Muchas
veces, al repasar la historia, en este caso la de los Estados Unidos de América,
rememoramos por intuición algunas nociones que se nos hacen más factible
retener, sin profundizar lo que pudiera significar en la evolución de la tan
intrincada y complicada sociedad de esa poderosa nación.
Por
eso, al decidir continuar mis impertinentes empeños en descubrir y revelar todo
el daño que ese esperpento ha causado a la humanidad y sobre todo a nuestro
país en esta larga viacrucis, consideré
necesario resaltar sus verdaderas intenciones en el siguiente escrito titulado
“Los Estados Unidos en el Siglo XIX (Primera Parte).
Se
trata de un recuento de los hechos, sucesos y acontecimientos más importantes
que tuvieron lugar en ese definitorio siglo para la conformación decisiva de
esa nación y que relacionamos a continuación:
· La compra al gobierno frances
de la Louisiana.
· El Destino Manifiesto
· La Doctrina Monroe
· El segundo conflicto con la
madre patria (Inglaterra)
· La esclavitud
· La Guerra de Secesión
· La oposición del gobierno de
los Estados Unidos a las ideas independentistas de Simón Bolívar.
· Las invasiones y ocupaciones
a otros países.
· El expansionismo territorial
· La anexión del territorio
mexicano de Texas.
· El despojo de la mitad del
territorio de México.
· El asesinato del presidente
Abraham Lincoln.
· La declaración de guerra a
España y posterior invasión a Cuba.
· La colonización del Oeste.
· El exterminio de los indios.
Es
conocido que el comienzo del siglo XIX representó para los Estados Unidos,
poner en práctica lo que ya había sido concebido con astucia y premeditación,
tan pronto como se aprobó la Constitución en 1783, generándose una infestación
social de envergadura, a través del cadáver alterado de la Declaración de
Independencia y su sepulturero constituyente.
En
un vasto periodo de tiempo primordialmente fueron destacándose las tesis
esenciales del aristócrata empedernido Alexander Hamilton, secretario del
tesoro del primer presidente George Washington.
Este
hidalgo sujeto era conocedor y fiel seguidor de los postulados del escocés Adam
Smith, padre fundador de la filosofía económica del liberalismo, fundamentado
en que: “el libre juego de la mano
invisible de los mercados iría a producir una sociedad en donde la riqueza
estuviera armoniosamente distribuida, FUNDAMENTOS QUE MARCARON DE TAL FORMA LOS
PROCESOS ECONÓMICOS DE LOS ESTADOS UNIDOS Y QUE CONTINUAN PREVALECIENDO HASTA
NUESTROS DÍAS.
Asimismo,
es esencial destacar partes de la historia que conformaron las costumbres y
conductas de los gobernantes y del pueblo estadounidense, de forma tal que
podamos intuir y comprender el comportamiento de sus gobernantes y, porque no,
de sus ciudadanos.
Según
los entendidos, fue decisivo la tendencia al MESIANISMO(1) NACIONAL que marcó
la formación e impregnó la cultura del pueblo estadounidense y renovó, entre
tanto, una TRADICIÓN JUDAICA, rescatada por el FUNDAMENTALISMO BÍBLICO DE LOS
PURITANOS(2), que emigraron hacia América, imaginada como la TIERRA PROMETIDA.
Esos
Peregrinos veían a sÍ mismo como EXCEPCIONES de lo que consideraban la traición
de los europeos al cristianismo, y eran los protagonistas de un ejercicio de EXCEPCIONALIDAD, DISPUESTOS A FUNDAR
UNTIPO DIFERENTE DE COMUNIDADES; Y CREÍAN QUE SUS VENTAJAS Y CUALIDADES
PECULIARES LES CONFERÍAN UN PAPEL QUE OTROS PUEBLOS NO PODRÍAN DESEMPEÑAR.
Esto dio lugar a un sentimiento de
grandeza y superioridad que constituyó desde el principio, parte de la
identidad nacional de los Estados Unidos.
La predestinación constituyó la
sustancia real del protestantismo, de quienes creían que estaban en comunión
directa con Dios.
Las
sectas evangélicas que emigraron a América o que allí se formaron,
desarrollaron un protestantismo peculiar FUNDAMENTALISTA, que se diferenciaba y
al mismo tiempo se identificaba con la forma del judaísmo, al buscar
inspiración en la Biblia, para atribuirle al pueblo norteamericano lo que conocemos como el DESTINO MANIFIESTO
de expandir sus fronteras y la misión de guiar a la humanidad como si fuera el
PUEBLO ELEGIDO POR DIOS.
Aunque
estas ideas habían sido empleadas siglos atrás, estaban presentes en las
concepciones expansionistas de los presidentes Thomas Jefferson, James Madison,
James Monroe, John Quincy Adams y sobre todo James Polk, el más recalcitrante, persistiendo hasta nuestra época, aunque con
fulguraciones de nuevo tipo.
Otra
célebre disposición unilateral de los Estados Unidos en esa época, fue la
definición de la posición frente a Europa y las nuevas nacientes repúblicas de
la América Española, que el presidente James Monroe expuso en su mensaje al Congreso,
el 2 de diciembre de 1823, lo que se conoce como la DOCTRINA MONROE.
En
síntesis se proclamó: (…) “como principio en el que están comprometidos los
Estados Unidos, que los continentes americanos en virtud de la condición libre
e independiente que han asumido y conservado, no deben considerarse en lo
sucesivo como campo de futura colonización por ninguna potencia europea. Se
considera peligrosa para la paz y seguridad de Estados Unidos toda tentativa
por parte de esas potencias para extender su sistema a una porción cualquier de
este hemisferio.
Veamos
a continuación unos pocos ejemplos de la forma en que fueron puestos en
práctica estas manifestaciones unilaterales, prepotentes y fundamentalistas.
· El gobierno de los Estados
Unidos declaraba en 1825, que no puede consentir cambio alguno en la situación
política de Cuba que no sea aquel que la coloque bajo la jurisdicción de los
Estados Unidos. (Carta de Everett, ministro de los E.U en España a John Quincy
Adams, 30 noviembre 1825.)
· Un vistazo al mapa era
suficiente para predecir el destino de Cuba: fue el pronunciamiento del Comité
de Relaciones Exteriores del Senado de los E.U. La geografía parecía sugerir
realmente el destino; y existía unanimidad en conocer cuál era ese destino: el
Manifiesto (1859).
· “Es porque Cuba fue situada
por el Creador de todas las cosas en tal posición de la superficie de la Tierra
que obliga a los E.U. a hacer de su posesión una necesidad geográfica y
política. “Nosotros debemos tener a Cuba
por una necesidad que el Hacedor del Mundo creo. (James Clay 26 febrero 1859).
· El secretario de Estado, John
Quincy Adams configuró una imagen geográfica alrededor de la idea de Cuba como
“un apéndice natural de los E.U.” y, a partir de esta, concluyó “que los
intereses de Cuba y de los E.U. estaban conformados por la naturaleza.” (28
abril 1823)
· En 1818, y para facilitar sus
negociaciones con España, en torno a la compra de la Florida Oriental y la
Occidental, James Monroe promulgó una ley que castigaba con severas penas,
cualquier intento que se realizara en el territorio de los E.U. para apoyar las
luchas independentistas latinoamericanas.
Por
último, resulta inconcebible como después de aproximadamente 150 años, en pleno
Siglo XXI, perseveran en el seno de esa nación, convertida en imperio, esas
ideas mesiánicas, ese excepcionalismo y ese supremacismo, que se han
manifestado en los gobiernos de George W. Bush hijo, de Barack Obama y del
actual mandatario Donald Trump.
Referido
al fundamentalismo religioso de Bush hijo, recordemos lo analizado en el libro
titulado “Bush en el Diván”, del doctor estadounidense Justin A. Frank. En una
parte del libro, el Dr. Frank hace el siguiente razonamiento: “Desde que
asumiera la presidencia, Bush ha continuado citando las instrucciones divinas
para justificar sus acciones.” “Como apareciera en el Haaretz News, de Israel,
Bush dijo: “Dios me dijo que atacara a Al Qaeda y lo ataqué; y luego me dijo
que atacara a Saddan, lo cual hice”.
Barack
Obama fue más inteligente y astuto; pidió ingenuamente que olvidáramos el
pasado, como si eso pudiera llevarse a cabo después de tantos sacrificios y
tanta sangre derramada; pasando después con asombrosa tranquilidad a emitir el
Decreto Presidencial considerando a Venezuela un peligro inminente para la
seguridad de su país.
Y
que hablar del MONROISTA IMPLACABLE Y PERPETUO SANCIONADOR, con su distintivo
“América First”, como su Destino Manifiesto.
¿NOS TENDREMOS QUE ACOSTUMBRAR A QUE
EN LAS PRÓXIMAS DÉCADAS CONTINUARÁN EXISTIENDO MANDATARIOS DE ESE IMPERIO QUE
SE COMUNIQUEN CON EL CREADOR, COMO JUSTIFICACIÓN PARA SEGUIR AVASALLANDO A LA
HUMANIDAD CON IMPUNIDAD?
Notas:
(1) MESIANISMO. Confianza inmotivada en un agente bienhechor que se espera.
(2)
PURITANOS. Constituían el grupo reformador que deseaba establecer una religión
como una norma de vida basada en la Biblia. Este grupo ha pasado a la
posteridad como el de los Padres Peregrinos (Pilgrims Fathers).
La
Habana, 19 de septiembre de 2019.”Año 61 de la Revolución”
Julio Sergio Alcorta Fernández.
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