Fidel


"Peor que los peligros del error son los peligros del silencio." ""Creo que mientras más critica exista dentro del socialismo,eso es lo mejor" Fidel Castro Ruz

domingo, 31 de mayo de 2020

EN MARCHA HACIA UN FUTURO SOCIALISTA Y SOSTENIBLE.


En la actualidad se hace un gran énfasis en el desarrollo de la economía teniendo como centro los municipios. Por supuesto que no es posible en cada uno de ellos desarrollar todo lo necesario para la marcha adecuada de esta, es necesario que exista una interacción y cooperación entre todos, que será lo que nos dé una armónica marcha hacia una economía estable.

En especial, en términos agrícolas, no es posible el desarrollo de todos los cultivos o crías animales por igual. Los suelos, el clima, la hidrografía, calidad del agua, orografía, experiencia histórica de los productores, son condiciones que hay que atender y que deben determinar el desarrollo eficiente de la economía en cada lugar.

A la vez, para desarrollar los municipios, además de cuadros inteligentes, preparados, honrados y fieles a Cuba y la Revolución, se necesita de un pensamiento estratégico que haga posible el desarrollo de esta instancia de dirección y gobierno.

Hoy con la revolución agraria, que bajo el pensamiento de Fidel y Raúl se ha desarrollado en Cuba, se han hecho cambios impensables en el campo cubano, pero no se ha llegado al nivel de abastecimiento de productos agrícolas y pecuarios que necesita nuestro pueblo, no se ha llegado a producir para sustituir importaciones en la medida que lo necesitamos, ni se han logrado las exportaciones que potencialmente tiene el sector.

La agricultura tiene 783.000 trabajadores que es el 17.5% de la fuerza de trabajo del país, el 71% de sus tierras producen en forma privada y cooperativa.

En la actualidad el 78,7 por ciento de la producción nacional de alimentos de origen vegetal se logra con la participación de las cooperativas agropecuarias y los productores privados, así como el 35 por ciento de la producción de alimentos de origen animal y el 65,2 por ciento de la producción de leche, a pesar de la desatención que ancestralmente ha padecido el sector. Es entonces necesario actuar para que sea en este sector donde se concentre el apoyo, las inversiones e insumos, y propiciar la autonomía necesaria en la gestión económico-productiva. El mero entusiasmo y las arengas no son suficientes; hay que tener presente los intereses de estos productores.

Para poder avanzar al acelerado ritmo necesario, una de las primeras cosas que se debe lograr es eliminar la perjudicial subordinación de las cooperativas agropecuarias a las empresas, es ilógico, inconcebible, que organizaciones que son productivas y económicamente eficientes, se subordinen a algo que no funciona y que es ineficiente. Salvo las excepciones de empresas como La Cuba, El Sur del Jibaro y Ceballos, que han logrado una buena eficiencia económica y eficientes niveles de colaboración con el sector privado en sus territorios. Entonces sería muy constructivo que se analizara el desempeño de estas empresas y llevar sus experiencias administrativas y comerciales hacia otras instancias similares.

Las empresas de la agricultura han quedado como prestadoras de servicios, para lo cual no fueron diseñadas, además son también en su mayoría parte de las OSDE. Sin duda alguna es urgente acabar de solucionar el problema de las empresas estatales y su subordinación al estado o a las OSDE, pues ambas son entidades que limitan igualmente la necesaria independencia empresarial y no solo de las empresas agropecuarias, esto es aplicable a todas las empresas.
En relación con el funcionamiento de las cooperativas y en el ámbito agrícola municipal, las empresas son las rectoras del combustible y los recursos en general y lo poco que le dan a las cooperativas a cambio de sus producciones con destino a la exportación, la sustitución de importaciones o la venta directa al turismo, va a parar a la cuenta de la empresa y esta es la que decide si pueden usar parte de ese dinero en bien de su desarrollo.

Hoy una buena parte de las UBPC, CCS y las CPA, están estancadas y corren el riesgo de, en los próximos años, desaparecer como organización, no tienen fuerza de trabajo estable, ni pueden  reponer la que se va perdiendo por diversas razones,  no tienen incentivos que sean interesantes a los que vienen buscando trabajo, algunas no tienen con qué enfrentar sus obligaciones financieras, el autoconsumo es pobre, están empeñadas y deberán comenzar a pagar impuestos por tierras ociosas, las cuales no tienen fuerza para limpiarlas, ni dinero para pagar los gastos que demanda esa actividad.

A esos problemas internos, hay que sumarle una cantidad de cuadros no despreciable que hacen fuerza para disolverlas y entregar esas tierras en usufructo, lo que niega el pensamiento estratégico de Fidel, que vio con tiempo que el desarrollo en el campo está en la aplicación de la ciencia y la técnica y eso no se puede hacer en minifundios.
En Cuba se seguirán envejeciendo los campesinos y solo la mecanización, el riego mecanizado o automatizado, la ciencia y la técnica bien aplicada, harán posible que con menos fuerza de trabajo se aumente la producción y la productividad y eso en pequeños pedazos será muy difícil. 

El país tiene casi 5.000 cooperativas agrícolas y pecuarias primarias que prácticamente no tienen posibilidades de desarrollo en las condiciones actuales, ya que están subordinadas a la empresa estatal a pesar de la Ley de Cooperativas recientemente promulgada[JP1] , que establece que “las cooperativas se vinculan a empresas estatales agropecuarias y azucareras a través de contratos con el fin de desarrollar su línea fundamental de producción, conciliar y acordar su programa de desarrollo, su plan de producción anual, los volúmenes, surtidos y destinos de las producciones para el encargo estatal, u otros fines diferentes que tributen al plan de la economía con las que mantienen relaciones contractuales y reciben servicios que les permiten dar cumplimiento a sus planes y programas” (Artículo 25.1 – Decreto-Ley 365), por otra parte a las cooperativas agropecuarias no se les autorizan cuentas en divisas o CUC, sino que el cobro de esta forma de venta está en manos de la empresa[JP2] , a pesar que se establece que “las cooperativas agropecuarias, para el cumplimiento de las actividades económicas autorizadas en su objeto social, solicitan la apertura y operan cuentas bancarias para realizar sus operaciones de cobros y pagos” (Artículo 37.1 – Decreto-Ley 365)

Esto sigue comprometiendo la autonomía de las cooperativas, pero más el desarrollo hacia formas superiores de cooperativas, que se ha logrado en el mundo, entre otras acciones, con el desarrollo de las Cooperativas de Segundo Grado.

El establecimiento de las Cooperativas de Segundo Grado, es un acuerdo incumplido del VI Congreso del Partido (Lineamiento No. 29 en el título LAS COOPERATIVAS)

Las cooperativas y campesinos vendieron en el año 2017 directamente al turismo 191 millones de pesos; en estas operaciones se les reconoce una tasa de cambio de 10 CUP por un CUC, al cambio de estos a dólares USA, esos serían unos 21 millones de US$ que este sector vendió al turismo de buenos productos, en tiempo y en silencio.
Tampoco las cooperativas agropecuarias pueden participar directamente en la inversión extranjera, solo a través de la empresa estatal, si la ley dice que no hay subordinación, ¿cómo se entiende que esto siga permitiéndose?

¿Qué perspectiva de desarrollo tienen estas cooperativas?

¿Hay estímulo para exportar de esta forma, como está pidiendo el Presidente Díaz-Canel?

Se podía hacer alguna experiencia piloto, constituyendo algunas cooperativas de Segundo Grado. Esto comenzó a germinar en Artemisa hace unos dos años, se escogieron 3 CCS subordinadas a la empresa Güira de Melena y San Antonio de los Baños. Se comenzaron a hacer los primeros trámites, pero luego de unos meses, se suspendió todo ¿por qué?

Las cooperativas en Cuba se hicieron respetando siempre el principio de voluntariedad de los campesinos, sobre la base del trabajo político, de convencimiento, donde la ANAP jugó un destacado papel. Cada campesino cobró todo lo que aportó a la cooperativa y hoy es propiedad social del grupo que la integra, sin embargo no se ha hecho ni una experiencia a nivel municipal constituyendo algunas cooperativas de Segundo Grado.

A finales de la década del 70 y principio de los 80, en Cuba se hicieron 11 uniones municipales de cooperativas llamadas UNCA, las que, a pesar de su vida tan efímera, tuvieron resultados muy buenos.

Está demostrado que las cooperativas constituyen una forma de propiedad legitima en el periodo de tránsito socialista. No solo legítima, sino apropiada y necesaria en el proceso de desarrollo y emancipación de las fuerzas productivas 

Estableciendo las cooperativas de Segundo Grado, se cumpliría un acuerdo del VI Congreso del Partido y de los Lineamientos, y el movimiento cooperativo tendría la posibilidad de demostrar todo su potencial, como una forma de producción acorde con nuestro socialismo y que no se sigan deteriorando. La creación de las cooperativas de Segundo Grado sin dudas tendría una repercusión internacional, sobre todo en el ámbito agrícola y de los movimientos cooperativos del continente y del mundo. 

Otro aspecto a considerar es la posibilidad de  aprobar un instrumento legal que autorice la creación de PYMES en la actividad agroalimentaria, que puedan incorporarse a las cooperativas grupos ya establecidos, si lo desean, y ser parte de las cooperativas agropecuarias, o que estas funcionen como PYMES.

Las cooperativas de producción agropecuaria y de créditos y servicios serian autónomas en su funcionamiento interno y en su economía. Sus relaciones con las empresas y autoridades estatales, del Ministerio de la Agricultura y otros deberán ser de cooperación y en ningún caso de subordinación.

Podrán establecer operaciones de negocios, de inversiones y comerciales con las empresas estatales así como con empresas extranjeras. Podrán negociar créditos bancarios con la banca nacional para inversiones en equipos y tecnología, entregando garantías con sus activos y recursos propios. Podrán exportar e importar directamente asumiendo el pago con sus recursos propios.

Las cooperativas agropecuarias son la fuerza más revolucionaria y organizada que existe en Cuba, formadas a partir del pensamiento y guía de nuestro Comandante en Jefe, funcionan bien en su mayoría, son rentables, productivas y cooperan en todo lo que se les pide en bien de la sociedad, entonces no hay por qué temerle a que actúen con independencia para la exportación o importación. Además de contar con los recursos propios, también deben tener acceso a financiamiento, que deben gestionar por sí mismas, ya sea internamente o de entidades extranjeras.

También es el momento, que no se debe dejar pasar, de superar temores infundados sobre el Sector Privado Cubano, resida donde resida, en que se convierta en un ¨Caballo de Troya¨ que conspire contra el carácter socialista de la economía y de la preeminencia de la empresa estatal en el desarrollo económico.

Es también imprescindible que se fortalezca la Empresa Estatal Socialista, de manera que sea un instrumento económicamente fuerte para sostener la Economía Socialista, tal y como la Capitalista es sostenida por las grandes corporaciones y grupos financieros. 

No se entiende bien cómo se estimula la inversión extranjera y se le teme al establecimiento de PYMES con capital de ciudadanos cubanos, con independencia de donde residan.

El carácter socialista de la economía lo garantizan la Constitución Socialista, el gobierno cubano y la inversión de la economía planificada cubana en las empresas del estado. Y mucho más por la conciencia revolucionaria de nuestro pueblo y la unidad que no ha podido ser quebrada por los más de 60 años de hostilidad de los gobiernos de los EE.UU.

Si estas ideas se desarrollan hay que prepararse para enfrentar un incremento de los intereses inversionistas, lo que no sucede hoy porque las cooperativas tienen que actuar a través de la empresa estatal y de esa forma, ni está permitido por las leyes en el caso de inversionistas estadounidenses, ni hay interés por parte de otros. 

Las leyes estadounidenses aceptan ventas a las cooperativas y campesinos y al mismo tiempo aceptan productos cubanos para exportar a ese país y a la vez pueden ofrecer financiamiento ¿por qué no comenzar a romper el bloqueo por esta vía? Hoy no es posible la relación comercial porque las cooperativas tienen que hacerlo a través de la empresa estatal.

Estamos en tiempo de guerra, nuestra posición en este momento es más comprometida que cuando Fidel y sus compañeros, con aquellos 7 fusiles, se dispusieron a enfrentar a un ejército de miles de hombres bien armados; y ganaron la guerra ¿por qué? por la fuerza de las ideas, por lo tanto, es el momento de tomar decisiones riesgosas, heroicas, en la seguridad que la entereza y disposición de nuestro pueblo, el respaldo de millones a nuestra Revolución, bajo la guía de Nuestro Partido, serán suficientemente fuertes para no permitir que nadie se apodere de Cuba. Si algo resulta mal, ya tendremos la inteligencia para enmendarlo y hacerlo con toda la moral que nos caracteriza. Hay que pensar con mucha velocidad, hay que tomar decisiones rápidas, no desdeñando el famoso pensamiento de Napoleón: “vístanme, despacio que estoy deprisa”, ni el “sin prisa, pero sin pausa” de Raúl. Claro que el “despacio” o el “sin prisa” no se tomen como que no estamos necesitados de tomar decisiones bien analizadas y urgentes.

Es impostergable abrir la agricultura todo lo que sea aconsejable a la inversión extranjera, pienso que muchos inversores pudieran estar interesados en producir en Cuba muchos productos, incluyendo carne vacuna, pollos, huevos y varios productos agrícolas para el consumo interno y para la exportación. No creo que sea un secreto que existen muchos criterios por parte de los inversores extranjeros con respecto a limitaciones que impone nuestra ley, tampoco debe serlo que existe lentitud para la aprobación de las propuestas, todo eso debe ser revisado.

Pienso también que es hora que acabemos de eliminar la prohibición de acoger a los cubanos como inversionistas, ya sean residentes en el exterior o en nuestro territorio nacional. La ley permite que estos inviertan, pero sabemos muy bien que los decisores no permiten que se produzca esa acción. Hay miles de cubanos dispuestos a invertir en Cuba y la mayoría quieren hacerlo por amor a nuestro país, muchos de esos no son millonarios, ni eran latifundistas o acaudalados personajes en la Cuba de ayer, son personas que no tienen ningún sentimiento contrarrevolucionario, solo les interesa ver progresar a Cuba.

Leí un mensaje en las redes que me dejó impactado, decía: “tenemos miedo al enriquecimiento y no le tenemos miedo a la pobreza”. Creo que vale la pena analizar esta frase que bien vista tiene nivel filosófico. No queremos que los cubanos nos enriquezcamos, pero sin embargo admitimos en nuestras leyes que existan en Cuba empresas y empresarios extranjeros con participación en empresas mixtas e inclusive con 100% capital externo. Entonces esos sí pueden hacerse ricos, pero los cubanos no. Estimo que sería consecuente que para los que acumulen un gran capital se les imponga un régimen impositivo especial, pues igual que logramos concientizar a la población en relación con la necesidad de la solidaridad humana, se puede llevar a la conciencia de los inversores que mientras más acumulen, más obligación deben tener hacia la sociedad. Pienso que en casos extremos se les puede responsabilizar con el financiamiento de escuelas, hospitales y otras instituciones. Si hemos sido capaces de concientizar a miles de trabajadores de la salud, cómo no vamos a ser capaces de llevarlo a la mente de unos pocos que se sientan comprometidos con Cuba.

Respecto a la producción de productos alimenticios agrícolas y el incremento necesario para cubrir las necesidades de nuestra población y lograr el incremento productivo para la exportación, no solamente con la disponibilidad de combustibles, fertilizantes, pesticidas y otros insumos se resuelve elevar la productividad, que es más importante que incrementar las áreas de cultivo. Algo que ha faltado en nuestros campos es “dar el golpe a tiempo”, si se dispone de cierta cantidad de recursos es imprescindible que estén en manos del agricultor en el momento preciso, el retraso en la disponibilidad de estos resulta en graves inconvenientes que limitan enormemente los rendimientos. Con promesas de que “va a haber” no se hace una buena agricultura, sobre este tema se pueden escribir miles de historias de nuestros campos. Con menos recursos, mejor utilizados y en el momento preciso, pudiéramos incrementar sensiblemente la producción.

La producción de carne de cerdo es sin dudas la más apropiada para este momento en nuestras condiciones. Esta no se debe basar solamente en la alimentación a través de alimentos concentrados. Durante años el Instituto de Investigaciones Porcinas desarrolló trabajos que llevaron a una creciente producción de esta carne por medio de alimentos alternativos. Se desarrolló mucho la alimentación por medio de desechos de la alimentación humana, tanto en las casas y centros de confección de alimentos para gran número de consumidores, como de los centros de la cadena de comercialización (agromercados). Se estableció un sistema de recogida de salcocho en los grandes centros de procesamiento y consumo, eso funcionó bastante bien y el período especial y sus secuelas, lo hicieron desaparecer. Si se retomara esta modalidad, de acuerdo con los recursos disponibles hoy, sería posible incrementar esta producción. A la vez, es importante que grandes cantidades de masa verde, que se desperdicia muchas veces en los campos, pueda ponerse en función de la alimentación animal. Es posible que esto último no pueda ejecutarse para abastecer grandes centros de cría de cerdos, pero pudiera seguramente ser empleado por productores en menor escala y ayudaría a la oferta a la población, así como mejorar los precios que han ido subiendo como la espuma en las últimas semanas.

La producción de carne de aves y huevos es un capítulo aparte, para estos no me parece que haya otro camino que no sea el de disponer de alimentos concentrados, de calidad y con los contenidos de carbohidratos, vitaminas y proteínas requeridos para las distintas etapas de crecimiento de cada especie y objetivo de producción. Se puede ayudar al incremento de estas, por ejemplo, mediante la venta a la población de los “pollitos de un día”, tal y como se hizo en la década de los 90, dar capacitación por los medios de difusión y lograr que en cada lugar que se tenga posibilidad real, condiciones, se desarrolle la crianza. Claro que eso hay que combinarlo con la importante tarea de la higiene urbana, pero, creo que SÍ SE PUEDE.

Sobre la producción de carne vacuna y otras especies similares, que son en general de una baja tasa de reproducción, hay que aceptar que se ha llevado una política equivocada, no creo que sea necesario argumentar esto, porque es un hecho. Desde el triunfo de la revolución la masa de ganado mayor ha venido decreciendo a pesar de grandes esfuerzos que se han realizado por varios centros de investigación, muchos profesionales han expresado su desacuerdo con el sistema de manejo establecido, pero este no se ha variado en nada. Me limito solamente a hacer mención de un hecho inobjetable, es un asunto complejo que no se puede exponer en unas pocas cuartillas, existen muchos profesionales en activo y jubilados, que pueden dar elementos al respecto, sería oportuno instarlos a exponer sus experiencias y hacer sus propuestas.

Es sin dudas importante desarrollar al máximo las ideas de nuestro Comandante en Jefe sobre la utilización de plantas proteicas para la alimentación animal. Hay resultados de investigación que permiten establecer un programa basado en estas ideas.

Si existe un grupo de profesionales que se reúnen con frecuencia para discutir problemas de diversa índole nacional e internacional, como es el Grupo de la Revista Temas, estimo que de igual forma debiera constituirse un grupo para discutir con amplitud los temas que afectan el desarrollo agrícola cubano, no existe nada que nos dé visión de análisis retrospectivo de los problemas, ni de búsqueda de ideas para superarlos, algo tan necesario y que no acabamos de solucionar.

Crear un foro de debate libre para proponer soluciones a los problemas de la agricultura cubana, sería de gran ayuda, quizás la ACTAF como organización de trabajadores de la agricultura tenga posibilidades y fuerza para convocar este tipo de debate, estimo que sería muy constructivo.

Para lograr más exportación, es necesario que se cuente con cuadros que tengan conocimiento del mercado externo o que sean asesorados por profesionales que tengan suficientes elementos y experiencia en esta actividad. Nuestros directores de empresas estatales agropecuarias están demasiado cargados con los problemas internos, la presión por el abastecimiento a la población, los chequeos constantes y en cierta forma excesivos, de varios niveles del Gobierno y el Partido, exigiéndoles por el cumplimiento o el porqué de los incumplimientos. Su pensamiento está lleno con esas responsabilidades, su moral los conmina a no pensar en nada más que en eso, por lo que la exportación o sustitución de importaciones, están en un plano secundario. Nadie es sancionado por no encontrar fuentes de exportación, ni siquiera por incumplir con algún compromiso contraído con el exterior, sin embargo por los problemas relacionados con el mercado interno, pueden ser afectados moralmente, algo que valoramos mucho los cubanos con conciencia y orgullo de servir a la patria.

La Actualización, la más reciente reforma, concebida hace 10 años con el propósito explícito de desatar las fuerzas productivas, está a punto de pasar a la historia, más por las pausas que por las prisas. Varios temas esenciales han resultado pospuestos una y otra vez por razones diversas.

La principal fortaleza con que cuenta el país para afrontar la nueva situación radica justamente en el trayecto ya recorrido por la Actualización. Disponemos de un documento aprobado en el último Congreso del Partido y refrendado en la Carta Magna por una amplia mayoría de la población, no se requieren nuevos consensos, ahora hay un mandato que cumplir. Hay otras necesidades, pero medidas como la reunificación monetario-cambiaria, la reforma de la empresa estatal, y la institucionalización del sector privado y cooperativo, sobre todo el agrícola, con su larga experiencia y hoja de servicios a la Revolución, constituyen esencias de la actualización que se encuentran en pausa.

Ejecutar el reordenamiento monetario enfrenta el enorme desafío de gestionar exitosamente los ajustes que habrán de producirse, habrá empresas que verán afectadas sus actividades por incosteables, se presentarán desequilibrios macroeconómicos a solventar por el estado, los déficits de oferta a la población durante el proceso de puesta en marcha de las cadenas productivas, y el impacto negativo sobre amplios sectores de la población que requerirán ser protegidos, se hallan entre las principales razones para enfrentar este proceso. Pero esto hasta cierto punto está ocurriendo sin reunificación, por lo tanto, este es un momento inigualable para comenzar con un nuevo orden monetario, empresarial y cooperativo.

Como un nuevo orden monetario en las condiciones actuales debe crear una afectación a los niveles de vida de nuestra población, en especial a la de menores ingresos, es imprescindible desarrollar un programa de protección a este sector. Para ello existe una buena base a partir del Registro de Consumidores que recoge datos fundamentales de cada ciudadano cubano. En la actualidad se ha comenzado a realizar distribuciones limitadas de alimentos y productos de higiene a toda la población y en ocasiones dirigidos a grupos etarios de mayor riesgo a la COVID-19. Sin embargo esta forma igualitaria de distribución, nacida hace casi 60 años, hay que irla modificando acorde con conceptos más adecuados a la situación actual de nuestra economía y al desarrollo de nuestra sociedad socialista. La actuación humanitaria de nuestro Estado ha ocasionado que un número de ciudadanos hayan vivido protegidos por este y nunca en su vida han aportado, ni se han interesado por aportar nada a esta sociedad. Tenemos que tener en consideración que tantos años transcurridos, deben haber creado un número significativo de ciudadanos que en realidad son elementos degradados, desclasados y no organizados del proletariado, así como aquella parte de la población que para su subsistencia desarrolla actividades al margen de la legalidad o en la marginación social (delincuencia, prostitución y otros elementos de este tipo), que viven del esfuerzo de la mayoría de la sociedad y deben ser excluidos de cualquier tipo de protección social. Esto daría la posibilidad de distribuir más recursos a los que realmente lo necesitan y proteger a los que lo merecen.

La libreta de abastecimiento ha sido y es, un factor importante para gran parte de nuestra población, sin embargo se debe considerar la forma más idónea para modificarla. Se ha considerado en determinados foros de opinión hacer subsidio a las personas necesitadas en vez de los productos, así pudieran ser protegidos los más débiles y evitar que aquellos que no ameritan esa condición continúen beneficiándose por el actuar humanitario del estado. Es hora de aplicar acciones que impidan conductas inapropiadas.

"LA EDIFICACIÓN DE LA NUEVA SOCIEDAD EN EL ORDEN ECONÓMICO ES TAMBIÉN UN TRAYECTO HACIA LO IGNOTO". RCR

HACIA ALLÁ DEBEMOS ENCAMINARNOS, EN LA SEGURIDAD QUE SIEMPRE, UNIDOS, VENCEREMOS, Y QUE LA FUERZA DEL PUEBLO CUBANO MOSTRARÁ AL MUNDO CUANTO PUEDE HACER UN PUEBLO EN REVOLUCIÓN.

“… LIBERAR DEFINITIVAMENTE LAS FUERZAS PRODUCTIVAS EN EL PAÍS, Y QUE ESA LIBERACIÓN DE LAS FUERZAS PRODUCTIVAS TENGA UN IMPACTO EN EL DESARROLLO ECONÓMICO Y SOCIAL DE LA NACIÓN” MD-C

Este texto ha sido elaborado por José Pablo Guerra Melcón, jubilado del MINAG, tomando como base lo expresado por varios compañeros ligados al quehacer de nuestra economía.
1.       Juan José León Vega
2.       Joaquín Benavides
3.       Pedro Monreal González
4.       Juan Triana CórdovÍ
5.       Oscar Fernández Estrada
6.       Armando Nova González

 [JP1]Las cooperativas se vinculan a empresas estatales agropecuarias y azucareras con las que mantienen relaciones contractuales y reciben servicios que les permiten dar cumplimiento a sus planes y programas.

 [JP2]ARTÍCULO 37.1. Las cooperativas agropecuarias, para el cumplimiento de las actividades económicas autorizadas en su objeto social, solicitan la apertura y operan cuentas bancarias para realizar sus operaciones de cobros y pagos.

6 comentarios:

  1. Buen comentario, como los que vengo leyendo hace ya bastante tiempo de muchos compañeros revolucionarios probados. Todos coinciden, con sus lógicos matices, y apoyando sus propuestas en lo acordado, hace ya demasiado tiempo, en los Lineamientos del PC C y aprobado democráticamente por la mayoría del pueblo de Cuba. Sin embargo sus propuestas son ignoradas y los Lineamientos también. Es más Raúl y nuestro actual Presidente expresan en sus discursos una voluntad de cambio en el actuar económico existente, en la necesidad de "desamarrar" a las fuerzas productivas, en cambiar lo que deba ser cambiado, como orientó Fidel. ¿Entonces que esta pasando? Dejémonos de tanto discurso. Ya se sabe los pasos que deben darse, y rápido, para hacer avanzar la economía, producir alimentos, aliviar el asfixiante bloqueo. DEBEMOS ELIMINAR DE LOS CIRCULOS DE PODER A AQUELLOS, QUE CONTRIBUYEN CON SU RÍGIDO DOGMATISMO, DETIENEN EL AVANCE DE NUESTRA SOCIEDAD SOCIALISTA Y QUE SE CONVIERTEN EN PARTE DEL BLOQUEO. Compañero Raúl, compañero Presidente Diaz Canel creo en ustedes, al igual que la mayoría del pueblo cubano. Por favor actúen ya, se nos está acabando el tiempo.

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  2. Buen comentario, como los que vengo leyendo hace ya bastante tiempo de muchos compañeros revolucionarios probados. Todos coinciden, con sus lógicos matices, y apoyando sus propuestas en lo acordado, hace ya demasiado tiempo, en los Lineamientos del PC C y aprobado democráticamente por la mayoría del pueblo de Cuba. Sin embargo sus propuestas son ignoradas y los Lineamientos también. Es más Raúl y nuestro actual Presidente expresan en sus discursos una voluntad de cambio en el actuar económico existente, en la necesidad de "desamarrar" a las fuerzas productivas, en cambiar lo que deba ser cambiado, como orientó Fidel. ¿Entonces que esta pasando? Dejémonos de tanto discurso. Ya se sabe los pasos que deben darse, y rápido, para hacer avanzar la economía, producir alimentos, aliviar el asfixiante bloqueo. DEBEMOS ELIMINAR DE LOS CIRCULOS DE PODER A AQUELLOS, QUE CONTRIBUYEN CON SU RÍGIDO DOGMATISMO, DETIENEN EL AVANCE DE NUESTRA SOCIEDAD SOCIALISTA Y QUE SE CONVIERTEN EN PARTE DEL BLOQUEO. Compañero Raúl, compañero Presidente Diaz Canel creo en ustedes, al igual que la mayoría del pueblo cubano. Por favor actúen ya, se nos está acabando el tiempo.

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  3. Gracias. Ese es mi nombre. Quien quiera saber quien soy me puede buscar en el registro de direcciones.

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  4. Realmente el tiempo se acabó, lo que no se haga hoy, se inscribe en la cuenta como un (-1). Y llevar al cero costará el doble de mantenernos en 1.
    En el artículo se mencionan normas legales que son trabas y todos la.reconocen, que falta , que esperan, tener argumentos para en capítulo de los errores cometidos del próximo congreso de PCC.
    EL análisis del artículo es muy completo e integral y como bien expresa es como una introducción a los temas que son bien complejos.
    Me pregunto no se leen estas cuestiones en los niveles superiores, tiene miedo la burocracia transmitir estos mensajes a la dirección del país.
    Caeremos en el viejo decir popular de que si Fidel se enterara.
    El comentario del compañero Raúl Cabrera es el que lleva.
    Ya el pueblo entregó el poder a nuestros dirigentes, en sus manos están nuestras vidas.
    Rogelio Castro Muñiz

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    1. Gracias Rogelio por tus valiosas opiniones. Si se leen . saludos

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