La publicación del artículo “Conjurar la inflación: lo esencial de una política integral (la
oferta, la demanda y la política monetaria)*, de los destacados economistas
Luis Gutiérrez Urdaneta y Julio Carranza Valdés, me ha motivado a formular
algunas consideraciones sobre el tema por ellos abordado.
En todo caso, al considerar cambios en el modelo de
dirección y la política económica de Cuba siempre hay que tener muy en cuenta
los efectos negativos del bloqueo impuesto por el gobierno norteamericano
contra la Isla que ya dura mas de 60 años, recrudecido con 243 medidas
implantadas por la administración de Donald Trump y mantenidas por el actual inquilino
de la Casa Blanca, Joseph Biden. A ello hay que sumar los efectos de la
pandemia de la COVID-19 durante los últimos dos años, sus secuelas posteriores
y, ahora, las provocaciones de los Estados Unidos y la OTAN con el objetivo de
debilitar a Rusia, lo cual se manifiesta en las acciones militares en Ucrania, que
han creado turbulencias en la economía internacional y en la geopolítica mundial.
A pesar de todo ello, es urgente conjurar la actual
inflación presente en la economía cubana que afecta especialmente a las
personas de menores ingresos monetarios. No es posible esperar a que el bloqueo
se debilite y se forme un clima de paz en las relaciones internacionales para,
entonces, diseñar y aplicar un programa antiinflacionario en el país.
Teniendo esto en cuenta y con vistas a detener la
inflación y revertirla, considero que entre las medidas a decidir de inmediato
con este propósito pudieran incluirse las siguientes:
- Incrementar anualmente las
jubilaciones, el salario mínimo y las prestaciones a la asistencia social en la
misma tasa de la inflación del año anterior y establecer otras medidas
compensatorias de protección social, lo que aliviaría la situación de las
personas de menores ingresos;
- mantener por tiempo
indefinido la autorización de la importación no comercial de artículos de
alimentación, aseo y medicinas, sin límites de cantidades y sin cobro de
aranceles, lo que aumentaría la oferta de productos y el consumo de la ciudadanía;
- autorizar las importaciones
comerciales que realizan las personas naturales y que hoy se consideran
ilegales, aplicándoles bajos aranceles, que redundaría también a favor de la
oferta;
- incrementar las tasas de
interés de los saldos bancarios para estimular el ahorro;
- autorizar la apertura de
cuentas bancarias en MLC a personas naturales y jurídicas, preferiblemente en
Euros con vistas a que el Euro sea la moneda convertible de mayor circulación
en el país en detrimento del USD, aplicando tasas de interés atractivas, lo
cual beneficiaría las operaciones del comercio exterior;
- establecer la
convertibilidad del CUP en un proceso por etapas autorizando a los bancos la
compra y venta de MLC por CUP a personas naturales y jurídicas a una tasa de
cambio similar a la del mercado monetario informal con vistas a reducir ésta
última;
- eliminar el monopolio
estatal del comercio exterior de manera que las entidades estatales y no
estatales sean las que decidan si utilizan a una empresa estatal como
intermediaria para su relación en el comercio exterior o se vinculan directamente
con sus clientes y suministradores residentes en otros países en las
condiciones que mutuamente acuerden. Esta medida descentralizaría y
flexibilizaría la toma de decisiones de las empresas en su gestión y se
traduciría en un aumento de la producción y la eficiencia económica;
- autorizar la concurrencia de
suministradores extranjeros en el mercado interno, tanto mayorista como
minorista, para ampliar la oferta;
- emitir bonos de deuda
pública en CUP, con tasas de interés atractivas y honradas en fecha, que puedan
comprar personas naturales y jurídicas, tanto cubanas como extranjeras, lo que
incrementaría los ingresos al Presupuesto del Estado y reduciría el déficit
fiscal;
- establecer la intervención del
Estado en las empresas estatales con pérdidas con el objetivo de identificar
las causas de su irrentabilidad y, en su caso, sancionar a los funcionarios responsables,
confiscar los activos de la empresa y venderlos a otras empresas estatales,
cooperativas, MIPYMES y trabajadores por cuenta propia, lo que reduciría los
gastos presupuestarios y el déficit fiscal;
- racionalizar los gastos del
Presupuesto del Estado reduciendo significativamente el subsidio a las empresas
estatales con pérdidas y los gastos de la administración del Estado, entre
otros, lo que reduciría el déficit fiscal. Se exceptúan los servicios sociales
como educación, salud, deportes y cultura;
- considerar al sector no
estatal como una parte tan importante en la economía nacional como el sector
estatal, y no solo como un “complemento” al estatal;
- reordenar la oferta en tiendas en MLC y en CUP
de manera que se oferten productos similares aunque en las primeras se vendan
solo productos de “gama alta” y de “gama baja” en las segundas;
- adicionalmente y con vistas
a eliminar las “colas”, trasladar los productos de primera necesidad que hoy se
venden en las tiendas en CUP a las bodegas donde la población tiene el registro
de la Libreta de Abastecimiento sin que ello signifique normar en períodos
fijos de tiempo la distribución de esos productos trasladados. Pudiera crearse
una red de trabajadores sociales para distribuir los productos a las viviendas de
los consumidores vulnerables;
Simultáneamente a la
aplicación de estas medidas inmediatas, se pudieran iniciar las investigaciones
correspondientes para superar, en el mediano y largo plazo, las limitaciones
del actual modelo de dirección y planificación económica y los problemas
estructurales de la economía cubana.
Al respecto me parece conveniente
aplicar, en el proceso de estas investigaciones, la metodología del Sistema de Gestión
de Gobierno basado en la Ciencia y la Innovación (SGGI) que se desplegó en el
exitoso enfrentamiento a la COVID-19. Un artículo sobre los pormenores de esta metodología fue
publicado en la Revista Anales, de la Academia de Ciencias de Cuba, por el
Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el Miembro de
Mérito de la Sociedad Económica de Amigos del País, Jorge Núñez Jover. En el
artículo mencionado se destaca el relevante papel que
han desempeñado la ciencia y la tecnología nacionales, orgánicamente vinculadas
con la gestión gubernamental, en función de ofrecer una respuesta social,
científica, política y sanitaria capaz de enfrentar el desafío que la pandemia
nos planteó.
Piezas claves de la gestión realizada han sido el diálogo directo
de los expertos, académicos y profesionales con el Gobierno, el fomento de la
colaboración interinstitucional e intersectorial, la participación
interdisciplinaria, el despliegue de un trabajo intenso para acelerar las
respuestas y una activa comunicación pública para mejorar la información y el
desempeño de la población. Para lograrlo se llevó a cabo un sistema de trabajo
cuyos elementos principales son detallados en el artículo y que confirman las
grandes oportunidades que ofrece la colaboración estrecha e interactiva entre
los científicos y el Gobierno y corrobora la pertinencia de considerar la
innovación, la informatización y la comunicación social como pilares en la
gestión del Gobierno cubano. La experiencia acumulada indica que la
colaboración entre el Gobierno y los científicos debe constituir un estilo de
trabajo permanente para facilitar el profundo ejercicio de pensamiento
innovador que el desarrollo del país demanda. En ese esfuerzo, el
asesoramiento científico, el protagonismo del conocimiento experto y la
participación popular es clave.
En el caso que nos ocupa, para
avanzar hacia un modelo de dirección y planificación económica mas eficiente y
superar los problemas estructurales de la economía cubana, en el SGGI interactuarían
el Gobierno, especialistas en economía, ciencias sociales y otras disciplinas
científicas vinculadas a estos temas, así como la sociedad civil, partiendo de
los acuerdos adoptados por el VI y VII Congresos del PCC y proyectándolos hacia
el futuro en un diseño operacional que facilite alcanzar el desarrollo del
socialismo democrático, próspero y sostenible al que aspiramos.
*
Blog Segunda Cita, 30 de abril de 2022
La Habana, 5 de mayo de 2022
Compañero Vascos. Usted que fue Presidente del Comité Estatal de Estadísticas y dirigente de primer nivel de otros organismos globales de la Economía. Y conoció a nuestro Comandante en Jefe. Sabe de primera mano. Que antes un problema de índole socio político económico en Cuba. De inmediato había una decisión. Jamás los problemas languidecieron en espera de una medida. Tampoco ningún Ministro sobrevivió a un error de consecuencias. Desde hace 10 años. No existe una democion ni una separación en un cargo de primer. Lo mismo en el Gobierno que en el Partido. Es una especie de "moratoria en materia de movimientos de cuadros". Todos son liberados y a todos se les asignarán otras tareas. A seguir atrasando el país desde el nuevo puesto.
ResponderEliminarTodas esas recomendaciones de Usted , y de otros compañeros como Benavides y desde la Academia varios profesores. Hacia qué gaveta irán a dormir el eterno sueño de la decidía y de la pausa en la prisa.
Leí hasta aquí.....
ResponderEliminar"las provocaciones de los Estados Unidos y la OTAN con el objetivo de debilitar a Rusia".
Que más se puede esperar. Nada. De la utopía a la realidad.
Con cuadros y ex-cuadros como estos, es por lo que en Cuba no hay leche...y aun con tres empleos los ingresos no cubren las necesidades básicas.
Sin evaluar una a una las propuestas del Profesor, las creo de mucha importancia. A mi entender falta algo de extrema importancia: el incremento a corto plazo de las exportaciones y de la producción nacional de bienes de consumo, ambas muy interrelacionadas en su soporte y en sus impactos.
ResponderEliminarDesde el ángulo objetivo tienen como obstáculos la falta de recursos y de mecanismos para obtenerlos, aun cuando económicamente se logren retornos líquidos inmediatos.
Todo eso está relacionado con el modelo, las tasas de cambio y la independencia financiera de las empresas, algo que podemos considerar también dentro del modelo.
De acuerdo con el Profesor Vascós, si esperamos por la solución de los problemas estructurales, que serían a mediano plazo como mínimo, cada día las cosas estarán peor.
Pero aquí sobran experiencias para enfrentar problemáticas de ese tipo. Eso siempre se ha enfrentado mediante acciones administrativas fuertes, continuas y multilaterales, para colocar los recursos con la mano en programas de trabajos tensos, aunando todas las fuerzas. O sea, con los métodos viejos. ¿Es un paso atrás? Si, pero es la solución inmediata de lo más urgente.