Un sondeo de Funcas revela que un 54 por ciento cree que la economía de mercado genera pobreza, pero sólo un 24,7 quiere una economía dirigida.
Por otro lado, un 53,3 por ciento cree que las nociones de izquierda y derecha siguen siendo válidas para evaluar las tomas de posición de los políticos y un 39,1 por ciento que son nociones superadas.
Un 53,9 por ciento considera que la economía de mercado es un sistema económico que suele traer consigo la pobreza de la mayor parte de la población, frente al 39,1 por ciento que cree que es el sistema que se ha mostrado más capaz de erradicar la pobreza en el mundo.
Un 71,9 por ciento cree que el Estado es responsable de los ciudadanos y debe ocuparse de las personas que tienen problemas --4,5 puntos mas que hace cinco años-- mientras que sólo un 17,6 por ciento cree que cada persona es responsable de su propio bienestar.
Un 67,5 por ciento preferiría una sociedad más igualitaria aunque fuera menos innovadora, y sólo un 30 por ciento lo contrario.
Un 50,6 por ciento de los españoles está muy interesado o bastante interesado en la política pero una gran mayoría recela de los políticos y de su disposición a atender los problemas de los ciudadanos, según una encuesta de la Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) y Analistas Socio-Políticos (ASP).
La encuesta, que señala que un 31,1 por ciento de los españoles dedica más de una hora al día a informarse sobre política o a seguir comentarios políticos, se realizó telefónicamente con una muestra de 1.210 personas entre los días 17 y 28 de mayo de 2016.
A preguntas de los encuestados, 77 por ciento de los encuestados dijo estar muy de acuerdo o bastante de acuerdo con la afirmación de que los políticos no se preocupa por lo que piensan las personas como ellos.
Además, hasta un 83,3 por ciento estuvo muy o bastante de acuerdo con la tesis de que muchos políticos, de todas las tendencias, descalifican a los adversarios para desviar la atención del hecho de que no son capaces de resolver los problemas del país". Y un 63,2 apoyó la afirmación de que muchos políticos buscan alentar la hostilidad de sus bases contra otros partidos hacer imposible un compromiso con ellos.
Según el sondeo, lo sucedido desde las elecciones del 20D ha permitido a un 39,9% comprender mejor cómo funcionan los partidos, pero sólo un 21,5%, considera que ahora conoce mejor los problemas de España y las posibles soluciones.
Para un 72,3 por ciento lo más importante es que los partidos deliberen, negocien y lleguen a un compromiso frente al 26 por ciento que está más de acuerdo con que los partidos consigan cuanto antes la mayoría necesaria para tomar una decisión. Un 89 por ciento cree que los políticos escuchan a los políticos de otros partidos para rebatirles mejor, y solo un 5,4 por ciento piensa que están abiertos a incorporar las ideas razonables.
Un 71,4 por ciento achaca también a los líderes políticos el deseo de "promover el conflicto" nacionalista, y en cambio creen que la gente querría acuerdos.
Si les dan a elegir entre dos perfiles de políticos, un 77,2 por ciento opta por quienes tengan "sentido moral y sentido común" y sólo un 18,6 por "gran visión y energía para impulsarla".
Según la encuesta, un 18,2 por ciento están muy orgullosos de la etapa que va desde la Transición hasta hoy y bastante 34,7 muy orgullosos, mientras que un 28,7 por ciento está poco orgulloso y un 12,5 por ciento directamente nada.
La mayoría de los encuestados (por encima del 40 por ciento en todos los casos) creen que de aquí a cinco años seguirá igual la capacidad del Estado español para resolver los problemas del país, para garantizar la unidad de los españoles y para reflejar los intereses de la mayoría.
Un 46,5 por ciento es partidario de que cada país recupere un mayor control de las políticas económicas --frente a un 36,6 por ciento que quiere más protagonismo de la UE-- pero un 72,6 por ciento es partidario de que España siga en la zona euro y sólo un 22 por ciento de salir de ella.
Un 24,2 por ciento mencionó a Alemania como modelo --siete puntos menos que en 2009-- y un 7,5 por ciento a Suecia y Dinamarca, respectivamente.
Entre que el país tenga "más riqueza e influencia en el mundo" o "que las gentes tengan una vida mejor y más tiempo libre", un 84,1 por ciento se decanta por lo segundo y sólo un 11,6 por ciento por lo primero.
En cuanto a su actitud hacia el trabajo, sólo un 33,4 por ciento dijo que procura hacer muy bien su trabajo mientras que un 61,5 por ciento afirmó que suele hacerlo sólo para cumplir.
Por otro lado, un 64,7 por ciento está convencido de que los países europeos actuando en conjunto afrontarán con eficacia el problema del terrorismo yihadista.
Las opiniones están divididas sobre cómo debe decidirse el número de refugiados que acoge cada país: un 46,1 por ciento de los encuestados cree que cada país debe decidirlo por su cuenta y un 47,6 por ciento que deben decidirlo "la mayoría de los gobiernos de la UE".
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