La finca santiaguera produce al año mil toneladas de carne de cerdo, 230 de pollo y otras como conejo
SANTIAGO DE CUBA.-Enclavada en la irregular topografía que comprende la falda sureña del lomerío de la Gran Piedra, y carente de abundantes fuentes de agua, la finca La Fortaleza debe su nombre a las manos laboriosas y al espíritu emprendedor de Aida Dolz Mariño, una mujer llegada allí con su familia, desde esta ciudad, hace 25 años.
Si bien en la improvisada oficina, su hijo Ciro Verdecia conserva el título de graduado en Medicina, el otro doctorado ha sido el apego a estas tierras que, indirectamente, inculcó en la madre, al proponerle la compra de los 500 pollitos criados en la azotea de la casa, los cuales, en pleno periodo especial, ayudaron al sustento familiar y a que, como Mariana de estos tiempos, ella sumara a todos en este empeño.
De lo que fuera entonces poco más de una hectárea recibida en usufructo, hoy suman 44 las que integran la finca que recorrió, en la más reciente visita a la provincia, el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, para afirmar con admiración que sus resultados constituyen un ejemplo de programa de desarrollo local digno de generalizar en la nación.
Sobre ese encuentro, Aida Dolz comentó a Granma que ha contribuido a multiplicar su amor y el agradecimiento por la Revolución, mientras que su hijo Ciro Verdecia, quien acompañara al Jefe de Estado, refiere que fue un sueño hecho realidad, porque sintió muy dentro el valor del trabajo desplegado y el sentimiento de que los productores agropecuarios cuentan para la dirección del país.
«Siempre había deseado –afirmó–, que él y Raúl vieran lo que hacemos como aporte a la Revolución, y realmente no sabíamos que vendría; de ahí que esto fue como un milagro pedido a gritos, ante el cual yo me preguntaba: ¿y ahora qué le digo?; pero tan pronto lo tuve delante, con su amabilidad y sencillez, fue como un intercambio entre viejos conocidos».
LA FORTALEZA POR DENTRO
Como conociera el mandatario cubano, distingue a la finca todo un sistema productivo integrado por eficientes programas que funcionan entre sí y tienen de líder, por su magnitud productiva, al porcino, seguido de cerca por la avicultura, la cunicultura y la ceba de toros, a los cuales se añaden el cultivo de alimentos humanos, plantas proteicas para animales, y plantas medicinales.
Para las mil toneladas de carne de cerdo en óptimas condiciones comprometidas anualmente, cuentan con capacidad en naves para 4 500 precebas y la posibilidad de realizar 2,2 ciclos productivos, cuya primera entrega se efectúa a través de la selección de animales que, a los cuatro meses, alcanzan de cien a 110 kilogramos de peso, y de inmediato son sustituidos por precebas.
Disciplina y rigor en el manejo resultan esenciales para el jefe de nave Alexiuber Barroso Barroso, en la atención de sus 365 animales. De lo contrario, poco pueden aprovechar la tecnología de alimentos compuestos por vitaminas, minerales, miel, soya y forraje basado en chopo de plátano y plantas proteicas como la moringa, la morera y la tithonia.
Sobre la cría de pollos, que empezó con medio millar, y asciende hoy a 15 000, Ciro Verdecia precisa que actualmente se trata del principal programa en desarrollo, mediante la construcción de dos nuevas naves que elevan la capacidad instalada a 20 000 aves, bajo una tecnología moderna que permite realizar cinco ciclos productivos al año.
Partiendo del efectivo empleo de un crédito bancario, comprende instalaciones dotadas de nebulizadores y ventiladores que refrescan la temperatura ambiente, de una óptima iluminación mediante lámparas led, comederos y bebederos automatizados, higiene extrema, y protección en los laterales contra el mal tiempo, que, en conjunto, contrarrestan el posible estrés de las aves.
Al igual que las demás producciones, la venta de esa carne está destinada al Estado, y para el venidero año proyectan introducir el ciclo cerrado desde la obtención del huevo, incubación, ceba del ave, sacrificio, empaque y congelación del producto en la misma finca, cuya calidad será asegurada por una tecnología de avanzada y la capacitación del personal asignado.
Confiados en la posibilidad de la soberanía alimentaria, la crianza de conejos cuenta ya con 400 reproductoras y suma cuatro toneladas de carne entregadas este año, a la vez que, desde hace unos meses, fue incorporada la ceba de toros semiestabulada, en un rancho con capacidad para 120 vacunos que en la dieta incluyen plantas proteicas.
EL TRABAJO COMO CRÉDITO
«Todo –dijo Ciro Verdecia–, se ha ido logrando en interés de apoyar al país en sus prioridades, y cuando se parte de cero nada es fácil, se cometen errores, y lo mejor es trabajar fuerte para que cuando acudas a quienes tienen mejores experiencias, y a las instituciones de la ciencia y la técnica, confíen en que su cooperación no será en vano».
Bajo esa premisa, los 123 trabajadores fijos y cerca de 20 concurrentes, en su mayoría de la zona, comparten la tecnología y prácticas agroecológicas implantadas, la cultura organizacional, las técnicas agroecológicas y la defensa del medioambiente mediante el uso y manejo adecuado de los residuales, la reforestación y los sistemas de drenaje.
De igual manera, convenios establecidos con la Universidad de Oriente e instituciones científicas del Ministerio de la Agricultura, cooperan en proyectos para la generación de energía renovable, el reciclaje del agua, estudio de los suelos, cruces genéticos, producción de biofertilizantes, y empleo de cuanta tecnología de avanzada sea posible.
«Sobre todos estos temas –planteó Ciro Verdecia–, estamos abiertos al intercambio con estructuras estatales y productores, pues así lo hicimos saber al compañero Díaz-Canel cuando dijo que nuestro pedacito de tierra es, también, el país, a la vez que le pedimos que confiara en nosotros cualquier tarea que desee transmitirnos sin importar su complejidad.
«Escucharle decir que aplicar nuestra experiencia contribuye, con el problema partido en pedacitos, a encontrar soluciones más rápido, es expresión del reconocimiento al aporte de los productores que, en nuestro caso, con su maravillosa visita nos sentimos más comprometidos a seguir aportando alimentos para el pueblo».
INDICACIONES DEL PRESIDENTE
Es una experiencia de las que hay que aplicar de inmediato. Cuando uno ve la sabiduría, lo que hay en esa finca en muchos años de trabajo, las conquistas que ellos han logrado con un pensamiento muy enfocado en cómo gestionar y cómo aprovechar, de la manera más eficiente, la tierra, lo primero que uno se pregunta es: bueno, ¿por qué si tenemos la experiencia de cómo hacer las cosas bien, no somos capaces de multiplicar con más rapidez estas experiencias?
Ahí hay un ejemplo de cultura organizacional, de gestión, de innovación. Tienen vínculo con la Universidad (de Oriente) y con casi todos los centros científicos de las Ciencias Agropecuarias del país. Por ahí ha pasado todo el mundo, y tienen montadas, con casi todos, experiencias de innovación.
Las cosas que uno ha criticado en otros lugares aquí funcionan bien, han podido usar el crédito bancario con financiamiento cubano, aquí no hay proyecto de cooperación internacional, no. Han logrado lo mismo que nosotros hemos visto en otros proyectos que son de cooperación internacional.
Eso por sí solo es un proyecto de desarrollo local, ahí hay desarrollo de tecnología, ahí hay trabajo en función de una de las prioridades del país, ahí se le da empleo a la gente de la zona, ahí hay desarrollo sostenible porque ellos también tienen esa cultura de sostenibilidad para no dañar el medioambiente.
Eso es un sistema productivo local que generó oportunidades de empleo para ciento y tantas personas que tienen una perspectiva de desarrollo en sus vidas, y sus proyectos de vida coinciden con los de ese programa de desarrollo.
Producen al año mil toneladas de carne de cerdo, 230 toneladas de pollo y otras toneladas de diferentes carnes como conejo. Vamos a detenernos en el cerdo. Vamos a redondear 200 000 toneladas en el país. Con 200 productores como estos se resuelve el problema en el país. Vamos a más, vamos a duplicar eso, con 400 productores de cerdo como estos se resuelven los problemas del país. Entonces, ¿qué tenemos que hacer ahora? Identificar en el país cómo llegamos a esos 400 productores que tienen esas potencialidades.
Hay que hacerlo con la carne de cerdo, de aves, en cada uno de los renglones, con los que producen cultivos varios, y vamos a sacar las proporciones, y que todos los otros aporten más. Eso es partir el problema en pedacitos, y darnos cuenta entonces cómo, de una manera más eficiente, nosotros podemos lograr mejores resultados
Resulta paradójico, una empresa estatal con mayores recursos y muchas veces subvencionada no logra el resultado de estos emprendedores, que marca la diferencia? La propiedad, la libertad, la entrega...
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