En Cuba, actualmente se está apreciando una situación en la que los bancos tienen cada vez menos liquidez debido a que el estado vende poco (porque produce poco y tiene poca capacidad de compra para importar) y el dinero circula entre vendedores privados que no guardan su dinero en los bancos.
Esta falta de circulación del dinero en los bancos puede tener consecuencias negativas para la economía del país y para la población en general. Por ejemplo, los bancos pueden tener dificultades para otorgar créditos a las empresas y a los particulares, lo que puede limitar el crecimiento económico y la inversión en el país.
Además, la falta de dinero en los bancos también puede afectar a la población en general, ya que puede ser más difícil para las personas cobrar sus salarios sin retrasos y, a pesar de muchos reciben sus pagos a través las tarjetas magnéticas, estos también se afectan por la inexistencia de efectivo en los cajeros automáticos en muchas ocasiones.
Es importante que se tomen medidas para fomentar la circulación del dinero en los bancos y para promover el uso de servicios financieros formales en Cuba. Esto puede incluir políticas y programas que incentiven a los vendedores privados a guardar su dinero en los bancos y a promover el uso de servicios financieros formales entre la población en general.
La situación actual es un problema que debe ser abordado de manera urgente para garantizar el crecimiento económico y el acceso a servicios financieros para la población.
Existen varias políticas y programas que podrían incentivar a los vendedores privados a guardar su dinero en los bancos en Cuba, algunas de ellas son:
1. Tasas de interés atractivas: Los bancos podrían ofrecer tasas de interés más atractivas para los depósitos a largo plazo, para incentivar a los vendedores privados a guardar su dinero en los bancos en lugar de mantenerlo en efectivo.
2. Promoción de servicios financieros: Los bancos podrían llevar a cabo campañas publicitarias y programas de educación financiera para promover el uso de servicios financieros formales y fomentar la cultura del ahorro y la inversión.
3. Reducción de cargos bancarios: Los bancos podrían reducir o eliminar algunos de los cargos asociados a los servicios financieros, como por ejemplo las comisiones por transferencias electrónicas, para hacerlos más atractivos para los vendedores privados y la población en general.
4. Incentivos fiscales: El gobierno podría ofrecer incentivos fiscales a los vendedores privados que depositen su dinero en los bancos, como deducciones fiscales o la exención de impuestos sobre los intereses generados por los depósitos.
5. Mayor seguridad de liquidez bancaria: Los bancos podrían mejorar su estrategia de seguridad y protección de los depósitos para garantizar la confianza de los vendedores privados y la población en general con relación a su acceso al sistema financiero formal.
Pero para lograr lo anterior, primeramente, el estado tiene que jugar el papel que le corresponde (cumplir sus promesas, incrementar las producciones, eliminar el déficit de medicamentos y controlar precios, entre muchas) y así construir una estrategia para eliminar la estanflación.
El problema es que aquí la banca no es independiente del estado, no puede establecer políticas monetarias que incentiven eficiencia y crecimiento. Para tomar decisiones depende de "La piñita" de burócratas que ponen por encima sus "intereses ideológicos" en beneficio propio antes que los intereses del pueblo cubano.
ResponderEliminarEn fin, la culpa la tiene el imperialismo.