Economía
Ilén DipotéTrabajadores de la industria conservera de Ciego de Ávila garantizan que el país sustituya importaciones con el aporte de sus productos a los mercados en divisa y consumo social, e incremente sus renglones exportables.
Rodajas y segmentos de piña, cascos de guayaba y mermeladas, vita nuova, salsa para pizzas y tomate frito, están entre los alimentos que se elaboran en las dos fábricas de la Unidad Empresarial de Base Conservas Ciego de Ávila, y contribuyen a que Cuba no desembolse dinero en su adquisición fuera de fronteras, precisó a la Agencia Cubana de Noticias Nohemí Iglesias Falcón, directora de la entidad.
También se incluyen el comino, bijol, todo sazón, laurel, orégano, muy demandados en la red de tiendas del Comercio Interior y las recaudadoras de divisas.
7En los meses venideros incorporaremos las tajadas de mango, los frijoles blanco, negro y colorado, maíz, garbanzos, pimiento morrón y vita nuova, este último producto de los que se envasan por el sistema conocido como doypack, en la industria ubicada en el municipio de Majagua, donde fue montada una nueva tecnología que está en fase de pruebas”, explicó Iglesias Falcón.
“Este año la presencia de mercancías elaboradas con tomate y piña ha estado limitada por problemas con la adquisición de la hojalata y cosechas menos bondadosas comparadas con el año anterior.
“No obstante, buscamos alternativas, y, a granel, en botellas o garrafas, se han vendido salsa y puré de tomate, aunque no todo lo que se quiere y necesita la población”, puntualizó.
“Para la comercialización en el exterior entregamos a la Empresa Nacional de Conservas las rodajas, segmentos, concentrado de piña y de mango, pero en 2020 adicionaremos el pimiento morrón”, agregó la directiva.
Con el objetivo de garantizar el fomento del programa de sustitución de importaciones y el incremento de las exportaciones con productos de mejor calidad, la industria conservera cubana compró, para la fábrica de Majagua, una línea aséptica con 30 por ciento de concentración de jugos de mango, guayaba y tomate.
Esta línea contiene áreas de lavado, selección, deshuese de la fruta y el vegetal, repasadores, concentradores, pasteurizadores, llenado aséptico y torre de enfriamiento, dijo Jorge González Armas, jefe del colectivo, caracterizado en Cuba por sus eficientes campañas de procesamiento del tomate.
Agregó que la capacidad productiva de la tecnología, en 24 horas, es de 300 toneladas de tomate, 150 de mango y 100 de guayaba.
Contiene, además, un sistema de elaboración y llenado del producto a partir de las pulpas, conocido por doypack, en bolsas de medio kilogramo, un kilogramo y tres kilogramos, señaló González Armas.
En su intervención, el 11 de julio último, ante los diputados al Parlamento Cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, recalcó que donde debe mirarse primero, ante cada necesidad del país, es hacia la industria nacional, antes de pensar en importar.
“Independientemente del desarrollo del turismo —expresó el mandatario cubano— hay que lograr un crecimiento en los sectores agroindustrial y manufacturero, en busca de un aporte superior al Producto Interno Bruto (PIB) y que puedan ofrecer mercancías requeridas por la población.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario