La planta de GLP en fase de terminación tiene una capacidad de almacenamiento de 2 mil 400 metros cúbicos, suficiente para cubrir la demanda de los clientes desde Villa Clara hasta Ciego de Ávila. /Foto: Ismary Barcia
Clientes de las provincias desde Villa Clara hasta Ciego de Ávila tendrán mayor cobertura del gas combustible, cuando en enero se ponga en marcha la moderna terminal de gas GLP, que con capacidad para 2 mil 400 metros cúbicos, actualmente se construye en Cienfuegos.
Prevista para iniciar su puesta en marcha en agosto pasado, dificultades con la fuerza de trabajo y el equipamiento constructivo retrasaron el cronograma de ejecución de esta inversión, valorada en cerca de 22 millones en moneda total.
Una vez rebasados los problemas, la obra entró en su fase de terminación.
“Ya estamos laborando en el montaje de la electricidad y la automática, trabajos que hacemos con la Empresa de Automatización Integral (CEDAI), y en los sistemas de detección contra incendios, con SEISA*. Prácticamente la obra entra así en su etapa conclusiva”, aseguró el ingeniero Reinaldo Rodríguez del Rey Hernández, director general de la Comercializadora CUPET en Cienfuegos, empresa inversionista.
Los obreros de la Empresa Constructora de Obras Industriales No. 6 (ECOI-6), han realizado unas 4 mil uniones por soldadura durante la edificación de la planta, ubicada en los antiguos predios de la Fábrica de Fertilizantes Nitrogenados de Cienfuegos, en la zona industrial de O’Bourke.
Las conexiones con la estación principal de bombeo marcan esta etapa final, de una obra donde la seguridad de los gases que se trasiegan es una de las mayores complejidades. Para asegurarlo, técnicos de la empresa alemana Klaus Union pusieron la confiabilidad demostrada en más de 20 años de trabajo en la industria petrolera cubana, proveyendo las primeras tres bombas de sellado magnético instaladas en Cuba.
La inversión de CUPET incrementará la cobertura del servicio de gas licuado en la región central del país a 30 días. /Foto: Ismary Barcia
“Estos equipos no usan sellos mecánicos, y son los únicos que garantizan cero fuga para proteger el medio ambiente. Son muy seguras y cuentan con las protecciones necesarias también en el motor, que ante un desperfecto, puede ser disparada”, afirmó Javier Díaz Castillo, representante exclusivo del fabricante alemán Klaus Union, con 70 años de presencia en el mercado mundial del petróleo.
Al unísono, se trabaja en el muelle de atraque, recuperado de las antiguas instalaciones aledañas a la fábrica, y destinado a operaciones de cabotaje e importación de GLP con buques de hasta 7 mil toneladas.
“Allí sólo faltarían las bombas contra incendios, que llegan para diciembre, pero ya la empresa de Obras Marítimas terminó sus mejoras en el espigón y se montan las tuberías. Están terminados un tanque de agua con capacidad para 300 metros cúbicos, así como las oficinas del operador, todo en espera para cuando lleguen las turbinas. También se concluyó el montaje de los conductos para el acople de las mangueras en el atraque de los barcos, o sea, que el muelle también tiene un avance muy grande”, agregó Rodríguez del Rey Hernández.
Igualmente está concluido el tendido de la fibra óptica que interconecta el muelle y el centro de control que radica en la terminal.
“La proyección que tenemos es terminar en diciembre, y tener disponibilidad para arrancar el primero de enero de 2019”, afirmó el director general de CUPET en la provincia.
Concebida por la Unión Cubapetróleo, la terminal GLP ampliará la capacidad de almacenamiento del gas combustible en el centro de la isla, de acuerdo con las demandas del programa nacional de gasificación.
(*) Sistemas de Seguridad Integral contra Incendios e Intrusos.
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