente. El ahorro resultante en términos de costos, inversión de capital y tiempo, ayudará a implementar los otros principios.
Cambiar a modelos y materiales de producción inspirados biológicamente - El capitalismo natural busca eliminar el concepto de desperdicio al modelar sistemas de producción de ciclo cerrado en diseños basados en la naturaleza, donde cada producto se devuelve inocuo al ecosistema como un nutriente o se convierte en insumo para otro proceso de manufactura.
Avanzar hacia un modelo de negocio basado en “servicio y flujo” - Brindar valor a partir de un flujo continuo de servicios en lugar del modelo tradicional de venta de bienes, ayuda a alinear los intereses de los proveedores clientes de una manera que recompensa la productividad de los recursos.
Reinvertir en el capital natural - A medida que aumentan las necesidades humanas y la presión sobre el capital natural, incrementa la necesidad de restaurar y regenerar los recursos naturales.
Mediante su trabajo con organizaciones que están haciendo la transición hacia una economía circular y mediante un análisis de estudios de caso, la Fundación identificó cuatro bloques fundamentales para una economía circular.
1. Diseño de economía circular
Empresas necesitan desarrollar competencias de diseño circular para facilitar el reuso, el reciclaje y el aprovechamiento de productos en múltiples ciclos. El diseño de productos (y procesos) circulares requiere habilidades, conjunto de informaciones y métodos de trabajo avanzados. Importantes áreas para el diseño circular económicamente atractivo incluyen: selección de materiales, componentes estandarizados, productos diseñados para que sean durables y que se facilite el reparo o la reutilización de productos y materiales, y criterios de diseño para fabricación que consideren posibles aplicaciones de coproductos y residuos.
Explore el Circular Design Guide (Guía de Diseño Circular) desarrollado en colaboración con IDEO, que ofrece metodologías de innovación circular además de entrevistas con diseñadores, ejercicios de creación, estudios de casos y enlaces para herramientas técnicas.
2. Nuevos modelos de negocio
La transición hacia una economía circular requiere modelos de negocio innovadores que sustituyan los existentes o ayuden a encontrar nuevas oportunidades. Empresas que detienen una parte significativa del mercado y que tienen la capacidad de activación en varias fases verticales de la cadena de valor lineal pueden desempeñar un rol importante en la innovación de economía circular, además de convertir la circularidad en algo común mediante el aprovechamiento de su escala e integración vertical. Aunque se espere varios modelos, materiales y nuevos productos de emprendedores, estas marcas y estos líderes en volumen también pueden desarrollar un rol fundamental. Modelos de negocio e iniciativas rentables de economía circular pueden inspirar otros actores y ser copiados y expandidos geográficamente.
3. Ciclos reversos
Habilidades adicionales o mismo nuevas serán necesarias para el aprovechamiento en varios ciclos y el retorno final de los materiales al suelo o al sistema de producción industrial. Esto involucra logística de la cadena de entregas, selección, almacenamiento, gestión de riesgos, generación de energía, e incluso biología molecular y química orgánica de polímeros.
Con una recolección e mejores y menos costosos sistemas de tratamiento, y con la segmentación efectiva de los productos en su fin de vida útil, se reduce el escape de materiales para fuera del sistema y refuerza los aspectos económicos del diseño circular.
4. Condiciones facilitadoras y condiciones sistémicas favorables
Para que la reutilización de materiales y una productividad mayor de recursos se conviertan en algo común, mecanismos del mercado deberán desempeñar un rol central, con el apoyo de políticas públicas, instituciones de enseñanza y líderes de opinión. Esas condiciones facilitadores incluyen:
- Colaboración
- Reformulación de incentivos
- Establecimiento de reglas ambientales e internacionales adecuadas
- Liderazgo por el ejemplo provocando un aumento rápido
- Acceso a financiamiento
( Elementos Básicos de la Economia Circular)
"Los principios de la economía circular deben de aplicarse al agua, con el fin de lograr una gestión sostenible, la reutilización del agua, requiere acción legislativa sobre requisitos mínimos del agua reutilizada, su consideración en el ciclo integral disminuirá la explotación de acuíferos, y contribuirá a aminorar la huella hídrica. También se necesitan nuevas reglamentaciones para la recuperación de subproductos de las aguas residuales. La legislación es escasa sobre las normas de calidad para estos productos, lo que fomenta la incertidumbre. Se impone por otra parte la exigencia previa de Estudios de Impacto Ambiental de las nuevas y ya existentes actividades económicas que se desarrollan, desarrollar conceptos como los “derechos de agua consuntivos”, relacionados con el compromiso por parte del usuario de devolver un caudal al río." (1)
ResponderEliminar(1)https://derehoambiental.wordpress.com/2020/07/14/gestion-cooperativa-y-capital-social-para-el-agua/