La Habana, 31 oct (AIN) Aunque los resultados de la VII evaluación nacional al Programa de producción local y venta de materiales de la construcción se mostraron discretos, esa actividad continúa dando pasos a fin de sustentar la construcción de viviendas por esfuerzo propio.
   Esta comprobación, efectuada desde el primero de septiembre hasta el 15 de octubre último, llegó a todas las provincias y municipios del país, según informó Aida Cabrera, especialista principal del programa, rectorado por el Ministerio de la Construcción.        
   Las acciones de control se enfocaron fundamentalmente hacia los niveles productivos, así como también la calidad y cantidad de los surtidos elaborados en los territorios según la disponibilidad de materias primas locales -naturales y recicladas- y las suministradas por la provincia y la industria nacional de materiales de la construcción.
   Se conoció que los mejores resultados lo merecieron Santiago de Cuba, Las Tunas, Ciego de Ávila, Villa Clara y Matanzas, en tanto el Municipio Especial de Isla de la Juventud fue el más rezagado y el resto de las provincias fueron evaluadas de regular.
   A tono con Cabrera, durante la recién finalizada evaluación se constataron trabas en la comercialización de los surtidos en las tiendas del Comercio Interior -donde se expenden los productos a precios locales- aunque se impulsan acciones orientadas a la venta en origen para abaratar el costo de los materiales por concepto de transportación.
   En ese sentido, señaló la necesidad de realizar una mayor promoción a esas producciones locales, en busca de que tengan mejor aceptación por la población, labor en la que también pueden influir los Arquitectos de la Comunidad.
   Alejandro Sánchez, especialista del Programa, resaltó la positiva alianza entre empresas estatales con el sector cuentapropista y cooperativas de producción no agropecuaria, que han incluido entre sus líneas de desarrollo la producción local de materiales.
   No obstante, enfatizó que resulta vital estudiar las materias primas con las que cuentan los territorios, pues muchos municipios y provincias conocen bien sus recursos naturales, pero obvian los reciclables a partir de los desechos industriales.
   Sánchez agregó que como parte de la comprobación se analizaron, además, los planes de producción e inversiones para equipamientos correspondientes a 2016.
   En ese sentido, adelantó que el próximo año la industria nacional prevé entregar al programa cerca de 130 mil toneladas de cemento, 37 millones de bloques y 19 mil elementos de techo (cubiertas sólidas) para viviendas, además de molinos, bloqueras y hormigoneras para apoyar la creación de capacidades en las provincias.
   El Programa de producción local y venta de materiales está llamado a dinamizar y fomentar el proceso de construcción de viviendas por esfuerzo propio y de personas beneficiadas por los subsidios, además de ser fuente de abastecimiento para las inversiones, reparaciones y mantenimiento de instalaciones sociales en los territorios.
   A sus 118 surtidos, entre los que sobresalen elementos de pared, cubiertas ligeras y pisos, se suman en la actualidad 16 renglones destinados al Programa de Ahorro de Agua y otros 12 productos menores, como bisagras y rejillas de piso.