Escrito por Moisés González Yero Foto: Eric YanesCategoría: Ciencia
Con la relativa reanimación de las lluvias durante los últimos tres meses, las presas de la provincia de Ciego de Ávila han ido saliendo del estado crítico de llenado como resultado de la prolongada sequía, y cuando cierra noviembre ya acogen 68,3 millones de metros cúbicos de agua, el 45,8 por ciento del volumen posible.
De acuerdo con la información ofrecida por Silvia Hernández Hernández, especialista de la Delegación de Recursos Hidráulicos, al cierre de agosto los embalses construidos por el hombre solo se hallaban al 13,0 ciento de la capacidad total, en septiembre subieron al 32,0 y en octubre al 41,0.
Cotas alcanzadas porque las precipitaciones rondaron la lámina histórica, durante el noveno mes, al 91,0 por ciento, en el décimo al 103, y en el que está por concluir —cuando inicia el período de sequía— han caído 122,0 milímetros como promedio, equivalentes al 197,7.
En noviembre los municipios más favorecidos por la humedad son Morón, Bolivia, Chambas y Majagua, y el menos beneficiado es Florencia, precisamente donde se encuentran las mayores presas que forman el Hidroconjunto, el cual con 40,5 millones de metros cúbicos anda a mitad de llenado.
El otro embalse con un tamaño significativo, Puente Largo, ubicado en los límites entre Morón y Bolivia, tiene ocupado el 58,5 por ciento; mientras los niveles más bajos corresponden a los de El Calvario, situado en Chambas; Sabanas Nuevas, cercana a la localidad de Gaspar; y Las Margaritas, en el poblado de Jicotea.
Las dos lagunas principales: La Leche y La Redonda, perteneciente a Morón, se hallan en el volumen máximo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario