Las obras de construcción y montaje deben empezar con el movimiento de tierra en el otoño próximo en un área aledaña al central azucarero Ciro Redondo, de la provincia central de Ciego de Ávila, y conocida por su creciente producción de caña de azúcar.
La compañía británica Havana Energy Ltd. suscribió un contrato de financiamiento para construir y poner en marcha la primera planta de cogeneración de biomasa en Cuba, informó en La Habana el Grupo Azucarero AZCUBA.
Un acuerdo sobre el particular firmaron en La Habana, mediante contratos de Ingeniería Procura Construcción y Arranque y de Financiamiento (IPCA), representantes de la empresa mixta Biopower S.A., creada entre Havana Energy, y la Compañía Zerus S.A, patrocinada por AZCUBA.
Según la misma fuente, así comenzará la aplicación de un programa de mediano y largo plazo de construcción de 25 plantas de cogeneración de centrales azucareros, denominadas bioeléctricas con biomasa, fundamentalmente cañera.
Estos proyectos forman parte de la estrategia de contribuir a cambiar la matriz de generación eléctrica cubana hasta 2030, a partir de las facilidades que brinda la inversión extranjera, y que constituyen políticas del país en la actualización de su modelo económico.
Las obras de construcción y montaje deben empezar con el movimiento de tierra en el otoño próximo en un área aledaña al central azucarero Ciro Redondo, de la provincia central de Ciego de Ávila, y conocida por su creciente producción de caña de azúcar.
El propósito, indicó también el citado grupo empresarial, es erigir una planta de cogeneración de 60 MW que utilizará el bagazo de la caña de azúcar como principal fuente de combustible.
Biopower S.A se dedicará, asimismo, a la cosecha del marabú, una maleza invasora que ha ocupado grandes extensiones de tierra en Cuba, la cual tiene valor como biocombustible de alta calidad, por lo que será utilizada como una fuente secundaria de energía.
Andrew Macdonald, presidente de Biopower S.A., quien ha trabajado durante cinco años para llevar el proyecto a buen término, dijo que esta es la primera vez que Cuba ha creado una empresa mixta en el sector y ha sido una negociación necesariamente compleja para establecer una estructura financiera que satisfaga a todas las partes.
Creemos que las plantas de cogeneración posteriores pueden avanzar rápidamente sobre el precedente establecido. Hemos tenido la suerte de encontrar un excelente socio en Shanghai Electric, que contribuirán con su enorme experiencia para ejecutar el IPCA y asegurar un exitoso proyecto, agregó.
Chu Xirang, al frente de Havana Energy, expresó su satisfacción por estar involucrados en este proyecto, que para Cuba representa un importante imperativo estratégico: la seguridad energética y el ahorro de combustible fósil sustituido por biomasa renovable.
El potencial de la economía cubana es claro y esperamos ser parte de su crecimiento, afirmó.
Sobre el mismo tema, Francisco LLeó Martín, ingeniero químico y Director General de la Tenedora de Acciones, ZERUS, la Sociedad Anónima de AZCUBA, comentó que se trata de un proyecto de referencia para nosotros y esperamos comenzar pronto.
Bárbara Hernández Martínez, ingeniera mecánica y Jefa de generación eléctrica de AZCUBA, manifestó también a la ACN que un grupo de industrias similares serán edificadas en otros centrales azucareros de la Isla.
Precisó que el costo aproximado de cada una es de 125 millones de libras esterlinas, en correspondencia con la tecnología por emplear, fabricantes, países donde adquirirla y alcance de suministros.
No obstante, añadió la especialista, existen acuerdos en relación con las restantes instalaciones de capacidad parecida de cogeneración, con modalidad de empresa mixta en correspondencia con negocios de AZCUBA
Anunció que la bioeléctrica será levantada por el Grupo Empresarial de Construcción y Montaje, del Ministerio de la Construcción, y como contratista estará Shangai Electric, que firmó un contrato para entregarla a Cuba en la modalidad llave en mano.
Constituirá una fuente de empleo para trabajadores cubanos en su construcción y montaje, así como en su operación y mantenimiento, de acuerdo con la experta.
Las obras comenzarán próximamente y se prevé su conclusión en dos años, en una zona de suelos ferralíticos rojos con potencial para la caña, y su desarrollo está planificado y asegurado en el plan de inversiones aprobado.
Incluso, se dispondrá de la maquinaria agrícola y el riego de agua que asegure contar en 2019 con toda el área de caña sembrada para respaldar su molienda.
Con la producción de caña proyectada se abastecerá un volumen de molida del ingenio de 8 000 toneladas por día en 2019, para no menos de 150 días de zafra, con explotación de la capacidad de operación como mínimo de 85 por ciento.
En la actualidad, esa proyección cañera se encuentra al 76 por ciento de cumplimiento, con una tendencia de crecimiento anual que respalda su materialización.
Biopower S.A. radica en el macizo de marabú pesado cercano a la microlocalización de la fábrica, con un rendimiento que asegura en un radio de 15 kilómetros disponer de mucho más de cinco años de explotación.
El marabú es un combustible alternativo que garantizará, una vez concluidas las zafras de 150–180 días, continuar generando hasta 300 días con toda seguridad.
En el programa de bioeléctricas de AZCUBA constituye una fortaleza el hecho de contar con ingenios seleccionados en el centro y oriente del país, donde en sus cercanías hay un potencial importante de marabú que puede ser utilizado para extender la campaña de generación una vez terminada la biomasa cañera, por varios meses del año.
Una alternativa semejante podrá ser utilizada por cualquier inversionista extranjero que tenga aprobado un negocio de este tipo en tales zonas y por los empresarios cubanos en el caso de que sean totalmente nacionales, que construiremos por créditos de gobierno, aseguró Hernández Martínez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario