Santa Clara, 7 jul (AIN) Mayor acción legal y enfrentamiento popular exigen las ilegalidades detectadas en obras hidráulicas de Villa Clara, como roturas de registros y otros elementos de la conductora de Cerro Calvo, terminada hace un año, a un costo de dos millones 800 mil pesos.
La inversión tuvo por objetivo garantizar el trasvase de agua desde el embalse Palmarito, hacia esta ciudad, en momentos de sequía como los actuales.
Recientes pruebas en el sistema permitieron detectar fallas provocadas por infracciones e indisciplinas, como conexiones clandestinas a los conductos y redes de distribución de agua, que se emplean para el riego de parcelas particulares, lavado de animales y autos .
Ricardo Rodríguez Leiva, subdelegado de inspección estatal de la delegación provincial de Recursos Hidráulicos, confirmó a la prensa que en recorridos por el territorio fue posible detectar estos graves daños al sistema, los cuales afectan el ya deteriorado suministro del líquido a la ciudad.
A pesar de los esfuerzos de la delegación de Recursos Hidráulicos de Villa Clara para enfrentar estos hechos vandálicos, resulta difícil la custodia permanente de 75 kilómetros de conductoras, desde las presas hacia la urbe, además de los envases construidos en el resto de los municipios, acotó.
Rodríguez agregó que se aplican multas de hasta de 200 pesos, lo que a su juicio resulta insuficiente para detener el uso ilegal del agua, por lo cual recabó la participación de toda la sociedad en la eliminación de esas violaciones.
Significó que cada año crece el monto de las inversiones para mejorar el abastecimiento a los ciudadanos, pero las ilegalidades retardan y encarecen el futuro servicio regular del líquido que tanto necesita la población.
Para Emilio Milián, jubilado de Santa Clara, los hechos contra la infraestructura hidráulica conciernen directamente a los ciudadanos, quienes padecen las carencias de agua y las afectaciones higiénicas y epidemiológicas que esa situación provoca.
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